Oración – v semana de cuaresma

Monitora: Luz y verdad familia Rosina.

Padre nuestro que estás en el cielo en este tiempo de Cuaresma escucha nuestra oración, ten
misericordia de nosotros, abre nuestros corazones y transforma nuestro egoísmo en bondad,
generosidad y gratitud. Todas juntas decimos:
En el nombre del Padre, del hijo y del Espíritu Santo. Amén
Cantamos: Ven Espíritu Ven
Invocación al Espíritu Santo
CANCION FALTA

Amén.

Monitora: El evangelio de hoy nos invita a continuar fortaleciendo nuestra fe y nuestra

esperanza en el amor y la misericordia; también nos recuerda tener poder sobre la vida y la
muerte tal como lo designa el Padre.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 8, 51 - 59

Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos líbranos, Señor, Dios nuestro. En el
nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
En aquel tiempo, Jesús dijo a los judíos: “Yo les aseguro: el que es fiel a mis
palabras no morirá para siempre”.
Los judíos le dijeron: “Ahora ya no nos cabe duda de que estás endemoniado.
Porque Abraham murió y los profetas también murieron, y tú dices: ‘El que es
fiel a mis palabras no morirá para siempre’. ¿Acaso eres tú más que nuestro
padre Abraham, el cual murió? Los profetas también murieron. ¿Quién
pretendes ser tú?”
Contestó Jesús: “Si yo me glorificara a mí mismo, mi gloria no valdría nada. El
que me glorifica es mi Padre, aquel de quien ustedes dicen: ‘Es nuestro Dios’,
aunque no lo conocen. Yo, en cambio, sí lo conozco; y si dijera que no lo
conozco, sería tan mentiroso como ustedes. Pero yo lo conozco y soy fiel a su
palabra. Abraham, el padre de ustedes, se regocijaba con el pensamiento de
verme; me vio y se alegró por ello”.
Los judíos le replicaron: “No tienes ni cincuenta años, ¿y has visto a
Abraham?” Les respondió Jesús: “Yo les aseguro que desde antes que naciera
Abraham, Yo Soy”.
Entonces recogieron piedras para arrojárselas, pero Jesús se ocultó y salió del
templo.
Palabra del Señor.
Monitora: Gloria a Ti, Señor Jesús
Monitora: Señor ten piedad de nosotros y cura nuestro egoísmo, escuchamos la reflexión.
Reflexión:
El Señor se ha acordado siempre de su alianza. (…) Su fidelidad a Abraham es
el recuerdo de las promesas que hizo. Dios eligió a Abraham para hacer un
camino. Abraham es un elegido, era un elegido. Dios lo eligió. Luego, en esa
elección le prometió una herencia y hoy, en el pasaje del libro del Génesis, hay
un paso más. “Por mi parte esta es mi alianza contigo” (Gn 17,4). La alianza.
Una alianza que le hace ver a lo lejos su fecundidad: “serás padre de una
muchedumbre de pueblos” (Gn 17,4). La elección, la promesa y la alianza son
las tres dimensiones de la vida de fe, las tres dimensiones de la vida cristiana.
(…) . Hemos sido elegidos, el Señor nos ha hecho una promesa, ahora nos pide
una alianza. Una alianza de fidelidad. Jesús dice que Abraham se regocijó
pensando, viendo su día, el día de la gran fecundidad, ese hijo suyo —Jesús
era hijo de Abraham (cf. Jn 8,56)— que vino a rehacer la creación, que es más
difícil que hacerla, dice la liturgia, vino a redimir nuestros pecados, a
liberarnos.
Monitora: Confiados en el amor de Dios y seguros que el nos escucha elevamos nuestras
peticiones.
Petición: Como familia rosina nos unimos en oración para pedirte por nuestro compañero David
Plasencia para que Dios les devuelva la salud y nuestra Madre Inmaculada les conceda la fortaleza
que tanto necesitan para lograr su recuperación. Roguemos al Señor.
Petición: Te pedimos Señor por la Comunidad de Hermanas Dominicas de la Inmaculada
Concepción, para que nuestro Señor Jesucristo derrame muchas bendiciones sobre ellas y guiadas
por tu amor y misericordia, a la sombra de María Inmaculada, continúen evangelizando, predicando
la Verdad y portando la Luz de Cristo. Roguemos al Señor.
Monitora: Confiados en la misericordia y la inmensidad del amor de Dios y de nuestra Madre
Santísima rezamos juntas un padre nuestro, un ave maría y el gloria.

Padre nuestro que estás en el cielo,

santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu Reino;
hágase tu voluntad
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy
nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
Amén.
 Dios te salve, María,
llena eres de gracia;
el Señor es contigo.
Bendita Tú eres
entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén

Gloria al Padre
y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en el principio,
ahora y siempre,
por los siglos de los siglos.
Amén.

Monitora: Oración final

Padre nuestro, que estás en el Cielo,

durante esta época de arrepentimiento,
ten misericordia de nosotros.
Con nuestra oración, nuestro ayuno y nuestras buenas obras,
transforma nuestro egoísmo en generosidad.
Abre nuestros corazones a tu Palabra,
sana nuestras heridas del pecado,
ayúdanos a hacer el bien en este mundo.
Que transformemos la oscuridad
y el dolor en vida y alegría.
Concédenos estas cosas por Nuestro Señor Jesucristo.
Amén.
Oración Colecta
Señor Dios nuestro:
Por tu Hijo, Jesucristo,
tú nos has dado un nombre nuevo,
el nombre de tu mismo Hijo:
por eso nos llamamos ahora “cristianos”.
Haz que sepamos vivir según este nuevo nombre
hasta llegar felizmente a nuestro nuevo destino,
que es ser hombres y mujeres “para-los-demás”,
 que sirvamos y nos entreguemos totalmente a los otros
juntamente con Jesús, Hijo tuyo y Señor nuestro
por los siglos de los siglos.

Monitora: Cantamos “Vaso nuevo”

Monitora: En el nombre del Padre, del hijo y del Espíritu Santo. Amén. El equipo de
matemática agradece su participación.