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APOCALIPSIS
Breve Introducción de cara al siglo XXI

Por
Luciano Silva Mora

Editorial PAIDAGOGOS

Auspicio:

Centro de Reflexión Teológica del Sur,

Seminario de Teología
2

Editorial PAIDAGOGOS
O´Higgins 1395, Concepción, Chile

Copyright 2016, Editorial PAIDAGOGOS


Todos los derechos reservados
Prohibida su reproducción total o parcial

Temas: Biblia – Apocaliptica – Profecía


Biblia – Historia de la Iglesia y del texto Sagrado
Biblia – Pensamiento cristiano

DDI 264074 (Departamento de Derechos


Intelectuales Chile )

Impresos Valverde Hnos.y Cia.Ltda - Pedro Aguirre Cerda 50 San


Pedro de la Paz - Concepcion

Fonos : (41) 2297373- Fax : (41) 2297390 Mail : info@valverde.cl


3

ÍNDICE

PREFACIO 11
Introducción 15
CAPÍTULO I “Una Mirada Panorámica” 19
Juan, Domiciano y las iglesias perseguidas 21
Una carta escrita en un lenguaje encriptado 22
Apocalíptica y filosofía judeo cristiana 23
Apocalipsis y sentido epistolar 24
Sumario del capítulo 26

CAPÍTULO II La fascinación que


provoca el apocalipsis 29

Apocalipsis en el mundo secular 31


Apocalipsis y su influencia en el cine 32
o Cine, apocalipsis y holocausto
nuclear 35
o Cine, apocalipsis y cambio
Climático 38
o Cine, Apocalipsis y descontroles
de virus 41
4

o Cine, apocalipsis y bestias


Destructoras 45
o Cine, apocalipsis y meteoritos destructores 47
o Cine, apocalipsis y extraterrestres 50
o Cine, apocalipsis y otras profecías 55
o Cine, apocalipsis y el anticristo 56
o Cine, apocalipsis y producciones evangélicas 58

Resumen del capítulo 58

CAPÍTULO III El apocalipsis y la profecía,


“miradas evangélicas” 61
Primeras consideraciones 63
Aclaraciones del concepto 64
La profecía en el Antiguo Testamento 66
La profecía en el Nuevo Testamento 69
Sumario del capítulo 75

CAPÍTULO IV Escuelas de
interpretación del apocalipsis 77

Primeras aclaraciones 79
Escuela Preterista 80
Escuela Historicista 85
5

Escuela Idealista 86
Escuela Futurista 87
o Futurismo histórico 90
o Futurismo dispensacionalista 90

Sub escuelas del futurismo 97


o En relación a la Tribulación 97
o En relación al milenio 98

Elementos que hacen débil la posición


futurista dispensacionalista 99
o La profecía, la iglesia e Israel 99
o Dispensacionalismo y Evangelización 102
o Método erróneo y antojadizo 103
o Desprecio por la historia 103
o Pérdida del valor del sufrimiento 104
o Similitud con los métodos de
interpretación de las sectas 105

¿Qué se ha creído a través de la historia? 107


Valoración crítica general, de las escuelas
interpretativas 107
o Un acercamiento conciliador 107
o Valoración del preterismo 109
o Valoración del idealismo 111
o Valoración del futurismo 118
6

CAPÍTULO V Temas de mayor interés


en Apocalipsis 121

La marca de la bestia “666” 123


Los 144.000 sellados 133
El rapto o arrebatamiento de la iglesia 135
La gran tribulación 140
Las 70 semanas de Daniel 144
La Iglesia y el Israel nación 145
o Israel en el apocalipsis futurista 149
o Influencia de EEUU en la posición
futurista al interpretar apocalipsis 152

Influencia interpretativa de apocalipsis,


en la manera de ver la sociedad 157

CAPÍTULO VI Elementos técnicos


para entender el apocalipsis,
“Una mirada general” 161

Contexto Histórico 163


Ocasión del apocalipsis 169
Marco teológico 170
7

Autor del apocalipsis 174


o Afirman autenticidad de apocalipsis 177
o Dudaron del apocalipsis 178
o No tienen citas de apocalipsis 179

Destinatarios 179
Fecha de composición 179
Propósito del apocalipsis 181
Tema Central 182
¿Qué es la apocalíptica? 182
o Características de la literatura apocalíptica 183
o ¿Por qué el apocalipsis de Juan está dentro
de la Biblia y otros no? 185
o Origen de la literatura apocalíptica
y su mensaje 186

Apócrifa y pseudonimia 188


Recomendaciones hermenéuticas
para interpretar apocalipsis 190

Consejos finales antes de leer apocalipsis 192

BIBLIOGRAFÍA 194
8

PREFACIO

El presente libro, es fruto de muchas conferencias sobre


apocalipsis, impartidas en congresos de jóvenes,
unidades pastorales y salas de seminarios teológicos, en
Chile y varios países de Latinoamérica. Por esta misma
razón, tiene forma de “notas, apuntes y exhortaciones”
utilizadas una y otra vez, para la edificación de las
iglesias evangélicas de diversas denominaciones. Por lo
mismo, se ha preferido aclarar de manera sencilla
muchos temas, en vez de profundizar exegéticamente en
alguno.

La intención principal, es otorgar un panorama de la


revelación juanina, a quienes desean comprenderla y
que no tienen necesariamente, acabados estudios
previos sobre el tema. Por ello, el lector notará que las
temáticas se vuelven a tocar a medida que avanza el
libro, profundizándolas con intención pedagógica. Esta
metodología es adrede, pues tales tópicos se aclaran
dentro de nuevos contextos, que permiten ahondar el
conocimiento.

No debe sorprender a quien lee el texto, que esas


argumentaciones repetitivas y crecientes, van
cimentando un hilo conductor, dirigido a evidenciar la
posición teológica, política y filosófica de quien escribe.

La redacción, de esta breve introducción al libro de


Juan, fue desarrollada pensando en que a la mayoría de
la gente, le cuesta entender el apocalipsis, y cuando se
dan a la tarea de intentarlo, se abruman con detalles
técnicos y abortan defraudados. Por eso, de manera
9

amistosa, hemos comenzado comentando generalidades


introductorias y con un capítulo que muestra como el
apocalipsis fascina a todo el mundo, cosa que ha
quedado reflejada en el uso que el cine hace de la obra.
Al mismo tiempo ese capítulo ayudará a entender al
lector como “no” se debe interpretar la revelación y lo
peligroso que puede resultar hacer lo mismo en la
enseñanza al interior de las iglesias.

En seguida dedicamos un capítulo entero a explicar


cómo el concepto que se tiene sobre la palabra
“profecía” influye en la manera de interpretar el
apocalipsis. Se hacen entonces, las aclaraciones del
concepto, revisando la noción en el Antiguo y Nuevo
Testamento. Luego de ese apresto, nos damos a la tarea
de explicar de manera sencilla y sucinta, cada una de
las escuelas de interpretación del apocalipsis. Con este
ejercicio, el lector comenzará a sentirse más equipado,
para enfrentar los capítulos siguientes que se muestran
un poco más técnicos y discusivos teológicamente.

Los capítulos finales abordan solo aquellos temas del


apocalipsis, que más suscitan interés tanto a cristianos,
como a personas que no frecuentan la iglesia
evangélica. Entre ellos, la marca de la bestia, los
144.000 sellados, el arrebato de la iglesia, la
tribulación, etc. Finalmente, tocamos los detalles
técnicos del libro como: contexto histórico, autoría,
fecha, literatura apocalíptica, etc. Pensamos que esta
arquitectura, ayudará pedagógicamente y hará la
lectura mucho más entretenida.
10

Prevenimos entonces, que este libro no pretende ser una


exégesis de apocalipsis. Sin embargo aborda los temas
con rigor teológico, cultural, político y filosófico. El
autor, no teme dar sus puntos de vista, sobre temas
pastorales y contingentes como la relación entre el
apocalipsis, EEUU y el conflicto palestino – israelí. Así
mismo, hace juicios de valor sobre temas sociales,
económicos, etc. que la iglesia evangélica, no ha tomado
en cuenta en su interpretación del apocalipsis.

Finalmente, mencionar que el contenido de este libro no


pretende ser completamente original, ya que se ha
escrito profusamente sobre apocalipsis. Muchas de las
frases, esquemas, argumentos y contrargumentos, el
autor las escuchó y apuntó desde que era un estudiante.
Sin embargo la redacción, la arquitectura argumental y
la selección pedagógica de temas, como la forma de
tocarlos, son una novedad. Vayan entonces los
reconocimientos a todos los eruditos y autores de libros
relacionados al apocalipsis que están en la esencia de
este escrito. Seguramente habrá mucho de sus ideas, las
cuales se han tratado de reconocer con las notas al pie
de página, las menciones directas y la bibliografía.

Las citas de la Sagrada Escritura, todas han sido tomadas


de la Nueva Versión Internacional.

Vitales han sido las lecturas de las obras sobre historia


de la iglesia, comentarios teológicos del Nuevo
Testamento, en especial de los temas de apocalipsis, de
los teólogos Justo González y Juan Stam. Se ha tratado de
ser fiel en las citas referidas a sus ideas. Ellos han
11

impactado al escritor de este libro, como a decenas de


profesores y jóvenes teólogos latinoamericanos.

Especialmente se extienden reconocimientos al hermano


Luis Alfredo Silva Baza (QEPD), padre del autor de este
libro, quien lo inició en los estudios teológicos desde
muy temprana edad. Permanecen aún en la mente, los
esquemas de las escuelas de interpretación y los mapas
futuristas; y en la biblioteca, aún esos libros ya
amarillentos de apocalipsis, que despertaron la
inquietud del escritor, entonces joven.

También, a los recordados maestros del Instituto de


Biblia. El emérito teólogo, escritor y pastor Pablo Hoff;
quien en sus clases de capacitación a profesores,
materias de Bachiller y Licenciatura en Teología, insistía
a sus alumnos a permanecer firmes no solo en los
conocimientos, sino también, en la fe y la vida cristiana.
Al profesor y teólogo David Miranda Salas, cuya huella
teológica, sería imposible borrar de la mente del autor
de este libro y de una generación completa de pastores y
maestros de la Biblia en Chile. Parte del pensamiento de
todos ellos, se expresa en este libro, lo cual se advierte
con agradecimiento y humildad.
12

INTRODUCCIÓN

El apocalipsis de Juan, es uno de los documentos de la


iglesia primitiva que ha causado mayor expectación a
través de todos los tiempos. Ya sea por su carácter
histórico, su alcance profético, su propuesta filosófica o
sus posibilidades crípticas, el libro ha sido objeto de
análisis desde las más variadas ópticas, solamente para
continuar en el más evidente desacuerdo interpretativo
entre estudiantes, expertos, creyentes de las más
variadas confesiones religiosas, e investigadores del
mundo secular. Desde la mirada psicológica, esta obra
literaria, causa en los lectores crédulos, una especie de
apropiación de su mensaje, independiente a la época o
tiempo en que se lea. Lo anterior, debido a la promesa
reivindicativa de victoria, que la carta desarrolla a favor
de los que se sienten destinatarios.

Su contexto inmediato es una denuncia al aspecto que


adoptaron los modelos políticos de la Roma imperial, y
que tuvieron inmediata repercusión en la vida religiosa
de la época1. Por lo mismo, el carácter político de esta
carta, es innegable si se le estudia en distintas épocas de
la historia de la civilización cristiana occidental. Por
ejemplo, los reformadores identificaban a la bestia y al
falso profeta con en el papado en sus aspectos políticos y
religiosos2. En las décadas 60 y 70 del siglo XX, los

1
Tenney, Merril C. Nuestro Nuevo Testamento. Estudio Panorámico del
Nuevo Testamento. Editorial Portavoz. Gran Rapids Michigan, 1961. Pág. 452
2
LADD, George. Teología del Nuevo Testamento, sexta parte El Apocalipsis.
Editorial Clie, Terrasa, Barcelona. 1974. Pág. 815.
13

evangélicos fundamentalistas3 de los EEUU,


consideraban tan cerca el tiempo del fin, como su
propia generación, y así justificaron la escalada nuclear
en plena guerra fría y tomaron posición a favor de la
lucha israelí contra los palestinos4.

Ellos esperaban, si no impulsaban, la reconstrucción del


templo de la religión judía, destruido el año 70 del siglo
I, como si fuera el reloj de Dios5 para el cumplimiento
del mensaje del libro. Apocalipsis, entonces, sin quererlo
ha servido para satanizar sistemas político-económicos
o bendecir otros6.

Pero ¿el apocalipsis habla de Israel como un pueblo que


literalmente será objeto de los desarrollos escatológicos
en el plan de Dios?, ¿Los símbolos, visiones y las escenas
apocalípticas darán lugar a juicios taumatúrgicos en el
período del fin de la historia humana?; o ¿Se tratan esas
mismas visiones de eventos que ya ocurrieron en la
historia de la iglesia cristiana?, ¿Hay claves que nos

3
El fundamentalismo es un fenómeno relativamente nuevo en la historia
religiosa de Norteamérica; su origen se remonta aproximadamente a la época
de transición del pasado siglo al actual, y surgió como un intencionado contra
ataque frente a lo que sus primeros adalides denominaban «modernismo» (el
intento de adaptar el cristianismo a la ciencia, al desarrollo y al liberalismo).
La denominación procede de una serie de folletos que, con el título de The
Fundamentáis, aparecieron entre 1910 y 1915.Cox, Harvey. La Ciudad
Secular. Hacia una Teología Postmoderna. Ed. Terrae. Santander. 1985.
Págs. 41-42.
4
Walvoord, Juan F. y Walvoord Juan E. Armagedón. Cercano Oriente:
Petróleo y Crisis. Ed. Vida, Miami, Florida. 1974.p126
5
Randolph S. y Winston S, Churchill. La Guerra de los seis días. Ed.
Candelabro. Buenos Aires.1967. p11-40
6
MILLOS, Samuel. Apocalipsis, Comentario Exegético al Texto Griego Del
Nuevo Testamento. Editorial Clie, Barcelona, España. 2010.Pág. 15. David
Stoll (2002) comenta en su libro, que las juventudes evangélicas
fundamentalistas americanas también eran anticomunistas durante la guerra
fría (Págs. 198-203)
14

ayuden a entender en plenitud los contenidos y


enseñanzas de este libro?, ¿Cómo ha interpretado esta
carta la iglesia cristiana a través de los tiempos?

Estas y otras preguntas resultan de gran interés no solo


para quienes comparten la fe cristiana, sino también
para intelectuales e investigadores. En la actualidad,
también, para el común de la gente que nació en el
mundo de la televisión, el cine y el internet. Muchas
películas se han inspirado en todo o parte del contenido
de este libro como veremos en las páginas siguientes.

Al llegar al término de ciclos, calendarios (como el


maya); o al observar cambios drásticos en la vida
ecológica del planeta ya sean estos naturales o
producidos por la mano del hombre (capa de ozono,
efecto invernadero, marea roja, marea negra,
agotamiento de los recursos naturales, etc.) el interés y
la curiosidad en este libro, crece de manera notable y
hasta preocupante. Y claro, desde nuestra aparición en
la tierra, los ecosistemas y la gran mayoría de los seres
vivos que habitan en ellos, incluyendo desde los grandes
mamíferos hasta los más diminutos insectos y
microorganismos, han sido en alguna medida víctimas
de nosotros7.

Si sumamos el hecho de que nuestro mundo


postmoderno, es altamente sincretista en lo “filosófico
religioso”, quienes esperan el cumplimiento del libro en
sus días, tendrán suficiente argumento para identificar

7
RANGEL, Sarai. Revista “Muy Interesante”. Apocalipsis Ecológico. Edición
Año XXIII 29-01, enero 2016. Editorial Televisa S.A. Chile. Págs. 12-21.
15

esta época como aquella “apóstata”, que debería


presagiar el comienzo del fin apocalíptico revelado a
Juan Apóstol.

Pero más allá de la controversia que el libro causa en


diferentes puntos ya sean históricos, interpretativos,
teológicos o crípticos; apocalipsis como carta jugó un
papel “vital” en un período muy difícil no solo para las
iglesias que históricamente fueron el objeto de la
persecución relatada en sus páginas, sino además, para
el cristianismo enfrentado a diversas tribulaciones y
pruebas a lo largo de la historia de la iglesia. Monjes,
teólogos y cristianos de todas las épocas encontraron
refugio, aliento y fe en su mensaje.

Es más, cuando llega el desespero que produce la


prueba, la enfermedad, la calumnia, el abandono, etc.
cada creyente en particular hace suyas las palabras de
Juan, cuando alza sus ojos hacia arriba y ve “una puerta
abierta en el cielo” y oye una voz como de trompeta que
le dice “Sube acá: voy a mostrarte lo que tiene que
suceder después de esto”8. Sin duda, ser invitados a
mirar desde la perspectiva de Dios, donde todo es calma
y seguridad; donde aprendemos que “los tiempos” y “los
acontecimientos” no están fuera del control soberano de
Dios, nos hace descansar y sentir que por más oscuras
que sean las tinieblas, las mismas darán paso a la luz
perfecta que inaugura para los santos: “cielo nuevo y
tierra nueva, donde mora la justicia”9.

8
Apocalipsis capítulo 4 versículo 1
9
Adaptación de las ideas de Apocalipsis capítulo 21 versículos 1 al 8
16

Capítulo I
Una mirada panorámica
17

Juan, Domiciano y las iglesias perseguidas

El Apocalipsis es una carta, un documento personal,


enviado por Juan apóstol a las iglesias del Asia Menor
(la actual Turquía) casi al fin del primer siglo (96-100
d. de C.) Las cartas a las siete iglesias (Cap. 2-3) son
siete cartas reales a siete iglesias representativas,
enviadas a la provincia romana de Asia Menor10. Los
mensajes del último de los 12 Apóstoles, dieron a
conocer las situaciones históricas y político-religiosas
que se desarrollaron en las iglesias de esa zona en el
contexto de la historia previa a la caída del gran imperio
romano en el siglo V después de Cristo11.

Estos grupos de creyentes fueron perseguidos durante el


gobierno del Emperador Domiciano. Backer (1974)
explica que los seguidores de Jesús no estuvieron
dispuestos a doblar sus rodillas ante las imágenes y
estatuas, que el imperio romano le erigió a Domiciano
como deidad imperial12. El resultado fue boicot
económico, hostigamientos, persecuciones y mucha
sangre de creyentes, derramada en forma violenta.

10
LADD, George. Teología del Nuevo Testamento. Editorial Clie, Terrasa,
Barcelona. 1974. Pág. 812.
11
La historia universal enseña que la caída del Imperio Romano el año 476
por medio de las invasiones bárbaras, son la culminación de una serie de
sucesos desgastantes en su política, el sistema religioso, la economía y las
guerras. Una mirada teológica dirá que estos eventos tienen mucha
coincidencia con los sellos, las copas de la ira y las trompetas, descritas en la
revelación apocalíptica.
12
BAKER, Robert. Compendio de la Historia Cristiana. Editorial CBP, el Paso
Texas. EEUU. 1974. Págs. 19 y 20. Adoración imperial: Roma cimentó su
imperio en un sistema donde lo político y lo religioso eran lo mismo. El
politeísmo fue un sistema con el cual los romanos anexaban provincias a su
gobierno a través del sincretismo religioso, con la exigencia de que
reconocieran que el emperador romano era un dios viviente. La religión de los
cristianos les resultaba ofensiva por sus valores éticos - morales, y porque no
aceptaba más que un solo Dios y este no se podía ver ni reproducir en una
imagen. Por eso una de las acusaciones contra los primeros cristianos fue
que eran “ateos”.
18

Una carta escrita en un lenguaje encriptado

Desde la literatura, apocalipsis es una manera de


escribir que se utilizó en tiempos de persecución a los
judíos y cristianos entre el siglo IV a. de C. y el siglo II d.
de Cristo. Fueron textos destinados a levantar el
nacionalismo hebreo, en una época en que Israel fue
hostigado por otras naciones. Este pueblo considera
tener un llamamiento especial de Jehová, para ser un
día la cabeza de todas las naciones, y al ver que no se
cumple ese ideal o se retrasa la espera, surgen estos
apocalipsis como “una respuesta existencial a esa
problemática”.

El judío piensa: …No puede ser que nos esté yendo tan
mal. Dios tendrá que intervenir en la historia humana
para darnos la victoria frente a nuestros enemigos. Así
se cumplirá la profecía de que Israel será la cabeza de
las naciones…

Surgen entonces estas obras literarias apocalípticas


donde el mundo queda dividido entre los buenos (los
hijos de Dios) y los malos (que hostigan a los elegidos).
Por eso, una característica básica de los apocalipsis es
que presentan marcados contrastes: Luz – tinieblas;
cielo – infierno; justos – injustos; hijos de Dios – hijos
del diablo; bien –mal; bestia – cordero; Jerusalén –
Babilonia, Cristo – Anti cristo, prostituta – esposa,
bendiciones – plagas, etc.
19

Apocalíptica y filosofía judeo cristiana

El pueblo de Dios no puede entender el problema del


mal en la historia, o por qué le sobrevienen semejantes
sufrimientos y terribles persecuciones13. De esta forma,
en el pensamiento hebreo antiguo heredado luego a los
cristianos, se resuelve por “dualismo contrastante”, lo
problemática que resulta la vida en términos éticos,
religiosos, filosóficos y culturales. Es una especie de
vuelta de página por parte de Dios, para que los suyos
comiencen de nuevo el desarrollo de su plan existencial.
De ahí que el cielo y la tierra deben ser nuevos y la
ciudad santa una “nueva Jerusalén”.

Por ende, la arquitectura psicológica producida por la


obra en la mente de los lectores, se presta para su
aplicación a diferentes períodos. El apocalipsis “de
Juan” fue un mensaje para una persecución específica
que ocurrió en la historia de los cristianos del primer
siglo. Al mismo tiempo, sus enseñanzas, principios y
valores pueden ser aplicados a distintos momentos de la
historia de la iglesia. Es posible también, hacer paralelos
entre los personajes de la obra del primer siglo y los
nuevos personajes de otras historias de la iglesia en el
tiempo (aunque muchas veces no es sano).

Finalmente, el apocalipsis es un mensaje que puede ser


aplicado también a la vida personal; todo creyente que
pasa momentos difíciles, de tribulación (enfermedades,
pérdidas, incomprensiones, etc.) puede ver en la obra el
mensaje alentador y el compromiso de la presencia de
Dios en su propia tribulación.

13
LADD, George. Teología del Nuevo Testamento. Editorial Clie, Terrasa,
Barcelona. 1974. Pág. 814.
20

El propósito general que hay en la literatura


apocalíptica y especialmente en el mensaje del
apocalipsis de Juan, es animar y levantar la fe de los
creyentes que sufren injusticia y persecución14. Esta fue
la experiencia literal que vivieron las 7 iglesias que se
describen en los capítulos 2 y 3 del libro, y que deben
ser considerados los destinatarios centrales de la carta.

Apocalipsis y sentido epistolar

El libro de “hechos de los Apóstoles” y la evidencia


externa, muestran que en esta época el evangelio había
crecido por gran parte del imperio romano y otros
sectores del mundo15. Por eso esta carta dirigida a las
iglesias del Asia Menor, sirvió también como un
documento “epistolar”16 a las iglesias ubicadas en otras
regiones que en algunos momentos también enfrentaron
persecuciones parecidas17.

14
Tenney, Merril C. Nuestro Nuevo Testamento. Estudio Panorámico del
Nuevo Testamento. Editorial Portavoz. Gran Rapids Michigan, 1961. Pág. 452
15
El Nuevo Testamento arroja luz sobre una gran obra evangelizadora de
Pablo por Roma incluso en la elite; y en su segundo viaje misionero llevó el
evangelio a Europa en la disuelta Yugoslavia de nuestra época (Macedonia).
Su acompañante el médico llamado Lucas probablemente llevó la Palabra a
Grecia. Mateo alcanzó Etiopía y Tomás probablemente alcanzó Media, Partia,
Persia e India. Simón Cananeo evangelizó Persia y San Bartolomé compartió
el mensaje en Arabia e India.
16
Una carta es un documento personal con destinatario(s) bien específico(s).
Cuando una carta contiene principios, valores y o enseñanzas que sirven a
otras personas, las cuales pueden extraer enseñanzas para sus propios
conflictos o situaciones, entonces ese documento se transforma en una
“Epístola”, que es el caso de apocalipsis y otras cartas del Nuevo Testamento
a las cuales también llamamos epístolas.
17
La persecución en el Asia Menor que se describe en el apocalipsis fue de
carácter “local”. Durante las persecuciones a cristianos que se dieron antes
de la caída del imperio romano hay unas tres que se pueden considerar
“universales” y que probablemente estuvieron destinadas a erradicar el
cristianismo bajo la teoría de que los males del imperio se debían a esta
nueva religión. BAKER, Robert. Compendio de la Historia Cristiana. Editorial
CBP, el Paso Texas. EEUU. 1974. Págs. 23 y 26
21

En Asia Menor había más iglesias cristianas a parte de


las siete que se mencionan18. De hecho, el número 7 se
usa para expresar la “totalidad” de las iglesias de esa
región, así como se utiliza para describir otras
plenitudes y perfecciones (7 bienaventuranzas, 7
mensajes, 7 sellos, 7 trompetas, 7 copas de la ira, 7
alabanzas al Cordero, 7 estrellas en la mano de Cristo, 7
seres celestiales, 7 espíritus, 7 alabanzas al Padre, 7
veces la expresión: de toda tribu nación y lengua, etc.), y
se condice con el uso simbólico de otros números en la
carta, como explicaremos más tarde (666; 144.000,
1.000, etc.) Esta forma de lenguaje numérico, simbólico,
hace del apocalipsis una obra “críptica” para quienes no
están familiarizados con el fondo histórico de los
eventos que se describen.

Sobre todo, es confuso para quienes están más separados


de la época en que se escribió (hace ya 1.900 años). No
entender este aspecto del libro, es una de las mayores
dificultades al intentar su interpretación. A este
respecto, se debe mencionar que cada generación desde
la época del hagiógrafo, ha creído que los símbolos
apocalípticos se cumplen en eventos de su propia época.

Sin embargo, se debe aclarar otra vez, que esta obra


literaria, es un documento personal, una “carta” y por
ende, los verdaderos destinatarios (a quienes se les
escribió en primera instancia) no debieron tener
problemas para entenderla, pues estaban
completamente familiarizados con los eventos y los
símbolos utilizados. De hecho se trata de “experiencias
de su vida”, ellos son los afectados que necesitan el
mensaje esperanzador, en plena persecución.

18
Ej. Troas, Hieriápolis y Colosas. MILLOS, Samuel. Apocalipsis, Comentario
Exegético al Texto Griego Del Nuevo Testamento. Editorial Clie, Barcelona,
España. 2010. Pág. 31.
22

Entonces, el apocalipsis no solo es el libro final del


Nuevo Testamento. Es una carta cuyo lenguaje es un
estilo literario llamado “apocalíptica”. A su vez, se vale
del género epistolar para corregir y movilizar en los
planes de Dios a las iglesias del Asia menor y de todos
los tiempos.

Sumario del capítulo

Aunque luego nos referiremos de manera más técnica


sobre la literatura apocalíptica, diremos que es una
forma de escribir, caracterizada por utilizar símbolos
para “esconder” el mensaje a quienes son contrarios a
los destinatarios (en este caso el mensaje estaba oculto a
los defensores y practicantes del sistema político
religioso romano). Pero el mensaje “encriptado” era
completamente comprensible a quienes les fue enviado
el documento, o sea los creyentes perseguidos del Asia
menor en el siglo I. Por eso, la apocalíptica se utilizó en
momentos de persecución o en grandes crisis del mundo
judío como veremos19.

Para quienes se están haciendo la pregunta ¿pero el


mensaje del apocalipsis es para la iglesia de hoy? Una
primera y “básica” respuesta sería que “sí” porque esta
obra no es solo una “carta” sino también una “epístola”
que tiene enseñanzas y principios que traspasan el
tiempo y las circunstancias en que fue escrito. El asunto
19
Gran parte del libro de Daniel es apocalíptica, también secciones de
Ezequiel. Estos profetas vivieron durante la época del cautiverio babilónico.
En el período de “silencio” o entre los testamentos (año 400 antes de cristo y
hasta su llegada) se escribieron varias obras apocalípticas pseudo
epigráficas; y las últimas aproximadamente hasta el año 200 después de
Cristo. RUSSELL, Período Intertestamentario. Editorial CBP, El Paso Texas,
EEUU. 1973.Págs. 91 a 117.
23

por resolver durante la lectura, será precisar hasta qué


punto.

Por eso apocalipsis no solo es controversial sino también


“vigente”. Su mensaje inalterable es que Dios consuela a
los justos en momentos de tribulación y se compromete
con una época de “cuentas” y castigos sobre la maldad.
Esa forma de ver la historia, traspasa la generación del
siglo I después de Cristo para la cual originalmente fue
escrito. La obra inspirada lleva el tinte clásico del
profetismo donde se reconoce que si Dios suele
hablarnos a través de las cosas sencillas de la vida, en
medio de las crisis “simplemente nos está gritando”20.

20
Esta hermosa frase ha sido utilizada por el gran C.S. Lewis.

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