Está en la página 1de 3

SENTENCIA CASACIÓN LABORAL N°4795-2011

Comentario:

El recurso de casación declarado procedente por resolución de fecha 14 de marzo de


2012, por denuncia casatoria de infracción normativa del art. 139º de la Constitución
Política del Estado, concordante con los artículos III y IV del Título Preliminar de la
NLPT. En la cual el casador sostiene que la recurrida omite observar los fundamentos
del proceso laboral, como son el acceso a la tutela jurisdiccional y la solución de
conflictos con arreglo a la Constitución.

Y por no subsanar la omisión de establecer en la demanda el petitorio en forma clara y


concreta de lo que se pide, pues se planteó la declaración de la existencia de un
despido nulo por la causal de existencia de un despido fraudulento, (cuya vía
procedimental era en ese entonces el proceso de amparo).

El decimocuarto considerando apunta que la NLPT, reestructuró el proceso laboral


estableciéndose entre otros la prevalencia del fondo sobre la forma, la interpretación
de los requisitos y presupuestos procesales en sentido favorable a la continuidad del
proceso laboral, con un mayor énfasis en la observancia de los jueces de un debido
proceso, tutela jurisdiccional efectiva y cumplimiento de los principios pro homine,
oralidad, celeridad, inmediación, entre otros.

Luego dice que los Jueces laborales deben romper el paradigma de procesos
ineficaces, de excesiva formalidad y que cuando el Juez Laboral dude al respecto del
cumplimiento de algún requisito o procedencia, que impliquen la inadmisión de la
demanda, o la continuación del proceso, deberá interpretar las normas procesales en
forma sistemática que permitan la continuidad del mismo.

El decimosexto considerando expresa que la decisión de los órganos de mérito de


rechazar la demanda vulnera el derecho fundamental a la tutela jurisdiccional efectiva
del actor y la circunstancia in limine del mismo rechazo transgrede el derecho
fundamental a un debido proceso (en su parte pro actione, art. III Título Preliminar
NLPT), pues han interpretado en forma severa las normas referidas a los requisitos de
la demanda, y que 159 si bien es exigible cierto formalismo, el exceso de atención a la
forma ha distorsionado el presente proceso. Declaran por lo mismo la nulidad del auto
de vista y del auto apelado, al haberse incurrido en infracción normativa y dispusieron
que el juez de primera instancia emita nueva resolución con observancia de los
parámetros y lineamientos contenidos en los artículos pertinentes del Título Preliminar
de la NLPT. Debemos analizar que ésta resolución se da en concordancia a lo acordado
posteriormente en mayo de 2014, por el II Pleno Jurisdiccional Supremo en Materia
Laboral, que acuerda que el órgano competente para conocer una pretensión de
reposición por despido encausado o fraudulento es el Juzgado Especializado de
Trabajo o quien haga sus veces, sin embargo lo sustancioso de la sentencia sub
examine no es que se deba admitir o no en la vía ordinaria laboral tal pretensión; lo
importante es la determinación como obligación del juez de aplicar las normas
procesales con flexibilidad, prevaleciendo el principio de continuidad del proceso y que
debe ser él, el Magistrado, quien tome decisiones trascendentes sobre las
formalidades que constriñen la aplicación de la justicia, entendiéndose que el principio
protector, debe ante la duda favorecer al trabajador, no solo en el ámbito sustantivo,
sino en el adjetivo o instrumental.

SENTENCIA CASACIÓN LABORAL N°7697-2013

Comentario

En esta casación se trata los siguientes causales: a) infracción normativa al derecho del
debido proceso, infracción normativa de los artículos 1321 y 1322 del Código Civil.

Es importante señalar que con la Nueva Ley Procesal del Trabajo, Ley Nº 29497, se
reestructuró el proceso judicial laboral, estableciéndose nueva competencia por
materia y cuantía de la demanda; menor número de actos procesales; legitimaciones
especiales; notificaciones electrónicas; inexigibilidad del agotamiento de la vía
administrativa, salvo cuando exista un tribunal u órgano administrativo ad hoc; y se
privilegió a la igualdad material y procesal entre las partes.

Se advierte que, contrario a lo alegado por la recurrente, el Colegiado de mérito


sostiene que, según se desprende de la sentencia de amparo, la interrupción del
vínculo laboral, al violentar derechos constitucionales, fue antijurídica, es decir,
contraria a derecho, circunstancia que, evidentemente al privar a la accionante de su
fuente de ingresos económicos, provoca un estado de angustia e incertidumbre que se
traduce en una afectación de índole personal y por lo tanto indemnizable, tal como ha
declarado el a quo, existiendo un nexo de causalidad entre la conducta del despido y
dicha afectación personal.

El octavo considerando nos menciona: En ese objetivo, los jueces laborales deben
romper el paradigma de procesos ineficaces, de excesiva formalidad, dando
prevalencia a una tutela jurisdiccional realmente efectiva, apostando por la nueva
dinámica contenida en la Ley laboral en comento, en resguardo de la protección de los
derechos fundamentales de los justiciables.

Para computar el plazo de caducidad de la pretensión de reposición, el juez puede


utilizar pruebas de oficio con el fin de fijar el momento inicial Se debe establecer de
manera clara y precisa desde cuándo se empieza a computar dicho plazo (caducidad),
esto es, desde ocurrido el despido efectuado o si es desde que tomó conocimiento el
actor de la declaración de improcedencia de su acción de amparo, para lo cual se debe
determinar la fecha exacta en la que tomó conocimiento de dicha improcedencia, para
lo cual la Ley Nº 29497 –Nueva Ley Procesal del Trabajo– otorga al juzgador toda la
facultad de actuar las pruebas que considere necesarias en aras de dilucidar desde
cuándo se inicia el plazo de caducidad.

También podría gustarte