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4 Nos Metemos en La Cocina
4 Nos Metemos en La Cocina
CUADERNO CUARTO
NOS METEMOS EN LA COCINA
Todos los alimentos, sin excepciones, tienen una de las dos cargas
energéticas básicas y se sujetan a unas reglas de funcionamiento
específicas.
CUADERNO CUARTO
NOS METEMOS EN LA COCINA
CONTENIDO.-
CUADERNO CUARTO:
NOS METEMOS EN LA COCINA.
En los libros de cocina más habituales (al final del cuaderno figura la
referencia de los más “básicos”) que se dedican a la Cocina Consciente
(la energética) aparecen multitud de recetas para aprender a preparar
los cereales integrales, bien solos o en combinación con otros
alimentos, lo que nos hace ver la idea de su importancia. Por ejemplo,
tomando un libro clásico de Aveline Kushi (La Cocina de Aveline) le
dedica 58 recetas a la preparación del cereal integral. En “La Nueva
Cocina Energética” de Montse Bradford se explican 16 recetas para
ello y, por último, en el caso de Perez Calvo (Revitalizate!!) a los
cereales se les dedican otras 30.
Por cierto que, aunque para todos los alimentos es esencial la buena
masticación, en el caso de los cereales integrales son tan potentes que
se dice que “si no se va a hacer una buena masticación es mejor
tomarlos refinados para evitar problemas de absorción de nutrientes y
de fuerza digestiva”.
Las legumbres son las semillas que se crían en las vainas de las
plantas leguminosas y son tradicionalmente muy empleadas en la
cocina diaria. De forma que lentejas, garbanzos, alubias, soja… son
muy habituales en nuestros menús diarios. Obviamente, en la Cocina
Consciente y Energética se requiere que las legumbres a utilizar sean
de cultivo biológico, sean naturales y que estén limpias de químicas y
de sustancias agresivas para el organismo.
Las legumbres completan, junto con los cereales integrales y todas las
verduras, el fundamento de la alimentación energética. De la
importancia de las legumbres es testimonio, nuevamente, el
tratamiento que se les da en los libros citados de cocina energética. En
el caso de Aveline Kushi es muy interesante, además, la propia
descripción que hace de los procedimientos que se emplean para
cocinarlas: el Shocking, el Hervido, en Olla Presión y en Horno. De su
experiencia expresa se toma la recomendación de cocinar legumbres y
cereales con un poco de alga kombu para mejorar el sabor, para
agregar minerales a la cocción, para quitarle acidez (efecto de
acidificación en el organismo) y para reducir gases y flatulencias.
Sin embargo, tres son los factores que marcan una gran diferencia
entre ambos tipos de cocina (la tradicional y la energética), hasta el
punto de que habitualmente son difíciles de encontrar en los
mercados tradicionales.
¿Exageraciones?... ¿Extremismos?....
Lo cierto es que, con el paso del tiempo y a base de haber forzado las
condiciones de desarrollo antinatural de las verduras, hemos perdido
nuestro conocimiento de cual es el periodo del año que les
corresponde para su crecimiento. De hecho en el mercado habitual es
posible encontrar casi de todo sin importar en que época del año nos
encontramos. Para tener el recuerdo de lo que corresponde con cada
estación, se presenta en las páginas siguientes la relación de verduras
según la temporada.
Así como los grupos de alimentos que han sido expuestos hasta el
momento (cereales integrales, legumbres, proteínas vegetales y
verduras de hoja, de raíz y redondas) forman parte consistente y diaria
de los platos de la nueva cocina en forma de SOPAS, de CREMAS,
ENSALADAS, ESTOFADOS, GUISOS, SALTEADOS, GUARNICIÓN,
PAELLAS etc, éste nuevo grupo de alimentos forman parte de los
complementos que se colocarán en un plato para “cerrarlo” y para que
contenga todos los nutrientes (o la máxima cantidad de ellos) en
equilibrio energético, pero no suelen ser platos en sí mismos. Se
incorporan para ello en pequeñas cantidades (no hace falta más) pero,
no obstante, son muy importantes para armonizar los platos.
Combinan bien con casi todos los alimentos de los grupos anteriores:
cereales integrales, verduras, proteínas vegetales, legumbres, sopas,
cremas, ensaladas….y es sencillo aprender a manejarlas. Las más
frecuentes y de uso diario son el alga Nori, el alga Wakame y el alga
Kombu. De uso más espaciado son la Arame, la Hiziki y la Dulse. Es
muy recomendable incorporarlas siempre en algunas preparaciones
concretas. Así ocurre cuando se preparan los cereales hervidos (en
especial el arroz) y cuando se cuecen las legumbres (ayudan a quitar
los gases). Conviene remojarlas antes de emplearlas. Veamos los
tiempos de remojo y de cocción.
LAVAR.-
Con relación a las Verduras, el lavado será distinto según sea el tipo
de verdura: de hoja, de raíz o redondas. Las verduras de hoja verde
son las más delicadas y deben de lavarse muy suavemente. Lo mejor
es poner abundante agua fría en una palangana y sumergir las hojas
para lavarlas. Las verduras de raíz tienen generalmente una piel dura
y resistente y la forma adecuada de tratarlas es lavarlas con un cepillo
de cerdas duras (especial para verduras) y frotarlas tanto en el sentido
horizontal como en el vertical bajo el grifo de agua fría. De ésta
manera se les quita la tierra pero manteniendo la piel por la gran
concentración de nutrientes que posee. Por ultimo, las verduras de
tierra se lavan con agua fría cuidadosamente, en algunos casos
inclusive después de que han sido peladas (como la cebolla por
CUADERNO CUARTO: Nos metemos en la cocina.
ALIMENTACIÓN CONSCIENTE 38
ejemplo). Por otra parte, las Algas (las verduras del mar) no requieren
de lavado puesto que al desechar el agua del remojo se eliminan las
impurezas. En general, si tenemos dudas acerca del posible
tratamiento con productos químicos de las verduras, entonces lo
mejor y más seguro es lavarlas y pelarlas. Lo mismo que en el caso de
la Fruta puesto que son las más sensibles a los tratamientos
químicos. En general los alimentos con piel, tienden a concentrar
nutrientes en la misma, pero también, de la misma manera,
concentran las “porquerías” y hay que evitarlas.
PELAR.
CORTAR.
REMOJAR.
Entre las legumbres hay que distinguir las que son blandas (como las
lentejas), las que son duras (garbanzos y alubias) y las que son medias
(como los azukis) puesto que el tiempo de remojo será distinto. Desde
las lentejas que no requieren tiempo de remojo previo, pasando por los
garbanzos y las alubias que requieren de 8 a 10 horas y en la posición
intermedia están los azukis que tienen bastante con un remojo de 3 o
4 horas (aunque pueden estar perfectamente toda la noche).
CEREALES:
Cocciones largas (cremas desayunos). Presión Olla (para granos
enteros). Hervidos (pastas, paellas).
LEGUMBRES:
Cocciones largas. Presión Olla.
PROTEÍNAS VEGETALES:
Cocción larga. Plancha. Fritura. Estofado.
FRUTAS:
Horno (asadas). Cocción larga (compotas).
VERDURAS:
Crudo. Vapor corto. Vapor largo. Hervido corto. Escaldar. Nishime.
Kimpira. Saltar. Asar. Hornear. Sofreir. Pickles. Prensados.
POCO UTILIZADOS:
Brasa. Horno. Ahumados. Plancha. Freir.
NADA UTILIZADOS:
Microondas.
Por último, hay unas técnicas para trabajar con las verduras cuyo
objetivo es el de lograr que fermente o germinen añadiendo agua
salada o presión física y que da lugar a los famosos Pickles, los
Prensados, los Macerados y los Germinados….los cuales se añaden a
los platos por sus excelentes condiciones nutricionales y de defensa de
la flora intestinal. Son técnicas muy elementales y sencillas y que
deben de aprenderse.
CUADERNO CUARTO: Nos metemos en la cocina.
ALIMENTACIÓN CONSCIENTE 46
Es decir que podremos elaborar cada ingrediente del plato único como
una unidad separada y con toda la variedad posible (siempre que se
respeten las reglas de los “alimentos correctos”) pero luego serán
colocados ocupando la parte del plato único que les corresponde. El
comensal en la mesa recibe un plato único completo con todos los
alimentos y en la mesa estarán (si es lo oportuno) los condimentos, las
salsas y los aderezos para satisfacer los diferentes gustos. Al final de
la comida se terminará con un té bancha caliente y digestivo.
Desde luego que si, pero tiene explicación. La necesidad del sabor
dulce es una de las necesidades más arraigadas en el “cuerpo
sensitivo” del ser humano y tiene que quedar satisfecha, so pena de
ser buscada con ahínco a toda costa. En la cocina energética, el dulzor
se obtiene de diferentes maneras, que nada tienen que ver con el uso
del azúcar. Es muy interesante observar el listado de postres que
prepara Aveline Kushi en su libro de “La cocina de Aveline”:
También es cierto que los postres son una tradición muy arraigada
para celebraciones y festejos sociales de tal manera que no se llega a
entender una celebración sin la presencia de deliciosos postres para
finalizar la comida. En éste sentido, también en la cocina consciente y
con carácter de celebración y fiesta, se preparan postres, pero
entendiendo que en el día a día, las comidas y las cenas deben de
incluir platos únicos completos y no llevar postre. Otra cuestión es
que platos preparados cocinando fruta como manzanas, peras… bien
sea en compota o asadas sean idóneos para la merienda o entre las
comidas e inclusive sirven para tomar algo dulce y relajante antes de
ir a la cama.
Cocinando en primavera
Cocinando en el verano.-
Cocinando en el otoño.-
Cocinando en el invierno.-
EVITAR
RECOMENDACIONES DIARIAS
SUGERENCIAS
CUADERNO PRIMERO:
LOS CONCEPTOS CLAVES.
CUADERNO SEGUNDO:
LA INICIACIÓN.
CUADERNO TERCERO:
DIFERENTES DIETAS PARA DIFERENTES NECESIDADES.
CUADERNO CUARTO:
NOS METEMOS EN LA COCINA.
CUADERNO QUINTO:
COCINANDO CON INTENCIÓN.
CUADERNO SEXTO:
276 REMEDIOS Y ALIVIOS
La Cocina de Aveline
Aveline Kushi y Alex Jack
Editorial Publicaciones Gea.
Alquimia en la cocina.
Montse Bradford
Editorial Océano Ambar
Curación natural.
Michio Kushi
Editorial Publicaciones Gea.