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1. Qué tipo de roquedo y modelado representa esta fotografía. Haga una pequeña descripción
ateniéndose a su composición, antigüedad y posible ubicación.
En la España silícea la roca más abundante es el granito, cuyas formas resultantes pueden ser muy
variadas en función de la presencia o no de diversos componentes y de las condiciones climáticas
del medio. La citada roca ofrece una débil resistencia a la erosión cuando tiene abundancia de
biotitas, plagioclasas, granos gruesos o diaclasas, cuando presenta una gran porosidad y si se
encuentra en un clima cálido o en un medio salino. Las circunstancias opuestas hacen del granito
una roca muy resistente a la erosión y, si las fisuras son ortogonales (en ángulo recto) y profundas,
acaban descomponiendo el granito en bolas, más o menos groseras, que forman pedregales al pie
de los cantiles.
El Sistma Central, de dirección NE-SO rompe la continuidad de la Meseta a lo largo de 700 km,
encaramándose puntualmente por encima de los 2500 m. Constituye un dorso muy fallado cuyas
hendiduras en sentido transversal facilitan la comunicación intermesetaria (corredor de Béjar,
puerto de Somosierra). Los materiales, granitos y pizarras, se remontan al Paleozoico en la mayor
parte de la serranía y pasan a ser mesozoicos en el extremo nororiental de la misma. El relieve
ofrece perfiles suaves, sin que los glaciares cuaternarios lograran rejuvenecerlos tras haber sido
enrasados por una superficie de erosión preparoxísmica.
Es el caso que se nos muestra: la Pedriza, en la sierra norte de Guadarrama, en el municipio de
Manzanares el Real, en el noroeste de la Comunidad de Madrid.
2. Señale del mapa adjunto de las islas Baleares las unidades de relieve balear que se
distinguen, y realice una descripción de las mismas según su origen y geomorfología .
Si dividimos el archipiélago en tres unidades de relieve por su cercanía y similitud de características
tenemos:
Mallorca, Conejera y Cabrera. Mallorca es la mayor de las islas (72% de sus superficie) y en
ella se distinguen tres partes: La Tramuntana, que se extiende de suoeste a noreste a lo largo
de 90 km y está formada por materiales secundarios (calizas y dolomías jurásicas), donde
son frecuentes los pliegues de corrimiento hacia el noroeste y las fallas; tiene un relieve muy
agreste y rico en formas (dolinas, lapiaces, poljés…) debido a la abundancia de
precipitaciones y a las numerosas fisuras; hace de barrera natural frente a los vientos fríos
del norte. El Pla ocupa toda la zona central de la isla y tiene dos grandes bahías (la de
Alcudia, al norte, y la de Palma, al sur), no es totalmente llana y bascula hacia la Alcudia (se
puede ver por la mayoría de los torrentes). El Raiguer es una zona de transición entre la
serranía y el Pla, es un piedemonte compuesto por materiales cuaternarios y algunas
manchas miocenas. El Mediodía situado en el suroeste del Pla, esta delimitado por la costa y
los relieves de la Randa que se precipitan verticalmente sobre el mar; hacia el sureste hay
formaciones de dunas que encierran lagunas costeras. Las Sierras de Levante que se
prolongan por las islas de Conejera y Cabrera mantienen la orientación suroeste-noreste,
aumentando la altitud en el mismo sentido y con fragmentación en varios bloques (por eso
lo de sierras) que permiten una comunicación fluida con la costa sur en la que torrentes y
pequeños ríos han formado calas entre los acantilados.
Ibiza-Formentera forman con numerosos y pequeños islotes las Pitiusas. En su relieve se
repite el mismo esquema que en Mallorca pero a menor escala: Ibiza se correspondería con
la Tramuntana y Formentera con el Pla; la presencia de las calizas ha originado un modelo
cárstico, entre los que destacan los numerosos poljés con fondos tapizados de terra rossa.
Menorca es la más oriental de las islas y, por tanto, la más alejada de la península. Por sus
materiales paleozoicos y su orientación ONO-ESE está más vinculada al macizo catalán que
se prolonga hacia Córcega y Cerdaeña. Frente a la ubicación periférica del relieve en las
otras islas, en Menorca el relieve se localiza en el centro, ofreciendo dos paisajes distintos:
un norte paleozoico de la Tramontana (Menorca oscura, con cotas más altas y formas muy
erosionadas después de las orogenias herciniana y alpina, con una costa muy fragmentada
debido a las pliegues y fallas sufridos en el terciario) y un sur mesozoico del Migjorn
(Menorca blanca, es una plataforma de materiales calizos con altura inferior a 100 me
inclinada ligeramente hacia el SO, donde abundan los torrentes que crean un paisaje
cárstico, con una costa agreste donde abundan las calas por los torrentes y la acción del
mar). Esta separación se debió a un corte tectónico o falla.
140 70
120 60
100 50
Precipitaciones
Temperaturas
80 40 80 40
60 30 60 30
Precipitaciones
Temperaturas
40 20 40 20
20 10 20 10
0 0 0 0
E F M A M J Jl A S O N D E F M A M J Jl A S O N D
6- Describa la cuenca del río Guadiana, señalando su forma, características, régimen, etc.
El Guadiana es, entre los grandes ríos de España, el que ofrece los caudales medios absolutos más
reducidos. Tiene una longitud de 818 km y drena una superficie de casi 70000 km 2; su caudal
específico gira en torno a 1 l/skm2 de cuenca, debido a las escasas lluvias que recibe (un máximo
destacado en febrero y uno secundario a finales de otoño) y a que tampoco tiene precipitaciones en
forma de nieve en su cabecera, aunque tiene el mayor embalse de la Península (La Serena).
El Guadiana circula por materiales terciarios (calizas) sin tajarlas formando una gran llanura, la
manchega, que pierde lentamente altura hacia el sur debido a dos razones, una geomorfológica (no
ha sufrido ningún desgarro tectónico) y otra climatológica (la cuantía de las precipitaciones es
irrisoria y no provoca erosión fluvial agresiva).
Delimitada por los Montes de Toledo al norte y por Sierra Morena al sur, su nacimiento es
polémico porque los cuatro ríos que llegan hasta la llanura procedentes de la Serranía de Cuenca
(Záncara y Cigüela) y el Campo de Montiel (Alto Guadiana y Azuer) desaparecen entre las fisuras
calizas para formar el acuífero, cuyos ojos alumbrarán el Guadiana.
Hasta las Tablas de Daimiel, el río no tiene entidad definida. El Záncara y el Cigüela descienden
de los Altos de Cabrejas (cercanías de Cuenca) y cruzan los terrenos calizos mesozoicos de
Altomira y penetran en el terciario manchego donde se forma un único cauce con el alto Guadiana
al suroeste de Alcázar de San Juan. Los dos primeros han dejado atrás zonas endorreicas, pequeñas
y grandes lagunas (Celadilla, Navazuela, Retamar…) más o menos duraderas y algunas de agua
salobre. El Alto Guadiana también aparece vinculado a lagunas (Ruidera).
Toda esta parte tiene unos resultados fluviales muy pobres (caudal específico inferior a 1 l/skm2 de
cuenca) por la falta de lluvias, la infiltración cárstica, el endorreísmo propio de la región y el alto
consumo para actividades agropecuarias.
En el Campo de Calatrava el río se ciñe a las estribaciones meridionales de los Montes de Toledo,
seguidamente toma rumbo noroeste y se dirige hacia el embalse de Cíjara, donde da un giro brusco
de 90º en dirección suroeste tras recibir las aguas del Estena. En el tramo anterior y por su margen
izquierda, ha recibido las del Jabalón y Tirteafuera. Tras dejar a sus espaldas el Cíjara, aparecen tres
nuevos embalses: García de Sola, Orellana y la Serena de los que salen varios canales que riegan el
amplio valle hacia tierras cacereñas.
En el curso medio el Guadiana recibe por ambas orillas numerosos afluentes pero con aportación
muy exigua debido a la escasez de precipitaciones, a las pérdidas naturales (evaporación e
infiltraciones) y al consumo para regadíos. Cerca de Badajoz gira hacia el suroeste y se convierte en
la frontera natural con Portugal durante 70 km.
En España ha drenado una cuenca de 50000 km² y su aportación anual está entorno a los 3000 hm³,
pero su irregularidad es tal que esa cifra se multiplica por tres algunos años y otros puede rebajarse
hasta los 200 hm³ (años 1944-1945).
10- Que diferencia hay entre lacustre y palustre. Razone la respuesta y ponga algún ejemplo
La diferencia entra lacustres y palustres, entre lagos y humedales, está en la permanencia y
profundidad de las mismas. Los lacustres son extensiones de agua permanentes que alcanzan cierta
profundidad, que restringe el desarrollo de la vida acuática en todos sus niveles. Los palustres
presentan aguas someras y su extensión está sujeta a fuertes vaivenes de acuerdo con el ritmo de las
precipitaciones. También varía el grado de salinidad y en sus márgenes dicha alternancia, humedad/
sequía, favorece la presencia de ecosistemas acuáticos y terrestres.
11- A qué se deben las diferencias expresadas en las siguientes tablas del módulo del Ebro en
las tres estaciones de aforo señaladas.
El curso alto del Ebro hasta Miranda presenta un régimen pluvio-nival oceánico con un máximo en
febrero debido a las lluvias atlánticas y al deshielo de las nieves invernales. Desde mayo a
noviembre el módulo queda por debajo de la unidad y el descenso veraniego es menor que el del
centro de la depresión. En Miranda ha recibido el 11% de su caudal.
Hasta Zaragoza, cuando atraviesa Logroño su caudal asciende a 3500 hm³. Por la derecha recibe las
aguas del Tirón, Najarilla, Leza, Cidacos y Alhama, cuyos caudales se ven mermados por los casi
400 hm³ que se derivan hacia el canal de Lodosa. Siguiendo por la misma orilla y una vez rebasada
Tudela se detraen unos 500 hm³ para el Canal Imperial de Aragón. Desde Miranda, donde los
rasgos nivales están ya muy diluidos, el régimen se torna exclusivamente pluvial mediterráneo por
la influencia de los aportes ibéricos. Pero desde la desembocadura del Aragón y hasta su fin en la
desembocadura, en Tortosa, vuelve al régimen pluvio-nival debido a la influencia de los afluentes
pirenaicos.
12. Identifique el origen geológico y formación de esta laguna y su posible localización
geográfica.
La Laguna de la Posadilla o de Fuentillejo es un maar; un maar es un cráter volcánico ancho y bajo,
producido por una erupción freático-magmática, es decir, una explosión causada por agua
subterránea que entra en contacto con lava caliente o magma. Los maares suelen llenarse de agua,
formando un lago de cráter o laguna cráterica de poca profundidad. Las dimensiones de los maares
varían entre 60-2000 m de diámetro y entre 10-200 m de profundidad. La mayoría de los maares
tienen bordes bajos, compuestos de una mezcla de fragmentos sueltos de piroclastos y rocas
provenientes de las paredes de las diatremas. La de la fotografía se encuentra en Valverde, en el
término municipal de Ciudad Real (España) y tiene 15 has, unos 218 m de diámetro. La Laguna de
la Posadilla se encuentra protegida con la categoría de Monumento Natural. Es una de las
abundantes lagunas del Campo de Calatrava, en la provincia de Ciudad Real.
Nota: Eje vertical en miles de habitantes; eje horizontal, años d. C. Sobre las barras, cifra de población en
millones de habitantes. Hasta la Edad Moderna, se considera de forma conjunta toda la Península Ibérica.
Desde 1500, se excluye la población de Portugal. Las cifras anteriores al siglo XVIII son altamente
especulativas. Las cifras del siglo XVIII están basadas en el vecindario de Campoflorido (1712), el catastro de
Ensenada (1756) y el censo de Floridablanca (1787). Las cifras a partir de 1857 provienen del Instituto Nacional
de Estadística (INE).
13- Analice los ciclos demográficos que se aprecian en ese gráfico, señalando su duración y
características.
El ciclo demográfico antiguo puede verse desde la Antigüedad hasta el siglo XIX, con unas tasas
altas de natalidad y de mortalidad. Se calcula que durante los siglos I y II la población en Hispania
alcanzaría los seis millones de habitantes. La caída del Imperio Romano, el hundimiento de las
ciudades y la ruralización de la economía reducen la población a cuatro millones a comienzos del
siglo IV. Si a esto añadimos la lucha permanente entre moros y cristianos, las cifras imperiales no
se alcanzan hasta el siglo XIII. El siglo XIV es un cúmulo de desdichas que diezman la población:
se producen lluvias torrenciales y heladas catastróficas para las cosechas, el fisco vacía los bolsillos
de las clases populares y la Peste Negra (1348). Durante el siglo XV desciende de nuevo por debajo
de los cinco millones. Desde finales del XVI hasta mediados del del XVII, el incremento medio
anual está por debajo del 1‰, lo que confirma un desarrollo poblacional muy precario. Desde 1768
hasta 1787 el incremento anual es del 6,29‰, debido a las mejoras administrativas de Carlos III
(empeñado en una modernización de la sociedad y una distribución más equilibrada de los recursos
económicos). La década siguiente, ya en el desgobierno de Carlos IV, debido a fiebres, inflación,
guerras con Francia e Inglaterra, epidemias de paludismo y hambrunas la población solo aumentó
un 1,26‰. Desde 1797 hasta mediados del XIX el incremento anual medio es de 7,7‰, y se puede
dividir en dos partes: la primera entre 1797 y 1834 los logros demográficos mejoran levemente
(3,6‰), pero en la segunda, es decir, desde 1834 hasta 1857, se disparan hasta alcanzar el 11,8‰,
porque el país se organiza, redistribuyendo la propiedad agraria y dando los primeros pasos hacia la
industrialización. Desde el punto de vista social la segunda mitad del siglo XIX presenta un altísimo
grado de defunciones (29‰), debido a pestes y otras mortalidades catastróficas como la viruela que
venía actuando desde 1833 y que tuvo su último gran azote en 1885. En el año 1900 la tasa de
mortalidad es del 28,8‰ y la de natalidad del 34‰, que nos sitúa todavía en el ciclo demográfico
antiguo.
La transición demográfica se produce entre 1900 y 1977, y produce un aumento espectacular de la
población porque la natalidad se mantiene elevada (mayor del 30‰) y la mortalidad cae
vertiginosamente (por debajo del 20‰), debido tanto a causas económicas (desarrollo de la
agricultura y pronta distribución de sus productos) como a causas sanitarias y culturales (las
medidas sanitarias e higiénicas logran prever numerosas dolencias y enfermedades endémicas por
medio de las vacunas). En el gráfico se puede ver que el censo del año 1900 tiene un aumento del
9,4‰, frente al 3,2‰ de 1897. La virulenta gripe de 1918 arrojó un saldo negativo del 4‰. entre
1920 y 1930 el país vive un impulso demográfico destacable y ni siquiera durante la guerra civil se
alcanzan cifras de mortalidad del 20‰ (en 1938 hubo un saldo negativo del 2‰, pero la cifra de
mortalidad fue del 18,4‰). La década de 1930 experimenta un saldo positivo del 9,87‰, debido a
un desarrollo social y económico importante, superior a las décadas posteriores (8,08‰ y 8,77‰).
La natalidad se mantiene por encima del 20‰ hasta 1968 y la mortalidad alcanza niveles muy bajos
desde comienzos de los años cincuenta (9,6‰ en 1952). El cénit del crecimiento se sitúa en 1964
con una tasa del 13,46‰ y el famoso “baby boom” habría que situarlo entre los años cincuenta y los
primeros setenta donde el saldo vegetativo relativo se sitúa por encima del 10‰.
El ciclo demográfico moderno se caracteriza porque sigue disminuyendo la mortalidad pero al
mismo tiempo disminuye la natalidad y que hace volver al desarrollo poblacional del ciclo antiguo
aunque no por los mismos motivos. Desde 1977 (tasa del 10‰) hasta el año 1998 (tasa del 0,12‰)
el descenso vegetativo es de continua caída y entre los años 2012 y 2018 se produce el temido
crecimiento cero, lo que implica un descenso de la población año tras año por causas naturales y no
catastróficas como antiguamente.
14- Defina Tasa General de Fecundidad (TGF) y Tasa Específica de Fecundidad (TEF), y
ponga la fórmula de ambas tasas.
La Tasa General de Fecundidad (TGF) representa la relación entre los nacimientos y el número de
mujeres en edad de procrear (entre 15 y 49 años). Su fórmula es
TGF = N * 1000 / PF
donde N es el número total de nacimientos y PF el número total de mujeres entre los 15 y los 49
años.
La Tasa Específica de Fecundidad (TEF) relaciona el número de nacimientos que tienen lugar por
cada 1000 mujeres de una edad determinada e (por lo general se agrupan en bloques de cinco años)
y su fórmula es :
TEFe = Ne * 1000 / PFe
donde Ne sería el número de nacimientos habidos de mujeres de una edad e, y Pf e, sería el número
de mujeres que tienen esa edad e.
16- Analice la estructura urbana de estas dos ciudades (Lugo y Pamplona) señalando los
contrastes de la evolución histórica y morfológica que se aprecia en ellas. (Fuente: IGN)
Lugo se fundó como un campamento romano, probablemente en el lugar de un antiguo castro celta,
en una campaña con la finalidad de anexionar al Imperio romano el noroeste peninsular en la época
de Augusto, alrededor del año 25 a.C. Así, en nombre del emperador, Paulo Fabio Máximo funda
Lucus Augusti sobre este campamento militar, y a partir del año 50 se inicia la expansión de la
ciudad, con el asentamiento de población indígena de los castros próximos. Posteriormente, la
ciudad se convierte en un importante núcleo urbano, representativo de la cultura y el modo de vida
romanos, como se aprecia en los restos encontrados de la antigua ciudad, correspondientes a
templos, piscinas, termas, monedas o mosaicos. Sobre las dos vías perpendiculares que
configuraban todas las ciudades romanas (el cardo y el decumano) hay discusión pues unos dicen
que seguían la ruta de las actuales calles San Pedro y Rúa Nova, que se cruzaban en la Praza do
Campo, formando el foro, sin embargo, recientes descubrimientos arqueológicos demuestran que
existía una amplia plaza pública que ocupaba desde la Rúa Doutor Castro (llamada de las
Dulcerías) hasta la Rúa do Progreso, incluyendo gran parte de la actual Praza de Santo Domingo, lo
que ha llevado a replantearse la teoría anteriormente citada. Tras la llegada y la toma de la ciudad
por parte de los suevos en el 460 se elevó a la iglesia lucense a sede metropolitana, pasando a
depender de ella los obispos de Astorga, Britonia, Iria Flavia, Orense y Tuy. En la Hispania
visigoda fue sede episcopal de la Iglesia católica, sufragánea de la archidiócesis de Braga. Su
protagonismo histórico empezó a decaer con la fundación de Oviedo, el descubrimiento del
supuesto sepulcro del Apóstol Santiago en Compostela y la restauración de Braga. Durante este
período Lugo perdió gran parte de su población, comenzándose a recuperar en el siglo X. En el 714
llegan a Lugo los musulmanes, y en el año 741 Alfonso I ocupa, sin resistencia, la ciudad, y el
obispo Odoario, encontrando la ciudad en un estado lamentable, ordena sepultar los restos romanos
y reconstruir la ciudad, conscientes ambos de la importancia que en estos años adquirirá dentro del
Reino, ya que era la única Iglesia metropolitana reconquistada y la única ciudad en toda la Hispania
cristiana durante el siglo VIII y la primera mitad del IX. De este modo, la urbe romana se convirtió
en un locus eclesiástico, núcleo del actual burgo. En el siglo VIII la ciudad era lugar de paso de las
peregrinaciones a Santiago de Compostela. Durante la Edad Moderna la ciudad experimentó un
cierto auge con la división del estado español en provincias realizada en 1833 y la creación de las
diputaciones cuando la villa fue designada como la capital provincial, decisión motivada sobre todo
por lo céntrico de la ciudad amurallada, y se convirtió en la más importante de entre las que hoy
forman parte de la provincia de Lugo, lo que supuso un crecimiento constante en población y
extensión. Este auge fue reforzado con la llegada del primer ferrocarril a la ciudad en 1875. En
1971 se aprobó un decreto que declaraba de utilidad pública la demolición de las edificaciones que
estaban adheridas a la muralla romana, y se inició entonces la demolición de los 130 edificios y
1429 cobertizos que estaban adosados a la muralla por el exterior e impedían la observación del
monumento.
El origen de Pamplona parece remontarse a los celtas, aunque está fuera de toda duda de que, por su
importancia como cruce de caminos hacia la Galia, el mar Cantábrico y el río Ebro, la convirtieron
en una ciudad romana con foro y termas, alcanzando su esplendor en el siglo I de nuestra era. Tras
años de retroceso, la política repobladora de los monarcas y la importancia que adquiere en el
camino de Santiago, fueron determinantes en el crecimiento de los burgos medievales que fueron
completando el casco antiguo de la ciudad. Con el derribo de las murallas (1888) y la edificación de
los ensanches (1915), la ciudad comenzó a crecer de forma ordenada hacia el sur. Puede apreciarse
una trama del casco viejo de trazado ortogonal y la trama del ensanche rectangular con
superposición de otro radial.
La influencia del medio físico en el emplazamiento primitivo de las dos ciudades está fuera de toda
duda. En el caso de Lugo, la ciudad y su paisaje, tanto rural como urbano, están marcados por el río
Miño, pues la ciudad se encuentra en una colina casi rodeada por el río. Todo este parque en torno
al río abarca una ruta de parques de unos treinta kilómetros de longitud. Los otros dos ríos que
atraviesan la ciudad son el Fervedoira y el Mera, en torno a los cuales se encuentran varios parques
con diversas especies de árboles. En el caso de Pamplona, la posición sobre un cerro en el río Arga,
que le permitía dominar la cuenca circundante, fue decisiva en la elección del primitivo
asentamiento de la ciudad.
FRANCO ALIAGA, TOMÁS. Atlas temático de España. Madrid, 2004. ISBN: 978-84-609-2854-6