Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Capitulo 4 Derecho
Capitulo 4 Derecho
PROTECCIÓN DE
PERSONAS EN LOS
CONFLICTOS ARMADOS
CAPÍTULO
4
OBJETIVOS GENERALES DE LA ASIGNATURA OBJETIVOS ESPECÍFICOS DEL CAPÍTULO
Definición. Enunciación
Son crímenes contra la humanidad (o de “lesa humanidad”) las pérdidas de
vida que se ocasionan como consecuencia de un ataque en forma generalizada o
sistemática contra una población civil, con conocimiento de dicho ataque por parte
de quien lo ordena.
Son actos inhumanos aquellos que, por su extensión y gravedad, van más
allá de los límites tolerables para la comunidad internacional, la que debe
forzosamente demandar su castigo.
Hay aquí una cercana conexión con la Cláusula Martens, que expresa que
los crímenes contra la humanidad son:
Asesinato.
Exterminio.
Esclavitud.
Tortura.
A. Principios Generales
Los miembros de las fuerzas armadas de una Parte en conflicto son combatientes, con excepción del
personal sanitario y religioso y del personal militar de la protección civil (Reglamento de La Haya, art.
1 y 3; P. I, art. 43, 67), y sólo los miembros de las fuerzas armadas son combatientes.
Los combatientes tienen derecho a participar directamente en las hostilidades (P. I, art. 43), es decir,
a realizar actos de guerra que por su naturaleza o su finalidad están dirigidos directamente contra los
combatientes o los otros objetivos militares de las fuerzas armadas adversas.
Todo combatiente que caiga en poder de una Parte adversa es prisionero de guerra (C. III, art. 4; P. I,
art. 44).
disciplina interna que haga cumplir, inter alia, las normas de derecho internacional aplicables en los
conflictos armados (P. I, art. 43).
C. Los Combatientes
Estatuto
Sólo los combatientes tienen derecho a atacar al adversario (Reglamento de La Haya, art. 1, P. I, art.
43). Cuando son capturados, deben ser considerados prisioneros de guerra, lo que significa que no
pueden ser castigados por haber cometido actos de hostilidad (P. I, art. 44).
Situación excepcional
En situación excepcional (territorio ocupado, conflicto asimétrico, contraguerrilla), los combatientes
pueden ser dispensados de la condición general de visibilidad (P. I, art. 44), pero sólo por decisión del
mando responsable ante la Parte en conflicto. En esos casos, basta con que se distingan de los
civiles llevando sus armas abiertamente durante la operación y durante el tiempo en que sean visibles
para el adversario cuando toman parte en un despliegue militar previo al lanzamiento de un ataque en
el que deben participar (P. I, art. 44), (es decir, según una opinión bastante generalizada, durante
todo movimiento en dirección a la base de ataque).
Casos especiales:
- el mercenario, si no es miembro de las fuerzas armadas de una Parte en conflicto, no tiene derecho
al estatuto de combatiente (ni de prisionero de guerra) (P. I, art. 47);
- el espía cogido en flagrante delito de espionaje, no tiene derecho, incluso si es miembro de las
fuerzas armadas al estatuto de combatiente (ni de prisionero de guerra) (P. I, art. 46);
- los niños menores de quince años no tienen, en principio, derecho al estatuto de combatiente y no
deben ser reclutados (P. I, art. 77);
- el parlamentario que se aprovecha de su posición privilegiada para provocar o cometer un acto de
traición pierde su inmunidad (y, en caso dado, puede ser tratado como espía) (R La Haya, art. 34);
- el estatuto de un combatiente perteneciente a un movimiento de liberación nacional no reconocido
por el adversario es incierto (P. I, art. 43). Si este adversario es Parte en el Protocolo, no puede
negarse el estatuto cuando el movimiento de liberación nacional ha efectuado la declaración prevista
en el artículo 96, párrafo 3 del Protocolo.
La diferencia reside en una cierta libertad de movimientos o en la repatriación anticipada (por ejemplo,
para el personal sanitario y religioso) (C. I, art. 30; C. II, art. 37; C. III, art. 33), en otras medidas
preferenciales (internados militares, C. III, art. 4; niños combatientes, P. I, art. 77) o en el
encausamiento penal por el hecho de haber llevado armas en caso de que se haya denegado
definitivamente el estatuto de combatiente (C. III, art. 5; C. IV, art. 68; P. I, art. 45), salvo para los
niños combatientes.
Categorías de Combatientes
Recapitulando sobre todo lo dicho hasta ahora en relación con los sujetos
combatientes, podemos clasificarlos atendiendo a la legitimidad o ilegitimidad de su
actuación, en:
Espías
El miembro de las FFAA de una Parte en conflicto que, en favor de esa parte,
recoja o intente recoger información dentro de un territorio controlado por una
Parte adversa siempre que, al hacerlo, vista el uniforme de las Fuerzas
Armadas a que pertenezca.
Mercenarios
Deberes
Por lo que atañe a los Deberes de los Prisioneros de Guerra, se derivan,
en general, de las Leyes de la Guerra y de las Normas de la Disciplina Militar.
Los prisioneros de guerra que, por razón de su estado físico o mental, sean
incapaces de dar su identidad, serán confiados al Servicio de Sanidad. Se
determinará, por todos los medios posibles, la identidad de estos prisioneros, a
reserva de las disposiciones del párrafo anterior.
4. CAUTIVERIO
Desde el momento de la captura, la Potencia detentora debe proporcionar al
prisionero de guerra una tarjeta de captura mediante la cual puede comunicar su
cautiverio a su familia y a la Agencia Central de Búsquedas.
Evacuación
Según los Artículos 19 y 20 del III Convenio, los prisioneros de guerra serán
evacuados, en el más breve plazo posible después de haber sido capturados, hacia
campamentos situados lo bastante lejos de la zona de combate como para no correr
peligro.
Socorros
Los prisioneros de guerra estarán autorizados a recibir, por vía postal o por
cualquier otro conducto, paquetes individuales o colectivos que contengan, en
especial, alimentos, ropa, medicamentos y artículos para satisfacer sus necesidades
por lo que atañe a religión, a estudio, incluidos libros, objetos de culto, material
Disciplina
A fin de garantizar la disciplina de conformidad con el honor militar, cada
campamento de prisioneros de guerra estará bajo la autoridad directa de un Oficial
responsable, perteneciente a las Fuerzas Armadas regulares de la Potencia
detentora.
Este Oficial dispondrá del texto del Convenio que conocerá perfectamente,
así como de las disposiciones pertinentes del Protocolo I. Además, se fijarán esos
textos en cada campamento en el idioma de los prisioneros de guerra, en lugares
donde todos los prisioneros puedan consultarlos.
Los jefes militares deben velar para que los miembros de las Fuerzas
Armadas bajo su mando conozcan sus obligaciones en virtud de lo dispuesto en los
Convenios y en el Protocolo; además, les incumbe impedir toda infracción contra
esas disposiciones, reprimirlas y, si es necesario, denunciarlas a las autoridades
competentes.
Medidas disciplinarias
Las sanciones judiciales, solo los Tribunales Militares podrán juzgar a los
prisioneros de guerra. Además, las autoridades militares y los tribunales de la
Potencia detentora solo podrán castigar a los prisioneros de guerra con las penas
que se prevén, por los mismos actos, para los miembros de las Fuerzas Armadas de
esa Potencia, y se prohíben:
los castigos colectivos por actos individuales,
los castigos corporales,
el encarcelamiento en locales no iluminados por la luz solar,
cualquier forma de tortura o de crueldad.
Por supuesto, se permite hacer uso de armas contra los prisioneros que se
evaden o intentan evadirse, pero esta práctica es un recurso extremo al que siempre
precederán intimaciones según las circunstancias.
Diligencias judiciales
información sin demora de los Sólo podrá juzgarse al prisionero una sola
detalles de la infracción que se le vez por el mismo hecho, de conformidad
atribuya, que debe ser un acto con la misma legislación y con el mismo
delictivo en el momento de procedimiento judicial.
cometerse,
presunción de inocencia,
1. los heridos y los enfermos cuya curación pueda preverse para el año
que siga al fecha de la herida o al comienzo de la enfermedad, si el
tratamiento en país neutral permite prever una curación más segura y
más rápida;
Para remediar esta situación, en el III Convenio, Art. 118 se estipula que:
Fallecimientos
Los prisioneros de guerra tienen derecho a hacer su testamento. Para ello,
en el Convenio se prevé que los testamentos de los prisioneros de guerra se
redactarán de manera que se ajusten a las condiciones de validez requeridas por la
legislación del país de origen, que tomará las medidas necesarias para dar a
conocer esas condiciones a la Potencia detentora.
6. CRÍMENES DE GUERRA
Son crímenes de guerra:
Matar intencionalmente.
Tomar rehenes.
Esta Agencia tiene en sus archivos más de cincuenta millones de fichas que
son una documentación única para determinar los derechos de los prisioneros o de
las respectivas familias.
Las familias tienen derecho a conocer la suerte corrida por sus miembros.
Así pues, en caso de desaparición, tan pronto como las circunstancias lo permitan y
a más tardar desde el fin de las hostilidades activas, cada Parte en conflicto buscará
a las personas que le haya señalado una Parte adversa y comunicará todos los
datos pertinentes a fin de facilitar la búsqueda.
Las Partes en conflicto darán al CICR todas las facilidades que estén en su
poder para que pueda desempeñar las tareas humanitarias que se le atribuyen en
los Convenios a fin de prestar protección y asistencia a las víctimas de los conflictos;
el CICR también podrá ejercer cualquier otra actividad humanitaria en favor de esas
víctimas con el consentimiento previo de las Partes en conflicto.
Terminología
Protección. Prohibiciones
Las naves que respondan a este llamamiento, así como las que
espontáneamente hayan efectuado dichas tareas de asistencia, gozarán de
protección especial y de facilidades para la ejecución de las mismas.
El principio general que rige este tema es el derecho que asiste a las familias
de conocer la suerte corrida por sus miembros.
Será considerado personal sanitario y por lo tanto les serán aplicables las
mismas normas al personal sanitario de las sociedades de la Cruz Roja y de otras
sociedades nacionales de socorro voluntario reconocidas por sus gobiernos.
Están prohibidos:
Los atentados a la vida, a la salud y a la integridad corporal o mental,
especialmente el homicidio en todas sus formas, las mutilaciones, los tratos
crueles, torturas y suplicios.
La toma de rehenes, las penas colectivas o toda amenaza en dicho sentido.
Que toda persona detenida, presa o internada por actos relacionados con
el conflicto armado, será informada sin demora de las razones de la
medida. Será puesta en libertad lo antes posible, en cuanto desaparezcan
las circunstancias justificantes de tal detención.
Las mujeres encintas y las madres con niños de corta edad a su cargo,
serán atendidas con prioridad absoluta en caso de ser arrestadas, detenidas o
internadas por razones relacionadas con el conflicto armado. Se procurará evitar
imponerles la pena de muerte por delitos relacionados con el conflicto armado; y, de
ser impuesta, no se la ejecutará.
Los niños serán objeto de respeto especial; se los protegerá contra cualquier
forma de atentado al pudor. Se les proporcionarán los cuidados y ayuda que
necesiten. Se evitará que los menores de quince años participen directamente en las
hostilidades. Se procurará reclutar en primer lugar a los de mayor edad, de los
comprendidos entre 15 y 18 años. Y aquellos que participen directamente en las
hostilidades gozarán de la misma protección, fueren o no prisioneros de guerra.
La población civil y los bienes de carácter civil no deben ser atacados; ello
está terminantemente prohibido. Pero sí pueden sufrir incidentalmente los efectos de
las hostilidades que ocurran después de haberse adoptado "todas las precauciones
factibles en la elección de los medios y métodos de ataque para evitar o al menos
reducir, en lo posible, el número de muertos y heridos civiles”, así como “los daños a
bienes de carácter civil”.
Cuando los muertos y heridos civiles, y los daños en los bienes civiles (que
se haya previsto ocurrirían incidentalmente en un ataque) fueran "excesivos en relación
con la ventaja militar concreta y directa prevista”, tal ataque no debe ser realizado:
será suspendido o anulado.
Cuando se pueda elegir entre varios objetivos militares para obtener una
ventaja militar equivalente, se optará por el objetivo cuyo ataque se espere que
presente menos peligro para las personas civiles y los bienes de carácter civil.
Lugares protegidos
Como para las demás personas civiles, el CICR promueve el respeto de los
derechos y la dignidad de los niños y les presta asistencia para mitigar los efectos de
los conflictos armados. Aunque el CICR actúa de forma imparcial para ayudar a
todas las víctimas de conflictos, los niños tienen necesidades especiales que el
CICR se esfuerza por satisfacer. Algunas de esas necesidades son las siguientes:
♠ Servicio de alarma.
♠ Evacuación.
♠ Salvamento.
BIBLIOGRAFÍA
• Pág. Web: Comité Internacional de la Cruz Roja: Estatuto del Combatiente y del
Prisionero de Guerra,
http://www.icrc.org/spa/resources/documents/misc/5tdm4r.htm (set 2011)