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¿COMO DEDE HACERSE?

se puede dar un informe de una persona sólo con verle hablar.


Para eso se requiere un profundo conocimiento de pslcofislogno-
mía o morfopsicología, las dos grandes corrientes modernas que
penetran en el hombre por su rostro.
Pero por encima de la técnica es preciso el hombre. 7 ese
conocimiento, ese sexto sentido no lo puede dar nadie, se nace
con él; pero sí se puede afinar, perfeccionar, mejorar sensi­
blemente.
Voy a contribuir en la medida de lo posible a dar a mis
lectores una idea de los tests gráficos en general y en particu­
lar; en la II PARTE trataremos del PLANO GRAFICO, el más
difícil, el peor explicado y el de mejores resultados, que sirve
siempre y da una imagen bastante certera del autor.

I . ... ( . , . -

/ V'; ' í- eó ■ • '


II PARTE

EL PLANO GRAFICO
• i. I

Por las obras los conoceréis


(El Nuevo Testamento)

24
INTERPRETACION DE LOS DIBUJOS

Las leyes en que se apoya el PLANO GRAFICO de los dibujos


son las mismas que rigen la grafología mímica y simbólica.
Es la forma de hacer de cada uno, con su impronta de per­
sonalidad, de vigor, de fuerza o de debilidad.
Como ya he dicho, divido este estudio en siete importantes
grupos que detallan los aspectos más importantes del campo
gráfico.
El tamaño, la proyección del dibujo, la situación, la forma,
fuerza, continuidad del trazo y estilo. Elementos estos que nos
ofrecerán una huella importante del autor.
Para proceder a la interpretación aconsejo el sistema de fi­
chas. Hacer fichas en las que el título de cada uno sea el rasgo,
pero detrás y en MAYUSCULAS, la familia.
Agrúpense en un orden las de TAMAÑO, PROYECCION, SI­
TUACION, FUERZA, FORMA, CONTINUIDAD y ESTILO. De
este modo iremos sometiendo cada dibujo a una primera inves­
tigación y anotando en un papel, en el lado de la izquierda, en
una columna lo que vayamos encontrando, siguiendo los siete
aspectos:
TAMAÑO:
Orando.
EL TAMAÑO DEL DIBUJO
il ruso CRAHCO

PROYECCION; — Rasgos temperamentales y caracterológicos:


Arriba, derecha. f • extraversión-introversión, etc.
SITUACION; (j~> Relaciones del niño y su medio.x^
Centro. — Preocupaciones más agobiantes.
FUERZA: — Complejos.
Firme. •»
FORMA: EL TAMAÑO DEL DIBUJO
Curvas.
Lo mismo que en grafología se estudió el módulo de tamaño
CONTINUIDAD: j partiendo del modelo caligráfico de cada nación y su aprendi­
Mezclas, unido, separado... zaje es importante para determinar el módulo de todos los as­
ESTILO: i pectos. Al referirnos a los dibujos este estudio se hace de
acuerdo con el marco de papel sobre el que se realiza la prueba.
Agil. El dibujo, según el marco del papel, puede ser:
Una vez que tengamos estudiado todo el plano gráfico en — Muy grande,
el orden indicado, sacaremos las Echas que correspondan a — Grande.
TAMAÑO, etc., y dentro de ellas tomaremos la que corresponde
— Normal.
al gesto hallado, comenzando a hacer en el lado de la derecha
de la cuartilla el borrador del informe, anotando lo que corres­ — Pequeño.
ponde a los aspectos de la personalidad que deseemos ínves- * — Muy pequeño. \
ligar.
El esqueleto de la personalidad debe consistir en un estudio Dibujo muy grande:
del factor intelectual, del factor volitivo y moral' Después he- 1
mos de completarlo con aquellos datos que nos Interesan, según Se dice que el dibujo es muy grande cuando no cabe en el
el carácter del estudio y que pueden ser. como veremos en la marco de papel que le hemos dado al sujeto, figura 2. Hay un
III PARTE: problema que conviene advertir. Un dibujo incompleto no sirve
para análisis, sobre todo para algunos aspectos relativos a!
— Orientación profesional, optitudes. Informe que vamos a hacer. Cuando un dibujo no se complete
— Orientación prematrimonial. en el marco de papel entregado al sujeto que se somete a la
— Factor social y de relación. prueba, se le deben nñadir papeles con el fin de que complete
— Elementos patológicos. el dibujo. Figura 3.
EL TAMAÑO DEL DIBUJO
EL PLANO CRAF1CO

el principio de la escalinata. Es curioso el signo de poner varias


. chimeneas, que se asocia a un símbolo fálico, según algunos,
pero que en este caso parece probable, conociendo la- historia
del autor, que corresponda a una tremenda falta de afectos, ya
que fue educado en un orfelinato. La chimenea y el humo sim­
boliza también el calor del hogar —tengámoslo en cuenta al
interpretar las chimeneas y el humo—, y no olvidemos el sím­
bolo fálico, que también puede ser interpretado en algunos
casos.

i
>
Corresponde este dibujo, reproducido de memoria, a un señor
megalómano, cuya afición a la vida fastuosa se deja ver en la
mansión palacio, que no entrándole en la primera cuartilla que
se le dio (A), hubo de pegarse la (B), que tampoco era sufi­
ciente, dándole la (C), donde añadió un signo externo de ri­
queza y poderío, un coche grande, y al darle la cuarta (D) situó Fie. 3
EL TAMAÑO DEL DIBUJO
EL PLANO CRAFICO

dibujo, y queda bastante espacio hasta llegar al borde, casi


Conviene completar el dibujo para no perder detalles im­
podría asegurar que la superficie ocupada es la mitad del papel.
portantes. En el caso de la figura 3, no hubiéramos visto el
Estar dentro de la norma es índice de acomodación al medio,
detalle curioso de las cuatro chimeneas ni el coche qué aparece
en la tercera. de equilibrio entre intro-extraversión, es vitalidad normal, es
exacta valoración de uno mismo, es control. Pero todo esto
En'el caso del árbol, de la familia, de la pareja, podemos
perder aspectos imprescindibles para la correcta interpretación.
En el árbol, concretamente se requiere medir la altura del árbol,
para una de las pruebas.
Cuando se hace muy grande un dibujo equivale a ser la per­
sona de amplias miras, con desprecio del detalle. Parece que
el mundo le viene pequeño. Generalmente corresponde a mega­
lomanía y supercompcnsación del sentimiento de Inferioridad.

Dibujo grande:

El dibujo es grande cuando ocupa todo el marco de papel


que hemos destinado a la prueba (fig. 4). Apenas quedan espa­
cios en blanco en el dibujo. Al margen de la interpretación que
corresponda al aspecto formal del dibujo, en este caso una pa­
reja de espaldas al amor del fuego, vamos a considerar el dibujo
grande:
Todo lo que sobrepasa la norma —dibujo de tamaño nor­
mal— es salir de nosotros mismos, es movimiento de extra­
versión, de fuerza y vitalidad, de orgullo, de amplitud de miras,
visión global de las cuestiones, generosidad, acaso de vanidad.

Dibujo normal:

Cuando un dibujo se considera normal es cuando ocupa la


superficie equivalente a un 50 del marco de papel empleado,
caso de la figura 5. Queda una franja blanca a los lados del
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32
EL riANO GRAFICO

EL TAMAÑO DEL DIBUJO


regulado por ios demás elementos, o supeditado a ellos. En fin,
estar en la media es ser circunspecto, correcto en las relaciones Dibujo pequeAo:
con los demás, en cierto modo feliz en el tiempo que le ha to«
cado vivir y en el ambiente que frecuenta. Decimos que un dibujo es pequeño cuando ocupa aproxi*
madamente el 25 % de la superficie del marco o papel. Véase
la figura 6.

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35
EL FLAN O ORATICO EL TAMAÑO DEL DIBUJO

Todo lo que sea descender de la media es Ir hacia la senci­ Figura 1, ya lo he explicado.


llez, pero también la inhibición de los impulsos, la inexacta * Figura 2, señorita de 25 años.
valoración de sí mismo, en menos de lo real, por sencillez, por Figura 3, ya está explicada y conviene reserva sobre este caso
sentimiento de inferioridad. Es seña: de meterse uno dentro copiado de memoria.
de sí mismo, introversión, mis acentuada cuanto más pequeño i Figura 4, señorita, 17 años.
sea el dibujo. Si has debilidad en el dibujo, en el trazo, refor­ Figura 5, chica de 16 años.
zaría el fallo de vitalidad física, aunque un dibujo pequeño no i
debe ser necesariamente el de una persona baja en vitalidad.
Hay una tendencia a la economía en los dibujos pequeños; tam­
bién al análisis de las cuestiones partiendo de los detalles. (

Dibujo muy pequeño:


t
Definimos como muy pequeño el dibujo que ocupa sólo un
12 % de la superficie del papel o menos. Muy pequeño o micros­
cópico, es el dibujo de la figura 7.
Una diminuta pareja en la que no falta ningún detalle im­
portante para distinguir el sexo y Las partes del cuerpo.
Los pequeños detalles a estas personas se les vuelven cas­
tillos y los «árboles, muchas veces, les impiden ver el bosque».
Aquí sí hay algún fallo de vitalidad, parece que se teme al es­
fuerzo. Hay economía y ahorro. Introversión y humildad. Cuan­
do el dibujo es muy pequeño y se dan las demás señales de
egoísmo, refuerza la tacañería c incluso la avaricia. Hay temor,
inhibición, timidez. Pero también hay una excelente capacidad
de especialización. A estas personas no les van las amplias vi­
siones globales, pero si el especializarse en un trabajo que hacen
a conciencia, pues pueden penetrar en lo pequeño sin gran
esfuerzo.
He prometido dar las circunstancias de los dibujos que co­
nozca y voy a intentarlo, por grupos.
36 J7
4

raoYKCtcK zzl tnpjo


Figura 6. chica de 15 años. quinto
ce Bachillerato. bujo mirando a la izquierda y situado en ¡a izquierda, refuerza
Figura 7. señera de 59 años.
i su tendencia a la vida interior, familiar, apego a la madre, etc.

PROYECCION DEL DIBUJO

No me refiero a la situación de! dibujo en la página, que i


estudiaremos luego. sino a la proyección ¿el dibujo. En el estu-
d;o de la proyección hemos de considerar en primer lugar hacia
dor.de mire el dibujo.
Si se trata de una figura humana. hacia dónde se dirige el
frente ¿e! cuerpo. S; us un vehículo, avión, coche, bicicleta,
hacia donde se dirige.
Sólo hay das formas de proyección en cuanto al mirar u
proyectarse ¿el dibujo- Hacia la derecha o hacia la izquierda.

Proyección hacia la Izquierda:

Cuando una figura humana mira hacia la izquierda. está (


mostrándonos su d:stanc:am.iento de los otros, su introversión,
su rica vida interior En ía figura 8- es clara la mirada de la
figura hacia la izquierda. Cuando se trate de una casa, por ejem­
plo. nos fijaremos en ¡a dirección que sigue c! humo o el cami­
no. que también es un avance hacia la dirección que éstos se- i
fialcn Debe interpretarse, cuando r.o coincida can la situación
dvl dibujo —interpretación del próximo grupo-—, como una
lucha o un conflicto, entre consciente e inconsciente, o dicho
Proyección a la derecha:
de otra forma. entre cómo se es y se desea ser El ideal que
nos forjamos v lo real que vemos no coincide y el sujeto desea Es verdad que cada caso es diferente, un mundo de proble­
cambiar las cosas. Cuando como en el caso de la figura B. di- mas. Aquí tenemos una personalidad Introvertida natural, ape»

as
lU. PLANO GRAFICO PROYOCCION DLL DIDUJO

gado a su madre, que sin embargo se proyecta de una forma A veces la proyección es por dirección del rostro, por mar-
dolotosu y violenta en el lado de la derecha. Se trata de un 1 cha del vehículo, humo o camino de la casa, o bien por avance
joven oficinista que no soportu a su padre y desea hacerse su del suelo, como sucede en la figura 10. Pero consideremos el
vida fuera de su hogar, aun a pesar de que se siente ligado avance en la figura 9 para tener ideas claras.
a la madre, por la que nunca se marcharía de su casa. Véase
en la figura 9.

El árbol, en su parte superior (A), está más lejos del papel


que en el lado de la derecha (B). Pero la implantación del tronco
está claramente colocada a la izquierda. En este caso la situación
a la izquierda está desvirtuada en parte por su proyección a la
derecha. Hay lucha entre lo que uno es y lo que quiere ser.
La introversión natural, el amor a la familia, el apego a la ma­
dre, se ve conmocionado y el sujeto quiere marchar, huir, de
una forma violenta. Ir hacia la derecha es extraversión, comu­
Fie. 9 nicarse, proyectarse o realizarse de una forma positiva. Es tam-

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EL ruso GRAFICO PROYECCION DrX DtDUtO

bien vida de contacto, iniciativas, decisiones, avance confiado el índice conflictual en las irregularidades del tronco, en el di-
hacia el porvenir rompiendo moldes que nos atan. Pero sobre I bujo del árbol.
todo es. insisto, cambiar el actual estado de las cosas, lograr
independencia, comunicación fácil, sociabilidad, que ahora nos
falta.
Sí conviene advertir que este avance puede ser por una sola
zona, figura 9, precisamente por la copa, y la figura 10 por el
suelo. Parece que el autor de este dibujo dice en su mutismo
gráfico:
Sí, yo estoy aquí; pero tengo que avanzar, recorrer ese
camino, llegar más allá.
Otras veces conviene apuntar una curiosa variante.

Proyección ambivalente:

A veces nos encontramos con figuras donde no hay armonía


entre los movimientos proyectados, pues nos hallamos con per­
sona como la de la figura 11 que gusta de recibir a los suyos
en su casa, mejor que a los desconocidos. Sus amigos entraña­
bles, sus familiares, hallarán en casa del autor de este dibujo
un segundo hogar. Pero es curioso que poniendo el camino
hacia la izquierda —afectos, apego familiar, pasado—, lance el Proyección desigual:
humo hacia la derecha. Parece como si sus sueños se dirigiesen
hacia lo desconocido, expectativa del porvenir, del más allá. Para este estudio conviene analizar y examinar despacio las
Cuando se produce esta ambivalencia parece que la personali­ ’ dos partes del dibujo, la izquierda y la derecha y considerar las
dad se divide, no sabe a que carta quedarse, máxime como en diferencias notorias que advirtamos. Es evidente, en la figura 12,
este caso el dibujo, la casa, está casi situada en el centro. la diferencia de la izquierda a la derecha. Primer contraste que
Dentro de la proyección estudio también las diferencias no­ advertimos es que hay puntas agudas en el lado izquierdo, mien­
torias entre el lado derecho e izquierdo. Toda irregularidad, tras hay bucles en el lado derecho.
toda variación, debe ser considerada y tenida en cuenta. En el Debemos interpretar la izquierda como el lado de la intimi-
estudio formal de cada elemento, en la III PARTE y en obras ' dad y de la familia. El derecho como la relación y el contacto
posteriores en preparación, detallaré aspectos concretos, como con desconocidos. No cabe duda alguna que esta persona en
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42
c. ru.vs citazico rxGVíXCIG* ínx

tu cas* con s.s Inumoa. es hiriente y mordaz, mientra* que sino que la parte derecha está materialmente caída hacia abajo.
pone muy buena cara a los extraños y desconocidos. Esto se La persona es pesimista, pero tiene probablemente desengaños
acrecienta. per ;a caída de las puntas cíe la izquierda y la eleva­ y heridas que proceden de los otros y que le hacen recelar de
ción de ios bu;,ci ce la derecha Es persona dolida con sus
laumos. en triste; íes por ellos, y con la ilusión de encontrar
s:£*,;;en fuera cue camb»e su destino y su vida. Aunque no dice
edad, n: dato*. parece el dibujo de una señorita y joven, no
superior a 20 años.

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Un caso tambidn de diferencias entre la derecha y la lz-
. quierda se da en U figura 13, donde el autor parece un-chico
no mayor, dulcifica su contacto con los íntimos y seguramente
la madre, y mira con recelo y desconfianza a Jos extraños, a En todos los casos debemos considerar el lado derecho como
los demis. No sólo hay diferencias de forma —curva, ángulo—, la zona de contacto y relación con los otros, los desconocidos.
45
LA SITUACION EN LA PAGINA ¡
E-L PLANO GRAFICO

les que están fuera de nuestro ambiente íntimo. Y el lado iz- i


quierdo es el que simboliza el calor del hogar, el afecto de los |
íntimos, la ligazón materna. • . r

LA SITUACION EN LA PAGINA

Los estudios del grafólogo suizo Max Pulver han tenido mar*
cada importancia no sólo en la escritura sino también en la I
interpretación de los dibujos, y concretamen'e en el estudio de i
su situación. Pero no debemos hacer esta interpretación segura j
c invariable, pues han de considerarse también factores mími- |
eos, ya muy contrastados por los estudiosos del gesto y apli* <
cados a la escritura por Michón —fundador del método grafo* I
lógico— y su seguidor Crepieux-Jamin. |
La situación en la página para su estudio debe clasificarse
en cinco posiciones:
ARRIBA, ABAJO, A LA IZQUIERDA. EN EL CENTRO. A LA
DERECHA.
0
Si tomásemos el papel y lo dividiésemos en cuatro partes
por un doble tendríamos los elementos constitutivos de la si* Fie. 14
tuación en la página. Figura 14.
Parte superior. A; inferior, B; izquierda, C; derecha, D, y cen­ Sin embargo, aconsejamos no se dé todo el valor interpre­
tral. E. tativo a estas señales si no coinciden también los signos ya
analizados como PROYECCION, que a mi juicio tiene más va­
Todo dibujo que. avance y se sitúe más arriba de su mitad
lor que la situación, que puede ser producida por estados pasa­
es dibujo situado en la parte superior. Y así en los demás luga­
jeros o crisis temporales que no afectan excesivamente al ca­
res indicados. Decimos que el dibujo está en el centro cuando
rácter.
hay equilibrio hacia todas las zonas y está realmente en el cen­
tro del papel. Dibujo situado arriba:
A lo largo de esta parte vamos a interpretar la situación
con el doble enfoque de la escuela clásica —estado de ánimo— Cuando un dibujo se sitúa arriba, figura 7 y figura 10, el
y la escuela moderna —símbolos de tiempo-espacio—. autor está dirigiendo su mirada a lo alto, se pone del lado de

46

I
LA SITUACION CN LA PAGINA
U. PIANO GRAFICO
sofisticada y nutocontrolada, que oculta su verdadero modo de
lo digno, lo noble, lo espiritual o. sencillamente, está alegre y ser. Puede corresponder a las rayas superpuestas, que protegen
eufórico. Por este solo rasgo no podremos juzgar; habremos el dibujo, dobles rayas en las casas, múltiples rayados en el
de considerar el resto del dibujo. árbol, copa, tronco y base. Pero la interpretación de esta figura,
por su situación en el lado de la izquierda, implica inhibición,
Dibujó situado abajo: timidez, dependencia materna, rutina y cierto encerrarse en uno
mismo. Claro está que esta difícil socialización o comunicación
Movimiento evidentemente contrario al anterior. La figura 15
corresponde a una persona positivista —por contraste grafoló*
gico— y la interpretación del dibujo abajo señala positivismo,
tendencias instintivas, acaso pesimismo y también actividad y
movilidad —si la proyección apoya este movimiento bajo—.
Las correspondencias grafológicas son evidentes con las técni­
cas de interpretación gráfica, contrastadas también en el caso
del árbol con el Test de Rorschach. Corresponde a un hombre
de 43 años, la figura 15. Es positivista, interesado, con fuerte
tendencia instintiva.
Casi siempre los dibujos de hombre dan a la mujer una
mayor fuerza sexi, destacando los senos, las curvas, mostrando
así la atracción sexual que opera sobre ellos el bello sexo. Cuan­
do, como en este caso, a los senos de la mujer corresponden
botones en el traje del hombre, puede denotar dependencia
materna. Por el contrario, las mujeres en su pudor más o menos
real, pero sí manifestado, suelen evitar en muy elevada propor­
ción el dibujo de los senos, o curvas sexi, dando a sus dibujos
una mayor normalidad y uniformidad, salvo en el caso de los
problemas sexuales, de lo que trataremos al referimos en la
III PARTE a la figura humana.

Dibujo situado a la Izquierda:

Las figuras 16 y 17 corresponden a la misma mano y están


hechas por una chica de 16 años, por la letra como bastante
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48
IA Al |U ACION MI IA PAIIINA
III. PIANO Í’.IIAVICO

mAi de l« «ItUAclón, no podríame» Júnior A eintn pmoi» con

con lo» domds —«dio se hace do forma afectada, falseando el


verdadero móvil— Implica, como la situación a la Izquierda,
Introversión. Todas catas Interpretaciones corresponden perfec­
tamente con loa hallazqon 38505^ do oslo» dibujos.
Situación del dibujo en el centren
Pero hay una razón que nos ha Impulsado a publicar don La figura 18 muestra un dibujo centrado, no sólo en el sen­
dibu jos de esta Jovcnclln, y u.t la PROYECCION a la derecha, tido de derecha a Izquierda, sino también de abajo a arriba.
que se advierte, tanto en el humo hacia la derecha, en la cnsn, Correspondo a un educador, religioso, <lc 30 artos aproxima­
como en la copa del Arbol que Junto con el nudo es mrts acen­ damente.
tuada en el Indo de la derecha. Véase, por tanto, la corrcspon- Todo lo que sea Ir al centro, es también buscar el fiel de
deuda en algunos puntos que llenen todas las muestras gráficas la balanza en los Juicios; Implica, por (unto, objetividad, con­
de una misma persona. Sin tener en cuenta la proyección, ade- trol de sí, reflexión y buco sentido, muy a tono con un educador.
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31
-1

• , » EL PLANO GRAFICO LA SITUACION EN LA HACINA


} *
Se puede decir de estas personas en general que el cerebro, la mos de dar corresponde al sentido de centrado en los lados
razón, domina lo sentimental y lo pasional. En su lado nega­ l de izquierda a derecha. Porque centrado de arriba a abajo,
tivo se puede apuntar el cálculo y acaso el interés —si hay base equivale a equilibrio y armonía entre el pesar y la alegría —con­
acentuada— en sus disposiciones y trabajos, trol del humor— y entre las necesidades espirituales y materia­
í les, entre la extraversión y la introversión.
Por eso, si el árbol está centrado y colocado arriba, indicará
j i todas las condiciones dadas para la situación arriba y en el
3 centro, entre izquierda y derecha.
Pero si estuviese situado a la derecha, y centrado de arriba
a abajo, tendríamos la interpretación que daremos en seguida
sobre dibujos hechos a la derecha, más la de centrados de arriba
a abajo, que darán un nuevo giro a la interpretación. Debe
siempre tenerse en cuenta la proyección, para interpretar de
acuerdo con la realidad la psicología del analizado.

Dibujo situado a la derecha:

Cuando el dibujo se desplaza a la derecha, como en la fi­


gura 19, indica extraversión, fácil comunicación con los demás
—en este caso concreto el tamaño pequeño del dibujo habrá
•' de considerarse y tenerse en cuenta para la valoración final—,
proyección hacia el porvenir, planes, proyectos, decisiones, con­
fianza en el futuro —la falta de base y los pies mal apoyados
en el suelo no ayudan a aceptar en este caso ese supuesto—.
Señales de precipitación e impaciencia, progresismo. Muy emo-
,z tivo y pasional; vehemencia, falta de freno en las pasiones.
En el caso que nos ocupa, figura 19, corresponde a un hom­
bre maduro, 53 años. Comparado con toda la batería observa­
FiG. 18 mos que tanto el árbol como la casa están más centrados —más
hacia el centro—, son mayores, aunque conservan el estilo. Pero
La situación del árbol en el centro puede ser conjugada con en el plano afectivo, socicdad-pareja-amor, el dibujo se va a la
todas las demás situaciones, pero la interpretación que acaba- derecha y se empequeñece. La escritura es muy inclinada a la

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LA FORMA DEL TRAZO
EL PLANO CRAF1CO

de izquierda a derecha. Si la inclinación es hacia la


derecha, angulosa de grandes barras de «t». La pareja se mues­ dibujo cae
tra, como puede verse, en abrazo cordial. ¿Puede indicar sol­ izquierda, es un movimiento defensivo e inhibitorio.
tería, viudez, ilusión de vida en el futuro, disminuida por actua­
les frustraciones a las que es propenso? Es probable. Indico
todo esto para que no acepte una interpretación al pie de la
letra siempre. Es preciso analizar el campo en que se presenta:
— Escritura.
— Dibujo de la casa.
— Dibujo del árbol.
— Dibujo de la pareja.
Lograr de una persona cuatro documentos, como ocurre en
este caso, nos asegura el camino hacia una visión más completa
y certera de la psicología humana.

Colocación asimétrica, en cualquier situación:

Cuando se dé una colocación asimétrica del dibujo, además


de la interpretación por su situación deberemos considerar lo
siguiente:
Si el dibujo es cuidado refuerza la claridad de ideas, la ri­
queza representativa, pues esta forma de presentar los dibujos
es frecuente en los artistas. Un excelente fotógrafo me decía
que el motivo recto y armónico es antiestético y desde luego
antiartístico. Que lo recto para él es la inclinación y el descen­
trado. Por eso aplicamos a los dibujos con cierta asimetría e
inclinación, si están bien hechos, las señales de la distinción
y el buen gusto, y es señal frecuente en alto promedio de los Fig. 19
artistas.
Sin embargo, cuando corresponde a una figura torpe y mal LA FORMA DEL TRAZO
hecha, puede corresponder o a una inquietud estética latente,
o bien a una deformación de la realidad por pesimismo si el Este es un terreno netamente grafológico. La forma del trazo
LA FORMA DEL TRAZO
EL PIANO GRAFICO

se estudia en casi lodos los tests gráficos, partiendo de la gra- recta. No debemos ocultar que esta señorita —o señora, no
fología y pasando por Machover, Wartegg, Garabatos, etc. indica su estado— también en los dibujos de figura humana,
Dentro de la forma hay tres claros caminos que nos guiarán aunque con mezclas de curvas y singular gracia, plasma en rec­
en el conocimiento de la personalidad: tas las figuras humanas.
—• La línea recta.
— La curva.
— El ángulo.
— El zig-zag.
— El remolino de curvas.
La forma en realidad tiene sólo dos variantes, dos grandes
variantes, LA CURVA y EL ANGULO. La recta, el zig-zag, el
remolino o el círculo son derivaciones de estos dos gestos prin­
cipales.
Este aspecto que vamos a estudiar ahora tiene una gran
relación y correspondencia con la CONTINUIDAD de los trazos*
que estudiaremos luego.

^f^Dlbujos con predominio de líneas rectas:

Cuando en el dibujo predominan las líneas rectas, figuras 20


y 21. indica fuerza y vitalidad, introversión —véase también la
observación final de este capítulo—; hay notable predominio
de la razón, claridad en las ideas y mesura en los procesos su­
periores de asimilación y comprensión. También, y en el terreno
de la afectividad, hay sequedad, frialdad de sentimientos en su Hay algo que me llamó la atención en este dibujo 21, y es
comunicación al exterior. Sin embargo, hay variación, según don­ la caída de la paite de la derecha; cae la ventana de la derecha
de veamos las líneas rectas. En el caso de la figura 20 es mucho más que la de la izquierda, y cae el plano de la derecha más
más extremo que el de la 21. Veamos; el caso 20 es un hombre que el del frente. En el árbol, también cae la copa por el lado
de 30 años y el cuerpo humano femenino lo convierte en líneas de la derecha; en la figura humana la mujer, a la derecha, está
rectas. Por el contrario, el caso 21 es una mujer de 22 años, mucho más abajo que el hombre a la izquierda. La escritura
y al hacer una casa es casi obligado dar preponderancia a la se muestra con imbricados descendentes —caen los finales de
LA FORMA DEL TRAZO
EL PLANO GRAFICO

persona afectiva, sensible, generalmente con alma de artista,


palabra , denotando pesar que trata de ocultarse y que segu­
ramente viene de los otros. extravertida, de buena memoria e imaginación. Las personas
que en sus dibujos —o su escritura— muestran predominio de
la curva son suaves en sus contactos con los demás. Aunque
de una forma tosca —diplomacias, acaso marrullerías o no muy
buen fondo— también utiliza formas suaves el autor de la figu­
ra 13, aunque carezca de la fresca espontaneidad de la figura 10.

Predominio del ángulo:

Es una de las señales de razón y sobre todo de introversión;


pero además, de acuerdo con el trazo, podemos ver:

Con trazo firme o fuerte:


Dureza, tenacidad, lucha y actividad y notable capacidad de
resistencia, propio de las personas enérgicas y consecuentes que
trabajan en pro de sus ideales y empresas hasta verlos resuel­
tos o realizados.

Con trazo débil o deficiente:


Susceptibilidad e impertinencia, acaso obstinación que no
siempre se mantiene a largo plazo, y puede no llegar hasta el
final de las tareas por falta de resistencia.
La figura 22 muestra un dibujo con predominio de ángulos,
de una mujer de 39 años, divorciada.
Fie. 2! • : Í».*H i •

Dibujo* con predominio de zlg-zag:


^/Dibujos con predominio de curvnsi
Ofrezco dos muestras de dibujos en zig-zag; los dos corres-
Cuando las líneas son curvas y hay notable predominio de ponden a mujeres. El primero, figura 23, es do una mujer do
ellas, como ocurre en la figura 10, decimos que se trata de una 39 años y el segundo, figura 24, de uno señorita de 26. El pri­
sa I 59
EL PLANO GRAFICO
LA FORMA PUL TEA/.O

mero está algo dulcificado por las curvas de la copa, como si Dibujos con predominio del círculo*
la autora tratase de suavizar sus expresiones de por sí duras,
aceradas, bruscas. Toda presentación de dibujos en círculos, o círculos dentro
de las partes del dibujo, pregonan egoísmo, y según la zona
donde se manifiestan será su interpretación. En las casas el
camino que va y vuelve, cerrándose, o el círculo que hace de
base en el árbol, indican aislamiento, introversión, narcisismo,
distanciamíento de los demás.

En los garabatos infantiles de niños mayores los círculos


La agresividad es notoria en el zig-zag; además es una agre­ aislados suelen ser señal de retraso mental. Y siempre, en todos
sividad violenta y súbita, de explosión impremeditada de, genio los casos, de distanciamíento.
inesperado. Es¿a explosividad es hija de un mal control de sí.
•' • Vil) t Pero cambia el panorama cuando nos referimos a los remo­
La figura 24 es una muestra de enorme agresividad volcada linos circulares, donde sin levantar el útil se hacen múltiples
en el papel. Pero también es Ja obra de una artista. Incluso curvas, como en el caso de la figura 5, que es señal de una feliz
la asimetría en la inclinación habla de sus preocupaciones es­ ideación mental, dinamismo en todas sus formas, ágiles reflejos,
téticas. gracia y expresividad.
60
61

i
LA FUERZA DEL TRAZO
EL PLANO GRAFICO
zura,' la suavidad y el carácter concillante de quien trata siem­
En general, debemos considerar:
pre de limar asperezas.
La recta y el ángulo como gesto duro y viril. Simboliza lo
masculino, por tanto, y la agresividad. r- la fuerza del trazo
Este es uno de los puntos cruciales en grafología, y lo es
también en la técnica interpretativa de los dibujos. Debemos
distinguir cuatro clases de presión, que para más fácil inter­
pretación vamos a designar cuidadosamente.
Los cuatro tipos de presión son como sigue:
— Presión deficiente, temblores, rotos.
— Presión fina, delicada.
— Presión firme, suficiente, normal.
— Presión fuerte, excesiva, pastosa.
Cada uno de los cuatro tipos de presión nos ayudará a cono­
cer la personalidad del dibujante.

Presión deficiente al dibujar:

Se caracteriza por temblores, rotos —se interrumpe la raya—


I* y desigualdades de presión dentro de una tónica general débil.
Como ejemplos van tres figuras: Figura 25, que corresponde
i a una señora, madre de familia, donde la debilidad general del
j trazado es evidente; 44 años. Pero es curioso contrastarla con
la de un señor que le dobla la edad, pues tiene 86 alegres pri-
• maveras de fecundidad y juventud: figura 26. Se advierte en
este dibujo, como en el siguiente, figura 27, los temblores pro­
pios de la edad bien soportada, pues el autor de la romántica
pareja de esta figura 27 tiene 77 años.
Los temblores, la debilidad, las interrupciones desiguales de
un trazado poco presionado e irregular hemos de clasificarlas
La curva y los remolinos son femeninos. Simbolizan la dul­ como dibujos de presión deficiente y considerarlos como señal
IA l'IHIH/A í"'l.
w. vuwo uhu-icu

dn inuovoiUón, do inhibición, tinddwi y coltibiclón. Ili ücrtui do


(allft de cnorgia, produelo de un orgunlbinn precario o una avan­
zada edad, que no cabe duda debilita la vitalidad íbice, Hila*
«ohuie» indican tainbldn olería fragilidad (hice.

¡
i
¡
i
i
i

Dibujos de presión fina o débil:

En este supuesto la presión general es débil, pero se man-

64
i
CONTINUIDAD DEL TRAZO
EX PLANO GRAFICO

tiene uniforme a lo largo del dibujo; no hay temblores ni vaci­ y do la potencia creadora cuando se corresponde con un gusto
laciones de ningún tipo —se debe ver porosidades en CONTI- l estético adecuado, como ocurre con la figura 24, donde las di e-
NUIDAD , lo que evidencia una delicadeza en el contacto con rencias de presión y fuerza en los trazos habla también de una
los demás, y la realidad y el contacto con el medio reafirma diferenciación minuciosa y artística, demostrado en el buen
y excita su natural emotividad; es, por tanto, impresionable. gusto de la composición.
El carácter es algo retraído y predomina la vida interior, la
espiritualidad y la introversión. Puede ser su peligro alejarse Complemento final; el útil:
de la realidad.
La figura 18 es una muestra de este natural emotivo, pero Para la realización de dibujos, en general, se suele utilizar
sólo en el trazo, pues otras señales pueden variar la interpre­ lapicero y goma de borrar. Pero también es verdad que al hacer
tación, ya que el tronco grueso —zona del «yo» en el test del la prueba en un consultorio cada uno utiliza el útil habitual.
árbol— habla de solidez de criterios, etc. Llegan los dibujos con pluma, con bolígrafo, con lapicero, con
\
rotulador o con pinturas de todo tipo.
Dibujos con trazos de presión firme:
Conviene una observación al respecto. Cada persona —lo sa­
Decimos que la presión es suficiente y en todos los lados bemos por larga experiencia— elige el útil que mejor le va a su
la señal del útil y la huella del dibujo es neta, bien dibujada personalidad y a la manifestación que quiere dar de sí. Por eso
y regular. Figuras 4 y 5. tiene bastante validez el dibujo que veamos terminado —si siem­
Indica vitalidad física, extraversión, carácter firme, y hay pre lo hace así y ha empleado el útil habitual—, pues estamos
seguridad en sí mismo y sus criterios. Refuerza las dotes de ante su forma normal de manifestarse gráficamente. Por eso las
mando. Es una señal positiva principalmente de fuerza y po­ personas delicadas usan bolígrafos azules de punta fina. Los hom­
tencia del «yo» frente al ambiente, y también de buen estado bres vitales y las personas fuertes se identifican mejor con los
de salud, de juventud y euforia. bolígrafos de punta normal. Y los artistas, los sensuales, los bru­
tos -—con perdón, y sin unir los conceptos— buscan los útiles que
Dibujos de presión muy pronunciada, pastosa: mejor se adaptan a su modo de ser y generalmente adoptan el
Generalmente se hace con un rotulador esta fuerte presión rotulador, con la punta adecuada a sus deseos, pues también en­
tre ellos los hay de diversas tonalidades.
o con un lapicero. Es una señal de sensualidad y potencia física
grande que puede rayar en brutalidad. El caso de la figura 13
es una muestra de esta presión que no se reproducirá muy CONTINUIDAD DEL TRAZO
bien seguramente, pero en el original es grueso y pastoso el
trazo. Este tipo de presión se produce generalmente por los Este aspecto es sencillo de interpretar, basta' con una obser­
vación cuidada, a veces la ayuda de una lupa para estudiar el
artistas plásticos, pintores y escultores, ya que el relieve y la
trazo y sus uniones posibles, pero sin mayores complicaciones,
profundidad es una muestra propia del sentimiento del color realmente.
fct MANO un Atico | UUifl>lUlli*li 141 IWAZO

Vmlcmoa dlvklk en cuntió giupua el gindo do unión o cuntí* La Intcrpietaclóu de la unión o ligadura de los trazos en un
nuldad del tiatoi I 0101'ilo o en un dibujo o« exponento do ln tendern in ti lú cxlhi*
Dibujos do linón voniluua, nln levantar el útil. versión y a In rommiiemlón con lo?» demás, Ih»y leiidimclu o In
•** Dibujo* do cominuklnd media, o inetvhdoi. lógico que se empleo pino ashlillar y rompiendo)' •» los demás.
**“'t)ibu|i»* hecho* m uua'hna veces, aueltmo Hay dliiamhmo y agilidad do rompí elisión, íi**í como «.onllmddod
Dlbu|o» con tevaa poroso* (que paireen ConlliiUOl peto i en los trabajo)» y loa oícclos, lía un aluno positivo, en gonetab
oMÁn hecho* en mucha» pequeña* tayas). A vero» cala última i En escrituran lulorioira y en dibujos torpea, puede ser un ex»
npieclaelóu no o» loell do advertir, y para ello ae piocha el em ponente do rutina.
píen tío la lupa, paro dlathigulr ol ivazo poroso del continuo
limpio. Dibujos de continuidad medial

Dllmjoa tío linón vunllnuoi A vocea para tcalixAr un dibujo hoy unn o do» deteiiciom’n,
aceito lie» al o» muy complicado el trn/mlo. pero loa lin/on son
Decimos que un dibujo o* do linea continua cuando »o haca I largos, aln iiilmiomph ol movimiento; Ihoona 1 y 12. Hay vtpil’
do una voa, sin lovantar ol útil, llijura 3U. Ebrio entro la Intuición y la deducción, llmm dinamismo y agi*
lidad, rapacidad do abstracción y do cminmivación, armonía
entro el mundo Imttrlor « Introversión - y la oxterlorl/.ación y
el contacto —cxlravtrslón*-. por lo tpio cnlua peí sumía catán
en una luán amplia disposición tjtin lúa que no Inclinan a uno
do loa don polos, PorabUeimht lumlainmital y ra/.omula en lo que
i ao emprendo, En cono do dibujos muy torpea o Intuí loica de*
mostrarla Inioguiidnd y eaplrliu groguiio.^

Dibujo» de Uñona nuultnai

i Declino» que un dibujo en do línea» sucha» cuando está


formado por mucha», pequeñas rayas, cuino ucunu en lo» ligu-
ra» I, 2. 6. 10 y 2.1.
En primor lugar, c» nodal propia, tina do ollaii, do Introvei-
alón y por lo misino do dllívulmdin» do contacto y i elación.
Temblón en ol plano Intvlectmd en cnraulorlstlca do la Intuición:
Vio. M ol sujeto os capaz, do adivinar la» cosui» al primor golpe do vlstu,
EL PLANO CRAFICO
EL ESTILO PERSONAL

sin razonamientos previos; pero si no llega de primera inten* personalidad. En cuanto he tenido oportunidad de hacer un
ción, el razonamiento posterior en personas de corazonadas suele muestreo amplio —este primer ensayo de clasificación del ES­
ser pobre y deficiente. Señal de inspiración, de invención, pero TILO se ha hecho con 600 muestras de Balería ESCRITURA,
de mala realización y escasa persistencia en lo emprendido. CASA, ARBOL, PAREJA, precedido de unos 2.OOO-3.OOO dibujos
Puede tener buenas ideas, pero no sabe desarrollarlas en la de árboles o casas aisladas, garabatos infantiles, dibujos espon­
práctica. Indica reserva y desconfianza. Peligro de dispersión táneos, parejas, figura humana, garabatos al teléfono, etc. En
de pensamiento, porque vive un poco esclavo de las ráfagas
esto fuerto muestreo de dibujos han colnborado diversas perso­
de inspiración y busca la novedad, lo sorprendente, pero es poco
realista. nas que me parece justo enumerar aquí: ¡
— Psiquiatras:
Dibujos con trazos porosos: Doctor Pacheco Báez, de Bilbao.
Doctora Encamación del Castillo, de Madrid.
A la primera impresión parece un dibujo hecho de una sola
vez, pero de fijarnos atentamente veremos que la raya continua — Educadores:
está formada por muchas pequeñas rayas unidas. Véase este Don Jesús Sanz Siller.
tipo de dibujos en las figuras 9, 15 y 19. Señorita Benita González.
Debemos enfocar este rasgo como una permeabilidad al am­ Señorita María Gracia Sánchez de Toca.
biente, transige, se acomoda al medio, y en el fondo tenemos
inseguridad en uno mismo como raíz. También es normal en — Otros:
las personas con excesiva sensibilidad, con impresionabilidad Don Pablo Vargas.
que raya en sugestionabilidad. Es una señal, también, de incer­ Don José Luis Herreros.
tidumbre. Falta aplomo, firmeza, seguridad en sí mismo. Profesor Mauricio Xandró.
Mis ideas a lo largo del estudio de tantos dibujos han llegado
EL ESTILO PERSONAL a darme un primer golpe de vista que yo llamo EL ESTILO
PERSONAL y que voy a intentar clasificar en tres grandes gru­
Cada persona tiene su estilo. Por eso, pretender clasificar los pos. Más que clasificación, debe entenderse como un primer
estilos es casi imposible. Están formados en primer lugar por intento de clasificación, que en obras posteriores es posible
los elementos ya estudiados en los capítulos anteriores de esta que mejore o puntualice, aunque la larga práctica ya me ha
II PARTE; pero no es menos cierto que desde el principio me demostrado que las interpretaciones están bien ajustadas y se
ha llamado la atención un impronto que despide cada dibujo apoyan en el TEST GRAFOLOGJCO.
y fácil de asociar a determinadas cuestiones caractcrológicas de LOS TRES GRANDES GRUPOS SON:
70 71
EL PLANO ORATICO
EL ESTILO PERSONAL

— POR TRABAJO DESARROLLADO: Cuando lo escueto del dibujo es producto de la fatiga y el


— Escuetos. evitar el esfuerzo, hay torpeza en el dibujo, temblor.
— Incompletos. Dibujos Incompletos, a medio hacer:
Complicados.
Una señorita de 25 años ha hecho las figuras 32, 33 y 34,
— Originales. dibujos a medio hacer. En general representa un deseo de ocul­
— Exóticos. tación, permanecer en la sombra. Se da en personas algo sofi»-
tificadas, con gran autocontrol y fuerte contenido consciente.
— POR DINAMISMO O EFICACIA: Suelen darse dificultades de contacto c inseguridad.
— Infantiles.
Dibujos muy elaborados, complicados:
— Torpes.
— Agiles. Abundan los sombreados, como sucede en las figuras 35, 36
y 37, de la misma mano, señorita de 23 años. Estos dibujos rnuy
— POR EQUILIBRIO Y ESTETICA: elaborados, complicados en «u ejecución, indican Introversión,
concentración en la tarca, amor a ejecutar con detalles y cui­
— Proporcionados.
dado el trabajo. Pero también un cierto encubrimiento de la per­
— Deformes. sonalidad, constreñida entre tanto retoque y sombreado. Y no
olvidemos la fantasía, el sobrepasar lo que se encarga, la diva­
Dibujos escuetos o esquematizados: gación. En este caso además de la complicación hay una buena
í plasmacíón, capacidad artística, que puede ir unida a estos di­
Se trazan en unas pocas líneas, son simplificados, a veces bujos. Pero eso lo detallamos en el siguiente grupo.
simbólicos, se expresa con poco esfuerzo, en poco tiempo lo
que se pide, la casa, árbol y pareja, figuras 29, 30 y 31, reali­
Dibujos originales o artísticos:
zadas por la misma mano. Se ha omitido en estos dibujos el Es en realidad una forma semejante a la anterior, pero con
marco del papel, pues al estudiar el estilo es preferible ver un cuño propio y una originalidad notable, como puede apre­
toda la producción del mismo autor junta que enmarcada apar­ ciarse en las figuras 38, 39 y 40. La fantasía cobra aires perso­
te, en diferentes hojas. Lo escueto de los trazos es evidente. nales, hay arte expresivo y gracia. Claro está que estos dibujos
En los abundantes dibujos de este tipo de entre los estudiados no son espontáneos, son elaborados, y en cierto modo partici­
se aprecia agilidad de concepción, dinamismo, aprovechamiento pan de la misma interpretación de los complicados. Suelen coin­
del esfuerzo, junto con reflexión y racionalización de los im­ cidir con personas con sentimiento de inferioridad, escrupulo­
pulsos. Suelen darse luchas afectivas y se tiende a controlar sos, con fuerte autocontrol, amantes de la obra bien hecha, a
la afectividad. En gran proporción hay tendencia al análisis. veces con posturas falsas en la vida, pero con un depurado sen-
72
73
IX KSTllO rBHSONM.

üdo artístico, que es la liberación y la compensación que buscan


los do esta serie de EL ESTILO PERSONAL. También de un
a sus minusvalías. Estos dibujos corresponden a un niño de muchacho de 17 años. Todo lo que sea huir do lo normal. de
F.L y sorprenden por el cuidado matiz. Ha<icen pensar en
años,CRU'ICO
14 FLASÜ
... r - - copia.
una perfecta lo establecido, ya distancia de la masa, por originalidad, o por
falta de realismo, como en este caso. Yo lo interpretada en
lineas generales como extravagancia con visos do originalidad,
con alejamiento de la realidad. Rarezas. Exhibicionismo.

Dibujos exóticos, extraños: l


Fias. 32.
Los dibujos 41, 42 y 43 son de la misma mano, como todos
74
75
t»i. ruNo wh o ri, nruo ntwioNU

ilutes a los 15*16 arto» indicará Inhuitllbinu, rolraio, torpeza,


éteátera.

Fie. J6

Los dibujos 44, 45 y 46 corresponden a una nlfta normal de


11 artos.
i
i
Dibujos torpes, dificultosos:
x
x•
Dibujos Infantiles: Dibujos torpes y dificultosos, donde se une la falta de habi­
lidad para el dibujo —que no excusa— en una sertora de 53 artos.
Son los dibujos propios de los nlftos y hasta los 14 artos Las figuras 47, 48 y 49 muestran la torpeza en la ejecución que
pueden aceptarse como normales; en edades de adultos y supe- corresponde también a dificultades en la ideación. Problemas
76 77
EL NANO GRAFICO El. ESTILO PERSONAL

de relación. Disminución de la vitalidad física. Obturación afec­ man mi indicación, ya que los niños que mejor dibujan son
tiva. En algunos dibujos torpes se advierte al mismo tiempo tnmblén los más avanzados de clase.
excelente vitalidad física en la presión, tamaño del dibujo, etc.

<

Fie. 37
I

Pero las experiencias llevadas a cabo en todo el mundo confir­ Fies. 38, 39 y 40
EL PLANO GRAFICO

EL ESTILO PERSONAL

escuetos, hechos por un señor de 40 años. Corresponden a per­


sonas con rapidez y facilidad para la ideación y el trabajo men­
tal. Hay visión objetiva de la vida. Hay facilidad de contacto
y relación, así como suavidad si además se advierte la curva.
Son siempre dibujos hechos por personas dinámicas, de rápi­
dos reflejos.

Fies. 41 y 42 Dibujos armónicos o proporcionados:

Las figuras 53, 54 y 55, corresponden a dibujos proporciona­


Dibujos ágiles, dinámicos:
dos o armónicos, donde hay equilibrio en las parles del con­
Los dibujos 50, 51 y 52 corresponden al tipo ágil, también junto enmarcadas en el papel y una cierta conformación equi­
librada en las partes que constituyen el dibujo. Son dibujos,
£0
EL PLANO GRAFICO
EL ESTILO PERSONAL

los que ofrecemos en estas figuras, hechos por una señorita de


29 años. afianzados a tierra, idealismo que no se pierde por las nubes.
Hay control, dominio de sí. Es una forma de superioridad grá­
fica.

Fies. 47, 48 y 49
Fies. 44, 45 y 46
Dibujos deformes y desproporcionados:
Indica armonía entre el sujeto y el medio y armonía interior,
equilibrio entre las necesidades espirituales y materiales, sueños Toda deformidad suele indicar conflictos sobre la zona de­
formada, y en muchos dibujos normales hay partes que ofrecen
82
83

J
I

i
I
EL ESTILO FEMSONAL
EL PLANO GRAFICO

deformaciones. Pero como se verá en las figuras 56, 57 y 58, de Contrariamente a ¡os dibujos armónicos, ¡os deformes rvi-
la misma mano, un joven de 27 años, hay deformidades en la i dencian dificultades de contacto y relación con el medio La
persona que hizo esas figuras tiene un grande e injustificado
ocupación del espacio y en la conformación de las diversas
figuras. temor al contacto con los otros. Tampoco hay armonía interior.
Se dan desequilibrios entre los planos de la personalidad, dis*
i

Fies. 50, 51 y 52
<L PUNO CíUFÍCG

tontas ncuro-vcgctaiivas, etc Es (recuente este tipo de dibujos


en niños y ancianos.

III PARTE

EL PLANO FORMAL
Ful S* 37 > 5t
Al dibujar
proyectamos la idea que tenemos de nosotros.
(Karen Machover)

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