Don Quijote es un pobre campesino de La Mancha que siente una gran pasió n por las novelas de caballería. Esto se convierte en una obsesió n, y bajo su influencia emprende el camino como un verdadero caballero. Se encariñ a con una moza y recoge unas armas de cartó n. Dedica todas sus acciones a su amante, Dulcinea del Toboso, que en realidad era una campesina bastante fea. Su primera aventura tiene lugar en una posada donde toma al posadero por su castellano. Luego encuentra a un campesino que ha estado golpeando a su criado atado a un á rbol y le hace prometer que lo desatará y le pagará su simbología. Después se encuentra con unos mercaderes a los que pide que consideren a Dulcinea como la mujer má s bella del mundo, pero uno de ellos le propina una gran paliza y tiene que volver a casa porque está malherido. Sus amigos saben que la demencia de Don Quijite se debe a sus libros de caballerías, que deciden quemar, dejá ndole só lo con dos: Dina de Montemayor y Amadís de Gaula. Tras recuperarse, el héroe emprende otra aventura, acompañ ado de Sancho Panza, a quien convence para que sea su escudero. En su viaje se enfrenta a unos molinos de viento a los que confunde con gigantes, con los que quiere luchar, pero es derrotado. Má s tarde se topa con un carruaje acompañ ado por monjes benedictinos e imagina que en su interior hay una princesa secuestrada. Finalmente, Don Quijote es persuadido de volver a casa tras encontrarse por el camino con una multitud de curas, colgados, pastores, presidiarios y fugitivos. La segunda parte de la novela Diez añ os después de la publicació n de la primera parte, aparece la segunda, en la que Don Quijote y su compañ ero Sancho Panza se hacen muy populares. Sin embargo, la reputació n del caballero no es buena, ya que se convierte en el hazmerreír de muchos y acaba siendo engañ ado por el propio Sancho. Como tenía que encontrarse con su gran amor, Panza lleva a Quijote tres campesinas a las que presenta como Dulcinea y sus acompañ antes. Don Quijote só lo ve a las campesinas y no a la noble dama que esperaba, por lo que su amigo finge estar hechizado y, por tanto, ser incapaz de ver la verdadera belleza de su amada. Finalmente, Sancho es nombrado gobernador de la ínsula Barratoria, pero renuncia, a pesar de ser há bil. Don Quijote regresa a su casa, donde cae en un profundo sueñ o, y cuando despierta, está curado de su locura, pero su salud empeora, por lo que muere.