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ESPIRITUALIDAD MARISTA
Que brota de la tradición de Marcelino Champagnat
AÑO DE ESPIRITUALIDAD
Agua de la roca, manantial de vida
Provincia Marista de América Central
Puestos en camino en nuestras distintas actividades y en la experiencia que se nos invita a vivir a
través de este Año de Espiritualidad, les ofrecemos el siguiente material que esperamos, les sea útil
para marcar oficialmente el inicio del mismo en su centro o movimiento.
Una oración
El encuentro en sí
Una eucaristía
Una presentación en video para el inicio del Año de Espiritualidad
Una presentación en Power Point sobre el documento Agua de la Roca
Archivos digitales de los documentos (En pdf y Word, si desean modificarlos)
El Proyecto Provincial para el Año de Espiritualidad
Se ha tratado de que los materiales propuestos tengan relación entre sí, lo cual no implica que se
deban realizar todos. De igual manera no se han fijado tiempos para cada actividad, pues
consideramos que cada uno lo debe adecuar al espacio con el que cuenta.
Atentamente,
Comisión de Espiritualidad
ESPIRITUALIDAD MARISTA
Que brota de la tradición de Marcelino Champagnat
AÑO DE ESPIRITUALIDAD
Agua de la roca, manantial de vida
Provincia Marista de América Central
HEREDEROS DE CHAMPAGNAT
Este texto dirigido a los primeros Hermanitos de María, resuena hoy para todos nosotros, miembros
de la Familia Marista que queremos hacer actual esas actitudes que Marcelino vivió y forjó en sus
discípulos, como sello característico de seguir a Jesús.
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Que brota de la tradición de Marcelino Champagnat
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Agua de la roca, manantial de vida
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DE MI EXPERIENCIA
¿De qué me siento heredero de Champagnat?
¿A qué me siento invitado a vivir de lo que Champagnat
quería para los continuadores de su obra?
“Les voy a mostrar a quién es semejante todo el que viene a mí, escucha mis palabras y las
pone en práctica: Es semejante a un hombre que, al edificar una casa, cavó profundamente y
puso los cimientos sobre roca. Al sobrevenir una inundación, rompió el torrente contra
aquella casa, pero no pudo destruirla por estar bien edificada. Pero el que las oye y no las
pone en práctica, es semejante a un hombre que edificó una casa a ras tierra, sin cimientos,
contra la que rompió el torrente y al instante se desplomó y fue grande la ruina de aquella
casa.”
COMPAÑEROS DE CAMINO
GESTO que manifiesta nuestro deseo de hacer un camino de conocer, profundizar y vivir la
Espiritualidad Marista. (Puede ser una vela o el logotipo del Año de Espiritualidad)
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Que brota de la tradición de Marcelino Champagnat
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Agua de la roca, manantial de vida
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PRESENTACIÓN
1. Este encuentro puede realizarse entre diversos grupos de un mismo Movimiento, entre diversos
Movimientos o sectores de un centro y con la comunidad de Hermanos. De ser así, es
conveniente reservar un espacio inicial para presentarse y si se dispone de tiempo suficiente, a
través de una dinámica para que interactúen con miembros de otros grupos.
2. Se presenta los objetivos de este encuentro y si se desea, las actividades a realizar en él.
ORACIÓN INICIAL
En este espacio se podría realizar la oración sugerida en el apartado anterior, o si se desea, una
oración más corta de ofrecimiento.
Si no se ha utilizado en la oración:
Escribir y compartir, ante qué nos sentimos agradecidos al Señor y cuál es la herencia que
consideramos recibida de Champagnat.
El compartir se puede hacer ante la Asamblea o en grupos pequeños (luego podría
recogerse en hojas, papelógrafos o simplemente decir algo de lo compartido en los grupos)
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Que brota de la tradición de Marcelino Champagnat
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“Nosotros creemos que el carisma de Marcelino es un don para la Iglesia y el mundo, que estamos
invitados a seguir desarrollando mediante una participación cada vez más honda en él”. (AR13b). Por
ello queremos dedicar este año para conocer y profundizar sobre la Espiritualidad Marista. Queremos
que este sea el inicio de un caminar, juntos, como Familia Marista buscando hacerla más viva y
comprometida.
El día 7 de octubre de 2007, domingo, dio comienzo en nuestro Instituto una peregrinación de espiritualidad que
se va a prolongar a lo largo de un año. Con la mirada puesta en que esta experiencia sirva para que se
acreciente en nosotros el aprecio de la Espiritualidad apostólica marista, se abre ahora un período significativo
de renovación para todos los que, de una manera u otra, se han visto beneficiados por el carisma que vino a la
Iglesia a través de Marcelino Champagnat, así como para el Instituto en general.
Empezamos este Año marista de espiritualidad trazándonos varios objetivos. En primer lugar, nos
comprometemos a seguir desarrollando aquella primera llamada del 20º Capítulo General que nos invitaba a
centrar apasionadamente nuestras vidas en Jesucristo. En segundo lugar, el Año marista de espiritualidad nos
brindará la ocasión de llegar a entender más plenamente lo que queremos decir cuando afirmamos que nuestra
espiritualidad es mariana y apostólica. Si nosotros tomamos conciencia de lo que eso significa, entonces
podremos inspirar en los demás el aprecio de este tesoro. En tercer lugar, a lo largo de doce meses tendremos
la posibilidad de impregnarnos de la espiritualidad que subyace en el documento Agua de la roca. Por último,
deberemos también aprovechar este tiempo de gracia para delinear y poner en marcha algunos planes
formativos relativos al campo de la espiritualidad, que vayan más allá del Año propiamente dicho. Tenemos que
dar los pasos necesarios que nos lleven a convertir estos meses en una experiencia de valor duradero para
cada uno de nosotros y para la Iglesia en general.
La invitación, extensa y cordial, a tomar parte en el Año de Espiritualidad va dirigida a los hermanos y laicos
maristas, así como a todos los que desean conocer mejor los pilares de nuestra historia.
Si queremos sacar provecho de este Año marista de espiritualidad, debemos comprometernos a seguir ciertas
prácticas. Yo recomiendo cuatro, en particular: estudio y reflexión, oración personal y comunitaria, dialogar y
compartir las experiencias, llevar un diario. Este Año de espiritualidad, además de todo lo dicho, constituye un
medio excelente de prepararnos para el 21º Capítulo general, el último que celebraremos antes del bicentenario
del Instituto, que será el año 2017. Recemos para que a lo largo de estos meses tengamos muchas
oportunidades de recordar y recordarnos que debemos ser hermanos y hermanas que irradian esperanza,
hombres y mujeres convencidos de la presencia activa del Espíritu en medio de nosotros, llamados a participar
juntos en la creación de un mundo nuevo y mejor. Recemos también para que aprendamos a escuchar, y así
seamos capaces de discernir el deseo de Dios. Y recemos, finalmente, para que lleguemos a ser personas sin
miedo, valientes y audaces, visiblemente apasionadas por Jesús y su Buena Noticia. De esta manera podremos
dar testimonio de Él con un corazón ardiente.
Afectuosamente,
Hermano Seán D. Sammon, FMS
Superior General
15 de octubre de 2007
ESPIRITUALIDAD MARISTA
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Se sugiere una lectura en grupo, en donde intentarán analizar las ideas presentadas y
complementadas con las primeras definiciones, presentarán una nueva definición de Espiritualidad.
Espiritualidad es, ciertamente, un término derivado de espíritu. Pero, para los cristianos, siguiendo
al Nuevo Testamento, espíritu designa la presencia de Dios en la vida humana, especialmente, en
la comunidad cristiana. Por eso, los especialistas definen la espiritualidad como la vida según el
espíritu, es decir, la forma de vida que se deja guiar por el Espíritu de Cristo. Vida espiritual es,
pues, una vida conducida y guiada por Dios.
Los cristianos creemos que el Dios encarnado se hizo presente en lo humano, haciendo del
hombre y del mundo el lugar de su revelación. Por ello para encontrarse con Dios no hay que
mirar sólo al cielo. Hay que mirar a la historia, hay que ser capaces de encontrar sus huellas en la
vida de los hombres y mujeres de nuestro mundo. No se puede separar a Dios del hombre, de la
historia, del mundo. Al contrario, la espiritualidad comienza por la fidelidad a lo real.
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Cuando hablamos de espiritualidad nos referimos a ese fuego inextinguible que arde dentro de
nosotros, nos llena de pasión por la construcción del Reino de Dios2 y se convierte en la fuerza
impulsora de nuestras vidas, dejando que el Espíritu de Cristo nos guíe. Todo cristiano que viva
de esta forma, crece en santidad.
Benito Arbués. Circular “Caminar en paz pero de prisa” (1997)
A lo largo de la vida, nuestra realidad espiritual interactúa dinámicamente con las experiencias
que vivimos. Por una parte, lo que denominamos nuestra espiritualidad se va moldeando a
medida que abrazamos esas experiencias; por otra, esta espiritualidad modela nuestra forma de
relacionarnos con las personas, con el mundo y con Dios.
Nosotros vivimos la espiritualidad cristiana de una manera peculiar: mariana y apostólica. Es una
espiritualidad encarnada que surgió de Marcelino Champagnat y se desarrolló después entre los
primeros hermanos, quienes nos la transmitieron como una herencia preciosa.
Presentación del documento Agua de la Roca, como uno de los medios que nos ayudarán a
profundizar en nuestra Espiritualidad (Ppt. adjunto)
Es importante que en esta última parte de encuentro, se reserve un espacio para visualizar algunas
actividades de formación, oración y/o compartir, que se puedan hacer en conjunto. Para ello
deben tomar en cuenta lo trazado en los distintos proyectos comunitarios y personales.
DESPEDIDA
ESPIRITUALIDAD MARISTA
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Todo auténtico carisma es una gracia del Espíritu Santo que se nos confía para construir y
unificar la Iglesia como Cuerpo de Cristo. Nosotros creemos que el carisma de Marcelino es
un don para la Iglesia y el mundo, que estamos invitados a seguir desarrollando mediante
una participación cada vez más honda en él. Nuestra espiritualidad define y expresa este
carisma al encarnarse en cada lugar y momento de la historia. Al vivir nuestra espiritualidad,
nuestra sed se sacia en los ríos de “agua viva”. A cambio, nosotros mismos nos
convertimos también en “agua viva” para los demás.
LITURGIA DE LA PALABRA
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HOMILÍA
Si se estima conveniente, acá se puede dar un espacio para que cada uno escriba su propio
Magníficat (o llevarlo escrito a la Eucaristía). Luego se podría invitar a compartir a la Asamblea o en
pequeños grupos.
OFERTORIO
1. Cuadros o signos de Jesús, María y Champagnat: Jesús a quién queremos seguir al estilo de
María y Champagnat.
2. Un signo que represente a los grupos o sectores que participan en la Eucaristía (se llevan todos
juntos al altar): Este camino lo queremos hacer juntos… como Familia
3. Libro Agua de la Roca: Nuestro deseo de profundizar durante este año, sobre la Espiritualidad
Marista.
4. Pan y Vino: Cristo que se comparte y nuestro deseo de hacer lo mismo.
PLEGARIA EUCARÍSTICA
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C: Te damos gracias por todas aquellas personas que a lo largo de la historia y en la faz del
mundo, se reúnen con la preocupación de trabajar por construir tu Reino.
T: Tú nos convocas,
Tú eres la llamada,
Tú promueves la unidad,
Tú eres el amor que rompe las ligaduras de esclavitud,
que perdona y que nos enseñas a vivir practicando el perdón.
Santo, Santo…
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Del mismo modo, tomó el cáliz lleno de vino, te dio gracias de nuevo y lo pasó a sus
discípulos diciendo…
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AÑO DE ESPIRITUALIDAD MARISTA
PROVINCIA MARISTA DE AMÉRICA CENTRAL
PRESENTACIÓN
El presente proyecto trata de ofrecer algunas pistas para la vivencia de este año, en el cual
será muy importante el apoyo y compartir experiencias a diferentes niveles. Como comisión
proponemos dicho proyecto para unos destinatarios específicos, pues consideramos que la
vivencia de este año es sólo el inicio de un camino de profundización y compartir de nuestra
espiritualidad como Don de Dios. Tratamos de explicar este proceso en los siguientes
párrafos:
Destinatarios
Durante el año 2008, se propone un trabajo más intenso con aquellos grupos cuya cercanía,
en trabajo y vivencia de nuestra espiritualidad es mayor: Comunidades de Hermanos,
Profesores, Movimientos (Fraternidades, Comunidad Remar), así como otras personas que
no participan en nuestros movimientos o grupos organizados y que manifiestan interés por
acercarse más nuestra espiritualidad.
A otros sectores de nuestra provincia (alumnos, Escuela de Padres, directivas…) se
ofrecerán actividades puntuales e informativas que mantengan cierta sintonía con el año de
Espiritualidad que se celebra a nivel del Instituto. Se aspira que a partir de 2009, como fruto
de la vivencia de este Año de Espiritualidad, surjan acciones que lleven a un trabajo más
profundo en Espiritualidad con estos sectores. Por ello, también se ve la necesidad de
apoyar e impulsar los proyectos que en otras comisiones se promueven y cuyos destinatarios
más específicos son, por ejemplo, los alumnos (Pastoral Educativa, Catequética, Juvenil y
Vocacional…). También sentimos la llamada a compartir más abiertamente nuestra
espiritualidad en otros ambientes diferentes de los actuales lugares de presencia marista,
pero eso requiere previamente que nosotros nos identifiquemos y vibremos desde la
Espiritualidad Marista, como una forma concreta de vivir nuestro ser cristianos.
OBJETIVOS GENERALES
Inspirados en los objetivos de este año de Espiritualidad Marista a nivel del Instituto, la
Comisión propone para la vivencia del mismo en nuestra Provincia:
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
d. Compartir
experiencias y
formación entre Cada centro
Hermanos y Laicos
• Encuentros con Dos al año
Movimientos y grupos que
realizan proceso de
profundización de la
Espiritualidad Marista
(Se sugiere encuentro con
otros centros) Cada comunidad de
Durante el año Hermanos y/o grupo
• Compartir alguna reflexión, de centro.
oración o experiencias
e. Proyectos
entre Hermanos y grupos
comunitarios y
Proyecto Personal
de Laicos Comisión EM o de
de Vida. Inicio del año Formac.
Permanente
• Guía para elaboración de
f. Animación de la Proyecto Comunitario y
vivencia del Año de PPV que ayude en la
Espiritualidad vivencia del año de E.M.
Provincial
• Crear la figura de alguien
que en cada país, anime e
impulse las experiencias
propuestas para este Año.
Descubrir y agradecer la Espiritualidad Marista como Don.
Estrategias Medios Tiempo Responsables
a. Subsidios • Guías de oración en clave 4 al año Comisión EM o de
comunitarios, de E.M. Formac. Permanente
grupales y
personales • Guía para retiros o días de 2 al año Comisión EM o de
recolección (Hermanos – Formac. Permanente
Laicos)