PROYECTO DE NACIÓN

MATERIA: PROYECTO DE NACIÓN

PROFESORA: PSIC. MONSERRATT MATA SAAVEDRA

ALUMNA: BLANCA ALEJANDRA TRUJILLO ROJAS

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EL SOCIALISMO

Introducción
Para entender la doctrina del socialismo empezaremos primero por entender la definición de
socialismo:
Doctrina política y económica que propugna la propiedad y la administración de los medios de
producción por parte de las clases trabajadoras con el fin de lograr una organización de la sociedad en
la cual exista una igualdad política, social y económica de todas las personas.
El socialismo es una corriente filosófica de pensamiento económico, social y político, es decir es un
conjunto de teorías políticas, de movimientos y de sistemas socioeconómicos que tiene como base el
pensamiento de igualdad social. Esta filosofía propone la planificación y organización de la vida social
y la vida económica desde adentro del Estado es decir que el Estado funcione y obviamente se
involucre en el cambio.
Es decir, se trata de un modelo filosófico, político, social y económico que tiene como objetivo la
distribución justa de la riqueza y la igualdad social.
Existen formas radicales, que suelen llamarse comunistas, que proponen la abolición de la propiedad
privada y otras en cambio, que proponen la convivencia con la economía de mercado, aunque bajo
formas de control y espíritu social.
El movimiento socialista tiene una larga historia podemos encontrar estas tendencias desde el inicio
mismo de la sociedad dividida en clases.
o El cristianismo primitivo, en su lucha contra el Imperio Romano, originó sectas comunistas
como la de los Esenios.
o Durante la Edad Media algunas sectas religiosas pretendieron regresar al comunismo original
del cristianismo.
o En el Renacimiento algunos pensadores imaginaron sociedades ideales que acabarían con la
miseria y la explotación: Campanella y Tomás Moro fueron algunos exponentes.

Las ideas de Rousseau acerca de los efectos de la propiedad privada impulsaron a algunos –como
Meslier, Morelly y Mably a llevarlas hasta conclusiones comunistas.
La Revolución Inglesa generó tendencias comunistas entre los Llevellers y Diggers. La revolución
francesa, la conspiración de los iguales. El carácter burgués de una revolución que pretendía instaurar
la libertad, igualdad y fraternidad llevó a pensadores como Fourier, Saint Simon, Cabet y Owen a
elaborar proyectos comunistas que realmente cumplieran las promesas de aquella revolución; Owen
llevó esas ideas desde la filantropía hasta el cooperativismo. Marx y Engels desentrañaron la dinámica
capitalista, revolucionaron el método dialéctico y le dieron al socialismo bases científicas por primera
vez. El socialismo ya no era la expresión de una moral eterna sino un producto de las contradicciones
sociales objetivas y la lucha de clases. Y no un proyecto ideal sino una necesidad histórica.
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Historia del socialismo

El uso del término socialista se empezó a usar durante la época de revoluciones o revueltas europeas
del siglo XVIII, y se usó para describir a lo más radical de los movimientos y filosofías políticas que
asociaban al capitalismo naciente con los malestares sociales de la época.
Al estudiar el socialismo nos encontramos con las primeras aportaciones al socialismo de idealistas y
sus aportaciones filosóficas sobre la igualdad social.
Así tenemos a:
Robert Owen quien predicaba la doctrina de la fraternidad humana, fue un empresario, filántropo y
teórico socialista galés, que llevó a la práctica sus ideas reformistas primero en su fábrica de New
Lanark y luego en las colonias de New Harmony que fundó en 1825 en Estados Unidos y Harmony
Hall, fundada en 1839 en Gran Bretaña. A su vuelta de América en 1828, se convirtió en el gran
impulsor y líder del movimiento obrero británico.
Claude-Henri de Rouvroy, conde de Saint-Simon, frecuentemente nombrado como Henri de Saint-
Simon, fue un filósofo, economista, teórico socialista y positivista francés, cuyo pensamiento tuvo una
influencia sustancial en la política, la economía, la sociología y la filosofía de la ciencia y la historia.
Fue, durante la Ilustración, que se jactaba como el uso de la razón humana y la comprensión sobre el
mejoramiento de la sociedad, que nació el primer socialismo moderno, y que hoy en día conocemos
como socialismo clásico.
Sus dos cunas fueron Francia e Inglaterra. Aunque carecieron de un cuerpo de ideas en conjunto,
contaron con importantes pensadores y militantes que allanaron el camino para la llegada en el siglo
XIX del marxismo.

El socialismo nació como

movimiento en el seno de la
sociedad industrial, aunque su
filosofía posee antecedentes muy
anteriores. Se pueden rastrear
ideas socialistas o comunistas en
textos tan antiguos como los
escritos sobre la República de
Platón, en las prácticas
comunitarias de los primeros
cristianos, o en la forma de
organización socioeconómica
del Imperio Inca.

Karl Marx dio al socialismo una teoría unificadora, con espíritu racional.
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El socialismo marxista revolucionó para siempre el modo de comprender la sociedad y la historia, a su

vez, le dio al socialismo una teoría unificadora y de espíritu racional científico asi lo dijo el
revolucionario alemán Federico Engels.
Desde entonces, el socialismo vigencia dentro de numerosos partidos y organizaciones obreras
de Europa y alcanzó su apogeo político a inicios del siglo XX, con la Revolución Rusa de 1917 que, bajo
la conducción de Vladimir Ilych Lenin puso fin para siempre a la monarquía zarista.
Así se fundó el primer país socialista (marxista-leninista) de la historia, la Rusia soviética, que
después se convirtió en la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas (URSS).
Los acontecimientos de Rusia avivaron los sentimientos europeos per fueron utilizados
negativamente por políticos ambiciosos para justificar ideológicamente el nacimiento del fascismo,
que es un movimiento político dictatorial y fundamentalmente anticomunista, que desencadenó
la Segunda Guerra Mundial.
Al término de la guerra a mediados del siglo XX el mundo asumió formalmente la división en dos
bloques:
El bloque capitalista liderado por Estados Unidos e Inglaterra, y el bloque comunista o socialista
liderado por la URSS y China, que tras la Revolución Comunista China había instaurado su propia
visión del socialismo: el maoísmo.
Eventos semejantes ocurrieron en otras naciones del mundo, como:
Vietnam y la Revolución de agosto de 1945
Corea, tras la Guerra de Corea de 1950-1953.
Cuba y la Revolución cubana de 1959.
Camboya tras la Guerra Civil Camboyana de 1967-1975.
Nacidos en la violencia, muchos de estos regímenes estuvieron involucrados en guerras, o
cometieron genocidios y atrocidades en nombre de la sociedad utópica futura.
Sin embargo, hacia el término del siglo XX, tras la disolución de la Unión Soviética en 1991, la mayoría
de los países socialistas se habían sumergido en la crisis y se habían visto obligados a reinventarse y
asumir más o menos formalmente una economía de mercado. Aun así, un nuevo experimento político
tomó el título de Socialismo del siglo XXI, un término del economista alemán Heinz Dietrich Steffan.
Comenzó a ganar renombre mundial gracias a su evocación en el V Foro Social Mundial por parte del
entonces presidente venezolano, Hugo Chávez Frías, en el marco de su autodenominada Revolución
Bolivariana.
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Características del socialismo

 Debilitamiento de la propiedad privada en favor de modelos sociales o comunitarios de
propiedad, especialmente en lo referido a los medios de producción las fábricas, por ejemplo.
 Modelo económico que apunta a la producción, más que en la generación y acumulación de
capitales y está dirigido por el Estado.
 Aplicación de diversos métodos de redistribución de la riqueza, como impuestos a los que más
tienen y planes de ayuda para quienes menos tienen, para tratar de uniformar económica y
socialmente a la sociedad.
 Empoderamiento del Estado que, dependiendo del caso, puede o no ir en detrimento de la
democracia y de los partidos políticos.
 Fuerte intervención del Estado en los asuntos económicos y sociales.
 Aunque podría sonar como utopía, el socialismo plantea una sociedad sin clases sociales: ni
pobres ni ricos, sino una gran masa trabajadora autogestionada.

EL SOCIALISMO EN MEXICO

Las ideas socialistas en México se comenzaron a difundir con una gran intensidad a mediados del siglo
XIX pero fue en el siglo XX en que tuvo impulso en instituciones políticas, sociales y culturales.
En México la lucha de clases también generó tendencias e ideas socialistas, en esta historia se puede
observar insurrecciones campesinas, ideólogos políticos, pensadores radicales, las primeras huelgas,
organizaciones y periódicos de inspiración socialista.
Las tendencias socialistas son confusas, ingenuas, proféticas. Las ideas utópicas jugaron un papel
progresista y saludable en el origen del movimiento obrero en nuestro país, un movimiento que surge
de la necesidad de resolver las tareas democráticas y de soberanía de un país subdesarrollado y
dominado como el nuestro. Bajo estas imperfectas ideas se inspiraron las primeras organizaciones
obreras, las primeras huelgas.
Para 1853 México aún no había podido consolidarse como Estado Nación, el país recién había logrado
obtener un poco de independencia en la que el viejo régimen se mantenía, en lo fundamental,
intocado: el clero, poderosos gobernadores y el ejército tenían el control de la tierra, los impuestos y la
política. Ninguna de los ideales sociales de Hidalgo, Morelos y Guerreo se habían cumplido: ni reparto
agrario, tampoco la ruptura del latifundio, ni separación de la Iglesia y el Estado, eliminación de
impuestos absurdos, ni la modernización del país en lo económico o en lo político.
México corría el riesgo de ser absorbido para beneficio de los intereses de un imperialismo
estadounidense en ascenso, que ya nos había arrebatado Texas, Alta California y Nuevo México,
“cuatro ejércitos extranjeros habían pisado en distintos momentos el territorio nacional. El país era
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dominado regionalmente por ambiciosos jefes o caudillos locales, por el ejército y los terratenientes
que

organizaban cuartelazos para hacerse del poder. Para colmo, los conservadores retornaban al poder
con Santa Anna a la cabeza, México tenía por delante años de guerra civil y la intervención francesa.
La batalla por la resolución de las tareas democrático burguesas que quedaron pendientes para la
revolución de independencia determinó el enfrentamiento entre conservadores y liberales que marcó
el siglo XIX mexicano; este contexto será el escenario del nacimiento del primer socialismo en México.
El enfrentamiento entre liberales y conservadores se daba sobre un marco de atraso económico y
social: el país apenas tenía 7 millones de habitantes, dispersos en pueblos y rancherías, los obreros
industriales minería y textiles, apenas rondaban los 60 mil en 1923 las minas ocupaban 44 mil obreros
y los textiles cerca de 3 mil-, las condiciones salariales y de trabajo eran espantosas.
En la extrema izquierda del liberalismo, oculto bajo las batallas contra los conservadores y contra las
intervenciones extranjeras, al calor de las insurrecciones campesinas, en el marco de las aspiraciones
de los artesanos, en la consciencia aún confusa de un proletariado en formación, en las elucubraciones
de algunos sabios de gabinete o de escritores de novelas, surgieron las primeras manifestaciones del
socialismo en México. En lo fundamental se trataba de las aspiraciones de unos pocos liberales
radicales inconformes con los resultados moderados de la Guerra de Reforma y de la lucha contra la
intervención francesa.
A pesar de las inevitables limitaciones propias de su tiempo y circunstancias, en sus mejores
exponentes, las ideas socialistas conectan con el pueblo, generan grupos de discusión y debate,
abanderan insurrecciones, promueven las primeras huelgas y aglutinan a la primera organización
obrera del país: la “Cartilla Socialista” de Rhodakanaty (1861), la fundación de círculos de estudio
socialistas (1863), la insurrección socialista en Chalco con su “manifiesto a todos los oprimidos de
México y el universo” (documento conmovedor de 1869), la fundación de El Gran Círculo de Obreros
de México (1871), el primer Congreso Obrero (1876), la fundación de La Social (1877), la publicación a
partir de 1871 de periódicos como “El Socialista”, “Revolución Social”, “El Hijo del Trabajo”, “La
Internacional”; la fundación del Partido Socialista (1878), la insurrección en la Sierra Gorda con el
Plan Socialista (1879), la insurrección en San Martín Texmelucan con La Ley del Pueblo (1879), la
primera publicación por El Socialista de El Manifiesto Comunista en México (1884), etc., son todos
ejemplos de ello.
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Conclusión:
Hemos nacido en un país capitalista pero afortunadamente con tendencias socialistas; los miles de
obreros caídos y sacrificados que se levantaron en huelga por el trato inhumano, las malas
condiciones laborales, la explotación y miseria en que trabajaban, tal como los obreros textiles de Rio
Blanco o los trabajadores mineros de Cananea en Sonora, fueron la flama que hizo abrir los ojos a la
clase obrera mexicana y luchar por la justicia e igualdad ya que el obrero seguía siendo explotado
como en el porfiriato.
Las tendencias socialistas se pueden observar en que por lo menos hay seguro de servicios médicos
(IMSS), sin embargo, esta seguridad social solo es para el que trabaja en empresas, los pueblos
indígenas, que no laboran en empresas sino en el campo no tienen derecho a este servicio, aunque han
inventado otros tipos de servicios para decir que en México hasta los campesinos tienen seguridad
social.
Hemos sido educados con la idea capitalista de que el rico tiene porque ha trabajado duro para tener y
por lo tanto merece disfrutarlo sin compartirlo.
Actualmente el país vive prácticamente en condiciones de explotación, a los campesinos se les explota
con el pago miserable de sus productos y muchos tienen que emigrar a las ciudades donde
desempeñan mayormente tareas de limpieza mal pagadas, o como vendedores informales en
pequeños puestos de la calle, la realidad económica y social del país si se ha transformado con la
modernidad sin embargo las condiciones de vida de la clase obrera y campesina a un tienen
tendencias de explotación.
Fácilmente podemos ver que las condiciones de dependencia y sometimiento al imperialismo
americano se ha fortalecido en estos tiempos, los gobiernos mexicanos han estado en la subordinación
y aceptación de las condiciones extranjeras, que no ayudan ni benefician al pueblo mexicano, un
ejemplo las maquilas extranjeras donde el salario apenas alcanza para subsistir.
La lucha por la justicia social es más necesaria que nunca, pero los métodos y las armas ideológicas
tienen que ser diferentes para poder lograr el cambio, para lograr el socialismo verdadero, esta lucha
requiere la comprensión de cómo funciona el capitalismo, para así crear una estrategia y tácticas que
nos permita realmente conectar y resolver las necesidades de los más vulnerables, los pobres.
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Bibliografía

 UNAM. Instituto De Investigaciones Sociales. Socialismo. Fernando Martínez Heredia.

http://conceptos.sociales.unam.mx/conceptos_final/475trabajo.pdf.

 Socialismo. Concepto y Definición.

https://concepto.de/socialismo/#ixzz72GLMQ1Bl

 Manifiesto del Partido Comunista. Carlos Marx y Federico Engels.

https://centromarx.org/images/stories/PDF/manifiesto%20comunista.pdf

 Socialismo o fascismo. El nuevo carácter de la dependencia y el dilema latinoamericano.

http://ru.iiec.unam.mx/3098/1/SocOFas.pdf.

 El origen del socialismo en México, los primeros pioneros.

https://www.marxist.com/origen-socialismo-en-mexico-primeros-pioneros.htm