La actividad consistió en resolver un problema real relacionado con el crecimiento de
una población de bacterias en un laboratorio. Se nos dio la función exponencial que
modelaba el crecimiento bacteriano y se nos pidió que calculara el tiempo necesario para que la población se duplicara, se redujera a la mitad o alcanzara un cierto valor. También se nos pidió que graficara la función y que interpretara el significado de la base, el exponente y la constante. Además, se nos pidió que comparara la función exponencial con la función logarítmica inversa y que explicara las diferencias y similitudes entre ambas. Finalmente, se nos pidió que aplicara el concepto de logaritmo para resolver ecuaciones exponenciales y que justificara cada paso. Esta actividad tiene algunas características de una evaluación auténtica, pero no todas. Por ejemplo: Cada estudiante sigue aprendiendo durante esta evaluación: Sí, porque se trata de una actividad que requiere el uso de diferentes habilidades matemáticas y el razonamiento lógico. Se trabaja en contextos de la vida real (fuera del aula y deseablemente promueve un beneficio para dicho entorno): Parcialmente, porque el problema se basa en una situación real, pero no se especifica cómo la solución puede beneficiar al entorno o a la sociedad. Enfrenta situaciones complejas: Sí, porque el problema implica el manejo de diferentes conceptos y operaciones matemáticas y el análisis de sus implicaciones. Debe actuar a partir de la puesta en práctica de los conocimientos, habilidades, actitudes y valores del curso en cuestión: Sí, porque la actividad exige el dominio de los contenidos del curso, así como la creatividad, la precisión y la honestidad. Cada estudiante debe justificar sus decisiones: Sí, porque la actividad requiere que el estudiante explique el proceso y el resultado de cada cálculo y gráfica.