La estadística es una disciplina que se dedica a la recolección, análisis, interpretación y

presentación de datos. Su objetivo principal es describir y extraer conclusiones sobre un

conjunto de datos, así como realizar predicciones y tomar decisiones fundamentadas en la
información disponible.

Existen dos ramas principales de la estadística:

a) Estadística descriptiva: Se utiliza para resumir y caracterizar los aspectos más relevantes
de un conjunto de datos.

b) Estadística inferencial: Se emplea para obtener conclusiones sobre una población más
amplia a partir del estudio de una muestra más reducida.

En el ámbito de la estadística inferencial, se entiende por población al conjunto total de

individuos, objetos o eventos sobre los cuales se busca extraer conclusiones. Por otro lado,
una muestra es un subconjunto representativo de la población que se selecciona para su
análisis. Las muestras se utilizan para realizar inferencias sobre la población cuando no es
factible o práctico estudiar la totalidad de los elementos.

Las variables en estadística se clasifican en dos categorías principales:

a) Variables cualitativas: Representan atributos o características que no pueden ser medidas

numéricamente. A su vez, se subdividen en variables nominales y ordinales.

b) Variables cuantitativas o numéricas: Representan cantidades que pueden ser medidas y

expresadas en términos numéricos. Estas variables pueden ser discretas o continuas.

Los niveles de medición en estadística se clasifican de la siguiente manera:

a) Nominal: Las variables se agrupan en categorías sin un orden inherente. Por ejemplo, los
tipos de fruta.

b) Ordinal: Las categorías poseen un orden natural, pero las diferencias entre los valores no
son necesariamente equidistantes. Por ejemplo, los niveles de satisfacción (bajo, medio,
alto).

c) Intervalo: Existe un orden y las diferencias entre los valores son iguales, pero no hay un
cero absoluto. Por ejemplo, la temperatura en grados Celsius.

d) Razón: Similar al nivel de intervalo, pero con la presencia de un cero absoluto. Permite
calcular razones entre los valores. Por ejemplo, la altura o los ingresos.