En la agricultura vegetal, la producción depende del suelo y del medio ambiente. El pH, la humedad, la textura y la fertilidad del suelo son necesarios para tener vegetales de excelente calidad. Además, la temperatura, la lluvia, la humedad relativa y la intensidad de la luz también son elementos necesarios para la producción de vegetales. El medio ambiente degradado empeora las condiciones de la población de menores recursos al limitar su ya restringido acceso a los recursos productivos. Esto se aplica particularmente a los recursos hídricos rurales, el suelo y la silvicultura, que constituyen la base de recursos para la agricultura. En algunos casos, las malas condiciones ambientales (p. ej., muy poca agua) dañan a las plantas directamente. En otros casos, el estrés ambiental debilita a la planta y la hace más susceptible a enfermedades o ataques de insectos. Los factores ambientales que afectan el crecimiento de las plantas incluyen la luz, la temperatura, el agua, la humedad y la nutrición. Por lo anterior, cuando alguno de los factores se altera por el deterioro ambiental el impacto directo es en la cadena de producción agrícola (producción de frutas, vegetales y maderables). La agricultura es una actividad del hombre para producir alimentos por medio de la utilización, control y manejo de las plantas. Por lo tanto, algunos de sus elementos son: Objetivos: Características de los suelos y su topografía, plagas y enfermedades, institucionales y organizacionales, medios de producción existentes, redes de comunicación y viales, potencial agro productivo, precios de venta y precios de importación de los productos. Subjetivos: Rendimientos agrícolas, costos directos, costos indirectos, gestión administrativa, explotación de los medios de producción e instalaciones, aprovechamiento de la fuerza laboral, calificación de la fuerza laboral, nivel de satisfacción laboral, mínimo uso de energías renovables.