INTRODUCCIÓN............................................................................................................................

2
PROBLEMÁTICA:...........................................................................................................................2
ANTECEDENTES............................................................................................................................3
La obesidad en los adolescentes:.................................................................................................3
cifras de adolescentes obesos en Latinoamérica.........................................................................3
Los factores que pueden influir para que haya obesidad incluyen, por ejemplo:.....................4
Complicaciones y Consecuencia de la Obesidad..........................................................................6
¿Qué problemas emocionales y sociales están vinculados con la obesidad?...............................9
Tipos de obesidad:.....................................................................................................................11
Como determinar si un adolescente tiene obesidad:.................................................................12
¿Cuál es el peso ideal según tu estatura?...................................................................................12
Qué edad es más propensa a la obesidad:.................................................................................13
¿Cómo afecta la obesidad en el crecimiento?..........................................................................14
CONSEJOS PARA COMBATIR LA OBESIDAD................................................................................14
Impacto social y económico de la obesidad en la adolescencia.................................................17
Influencia de los medios de comunicación y la publicidad en la obesidad adolescente:............18
Políticas públicas y programas de intervención.........................................................................19
CONCLUSION:.............................................................................................................................20
Bibliografía:................................................................................................................................21
INTRODUCCIÓN

La obesidad adolescente se ha convertido en un alarmante problema de salud

mundial. Esta patología, caracterizada por un exceso de grasa corporal, afecta
a un número cada vez mayor de adolescentes en todo el mundo. A medida que
la sociedad moderna experimenta cambios en los hábitos alimentarios, los
estilos de vida sedentarios y los factores ambientales, la obesidad se ha
convertido en un importante desafío de salud pública. Aunque la obesidad
afecta a personas de todas las edades, su impacto en la población adolescente
es de especial preocupación porque afecta el crecimiento y desarrollo, tanto
físico como mental.
La obesidad es sin duda un grave problema de salud en todo el mundo. Perú
es el tercer país de la región con mayor número de casos de sobrepeso y
obesidad, después de México y Chile. Según datos del Ministerio de Salud, el
53,8% de los peruanos de 15 y más años tienen sobrepeso. De este total, el
18,3% tiene obesidad, o 7 de cada 10 peruanos tiene sobrepeso.
La obesidad es el estado máximo de resistencia a la insulina y se asocia con
un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular y es un predictor de diabetes
tipo 2.
El riesgo de desarrollar la mayoría de las enfermedades no transmisibles
debido a la obesidad depende en parte de la edad de aparición y la duración de
la obesidad. La obesidad adolescente tiene consecuencias para la salud a
corto y largo plazo. Las principales consecuencias que suelen aparecer en los
jóvenes son:
Enfermedades cardiovasculares, diabetes, hígado graso, trastornos óseos y
articulares y algunos tipos de cáncer como el de mama, endometrio y colon.123
En el siguiente trabajo se realizó una investigación de cómo es la obesidad en
un adolescente y recomendaciones para poder combatirla y pueda estar
saludable.
DESAROOLLO:

PROBLEMÁTICA:
La obesidad incluye la acumulación de demasiada grasa en el cuerpo. Aunque
alguna vez el sobrepeso fue considerado un signo de belleza, salud y estatus
social, hoy la situación es muy diferente.
Además de los problemas o riesgos para la salud, también existen cuestiones
estéticas y sociales que individualmente pueden causar problemas
psicológicos.
Es por esto que la obesidad constituye un trastorno médico con enfoque
multidisciplinario, que hoy causa mucho interés, en el que la salud y la
apariencia se asocian a un cuerpo esbelto y delgado.
El notable aumento en las tasas de obesidad significa que la condición ahora
se considera una epidemia global, de proporciones impactantes y con un mayor
impacto en los adolescentes.

ANTECEDENTES
El sobrepeso y la obesidad son hoy problemas de salud pública en los países
desarrollados y en desarrollo. Su presencia en la infancia es un factor de
riesgo de obesidad y de enfermedad coronaria en la edad adulta; de ahí la
importancia de la prevención, detección y tratamiento rápido. Para diagnosticar
el sobrepeso y la obesidad se necesitan indicadores antropométricos
relacionados con la grasa. El índice de masa corporal (IMC) es útil para evaluar
a los adultos y recientemente se ha recomendado su evaluación en
adolescentes. Diversos grupos de expertos y organizaciones internacionales se
han propuesto la tarea de proponer estándares de referencia del IMC para su
uso a nivel internacional; entre ellos se encuentran los Centros para el Control
de Enfermedades (CDC) de EE. UU. y el Grupo de Trabajo sobre Obesidad
(IOTF) de la Organización Mundial de la Salud. (OMS 2014)4
* Vega (1991) dijo que los niños alimentados con fórmula tienden a ganar más
peso que los niños alimentados con leche materna. Por otro lado, se ha
observado que el aumento excesivo de peso durante los primeros seis meses
de vida predice fuertemente la obesidad infantil durante los años escolares.4
Los niños obesos tienden a seguir siendo obesos hasta la edad adulta y tienen
más probabilidades de desarrollar enfermedades no transmisibles como
diabetes y enfermedades cardiovasculares a una edad temprana. El
sobrepeso, la obesidad y las enfermedades relacionadas se pueden prevenir
en gran medida. Por este motivo, la prevención de la obesidad infantil debe ser
una máxima prioridad.421

La obesidad en los adolescentes:

Hoy en día, la obesidad entre los adolescentes es dos veces más común que
hace treinta años. Aunque la mayoría de las complicaciones de la obesidad
ocurren en la edad adulta, los adolescentes obesos tienen más probabilidades
de desarrollar hipertensión y diabetes tipo 2 que sus pares no obesos. Aunque
menos de un tercio de los adultos obesos lo son en la adolescencia, la
mayoría de los adolescentes obesos se convierten en adultos obesos.
A pesar de muchos tratamientos, la obesidad es uno de los problemas más
difíciles de tratar y las tasas de éxito a largo plazo siguen siendo bajas.5

cifras de adolescentes obesos en Latinoamérica

La obesidad adolescente es un problema creciente en América Latina. Según
la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en 2016, el 7,3% de los
adolescentes de América Latina y el Caribe eran obesos, un aumento del 50%
en las tasas de obesidad en los últimos 20 años.
Además, según un informe de la Comisión Económica para América Latina y el
Caribe (CEPAL), la obesidad adolescente es más común en zonas urbanas y
hogares con niveles socioeconómicos más altos. En algunos países de la
región como México, Chile y Argentina, las tasas de obesidad entre los
adolescentes son particularmente altas.
La obesidad en la adolescencia puede tener graves consecuencias para la
salud a largo plazo, incluido un mayor riesgo de enfermedades cardíacas,
diabetes tipo 2 y algunos tipos de cáncer. Además, la obesidad adolescente
puede afectar la autoestima y el bienestar mental de los adolescentes, lo que
puede afectar negativamente su calidad de vida..6789

Los factores que pueden influir para que haya obesidad

incluyen, por ejemplo:
La obesidad en la adolescencia puede ser causada por una combinación de
factores genéticos, ambientales y de estilo de vida. Aquí hay algunas de las
causas más comunes de la obesidad en la adolescencia:
Alimentación poco saludable: Una dieta alta en calorías, grasas y azúcares
puede contribuir a la obesidad en la adolescencia. Los adolescentes pueden
consumir alimentos poco saludables en la escuela, en casa o en la calle.
Falta de actividad física: La falta de actividad física puede contribuir a la
obesidad en la adolescencia. Los adolescentes pueden pasar mucho tiempo
sentados en la escuela o en casa, lo que puede reducir su nivel de actividad
física.
Factores genéticos: Los factores genéticos pueden estar relacionados con la
obesidad debido a que la obesidad puede tener un componente genético. Aquí
hay algunos ejemplos de factores genéticos relacionados con la obesidad:
Genes de la obesidad: Se han identificado varios genes que pueden estar
relacionados con la obesidad. Estos genes pueden afectar la forma en que el
cuerpo procesa y almacena la energía.
Metabolismo: El metabolismo es el proceso por el cual el cuerpo convierte los
alimentos en energía. Algunas personas pueden tener un metabolismo más
lento que otras, lo que puede aumentar el riesgo de obesidad.
Hormonas: Las hormonas pueden afectar el apetito y la forma en que el cuerpo
almacena la energía. Algunas personas pueden tener niveles más altos de
hormonas que aumentan el apetito y disminuyen la sensación de saciedad, lo
que puede aumentar el riesgo de obesidad.
Historial familiar: Las personas con antecedentes familiares de obesidad
pueden tener un mayor riesgo de desarrollar obesidad debido a la influencia de
los genes.
Factores socioeconómicos: Los factores socioeconómicos pueden estar
relacionados con la obesidad debido a la influencia que tienen en la
alimentación y la actividad física. Aquí hay algunos ejemplos de factores
socioeconómicos relacionados con la obesidad:
Acceso a alimentos saludables: Las personas que viven en áreas con acceso
limitado a alimentos saludables pueden tener un mayor riesgo de desarrollar
obesidad. Esto puede deberse a la falta de tiendas de comestibles que vendan
alimentos frescos y saludables, o a la falta de opciones saludables en las
tiendas de comestibles locales.
Costo de los alimentos saludables: Los alimentos saludables pueden ser más
caros que los alimentos procesados y poco saludables. Las personas con bajos
ingresos pueden tener dificultades para pagar alimentos saludables y optar por
opciones más baratas pero menos saludables.
Acceso a la actividad física: Las personas que viven en áreas con acceso
limitado a la actividad física pueden tener un mayor riesgo de desarrollar
obesidad. Esto puede deberse a la falta de parques, senderos para caminar o
instalaciones deportivas en la comunidad.
Nivel educativo: Las personas con un nivel educativo más bajo pueden tener un
mayor riesgo de desarrollar obesidad debido a la falta de conocimiento sobre la
alimentación saludable y la actividad física.
Inseguridad alimentaria: Las personas que experimentan inseguridad
alimentaria pueden tener un mayor riesgo de desarrollar obesidad debido a la
falta de acceso a alimentos saludables y la necesidad de depender de
alimentos procesados y poco saludables.
Factores psicológicos: Los adolescentes pueden comer en exceso debido al
estrés, la ansiedad, la depresión u otros problemas emocionales como:1011
Estrés: El estrés crónico puede aumentar el riesgo de comer en exceso y la
elección de alimentos poco saludables. El estrés también puede afectar la
calidad del sueño y la actividad física.
Depresión: La depresión puede aumentar el riesgo de comer en exceso y la
elección de alimentos poco saludables. La depresión también puede afectar la
motivación para hacer ejercicio y llevar un estilo de vida saludable.
Ansiedad: La ansiedad puede aumentar el riesgo de comer en exceso y la
elección de alimentos poco saludables. La ansiedad también puede afectar la
calidad del sueño y la actividad física.
Baja autoestima: La baja autoestima puede contribuir a la obesidad al afectar la
imagen corporal y la motivación para llevar un estilo de vida saludable.
Trauma: El trauma puede aumentar el riesgo de comer en exceso y la elección
de alimentos poco saludables. El trauma también puede afectar la calidad del
sueño y la actividad física.
Es importante abordar la obesidad en la adolescencia a través de cambios en
la alimentación, la actividad física y otros aspectos del estilo de vida, así como
a través de la atención médica y el seguimiento regular con un profesional de la
salud. Además, es importante abordar las desigualdades socioeconómicas que
pueden contribuir a la obesidad en la adolescencia y garantizar que todos los
adolescentes tengan acceso a opciones saludables y rentables

Complicaciones y Consecuencia de la Obesidad.

Las consecuencias que la obesidad y el sobrepeso pueden tener en la salud
son numerosas y variadas, desde un mayor riesgo de muerte prematura a
varias dolencias debilitantes y psicológicas, que no son mortales, pero pueden
tener un efecto negativo en la calidad de vida.

*Diabetes Mellitus. Son muchos los estudios que relacionan el exceso de peso
con un aumento de Diabetes Mellitus no insulinodependiente (DMNID). Estos
datos avalan la tesis de que la obesidad es el factor de riesgo más importante
para el desarrollo de la DMNID, hasta tal punto que el riesgo de diabetes
aumenta paralelamente al incremento del IMC. Por contra, al disminuir el peso
mejoran las cifras de glucemia y se optimiza el comportamiento de la insulina.
Estos cambios muchas veces ya se producen con pérdidas moderadas de
peso, que oscilan entre un 5 y un 10%.

*Dislipemia. Las personas obesas tienden a presentar concentraciones altas de

colesterol total, colesterol LDL (el denominado popularmente colesterol "malo")
y triglicérido, y valores bajos de colesterol HDL (conocido como colesterol
"bueno o protector"). Esta tendencia hace que aumente el riesgo de
aterogénesis. Al disminuir de peso, los parámetros alterados tienden a
normalizarse, descendiendo los triglicéridos y el colesterol LDL, y aumentando
el colesterol HDL.

*Hipertensión arterial: La obesidad es un factor de riesgo importante para la

hipertensión arterial. La hipertensión arterial es una afección en la que la
presión arterial es más alta de lo normal, lo que puede aumentar el riesgo de
enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares y otros
problemas de salud.
La obesidad aumenta el riesgo de desarrollar hipertensión arterial debido a que
el exceso de grasa corporal puede aumentar la resistencia a la insulina y la
inflamación, lo que puede afectar la función de los vasos sanguíneos y
aumentar la presión arterial. Además, la obesidad puede aumentar la carga en
el corazón y los vasos sanguíneos, lo que puede aumentar la presión arterial.
Es importante que las personas con obesidad controlen su peso y reciban
atención médica regular para prevenir y tratar la hipertensión arterial
relacionada con la obesidad. Además, es importante fomentar un estilo de vida
saludable que incluya una alimentación saludable, la actividad física regular y la
limitación del consumo de alcohol para prevenir problemas de salud a largo
plazo. Controlar el peso y mantener un índice de masa corporal saludable
también es importante para prevenir la hipertensión arterial relacionada con la
obesidad. Si se diagnostica hipertensión arterial, es importante seguir las
recomendaciones del médico para controlar la presión arterial y reducir el
riesgo de problemas de salud a largo plazo.12

*Enfermedades cardiovasculares: La obesidad es un factor de riesgo

importante para las enfermedades cardiovasculares. Aquí hay algunas
enfermedades cardiovasculares relacionadas con la obesidad:
Enfermedad coronaria: La enfermedad coronaria es una afección en la que las
arterias que suministran sangre al corazón se estrechan o se bloquean. La
obesidad aumenta el riesgo de desarrollar enfermedad coronaria.
Insuficiencia cardíaca: La insuficiencia cardíaca es una afección en la que el
corazón no puede bombear suficiente sangre para satisfacer las necesidades
del cuerpo. La obesidad aumenta el riesgo de desarrollar insuficiencia cardiaca.
Accidente cerebrovascular: Un accidente cerebrovascular ocurre cuando el
suministro de sangre al cerebro se interrumpe, lo que puede causar daño
cerebral permanente. La obesidad aumenta el riesgo de desarrollar accidentes
cerebrovasculares.
Enfermedad arterial periférica: La enfermedad arterial periférica es una
afección en la que las arterias que suministran sangre a las piernas y los pies
se estrechan o se bloquean. La obesidad aumenta el riesgo de desarrollar
enfermedad arterial periférica.
Es importante prevenir las enfermedades cardiovasculares a través de un estilo
de vida saludable que incluya una alimentación saludable, la actividad física
regular, la limitación del consumo de alcohol y el no fumar. Además, es
importante controlar los factores de riesgo para las enfermedades
cardiovasculares, como la hipertensión arterial, la diabetes y el colesterol alto, y
recibir atención médica regular para detectar y tratar las enfermedades
cardiovasculares temprano. Controlar el peso y mantener un índice de masa
corporal saludable también es importante para prevenir las enfermedades
cardiovasculares relacionadas con la obesidad.

*Enfermedades digestivas: La obesidad puede aumentar el riesgo de

desarrollar varias enfermedades digestivas. Aquí hay algunas enfermedades
digestivas relacionadas con la obesidad:
Enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGNA): La EHGNA es una
afección en la que se acumula grasa en el hígado. La obesidad es un factor de
riesgo importante para la EHGNA.
Enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE): La ERGE es una afección en
la que el ácido del estómago fluye hacia el esófago, lo que puede causar
acidez estomacal, dolor en el pecho y otros síntomas. La obesidad aumenta el
riesgo de desarrollar ERGE.
Cálculos biliares: Los cálculos biliares son depósitos duros que se forman en la
vesícula biliar. La obesidad aumenta el riesgo de desarrollar cálculos biliares.
Esteatohepatitis no alcohólica (EHNA): La EHNA es una afección en la que se
acumula grasa en el hígado y se inflama. La obesidad es un factor de riesgo
importante para la EHNA.
Pancreatitis: La pancreatitis es una inflamación del páncreas que puede ser
aguda o crónica. La obesidad aumenta el riesgo de desarrollar pancreatitis.

*Enfermedades respiratorias: La obesidad puede aumentar el riesgo de

desarrollar varias enfermedades respiratorias. Aquí hay algunas enfermedades
respiratorias relacionadas con la obesidad:
Apnea del sueño: La apnea del sueño es una afección en la que la respiración
se detiene y se repite repetidamente durante el sueño. La obesidad es un factor
de riesgo importante para la apnea del sueño.
Asma: El asma es una afección en la que las vías respiratorias se inflaman y se
estrechan, lo que puede causar dificultad para respirar, sibilancias y otros
síntomas. La obesidad aumenta el riesgo de desarrollar asma.
Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC): La EPOC es una afección
en la que las vías respiratorias se estrechan y los pulmones pierden su
elasticidad, lo que puede causar dificultad para respirar, tos y otros síntomas.
La obesidad aumenta el riesgo de desarrollar EPOC.
Síndrome de hipoventilación por obesidad: El síndrome de hipoventilación por
obesidad es una afección en la que la obesidad causa una disminución en la
respiración, lo que puede causar somnolencia diurna, dolores de cabeza y
otros síntomas.
Neumonía: La neumonía es una infección pulmonar que puede ser grave. La
obesidad aumenta el riesgo de desarrollar neumonía y puede empeorar los
síntomas.
Es crucial que las personas con obesidad controlen su peso y reciban atención
médica regular para prevenir y tratar las enfermedades respiratorias
relacionadas con la obesidad. Además, es importante fomentar un estilo de
vida saludable que incluya una alimentación saludable, la actividad física
regular y la limitación del consumo de alcohol para prevenir problemas de salud
a largo plazo.13

*Alteraciones óseas y articulares: La obesidad puede aumentar el riesgo de

desarrollar varias alteraciones óseas y articulares. Aquí hay algunas de las más
comunes:
Artritis: La obesidad aumenta el riesgo de desarrollar artritis, una afección en la
que las articulaciones se inflaman y se vuelven dolorosas. La obesidad
aumenta la carga en las articulaciones, lo que puede causar daño y dolor.
Dolor de espalda: La obesidad puede aumentar el riesgo de desarrollar dolor
de espalda debido a la carga adicional en la columna vertebral.
Osteoporosis: La obesidad puede aumentar el riesgo de desarrollar
osteoporosis, una afección en la que los huesos se vuelven frágiles y se
rompen con facilidad. La obesidad puede afectar la absorción de calcio y la
densidad ósea.
Lesiones deportivas: La obesidad puede aumentar el riesgo de lesiones
deportivas debido a la carga adicional en las articulaciones y los huesos.
Artrosis: La artrosis es una afección en la que el cartílago que cubre las
articulaciones se desgasta, lo que puede causar dolor y rigidez. La obesidad
aumenta la carga en las articulaciones, lo que puede acelerar el desgaste del
cartílago.
Es fundamental que las personas con obesidad controlen su peso y reciban
atención médica regular para prevenir y tratar las alteraciones óseas y
articulares relacionadas con la obesidad. Además, es importante fomentar un
estilo de vida saludable que incluya una alimentación saludable, la actividad
física regular y la limitación del consumo de alcohol para prevenir problemas de
salud a largo plazo. El ejercicio regular y la actividad física pueden ayudar a
fortalecer los huesos y las articulaciones y reducir el riesgo de lesiones.

¿Qué problemas emocionales y sociales están vinculados con la

obesidad?
El sobrepeso y la obesidad están asociados con ciertos problemas de salud
mental, como la depresión, las personas que sufren de sobrepeso u obesidad
también pueden ser objeto de prejuicios y estigma por parte de otras personas,
incluso por parte de los proveedores de atención médica. Esto puede provocar
sentimientos de rechazo, vergüenza o culpa, lo que empeora aún más los
problemas de salud mental.
estigma social
Para los niños con sobrepeso y sus padres, vivir con ese peso extra puede
resultar desgarrador. A su manera, el estigma social del sobrepeso puede ser
tan perjudicial para los niños como las condiciones físicas y las enfermedades
que a menudo acompañan a la obesidad. Probablemente puedas verlo en tus
ojos y oírlo en las palabras de tu propio hijo con sobrepeso. En una sociedad
que valora la delgadez, los estudios muestran que niños de hasta 6 años
pueden asociar estereotipos negativos sobre el sobrepeso y creer que un niño
con sobrepeso es simplemente más agradable.

Autoestima y acoso
Es cierto que algunos niños con sobrepeso son queridos por sus compañeros,
se sienten bien consigo mismos y tienen total confianza en sí mismos. Pero, en
general, su hijo obeso tiene más probabilidades de tener una baja autoestima
que sus compañeros flacos. Su baja autoestima puede convertirse en
sentimientos de vergüenza por su cuerpo y la falta de confianza puede
conducir a un peor rendimiento académico. Probablemente no sea necesario
describir en detalle lo difícil que puede ser a veces la vida cotidiana para un
niño con sobrepeso. Es posible que sus compañeros de clase (e incluso los
adultos) les digan a estos jóvenes que el sobrepeso es culpa suya. Pueden
ponerles apodos. Pueden ser víctimas de burlas y acoso. Sus viejos amigos
pueden evitarlos y también pueden tener dificultades para hacer nuevos
amigos. Pueden ser los últimos en ser seleccionados durante el proceso de
selección del equipo en las clases de educación física.

Depresión
Con toda la agitación en la vida de un niño con sobrepeso, él o ella puede
sentir que no encaja o que no encaja en ningún lado. Puede que te consideres
diferente y marginado. A menudo te sentirás solo y será menos probable que
tus compañeros de clase te describan como popular o agradable. Y cuando
este escenario se confirma en tu vida, mes tras mes, año tras año, puedes
volverte triste, deprimido y retraído.21

comer emocional
Paradójicamente, algunos niños con sobrepeso pueden buscar consuelo
emocional en la comida, añadiendo aún más calorías a sus platos cuando los
pediatras y los padres los presionan para que coman menos. Agregue a esto
los otros altibajos emocionales de la vida, incluido el estrés de mudarse a una
nueva comunidad, las dificultades de aprendizaje, la muerte o el divorcio de los
padres y el hecho de que algunos niños comen en exceso con regularidad.

Discriminación
Hay otras consecuencias asociadas con la obesidad que perduran hasta la
adolescencia y más allá. Los adolescentes y adultos con sobrepeso pueden
enfrentar discriminación basada únicamente en su peso. Algunos estudios
muestran que es menos probable que te acepten en una universidad
prestigiosa. También pueden tener menos posibilidades de conseguir un
trabajo que sus pares delgados. Las mujeres con sobrepeso tienen menos
probabilidades de tener citas o encontrar pareja. En resumen, a medida que
los niños con sobrepeso se convierten en adultos con sobrepeso, tienden a
ganar menos dinero y casarse con menos frecuencia que los niños de peso
promedio.

Tipos de obesidad:
Existen diferentes tipos de obesidad, que se clasifican según la distribución de
la grasa corporal. Aquí hay algunos ejemplos:
Obesidad central o abdominal: También conocida como obesidad androide, se
caracteriza por la acumulación de grasa en la zona abdominal. Este tipo de
obesidad se asocia con un mayor riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes
tipo 2 y presión arterial alta.
Obesidad periférica o ginoide: También conocida como obesidad en forma de
persona, se caracteriza por la acumulación de grasa en las caderas, los muslos
y las nalgas. Este tipo de obesidad se asocia con un menor riesgo de
enfermedades cardíacas y diabetes tipo 2 en comparación con la obesidad
central.
Obesidad generalizada: Este tipo de obesidad se caracteriza por la
acumulación de grasa en todo el cuerpo. Aunque este tipo de obesidad se
asocia con un mayor riesgo de enfermedades cardíacas y diabetes tipo 2, el
riesgo es menor que con la obesidad central.
Debemos tener en cuenta que la obesidad es un problema de salud complejo
que puede estar influenciado por factores genéticos, ambientales y de estilo de
vida. Además, la obesidad puede tener diferentes consecuencias para la salud
según el tipo de obesidad y otros factores de riesgo individuales. Por lo tanto,
es importante abordar la obesidad de manera integral, a través de cambios en
la alimentación, la actividad física y otros aspectos del estilo de vida, así como
a través de la atención médica y el seguimiento regular con un profesional de la
salud.

Como determinar si un adolescente tiene obesidad:

Para determinar si un adolescente tiene obesidad, se utiliza el índice de masa
corporal (IMC), que es una medida que relaciona el peso y la altura de una
persona. El IMC se calcula dividiendo el peso en kilogramos por la altura en
metros al cuadrado. En los adolescentes, el IMC se compara con las tablas de
percentiles de IMC para la edad y el sexo.
Un IMC entre el percentil 5 y el 85 se considera un peso saludable, mientras
que un IMC entre el percentil 85 y el 95 se considera sobrepeso. Un IMC por
encima del percentil 95 se considera obesidad.
Es importante tener en cuenta que el IMC es solo una medida y no siempre es
una indicación precisa de la salud de una persona. Por ejemplo, una persona
con una gran cantidad de masa muscular puede tener un IMC alto, pero no
tener obesidad. Además, el IMC no tiene en cuenta la distribución de la grasa
corporal, que puede ser un factor importante en la salud.
Por lo tanto, es importante que los adolescentes sean evaluados por un
profesional de la salud para determinar si tienen obesidad y para evaluar su
salud en general. Además, es importante abordar la obesidad en los
adolescentes de manera integral, a través de cambios en la alimentación, la
actividad física y otros aspectos del estilo de vida, así como a través de la
atención médica y el seguimiento regular con un profesional de la salud.14

¿Cuál es el peso ideal según tu estatura?

El peso ideal según la estatura puede variar según varios factores, como la
edad, el género, la composición corporal y el nivel de actividad física. Sin
embargo, una medida común utilizada para determinar el peso ideal es el
índice de masa corporal (IMC).
El IMC es una medida que relaciona el peso y la altura de una persona. Se
calcula dividiendo el peso en kilogramos por la altura en metros al cuadrado.
Un IMC entre 18,5 y 24,9 se considera un peso saludable para la mayoría de
las personas.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que el IMC no siempre es una
medida precisa de la salud de una persona. Por ejemplo, una persona con una
gran cantidad de masa muscular puede tener un IMC alto pero no tener
sobrepeso u obesidad. Además, el IMC no tiene en cuenta la distribución de la
grasa corporal, que puede ser un factor importante en la salud.
Por lo tanto, es importante que las personas consulten con un profesional de la
salud para determinar su peso ideal y evaluar su salud en general. Además, es
importante fomentar un estilo de vida saludable que incluya una alimentación
saludable, la actividad física regular y la limitación del tiempo de pantalla para
mantener un peso saludable y prevenir problemas de salud a largo plazo.1516

Qué edad es más propensa a la obesidad:

La obesidad puede afectar a personas de todas las edades, pero hay algunas
edades que son más propensas a la obesidad que otras. En general, la
obesidad es más común en la edad adulta, pero también puede afectar a los
niños y adolescentes.
En los niños, la obesidad es más común entre las edades de 5 y 11 años. En
los adolescentes, la obesidad es más común entre las edades de 12 y 19 años.
Durante la adolescencia, los cambios hormonales, el aumento de la
independencia y la exposición a factores de riesgo como la publicidad de
alimentos poco saludables pueden contribuir a la obesidad.
Es conveniente abordar la obesidad en los niños y adolescentes temprano para
prevenir problemas de salud a largo plazo. Los niños y adolescentes obesos
tienen un mayor riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como diabetes
tipo 2, enfermedades cardíacas y presión arterial alta. Además, la obesidad en
la infancia y la adolescencia puede afectar la autoestima y el bienestar
emocional de los niños y adolescentes.
Por lo tanto, es importante fomentar un estilo de vida saludable desde una
edad temprana, incluyendo una alimentación saludable, la actividad física
regular y la limitación del tiempo de pantalla. Además, es importante que los
niños y adolescentes reciban atención médica regularmente y sean evaluados
para detectar la obesidad y otros problemas de salud.17

¿Cómo afecta la obesidad en el crecimiento?

Demasiado peso también puede impactar seriamente el crecimiento y la salud
de los huesos, las articulaciones y los músculos. El exceso de peso puede
dañar la placa de crecimiento, el área de cartílago que se desarrolla en el
extremo de los huesos del brazo, pierna y otros huesos largos. Las placas de
crecimiento regulan y ayudan a determinar la longitud y la forma de un hueso
cuando se completó el crecimiento, o se llegó a la madurez.

CONSEJOS PARA COMBATIR LA OBESIDAD

La prevención de la obesidad en la adolescencia es crucial para evitar
problemas de salud a largo plazo. Aquí hay algunas medidas que pueden
ayudar a prevenir la obesidad en los adolescentes:

Fomentar una alimentación saludable: Los adolescentes deben consumir una

dieta equilibrada y variada que incluya frutas, verduras, proteínas magras y
granos enteros. Es importante limitar el consumo de alimentos procesados,
azúcares añadidos y grasas saturadas:
Controlar las porciones: Es importante controlar las porciones de comida y
evitar comer en exceso. Es recomendable comer varias veces al día en
porciones pequeñas y equilibradas.
Beber suficiente agua: El agua es esencial para mantener una buena
hidratación y un buen funcionamiento del cuerpo. Se recomienda beber al
menos 8 vasos de agua al día.
Evitar las bebidas azucaradas y alcohólicas: Las bebidas azucaradas y
alcohólicas suelen ser ricas en calorías y azúcares, lo que puede aumentar el
riesgo de enfermedades crónicas. Es importante limitar su consumo y optar por
agua, té o café sin azúcar.
Planificar las comidas: Planificar las comidas con anticipación puede ayudar a
evitar comer fuera de casa con frecuencia ya asegurarse de que se están
consumiendo alimentos saludables.
Buscar el apoyo de un profesional de la salud: Un nutricionista o un médico
especializado en nutrición pueden brindar orientación y seguimiento en el
proceso de cambio de hábitos alimentarios.
Fomentar una alimentación saludable es un proceso gradual que requiere
compromiso y esfuerzo, pero los beneficios para la salud son innumerables.
Adoptar hábitos alimentarios saludables puede mejorar la calidad de vida y
prevenir enfermedades crónicas a largo plazo.

Promover la actividad física: Los adolescentes deben realizar al menos 60

minutos de actividad física moderada a vigorosa al día. Esto puede incluir
deportes, caminar, andar en bicicleta o bailar. Es importante fomentar
actividades que disfruten para que se mantengan motivados. 25.
Actividades escolares: Las clases de educación física son un espacio ideal
para promover la actividad física en niños y adolescentes.22. Es importante
que los profesores de educación física apliquen estrategias eficientes que
promuevan en los niños y adolescentes un conocimiento sobre la actividad
física y favorable para su desarrollo.
Familia y amigos: Un estudio descubrió que la familia es uno de los factores
más influyentes en los jóvenes que practican actividad física saludable.23 Es
importante que la familia y amigos motiven a los niños y adolescentes a
practicar actividad física y que se involucren en actividades físicas con ellos.
Variar la actividad física: Es importante variar la actividad física para evitar el
aburrimiento y para trabajar diferentes grupos musculares. Se pueden alternar
actividades como caminar, correr, nadar, hacer yoga, levantar pesas, entre
otras.
Es importante tener en cuenta que cada grupo de niños y adolescentes es
diferente y puede requerir estrategias específicas para promover la actividad
física.

Limitar el tiempo de pantalla: Los adolescentes deben limitar el tiempo que

pasan frente a pantallas, incluidos televisores, computadoras y teléfonos
móviles. El tiempo de pantalla debe ser limitado a no más de dos horas al día.
Incentivar la lectura: Incentivar la lectura puede ser una buena opción para
limitar el tiempo de pantalla en niños y adolescentes24. Los padres o
cuidadores pueden incentivar la lectura de libros, revistas o periódicos en lugar
de utilizar dispositivos electrónicos.
Crear espacios sin pantallas: Crear espacios sin pantallas en el hogar puede
ser una buena opción para limitar el tiempo de pantalla en niños y adolescentes
24.Los padres o cuidadores pueden crear espacios de juego, lectura o
manualidades que no implican el uso de dispositivos electrónicos.

Fomentar un sueño adecuado: Los adolescentes necesitan entre 8 y 10 horas

de sueño por noche. La falta de sueño puede aumentar el riesgo de obesidad.18
Evite el uso de dispositivos electrónicos antes de dormir: El uso de dispositivos
electrónicos antes de dormir puede afectar la calidad del sueño. Es
recomendable evitar el uso de dispositivos electrónicos al menos una hora
antes de dormir.
Evitar las siestas largas durante el día: Las siestas largas durante el día
pueden afectar la calidad del sueño nocturno. Es recomendable limitar las
siestas a no más de 30 minutos durante el día.

Establecer un ambiente saludable en el hogar: Los padres deben fomentar un

ambiente saludable en el hogar, incluyendo la disponibilidad de alimentos
saludables y la promoción de la actividad física.26.
Fomentar un ambiente relajado y sin estrés: El estrés puede afectar la
alimentación y el peso. Es importante fomentar un ambiente relajado y sin
estrés en el hogar, con actividades como meditación, yoga o lectura.

En resumen, la prevención de la obesidad en la adolescencia implica fomentar

una alimentación saludable, promover la actividad física, limitar el tiempo de
pantalla, fomentar un sueño adecuado y establecer un ambiente saludable en
el hogar. Al tomar medidas preventivas tempranas, se puede ayudar a los
adolescentes a mantener un peso saludable y prevenir problemas de salud a
largo plazo.

Terapia conductual: La terapia conductual puede ayudar a los adolescentes a

cambiar sus hábitos alimenticios y de actividad física. Un terapeuta puede
ayudar a establecer metas realistas y desarrollar estrategias para alcanzarlas.
Medicamentos: En algunos casos, los medicamentos pueden ser recetados por
un médico para ayudar a controlar el apetito y reducir la ingesta de alimentos.
Cirugía bariátrica: En casos extremos de obesidad, la cirugía bariátrica puede
ser una opción. Sin embargo, esta opción solo se considera después de que se
hayan probado otros métodos de tratamiento y se haya evaluado
cuidadosamente la salud del adolescente.
Es importante recordar que el tratamiento de la obesidad en la adolescencia
debe ser un enfoque integral que involucre cambios en la alimentación,
aumento de la actividad física, terapia conductual y, en algunos casos,
medicamentos o cirugía. Además, es importante que los adolescentes reciban
apoyo emocional y psicológico durante el proceso de tratamiento.19

Impacto social y económico de la obesidad en la adolescencia

La obesidad en la adolescencia tiene un impacto significativo en la sociedad y

la economía. Aquí hay algunos ejemplos:
Costos de atención médica: La obesidad en la adolescencia puede aumentar
los costos de atención médica debido a problemas de salud relacionados con la
obesidad, como diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y presión arterial alta.
Costos de atención médica: La obesidad en la adolescencia puede aumentar
los costos de atención médica debido a las enfermedades relacionadas con la
obesidad, como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.29

Impacto en la calidad de vida: La obesidad en la adolescencia puede tener un

impacto negativo en la calidad de vida, incluyendo la autoestima, la salud
mental y la capacidad para realizar actividades diarias 27

Impacto en la educación: La obesidad en la adolescencia puede tener un

impacto en la educación, incluyendo la asistencia escolar y el rendimiento
académico 27

Impacto en la economía: La obesidad en la adolescencia puede tener un

impacto económico negativo en la sociedad, incluyendo los costos de atención
médica y la disminución de la productividad laboral. 30

Desigualdades sociales: La obesidad en la adolescencia puede estar

relacionada con desigualdades sociales, como la falta de acceso a alimentos
saludables y la falta de oportunidades para la actividad física. 31

En sintesis, la obesidad en la adolescencia puede tener un impacto social y

económico significativo, incluyendo costos de atención médica, impacto en la
calidad de vida, impacto en la educación, impacto en la economía y
desigualdades sociales. Es importante tener en cuenta que la prevención y el
tratamiento de la obesidad en la adolescencia pueden tener un impacto positivo
en la sociedad y en la economía a largo plazo.

Influencia de los medios de comunicación y la publicidad en la

obesidad adolescente:

Este estudio se centra en la influencia de los medios de comunicación en la

elección de alimentos y las percepciones de dieta saludable de adolescentes
de secundaria matriculados en programas escolares de promoción de la salud
(EPDS) y estudiantes que no forman parte de estos programas. Se realizó una
encuesta a 330 adolescentes, 165 de cada grupo.

Los resultados muestran que tanto en los adolescentes de programas EPDS

como en los que no pertenecen, la televisión es percibida como el medio de
comunicación más influyente en la elección de alimentos. La radio y los diarios
tienen una influencia percibida variada en ambos grupos, mientras que el
internet tiene una influencia percibida baja. Los adolescentes de ambos grupos
indicaron que la televisión influye en el mayor consumo de alimentos
saludables, como leche evaporada y frutas, así como en alimentos no
saludables, como golosinas. Además, programas específicos de salud en la
televisión y secciones de salud en diarios influyen en la elección de alimentos
saludables. (Román, V., & Quintana, [2010]. vol.71, n.3, pp.185-190)
La mayoría de los adolescentes de ambos grupos han comprado o deseado
comprar alimentos promocionados en los medios de comunicación, como leche
evaporada, yogur, chocolates, galletas, dulces y snacks. En cuanto a la
influencia de la familia en la elección de alimentos, los adolescentes de
programas EPDS tienden a considerarla más importante que los medios de
comunicación, mientras que los adolescentes que no pertenecen a estos
programas ven a los medios de comunicación como más influyentes que la
familia.
No se encontró una asociación significativa entre el nivel de influencia de los
medios sobre la dieta y la adherencia a los programas EPDS, ni tampoco hubo
diferencias significativas en los resultados de la encuesta entre los dos grupos.
El estudio muestra que la televisión es el medio de comunicación que más
influye en la elección de alimentos de los adolescentes, tanto en el grupo que
pertenece a los programas de Escuelas Promotoras de Salud (EPDS) como en
el grupo que no pertenece. Esto es consistente con investigaciones previas que
han demostrado la influencia de la televisión en las preferencias alimentarias
de los jóvenes.
La mayoría de los adolescentes de ambos grupos dijeron que habían comprado
o querían comprar alimentos anunciados en los medios, la mayoría de los
cuales eran productos poco saludables. Esto resalta la importancia de cambiar
la estructura de la publicidad televisiva de alimentos para promover opciones
saludables. A pesar de la influencia de los medios de comunicación, la familia
sigue siendo un factor importante en la elección de alimentos, especialmente
en el grupo EPDS. Esto pone de relieve el papel educativo de la familia en la
configuración de los hábitos alimentarios. La influencia de la escuela en la
elección de alimentos fue débil en ambos grupos, lo que sugiere la necesidad
de fortalecer las actividades de promoción de la salud y la educación nutricional
en las escuelas.33

En conclusión, el estudio destaca la importancia de abordar la influencia de los

medios de comunicación en las elecciones alimentarias de los adolescentes y
sugiere que las intervenciones educativas deberían hacer hincapié en la
promoción de alimentos saludables y desarrollar habilidades para combatir las
influencias nocivas de los medios de comunicación. También subraya la
importancia de la familia como un factor educativo clave en la elección de
alimentos de los adolescentes.

Políticas públicas y programas de intervención

Las políticas públicas y los programas de intervención son herramientas
importantes para abordar la obesidad en la adolescencia. Aquí hay algunos
ejemplos de políticas y programas que pueden ayudar a prevenir y tratar la
obesidad en los adolescentes:
Políticas de alimentación escolar: Las políticas que promueven una
alimentación saludable en las escuelas pueden ayudar a los adolescentes a
adoptar hábitos alimenticios saludables. Esto puede incluir la disponibilidad de
alimentos saludables en las cafeterías escolares y la promoción de programas
de desayuno escolar.
Programas de actividad física: Los programas que fomentan la actividad física
en las escuelas y en la comunidad pueden ayudar a los adolescentes a
mantener activos y prevenir la obesidad. Esto puede incluir programas
deportivos, clases de ejercicio y actividades al aire libre.27
Políticas de publicidad de alimentos: Las políticas que regulan la publicidad de
alimentos poco saludables pueden ayudar a reducir la exposición de los
adolescentes a alimentos poco saludables y promover opciones más
saludables.
Programas de educación nutricional: Los programas que enseñan a los
adolescentes sobre nutrición y hábitos alimenticios saludables pueden ayudar a
prevenir la obesidad y promover un estilo de vida saludable.28
Políticas de transporte activo: Las políticas que promueven el transporte activo,
como caminar o andar en bicicleta, pueden ayudar a los adolescentes a
mantener activos y prevenir la obesidad.
En pocas palabras, las políticas públicas y los programas de intervención
pueden ser herramientas efectivas para prevenir y tratar la obesidad en la
adolescencia. Es importante que estas políticas y programas sean accesibles y
estén disponibles para todos los adolescentes, independientemente de su
origen socioeconómico o ubicación geográfica.

CONCLUSION:

La obesidad es un problema de salud complejo que afecta a personas de todas

las edades, pero su aumento en la adolescencia es una preocupación que
requiere un abordaje multidisciplinario debido a los riesgos para la salud,
aspectos estéticos y sociales que pueden afectar la calidad de vida. Es
importante reconocer las consecuencias que la obesidad puede tener en la
salud, la sociedad y la economía. Los costos de atención médica, el impacto en
la calidad de vida, la educación y la economía son áreas donde la obesidad
puede tener un impacto negativo. Por ello, es importante implementar medidas
preventivas y políticas públicas para combatir esta epidemia y mejorar el
bienestar general.
Para combatir la obesidad en los adolescentes, además de los factores
psicológicos, se deben tener en cuenta factores como el metabolismo, las
hormonas, la genética, el entorno familiar y socioeconómico. Cambiar su dieta,
aumentar la actividad física y consultar a su médico son pasos importantes.
También es necesario abordar las desigualdades socioeconómicas.
La obesidad puede afectar negativamente a la salud respiratoria, aumentando
el riesgo de asma, obesidad y síndrome de hipoventilación y enfermedad
pulmonar obstructiva crónica (EPOC). La prevención incluye mantener un peso
saludable, llevar una dieta equilibrada, hacer actividad física y evitar el tabaco.
Trabajando juntos, podemos promover estilos de vida más saludables,
prevenir la obesidad juvenil y crear una sociedad más inclusiva y respetuosa.
La educación, la promoción de la autoestima y el acceso a opciones saludables
son pilares clave en esta lucha contra la obesidad en la adolescencia.
En resumen, es fundamental controlar el peso, recibir atención médica y
promover un estilo de vida saludable para prevenir y tratar la obesidad en
adolescentes, mejorando su calidad de vida. También es importante abordar
las desigualdades sociales y promover la educación y la autoestima. Las
políticas públicas y programas de intervención son herramientas esenciales,
como políticas de alimentación escolar, programas de actividad física,
regulación de publicidad de alimentos no saludables, programas de educación
nutricional y políticas de transporte activo. Estas medidas deben ser inclusivas
y accesibles para todos los adolescentes. La lucha contra la obesidad en los
adolescentes tiene un impacto positivo en la sociedad y la economía al reducir
los costos de atención médica, mejorar la calidad de vida y combatir la
desigualdad social.

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