EL TERNARIO O LA MATEMÁTICA DE LA LUZ

En el corazón de la galaxia, un haz de luz rasgó el velo de la noche. Atravesando los umbrales de la
penumbra, dotó de luz a todo cuanto halló a su paso. Traspasando los umbrales del alba, dotó de
sí a la mente del hombre. Refractándose en la materia, dotó de amor al corazón de todos mis
queridos hermanos, dando origen a los colores, formas y sonidos que esta noche nos acompañan.

Desde oriente a occidente, cada golpe de mallete forja, traza, desplaza y refracta la luz. En el
corazón de la Logia, la luz se concentra, asienta y se propaga como ondas que irradian a cada
molécula de los cuerpos aquí presentes. En resonancia con las frecuencias emanadas del corazón
de la galaxia, al medio día en punto os invito a contemplar en absoluto silencio como damos vida
al ternario, reintegrando al tiempo y el espacio. Permitamos que la ley se cumpla.

Dicho esto. Silencio hermanos míos, estamos en Logia.