Está en la página 1de 7

Clase 9

Características y tendencias musicales


de la generación romántica
2da parte

La revolución industrial y las innovaciones


en los instrumentos musicales

La revolución industrial no fue un hecho aislado sino una serie de


invenciones y aplicaciones que juntas cambiaron la manera de fabricar
productos.
Objetos que habían sido elaborados a mano durante siglos, ahora ya podían
fabricarse con máquinas, lo cual los hacía más accesibles y menos costosos.
La fabricación de instrumentos musicales fue una de las industrias más
revolucionadas. Un gran cambio fue la gran cantidad de instrumentos que
podían fabricarse. Por ejemplo, en 1770 las fábricas más importantes de
Europa solo fabricaban veinte pianos al año ya que cada pieza debía hacerse
a mano. Para el 1800, John Broadwood & Hijos llegaron a fabricar
cuatrocientos pianos por año, contratando una gran cantidad de
trabajadores especializados que desarrollaban su labor mediante la división
del trabajo. Para 1850 la fábrica usaba máquinas de vapor que les permitía
fabricar más de dos mil pianos por año.
El diseño del piano mejoró gracias a una serie de innovaciones, el pedal
sordina, que manteniendo los resonadores lejos de las cuerdas, permitía
que el sonido continuara una vez que se liberaran las teclas. Por lo cual la
resonancia permitía lograr nuevos efectos expresivos. El clavijero metálico
permitió mayor tensión en las cuerdas generando un volumen más
importante, un rango dinámico más amplio y la posibilidad de un mejor
legato. En esta época el teclado se extendió de seis octavas a siete, con lo
cual al tener más notas ampliaba la posibilidad de desarrollar destrezas en
la técnica de ejecución.
Ese mismo espíritu de innovación alcanzó también a otros instrumentos
como por el ejemplo el arpa. Hasta entonces el arpa tradicional se afinaba
en una sola escala diatónica, con lo cual no podían hacer cromatismos y los
cambios de tonalidad requerían cambiar la afinación de algunas cuerdas.
Para poder modificar esta limitación, se implementó un sistema de
horquillas que permitía cambiar en el momento la afinación y lograr así la
escala cromática. Éste principio de horquillas es utilizado actualmente por
los fabricantes de arpas accionadas con pedal.
Desde 1810 los fabricantes de instrumentos de metal implementaron el
sistema de pistones similar a los de las maquinas a vapor que controlaban
el flujo de agua o de aire. Esto permitió que instrumentos como la trompeta
o el corno pudieran tocar todas las notas de la escala cromática.
Con esta evolución de la fabricación de instrumentos de metal, se
inventaron nuevos instrumentos como la tuba que pasó a ser el bajo de la
orquesta en la sección de metales.
En el caso de los vientos de madera, Theobald Böhem era ofebre y músico
con experiencia. Estableció una exitosa fábrica de flautas en Münich, su
innovación fue desarrollar un mecanismo que permitía tapar los orificios
con un sistema de llaves con almohadillas, unidas por un eje y resortes que
permitían el retroceso de las llaves. Este sistema se lo llamó “sistema
Böhem” y se aplicó en otros instrumentos como el clarinete, el oboe y a la
reciente invención de Adolph Sax, el saxofón. Este sistema revolucionario
de mecanismos se continuó usando hasta la actualidad.
Los instrumentos de cuerda también adquirieron modificaciones que les
permitió mayor volumen y estabilidad en la afinación. Lograron adquirir
mayor tensión en las cuerdas, un puente más alto, un mástil inclinado y más
largo para incluir más cantidad de notas agudas, extendiendo su registro.
En la segunda mitad del siglo XIX, los instrumentos habían evolucionado al
formato actual gracias a las innovaciones técnicas de la revolución
industrial.

Los nuevos clásicos: La vigencia de la música del pasado


Junto a la moda por la práctica musical doméstica, en el siglo XIX hubo un
incremento espectacular de los conciertos para las grandes audiencias.
Además de las orquestas profesionales, también las de aficionados y las
sociedades corales llevaron la práctica amateur al ámbito público.
Las nuevas orquestas profesionales y los solistas virtuosos hacían grandes
giras por Europa y América mientras que las sociedades filarmónicas y los
empresarios contribuyeron a desarrollar una producción de conciertos
vibrante apoyada por la venta de entradas a todo tipo de público. La música
de cámara pensada originalmente para el disfrute de los intérpretes en el
ámbito privado de los hogares ahora comenzaba a interpretarse como
repertorio de concierto.
Todos estos cambios fueron acompañados por el surgimiento del repertorio
clásico del pasado que competía con la nueva música del siglo XIX. Mucha
música que se siguió interpretando tiempo después de la muerte del
compositor, compartía los escenarios con las nuevas composiciones y en
cierto caso hasta competían ambos repertorios por los espacios de difusión.
Las obras de los compositores de las generaciones anteriores como el caso
de los oratorios de J.S.Bach o Händel así como las sinfonías y cuartetos de
cuerda de Mozart, Haydn y Beethoven; en vez de pasar de moda como
había sucedido en otros períodos de la historia, siguieron interpretándose
en forma permanente en el repertorio musical a lo igual que los grandes
clásicos de la literatura o del arte.
Si analizamos los programas de concierto entre 1780 y 1870, observamos
que en 1780 el 85% del repertorio era de compositores vivos, en 1820 al
comienzo del romanticismo era del 75% y para 1870 este mismo porcentaje
se invierte en favor de los músicos del pasado.
En el siglo XXI si una obra de un compositor vivo forma parte de un
programa de concierto de orquesta, es todo un acontecimiento novedoso
(este fenómeno no se debe a la falta de producción musical por parte de los
compositores contemporáneos).

La perspectiva histórica

El creciente interés por la música del pasado fue impulsado por diferentes
factores que contribuyeron con la permanencia de un repertorio y una
nueva manera de escuchar música desde una perspectiva histórica.
En la actualidad nos acercamos a la música académica presuponiendo que
es música del pasado y lo hacemos desde una visión histórica, sabemos que
esa música que permanece vigente por herencia cultural, tiene sus
características por el momento y el lugar en donde fue creada. El interés
por la misma se debe a que hay muchos elementos que siguen siendo de
interés para el gusto musical actual. Sin embargo ésta actitud de interés por
la música del pasado tuvo su origen a lo largo del siglo XVIII y se enfatizó en
el siglo XIX siendo una de las características del gusto musical del período
romántico. Por lo cual la nueva música estuvo afectada también por la
permanencia y el redescubrimiento de la música del pasado. Ésta
perspectiva histórica fue una característica importante de la generación
romántica, tanto para los compositores como para los intérpretes, el
público y los críticos.
La perspectiva histórica tuvo varios factores que la impulsaron:
-El primer factor fue el creciente número de aficionados a la música de la
clase media y alta europea tanto en el siglo XVIII y XIX. El gusto por la
interpretación musical en los hogares y en los conciertos públicos, generó
un interés por parte de los aficionados a querer conocer mas sobre la
música y su origen.
-El segundo factor fue que compositores del nivel de Haydn y Beethoven
consiguieron tanta popularidad en vida, que su música continuó
ejecutándose después de su muerte. Al mismo tiempo muchas de las
características de la música de estos compositores seguían formando parte
del gusto musical del público y de los músicos románticos.
-El tercer factor que influenció a la permanencia de la música del pasado es
que ésta era más barata que la de los compositores vivos. A la hora de
publicarla resultaba más fácil de interpretar para los aficionados que la
música más reciente.
-Como cuarto factor podemos describir la influencia de los músicos y
críticos del romántico promocionaban la música del pasado como
contrapeso de la música del presente.
Por aquel entonces los compositores-intérpretes como era el caso de
Niccolo Paganini, generaban una atracción espectacular por su virtuosismo
en el instrumento en el plano de la exhibición, con frecuencia atentando
contra los valores estéticos apreciados por muchos músicos, críticos y
entendidos.
Por ello los compositores románticos que compitieron con el repertorio
clásicos se vieron tentados a aspirar a la trascendencia de su obra mediante
la profundidad de sus intenciones estéticas, combinando el oficio
compositivo con la intensidad emocional y el atractivo inmediato con el
interés duradero.
Finalmente podemos observar que otro elemento que colaboró con la
difusión del repertorio del pasado compitiendo con la nueva música, fue la
elección del programa de concierto por parte de los intérpretes y directores
de orquestas. Si bien muchos de ellos componían, la manera de darse a
conocer no era con la interpretación de sus obras si no con aquellos clásicos
que eran del gusto musical del público y al mismo tiempo ya era música
conocida y difundida. Esto produjo un cambio profundo que alteró para
siempre el trabajo de los intérpretes. Hoy en día no se espera de un
intérprete de música académica que estrene obras propias, de hecho en las
carreras académicas en los estudios superiores de música, separan la
composición de la interpretación. Un intérprete de primer nivel puede
trascender sin necesidad de componer una sola nota en toda su vida y la
mayoría de los compositores, tal vez les cueste interpretar su propia
música, ya que sus ideas musicales suelen estar por encima de sus
habilidades como instrumentistas.

La nueva seriedad del repertorio estuvo acompañada de una nueva


seriedad en el comportamiento del público durante el concierto. De forma
creciente se esperó del público que guardase silencio, y escuchase durante
la interpretación musical en lugar de conversar y ponerse al día de la vida
social, como solía suceder en los conciertos del siglo XVIII. Ese público
silencioso y abierto a la experiencia del goce estético, es un rasgo que se
mantiene hasta la actualidad en los conciertos de música académica y tiene
su origen en el romanticismo.

Félix Mendelssohn redescubre a J.S. Bach

Un claro ejemplo de la perspectiva histórica, tanto desde el interés musical


como melómano, la crítica musical y el aprendizaje de una herencia musical
del pasado que podía ser utilizada como recurso para componer nueva
música, fue el redescubrimiento de la música de J.S. Bach en manos del
compositor Félix Mendelssohn (1809-1847)
Tras su muerte en 1750, las obras vocales de Johann Sebastian Bach, sus
canciones y su música sagrada fueron olvidadas durante mucho tiempo.
hasta que el compositor fue redescubierto a principios del siglo XIX y fue
estilizado como un héroe nacional.
Fue el compositor Félix Mendelssohn-Bartholdy el que redescubrió la
música sagrada de Bach en 1829, incluyendo las cantatas, que había escrito
como música popular, sus oratorios y pasiones. Mendelssohn realizó una
versión abreviada de la Pasión de San Mateo, que dio el impulso para un
nuevo culto a Bach.
Félix Mendelssohn
Félix Mendelssohn al igual que muchos compositores románticos, fue un
niño prodigio, comenzó a componer seriamente a la edad de once años. Fue
célebre pianista, organista y director de orquesta. Sus obras se destacaron
por combinar la expresividad romántica dentro de las formas y las técnicas
clásicas, compartiendo así las mismas cualidades de sus contemporáneos
de la primera generación romántica como Franz Schubert o Robert
Schumann.
Compuso 5 sinfonías para orquesta completa y 13 para orquesta de
cuerdas, numerosas obras de cámara, 2 oratorios, obras corales,
numerosos lied, música incidental para obras de teatro (entre las que se
encuentra sueño de una noche de verano), oberturas y obras orquestales.
También compuso una gran cantidad de obras para piano solo en donde
se encuentran sus romanzas sin palabras y sus siete piezas de carácter para
piano
Las piezas de carácter publicadas en 1827 colaboraron para introducir el
término y definirlo como un género y como un concepto que formaría parte
de las tendencias musicales del romanticismo.

Guía de lectura

-Beneficios de la revolución industrial en la fabricación de instrumentos


-Mejoras en la construcción del piano
-Vigencia del repertorio del pasado en el siglo XIX
-¿Cuáles fueron los factores que impulsaron a la perspectiva histórica en el
romanticismo?
-El redescubrimiento de J.S. Bach en el romantcismo.
-Característica de las técnicas de composición de Félix Mendelssohn
Obras de referencia:
Félix Mendelssohn:
- Concierto para violín y orquesta Op.64
-Sueño de una moche de verano, obertura en Mi Mayor Op.21 (1827)

También podría gustarte