PREPARANDO GERMINADOS

Los germinados o brotes cada día están más de moda. Y es

normal que lo estén, se trata de un alimento fácil de digerir y de
un gran valor nutricional, que además incluye muchas veces un
gran aporte de antioxidantes.
Además, pueden ser una alternativa no solo sana y natural sino
también muy barata si aprendes a hacer tus propios brotes o
germinados. En este taller vamos a conocer algunos tipos de
germinados y cómo hacerlos.

Tipos de germinados comestibles

Estos son algunos de los tipos de germinados que se
pueden consumir:
 Alfalfa
 Lentejas
 Trigo
 Quinua
 Linaza
 Arvejas
 Garbanzos

Cómo hacer germinados paso a paso

Hacer tus propios germinados es muy sencillo. Lo puedes
realizar con germinadoras caseras como aquí te enseñamos.

1. Prepara un tarro de cristal de cierta anchura para que te sea

cómodo trabajar con él. Lávalo, pon tus semillas a germinar en
él. Con una cucharada grande será suficiente la mayor parte de
las veces: ten en cuenta que las semillas multiplican su volumen
varias veces al germinar.
2. Añade al menos el triple de volumen de agua que de semillas, y
déjalas remojar durante toda la noche.
3. A la mañana siguiente, retira las semillas que floten, ya que no
germinarán. Una vez retiradas las semillas malas, cubre la boca
del recipiente con una gasa o algún otro material parecido.
 Puedes fijarlo a la boca del tarro simplemente con algunas ligas.
Una vez hecho esto, retira el agua.
4. Deja el bote escurriendo boca abajo en algún punto con una
ventilación adecuada y una temperatura constante que se
mantenga alrededor de los 20ºC. Procura también que se
mantenga resguardado de la luz o dentro de una bosa
negra, al menos hasta que las semillas empiecen a
germinar.
5. Por la mañana enjuágalos de nuevo y ponlos a escurrir en
su sitio. En unos pocos días deberías tener listos tus brotes
germinados.
Este proceso puede repetirse para prácticamente cualquier tipo
de germinado. Recomendamos el consumo de los
brotes cuando tengan una longitud mínima de unos 2
centímetros, aunque hay quien prefiere dejar que crezcan más.
Una vez los germinados tienen la longitud deseada, guárdalos en
la refrigeradora envueltos en papel absorbente y dentro de un
taper, no deberías tardar más de 3 días en consumirlos.

Tipos de germinados y cómo

hacerlos
Los germinados o brotes cada día están más de moda. Y es
normal que lo estén, se trata de un alimento fácil de digerir y de
un gran valor nutricional, que además incluye muchas veces un
gran aporte de antioxidantes.
De hecho, las semillas germinadas llevan consumiéndose por el
ser humano durante prácticamente toda la historia, pero ahora
empieza a haber una mayor concienciación de sus propiedades
beneficiosas y se germinan semillas que era menos habitual
consumir así. Además, pueden ser una alternativa no solo sana y
natural sino también muy barata si aprendes a hacer tus propios
brotes o germinados en casa. En este artículo de EcologíaVerde
vamos a ver algunos tipos de germinados y cómo hacerlos en
tu propia casa.
Tipos de germinados comestibles - los
mejores
Estos son algunos de los tipos de gemrminados o
brotes que se pueden consumir:
 Lentejas
Las lentejas siempre han sido un alimento muy nutritivo,
pero al consumirlas como germinados de semillas sus
proteínas se vuelven más digestivas y al no necesitar
cocinarlas, sus nutrientes no se ven mermados. Las
lentejas se desarrollan muy rápido, y no tardarás más de 4
o 5 días en tener unos brotes de buen tamaño para
consumir.
Si te gustan estas legumbres, aquí puedes
aprender Cuándo y cómo plantar lentejas en casa.
Quinoa
Hace ya un tiempo que la palabra quinoa resuena por todas
partes cuando se habla de nueva cocina o cocina sana. Lo
que no todo el mundo sabe es que la quinoa puede
germinarse, proporcionando un alimento ideal para
complementar tus ensaladas y con unas excelentes
propiedades nutricionales.
Brócoli
Los brotes o germinados de brócoli también son muy
populares. Su sabor característico y único los hace muy
valiosos para complementar ensaladas o para dar ese
toque de sabor vegetal extra a un wrap o enrollado.
Además, también son muy usados para dar un toque
decorativo a algunos platos.
Soja
Es uno de los más clásicos, pero no podíamos dejarlo sin
nombrar. Los brotes de soja son muy consumidos en
ensaladas y para dar un aporte vegetal a gran cantidad de
platos. Los germinados de soja son también un ingrediente
indispensable del Chop Suey.
Rábano
Los germinados de rábano tienen un sabor intenso y con
un toque picante. Son habitualmente utilizados en
ensalados y en platos crudiveganos, así como para dar una
 textura más crujiente e interesante a prácticamente
cualquier plato.
Otros tipos de germinados
Esta es una lista de otros tipos de germinados o
brotes que también son comestibles y se pueden encontrar
en variedad de platos fríos y calientes alrededor del mundo.
 Alfalfa
 Fenogreco
 Mostaza
 Amaranto
 Sésamo
 Arvejas
 Arroz integral
 Avena
 Calabaza
 Trigo
 Garbanzos
Cómo hacer germinados paso a paso
Hacer tus propios germinados en casa es muy sencillo. Lo
ideal es realizarlos con una germinadora, son muy baratas de
comprar y te durarán toda la vida, pero si no quieres, también
puedes realizarlos con germinadoras caseras como aquí te
enseñamos.
1. Prepara un tarro de cristal de cierta anchura para que te sea
cómodo trabajar con él. Lávalo a conciencia usando un
poco de vinagre y, una vez listo, pon tus semillas a germinar
en él. Con una cucharada grande será suficiente la mayor
parte de las veces: ten en cuenta que las semillas
multiplican su volumen varias veces al germinar. Conforme
vayas haciendo varias tandas, le irás cogiendo el punto a
las cantidades.
2. Añade al menos el triple de volumen de agua que de semillas, y
déjalas remojar durante toda la noche.
3. A la mañana siguiente, retira las semillas que floten, ya que no
germinarán y sólo sirven como fuente de elementos no
deseados. Una vez retiradas las semillas malas, cubre la boca
del recipiente con una mosquitera fina o algún otro material
parecido, siempre de agujeros más finos que las propias
 semillas. Puedes fijarlo a la boca del tarro simplemente con
algunas gomas elásticas. Una vez hecho esto, retira el agua.
4. Deja el bote escurriendo boca abajo en algún punto con una
ventilación adecuada y una temperatura constante que se
mantenga alrededor de los 20ºC. Procura también que se
mantenga resguardado de la luz, al menos hasta que las
semillas empiecen a germinar.
5. Por la noche vuelve a dejarlos en agua, y por la mañana
enjuágalos de nuevo y ponlos a escurrir en su sitio. En unos
pocos días deberías tener listos tus brotes germinados,
aunque hay germinados como los del ajo, la cebolla y los
puerros, que pueden llegar a tardar hasta más de una
semana.
Este proceso puede repetirse para prácticamente cualquier tipo
de germinado. Recomendamos el consumo de los
brotes cuando tengan una longitud mínima de unos 2
centímetros, aunque hay quien prefiere dejar que crezcan más.
Una vez los germinados tienen la longitud deseada, guárdalos en
la nevera envueltos en papel absorbente, aunque no deberías
tardar más de una semana en consumirlos.
En este otro artículo de EcologíaVerde mostramos más
sobre Cómo hacer germinados de lentejas, pero las indicaciones
pueden servir para variedad de tipos de brotes.