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Este documento ofrece consejos irresponsables y de mal gusto sobre cómo comportarse en un velorio para ganar atención, generar conflictos y sacar provecho económico de manera inapropiada. Recomienda reaccionar negativamente a la noticia de la muerte, preguntar detalles inapropiados, llamar repetidamente para pedir direcciones, vestirse de manera exagerada, fingir ser amigo del fallecido en otro velorio, exagerar el dolor de manera teatral y causar disturbios recordando otras muertes o viviendo
Este documento ofrece consejos irresponsables y de mal gusto sobre cómo comportarse en un velorio para ganar atención, generar conflictos y sacar provecho económico de manera inapropiada. Recomienda reaccionar negativamente a la noticia de la muerte, preguntar detalles inapropiados, llamar repetidamente para pedir direcciones, vestirse de manera exagerada, fingir ser amigo del fallecido en otro velorio, exagerar el dolor de manera teatral y causar disturbios recordando otras muertes o viviendo
Este documento ofrece consejos irresponsables y de mal gusto sobre cómo comportarse en un velorio para ganar atención, generar conflictos y sacar provecho económico de manera inapropiada. Recomienda reaccionar negativamente a la noticia de la muerte, preguntar detalles inapropiados, llamar repetidamente para pedir direcciones, vestirse de manera exagerada, fingir ser amigo del fallecido en otro velorio, exagerar el dolor de manera teatral y causar disturbios recordando otras muertes o viviendo
Pocos momentos son tan satisfactorios como recibir la invitación a un velorio o
enterarse de la posibilidad de estar presente en uno. ¿Por qué? Porque es un evento para ganarse el cariño de gente, ganarse el odio de gente y sacar algún rédito económico. En la columna de hoy voy a dar algunos tips para capitalizar esa visita al velorio.
Reaccionar alevosamente/antipáticamente a la noticia de la muerte.
¿Hacen algo? ¿Qué llevo? ¿Qué tienen armado? ¿Hay barra? Ofrecer conocidos para que hagan show (musical, stand up, ronda de chistes). Llamar 28 veces a distintos parientes para decir que no encontrás la dirección del velorio. Vestirse de luto nivel siglo XIX. Totalmente de negro, conseguir un tul negro para taparse la cara y tener pastillas de menta a mano para tirarse airecito y llorar los ojos. Si hay otro velorio al lado, entrar igual y hacerte pasar por amigo del muerto (acting) hasta que la mayor parte del público te dice que te equivocaste de velorio. Sobre exagerar el dolor por la muerte. Nadie te va a decir nada, jugar con el dolor propio, al borde de la locura (risa, llanto, risa, llanto). Equivocar el nombre. Anécdotas a los gritos, sin filtro. (Rueda de cabarets). Reclamarle una deuda del muerto a los deudos. Recordar muertes de famosos. Canción favorita del muerto (convocar canto masivo) (ejemplo Neustard). Hacer la gran Pepe Argento y vivir a full cualquier partido por el celular. (Festejar con el cajón, abrazarse con los familiares). Vender cosas entre llanto y llanto, si alguien se niega comprar llorar más. Intentar discursos pero quebrarse en llanto. Sobre el final del velorio, subirse al cajón y no dejar que se lo lleven. Querer llevarlo sólo. Querer manejar el auto fúnebre hasta el cementerio o manejar la máquina que quema el cuerpo. ¿Dónde tiran las cenizas?