Está en la página 1de 2

D E F#m

El Señor es mi pastor,
D E F#m
nada me puede faltar,

nada me puede faltar.

El Señor es mi pastor,
qué me podrá faltar.
En las verde praderas
me lleva a reposar.
Me conduce a las aguas frescas
y mi alma reconforta.

El me guía por sendas justas


por amor de sus nombre.
en la oscuridad yo no temo,
porque el está junto a mí.
Tu cayado, la vara tuya
son ellos mi confianza.

Para mí pones una mesa,


frente a mis asdversarios;
has ungido mi cabeza,
y mi cáliz rebosa.
De gracias yo gozaré
en tu casa mientras yo viva.

Demos gloria al poderoso,


a Jesus, el señor.
Al Espiritu en nuestras almas,
a nuestro consolaador.
Al Dios que es que era y que vendrá
por los siglos de los siglos.

F G Am
1 2 3 1 2 3 1 2 3 1 2 3
dudududududududududududu
F G Am
1 2 3 1 2 3 1 2 3 1 2 3
dudududududududududududu
Dm Am E7 Am
1 2 3 1 2 3 1 2 3 1 2 3
dudududududududududududu

G F
1 2 3 1 2 3 1 2 3 1 2 3
dudududududududududududu
Am
1 2 3 1 2 3 1 2 3 1 2 3
dudududududududududududu

1 2 3 1 2 3 1 2 3 1 2 3
dudududududududududududu

1 2 3 1 2 3 1 2 3 1 2 3
dudududududududududududu

También podría gustarte