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UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL

DE LOS LLANOS OCCIDENTALES


“EZEQUIEL ZAMORA”
UNELLEZ-APURE
ESPECIALIZACION EN DERECHO AGRARIO Y AMBIENTAL
SECCIÓN “A”

ORIGEN Y EVOLUCION HISTORICA DEL DERECHO INTERNACIONAL


AMBIENTAL

PROFESOR: INTEGRANTE:
PERDOMO HORACIO C.I. V-8.909.594
LINDON LANDAETA

San Fernando de Apure, Noviembre 2021


Evolución Histórica del Derecho Internacional Ambiental

El Derecho Internacional Ambiental (DIA) ha pasado por tres ( 3) etapas: Una


primera etapa tradicional hasta el año 1970, dividida en un periodo pre de la
segunda guerra mundial en 1945 y un post periodo que va después de la segunda
guerra mundial en 1945 hasta antes de la conferencia de Estocolmo en 1972. Una
segunda etapa que va desde la conferencia de Estocolmo en 1972 hasta la
conferencia de Rio de Janeiro en Brasil, y una tercera etapa que abarca desde la
Conferencia de rio de Janeiro hasta la presente fecha y hacia el futuro. Es por ello
que en el presente ensayo haremos un resumen del desarrollo de estas fases, a
fin de conocer los logros más importantes durante la evolución del Derecho
Ambiental Internacional.

Desde la edad antigua, las comunidades primitivas tenían claro que debía existir
una relación mutua entre el ser humano y la naturaleza, sin embargo, el ser
humano fue olvidando esta regla, cuando empezó a sentir el dominio sobre la
naturaleza, sin nunca pensar que la naturaleza debe ser obedecida y nunca
dominada, que debía existir un equilibrio entre las personas y el medio ambiente,
de tal forma de convivir ambos sin ser perjudicados uno por el otro. Situación que
se agravo cuando el olvido de la regla por parte del ser humano comenzó a cruzar
fronteras y afectar el medio ambiente de otros países que mantenían recursos que
debían ser manejados en común.

En la década de los años sesenta surgen los primeros indicios serios de la


conciencia ambiental por parte de las personas, cuando la gente empezó a darse
cuenta de los peligros que amenazaban al planeta. Antes de eso hubo intentos de
regulación ambiental que no tuvieron éxito, como el Convenio de Londres de 1900
y hubo otras iniciativas, pero de forma aislada. Fue en los años 60 que salieron
documentos y fotografías de los daños que estábamos causando al planeta, y es
desde allí que la opinión publica empieza a tomar conciencia en forma seria sobre
la situación ambiental, en ese entonces entra a jugar un papel muy importante el
Derecho Internacional Ambiental, como materia reguladora de las situaciones
ambientales que se pudieran estar presentando entre dos o más países, además
de ejercer el cumplimiento de los acuerdos firmados para una mejor convivencia
en materia ambiental.

Hablar del Derecho Internacional Ambiental es hablar de un derecho que


involucra a todos los países del mundo para la protección de un bien común: como
lo es nuestro medio ambiente, la preservación del planeta, de nuestra
subsistencia, lo debemos aplicar a diario para ayudar a personas y comunidades a
defender el ambiente y los derechos humanos fundamentales que de él dependen.

Sus reglas no han sido dictadas por una institución nacional ni por una autoridad
internacional, está basado en un compendio de declaraciones, tratados y normas
vinculantes y voluntarias que se han desarrollado a la par del conocimiento
científico y la toma de conciencia del estado actual de nuestro mundo natural.

La historia del Derecho Internacional Ambiental se puede dividir en tres etapas,


separadas por dos de las conferencias internacionales más relevantes celebradas
hasta ahora: la Conferencia de Estocolmo (1972) y la Cumbre de la Tierra de Río
de Janeiro (1992). Y en 2016, con la firma del Acuerdo de París, inició una nueva
etapa para enfrentar el desafío natural más importante de la humanidad: la actual
emergencia climática.

En 1972, con la Declaración de Estocolmo, tenemos la primera Conferencia


organizada por la ONU, sobre el medio ambiente, titulada Conferencia de las
Naciones Unidas Sobre el Medio Ambiente Humano, donde se reconoce por
primera vez el derecho del hombre a un ambiente sano. Se estableció la
responsabilidad de los Estados de garantizar que las actividades bajo su
jurisdicción no causen daños al ambiente de otros Estados; el principio de
cooperación, los países deben unir esfuerzos para hacer frente a los desafíos
globales de nuestro entorno común. Se creó el Programa de las Naciones Unidas
para el Medio Ambiente (PNUMA), para los asuntos ambientales en la actualidad.
Además, en ese mismo año se publicaron más de 300 libros sobre medio
ambiente, ecología y contaminación.

Después de la Declaración de Estocolmo, en 1983 surgió la Comisión Bruntland,


con el informe Nuestro Futuro Común en 1987, donde por primera vez se habla de
desarrollo sostenible, definiéndolo como “la satisfacción de las necesidades de la
generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras
para satisfacer sus propias necesidades”. En 1987, se firmó el Protocolo de
Montreal relativo a las Substancias Agotadoras de la Capa de Ozono.

La Cumbre de la Tierra, en julio de 1992 en Brasil, es muy importante porque hubo


la aceptación de principios que conforman la transición hacia un desarrollo
sostenible. De la Declaración de Río surge el principio precautorio y el principio
preventivo, que es un pilar dentro del Derecho Internacional Ambiental para la
protección ambiental. También surge el principio 10, que reconoce el derecho a la
información, a la participación y a la justicia en asuntos ambientales. De este
principio derivan la Convención de Aarhus en 1998 para Europa y Asia Central, y
el Acuerdo de Escazú para Latinoamérica (aún no entra en vigor), ambos
buscando que lo expuesto en el principio 10 sea vinculante. Después de Río, en
todos los tratados económicos importantes se empezó a hablar de la protección
ambiental.

La Cumbre Mundial de la ONU sobre el Desarrollo Sostenible, en Johannesburgo,


en 2002, ahí se adoptó la Declaración sobre el Desarrollo Sostenible se habla
sobre promover el desarrollo sostenible, mejorar las vidas de las personas que
viven en pobreza, y revertir la continua degradación del medio ambiente. A fin de
alcanzar el desarrollo sostenible, la protección del medio ambiente deberá
constituir parte integrante del proceso de desarrollo y no podrá considerarse en
forma aislada. En 2012, llega “El Futuro que Queremos” un documento no
vinculante, realizado en la Conferencia sobre el Desarrollo Sostenible de la ONU,
mejor conocida como Río+20. Donde se renueva nuevamente el compromiso para
un desarrollo sostenible.

En la era post moderna, surge el Protocolo de Kioto para enfrentar el cambio


climático, que luego dio paso al Acuerdo de Paris (2016), donde los países
firmantes se comprometieron a hacer todo lo posible por evitar que la temperatura
promedio del planeta supere los 2°C, respecto de los niveles preindustriales,
acuerdo que fue ratificado por casi todos los países del mundo. Este acuerdo
sienta las bases para una transformación hacia modelos de desarrollo bajos en
emisiones y la capacidad para adaptarse a las situaciones adversas con
resultados positivos al clima.

Ya para finalizar, se puede concluir que se han hecho muchos esfuerzos para
tener una normatividad que realmente ayude a resolver las problemáticas
ambientales que van en crecimiento, sin embargo, nos encontramos con un
derecho ambiental que aún está en proceso de tomar forma, como por ejemplo las
medidas preventivas y precautorias y los principios de desarrollo sostenible son
difíciles de defender, por tratarse de conceptos bastante nuevos e imprecisos. Las
iniciativas globales no han logrado motivar el cambio de rumbo que
necesitamos para que nuestro planeta empiece a recobrar la salud. Así como
vamos, nadie asegura que las futuras generaciones puedan satisfacer sus
necesidades como lo han hecho las pasadas y actuales. Las conferencias
mundiales son eventos para la concientización masiva, pero no se ha logrado que
esto ocurra con la velocidad que lo pide el medio ambiente, aun así, han sido
grandes avances para la defensa de nuestro planeta, y cada vez la sociedad tiene
más conciencia ambiental, lo que hace que se vaya tomando el rumbo que el
planeta necesita para recobrar la salud. Se ha observado cómo la evolución del
pensamiento de postguerra hizo posible la aparición de conceptos nuevos,
políticas y normas específicas para problemas específicos relacionados con el
medio ambiente.

En la evolución del pensamiento de postguerra, se observa el surgimiento del


Derecho Ambiental. Este derecho, en el plano internacional, resulta ser Derecho
Internacional Ambiental, con caracteres y principios propios y pretensión de
autonomía científica, a través de haber conquistado un objeto propio, como es la
norma ambiental. El estudio y la investigación de las normas jurídicas ambientales,
ha permitido su incorporación a los ordenamientos jurídicos internos,
conceptualizarlas e interpretarlas, facilitando su traslado y consecuente aplicación
al destinatario final de la ciencia jurídica, el Hombre.

Dentro del Derecho Internacional Ambiental, se han instalado como objeto de


estudio la norma jurídica ambiental, normas supranacionales con contenido
ambiental que han contribuido a disminuir los efectos nocivos de la
industrialización de posguerra y la consecuente contaminación y otros daños
ambientales. La protección del Ambiente, progresó al amparo del Derecho
internacional Ambiental, este trajo consigo principios propios, que continúan
evolucionando hasta formas no investigadas todavía en profundidad. Principios
que, aún en estado germinal, van extendiendo sus efectos, ventajas y desventajas
en los órdenes jurídicos de los Estados provocando cambios políticos e
institucionales de vital importancia en materia ambiental.

La evolución del Derecho Internacional Ambiental en relación a la protección del


ambiente, ha dado lugar a la existencia de normas supranacionales ambientales,
como los convenios internacionales y los Reglamentos. Estas categorías de leyes,
han logrado resultados notables y evidentes, sobre todo ante las respuestas
obtenidas a través de los órganos jurisdiccionales quienes han contribuido con sus
sentencias al esclarecimiento y solución de los problemas ambientales. Los
órganos jurisdiccionales dotados de competencias supranacionales es una
posibilidad cierta, concreta, visible, que produce resultados jurídicos prácticos
como las sentencias, fallos y pronunciamientos, dictados a consecuencia del
ejercicio de la acción de incumplimiento, explicada y descripta en el presente
trabajo.

La existencia de un Tribunal Internacional Ambiental para resolver controversias


internacionales ambientales, tal como se propone, halla su justificación en la
necesidad de que los Estados que ven afectados sus intereses por el
incumplimiento de normas ambientales supranacionales por parte de otros
Estados o sus particulares, puedan ocurrir ante un órgano supranacional
jurisdiccional, en forma unilateral o en litisconsorcio, garantizando el uso y goce
del derecho a una vida saludable y productiva en armonía con la naturaleza.

El derecho a un Ambiente sano y en armonía con la naturaleza, se encuentra


consagrado en la Declaración de Río (1992). Especie de Constitución para el
Ambiente Mundial, que contiene 27 principios rectores y que si bien no es
obligatoria, por efecto del derecho consuetudinario, los Estados han contraído el
compromiso de cumplirla y hacerla cumplir.

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