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NEGRO
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Primer acto: la experiencia con el
negro
El narrador, recluido en una celda, nos cuenta cómo llegó hasta allí. Se describe a sí mismo
como un hombre afable que se casó temprano con una mujer con la que compartía su amor
por los animales. Por ello, tuvieron incontables mascotas, aunque su favorita era un gato
negro llamado Plutón, al que amaba a pesar de la superstición de que albergara espíritus de
brujas.
El narrador, azotado por lo que creía que eran remordimientos, intentó reemplazar al gato
negro. Visita bares y tugurios a causa de su adicción y en uno de ellos encontró un gato muy
similar a Plutón, pero con una mancha de pelo blanco en el pecho. Acogió al gato en su casa y
allí se percató de que, a ese gato, igual que Plutón, le faltaba un ojo. Con el paso del tiempo, el
hombre repudió al nuevo gato, al cual la mujer amaba profundamente.
Poco a poco, la mancha blanca en el pecho del gato adopta forma de horca. El gato se muestra
muy amigable con el narrador, que cada día que pasa lo odia más, y más aún con las muestras
de fidelidad y amor que el gato presenta. El gato incluso se acurrucaba sobre el pecho del
hombre, a la altura del corazón, para dormir atormentándolo según la perspectiva de éste.
Tercer acto: el final de los
maullidos
Un día, bajando al sótano, el narrador tropieza con el gato. Enfurecido, el narrador se
dispone a atacar al gato con un hacha, pero su mujer llega a tiempo para impedirlo, pero el
narrador, loco de ira, ataca a la mujer clavándole el hacha en su cráneo. Asustado, el
hombre decide ocultar el cadáver de su mujer emparedándolo en el sótano.
Unos días después, la policía llega a la casa para revisar el lugar en busca de la esposa
desaparecida. El narrador, convencido de su gran trabajo ocultando el cadáver, no teme
nada; de hecho, cuando la policía revisa el sótano, el hombre, altanero, golpea la pared. Sin
embargo, desde el interior de la pared comienzan a oírse gemidos que se convierten en
fuertes aullidos. La policía tira la pared y encuentra el cadáver de la mujer y, sobre su cabeza
abierta, al gato maullando de forma acusatoria.
BIOGRAFIA: