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EL MAR TROPICAL DEL PERÚ

El mar tropical del Perú es el espacio marino influenciado por la corriente de El Niño, en la
costa del océano Pacífico, al norte de Perú. Esta corriente constituye la parte sur de la corriente
de Panamá, que proviene del golfo de Panamá y posteriormente de Colombia.

El mar tropical, junto con el mar frío, constituyen la totalidad del espacio marítimo del Perú.
Este territorio es denominado oficialmente mar de Grau.

Por efecto de las bajas latitudes y por la influencia de la corriente de El Niño, las aguas del mar
tropical son cálidas y bajas en nutrientes. A diferencia de las aguas del mar frío, caracterizadas
por sus bajas temperaturas y alta productividad.

Características del mar tropical del Perú.


Las aguas del mar tropical son cálidas durante todas las épocas del año. Su temperatura puede
variar entre 19 ºC en invierno y 22 ºC en verano. Esto se debe a la cercanía a la línea ecuatorial
y a la influencia de la corriente de El Niño, formada por aguas cálidas.

Tiene una baja salinidad por efecto de la elevada pluviosidad de la zona tropical. Su contenido
en nutrientes es bajo, por lo que su productividad es inferior.

El color azulado, la temperatura y la abundante biodiversidad del mar tropical, lo convierten en


un destino turístico importante para el Perú.

La corriente de El Niño tiene un efecto importante sobre el clima del Perú al generar lluvias
regulares o repentinas y eventos de muerte de grandes masas de plancton.

Las aguas son transparentes.

En el mar tropical no se produce el upwelling, o afloramiento de aguas profundas.

Ecosistemas marino-costeros

MANGLARES.

El manglar es un tipo de humedal que se desarrolla en zonas influenciadas por las mareas en
las que ocurre una mezcla de agua salada y dulce. En Perú este tipo de ecosistema está
restringido al mar tropical. Abarca una superficie total de 5.870 ha, menos del 0,01% del total
nacional.

FLORA.
Los manglares son formaciones vegetales con predominio de diferentes especies de mangles:
mangle rojo (Rhizophora mangle), mangle colorado (Rhizophora harrisonii), mangle blanco
(Laguncularia racemosa), mangle prieto (Avicennia germinans) y mangle piña (Conocarpus
erectus).

Otras especies vegetales arbóreas presentes son el faique (Acacia macracantha), el charán
(Caesalpinia paipai), el algarrobo (Prosopis pallida), el palo santo (Bursera graveolens), el
añalque (Coccoloba ruiziana), el ceibo (Ceiba trichistandra), el lipe (Scutia spicata), el palo
verde (Parkinsonia aculeata), entre otras.
También habitan en los manglares algunas especies de plantas trepadoras y epífitas. Destacan
la pitaya, un bejuco del género Selenicereus sp., bromelias, como la Tillandsia usneoides, y
algunas orquídeas de los géneros Oncidium, Epidemdrum y Cattleya.

FAUNA.

Las raíces de los mangles sirven como sustrato a muchas especies de invertebrados
equinodermos (Ophiothrix), cangrejos (Ucides), caracoles (Calliostoma, Theodoxus) y percebes
(Pollicipes).

Además, algunas especies son sometidas a una gran presión de extracción para usos
comerciales. Destacan los bivalvos, como la concha negra, concha huequera, concha pata de
burro (del género Anadara), la concha lampa (Atrina maura), la concha rayada (Chione
subrugosa) y el mejillón (Mytella guyanensis). También langostinos (Pennaeus spp.) y jaivas
(Callinectes).

Por otro lado, los manglares son refugio de larvas y juveniles de una gran diversidad de
especies de peces. Destacan el róbalo (Centropomus viridis), el pargo colorado (Lutjanus
guttatus), las mojarras (Eucinostomus currani), la lisa (Mugil spp) y el bagre (Galeichthys
peruvianus).

Entre los manglares también viven especies de gran tamaño, como el cocodrilo de río
(Crocodylus acutus) y la nutria del noroeste (Lutra longicaudis).

Las ramas de los mangles y otras especies arbóreas son usadas como dormideros y sitios de
anidación por un gran numero de especies de aves, como los pelícanos (Pelecanus thagus y
Pelecanus occidentalis), el flamenco chileno (Phoenicopterus chilensis), los ibis (Eudocimus
albus y Eudocimus ruber), la fragata (Fregata magnificens) y el cormorán (Phalacrocorax
brasilianus)

ECOSISTEMAS INTERMARIALES.

Los ecosistemas intermariales son aquellos que se desarrollan en un espacio de transición


entre los ambientes terrestres y marinos. Específicamente, abarca desde el nivel más alto al
más bajo influenciado por la mareas. En la costa peruana esta zona esta representada por
playas arenosas, playas pedregosas y litorales rocosos.

PLAYAS ARENOSAS.

Constituye el ecosistema menos diverso. Resalta una diversidad baja de macrobentos. En el


nivel supralitoral, la zona más alta, se distribuyen el cangrejo carretero (Ocypode gaudichaudii)
y el isópodo Excirolana braziliensis.

En el nivel intermedio (zona mesolitoral) se distribuyen los crustáceos Callianassa garthi y


Emerita analoga, y los moluscos Mesodesma donacium y Donax marincovichi. Otras especies
asociadas son los poliquetos (Thoracophelia, Lumbrineris, Nephtys impressa y Hemipodus
biannulatus).

Las playas arenosas del mar del norte se caracterizan por presentar poblaciones muy
abundantes del caracol filtrador Olivella columellaris.
LITERALES ROCOSOS.

Los litorales rocosos son ambientes muy heterogéneos con una gran variedad de
microhábitats, lo que favorece un incremento en la biodiversidad de este ecosistema.

En la zona supralitoral predominan los gasterópodos Nodilittorina peruviana y los crustáceos


Grapsus grapsus.

Mientras que en la zona mesolitoral, ubicada en la sección intermedia del litoral rocoso, que
presenta un mayor efecto de las mareas, se desarrollan las praderas de macroalgas de los
géneros Porolithon, Enteromorpha, Hynea, Cladóphora y Gracilaria.

En cuanto a la fauna, dominan los cirrípedos Jehlius cirratus y los bivalvos Perumytilus
purpuratus y Semimytilus algosus.

Por último, en la zona infralitoral, aquella que siempre está sumergida, destacan los siguientes
géneros de algas: Gelidium, Hypnea, Gracilaria y Laurencia (algas rojas), Sargasum y Dictyota
(algas pardas), y Halimeda, Caulerpa, Ulva (algas verdes).

Además, en esta zona están presentes poblaciones numerosas de los cirrípedos


Austromegabalanus psittacus y el poliqueto Phragmatopoma moerchi. También pueden
encontrarse algunas especies de actinias (Anthothoe chilensis y Phymactis clematis).

Entre los peces asociados a estos ecosistemas de litoral rocoso, destacan el pez coche (Balistes
polylepis), el pez zanahoria (Antennarius avalonis), la morena (Gymnothorax porphyreus), el
pez borracho (Scartichthys gigas) y el trambollo (Labrisomos philipii).

PLAYAS PEDREGOSAS.

Las playas pedregosas representan la zona de transición entre las playas arenosas y las orillas
rocosas. Pueden ser playas de cantos rodados o de cantos angulosos.

La fauna característica de estas playas es similar a la de los litorales rocosos. Sin embargo,
resaltan ciertas peculiaridades, como la presencia en la zona supralitoral de los isópodos Ligia
novaezelandiae, el poliqueto Hemipodus biannulatus, y los crustáceos Pinnotherelia laevigata y
Cyclograpsus cinereus.

En la zona mesolitoral habita el anfípodo Prisogaster niger. Mientras que en la zona infralitoral
se ecuentra el anfípodo Tegula tridentata.

Ecosistemas marinos

Arrecifes de coral

El ecosistema marino más representativo del mar tropical del Perú es el arrecife de coral. Estos
constituyen uno de los ecosistemas con mayor biodiversidad en el mundo.

Los arrecifes de coral se encuentran en mares poco profundos, de temperaturas cálidas (entre
25 y 29 ºC), principalmente en la zona tropical y subtropical del planeta.

Los arrecifes de coral se sustentan sobre una masa calcárea formada por corales cementados a
través de millones de años. Sobre estas estructuras complejas crecen los corales, constituidos
por colonias de pólipos que establecen asociación simbiótica con algas zooxanthelas
fotosintéticas.
En los arrecifes de coral del mar tropical del Perú coexisten diferentes especies corales, además
de una gran diversidad de otros invertebrados y peces. Entre los peces predominan las familias
Serranidae, Pomacentridae, Labridae, Haemulidae, Diodontidae y Chaetodontidae.

La alta biodiversidad asociada a los arrecifes de coral está amenazada por los efectos del
cambio climático. El incremento de las temperaturas, la acidificación de los océanos, la
acumulación de sedimentos y el incremento de la concentración de nutrientes son las
principales amenazas.

En las aguas del Pacífico Oriental se suma la influencia de la corriente de El Niño. El incremento
de la temperatura de las aguas ha ocasionado eventos irreversibles de blanqueamiento de los
corales.

RELIEVE.

El mar tropical del Perú abarca desde la línea de baja marea hasta las 200 millas mar adentro.
En este territorio se diferencian tres zonas: la costera, la nerítica y la oceánica.

ZONA COSTERA.

La zona costera abarca desde la zona marino-costera hasta los 30 metros de profundidad.

ZONA ENERTICA.

La zona nerítica abarca desde la línea de 30 metros de profundidad hasta el límite de la


plataforma continental, a 200 metros de profundidad aproximadamente.

En el mar tropical de Perú, la zona nerítica contiene el zócalo continental. Este tiene 50 km de
ancho a la altura del departamento de Tumbes y 40 km frente al desierto de Sechura.
Haciéndose más angosto en el extremo sur del mar tropical.

ZONA OCEANICA.

La zona oceánica se encuentra después del límite de la plataforma continental. Esta puede
alcanzar miles de metros de profundidad.

La zona oceánica comprende el talud continental, una depresión al oeste del zócalo continental
que supera los 6.000 m de profundidad. En esta zona se encuentran los cañones submarinos,
valles o cavidades de laderas empinadas, de aspecto similar a los cañones de la superficie
terrestre.

UBICACIÓN Y EXTENSIÓN.

El mar tropical se ubica en el sector más al norte del litoral peruano. Se extiende desde el límite
al norte con Ecuador, en la línea baja de la Boca de Capones (3º de latitud sur) hasta la
península de Illescas, en el departamento de Piura, al sur (5º de latitud sur). Constituye la
región septentrional o del norte del mar de Grau.

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