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Cuidados post:

- Baños de sol: Es importante evitar la exposición solar directa y prolongada durante al menos
2 semanas después del tratamiento IPL. El área tratada es muy sensible a quemaduras solares.
Usar protector solar SPF 50.

- Hidratación: Aplicar crema hidratante suave varias veces al día ayuda a calmar,
suavizar y promover la regeneración celular. Se recomiendan cremas sin perfumes,
para pieles sensibles.

- Ropa: Usar ropa holgada y de tejidos suaves como el algodón en las zonas tratadas
para evitar roce e irritación. Evitar lycra o nylon.

- Depilación: No depilar el área con ningún método hasta que el especialista lo indique,
usualmente de 4 a 6 semanas después del tratamiento. Esto permite la eliminación de
los folículos dañados.

- Maquillaje: No aplicar maquillaje en la zona tratada hasta que sane completamente,


usualmente unos días. Esto evita infecciones.

- Ejercicio: Evitar actividad física intensa y sudoración excesiva por unos 2-3 días
después del procedimiento. El sudor puede irritar la piel tratada.

- Aseo: Usar jabones suaves sin perfumes y duchas breves con agua tibia los primeros 2-
3 días. No frotar la zona. Seque dando toquecitos suaves con la toalla.

- Signos de alerta: Consultar al médico ante ardor prolongado, enrojecimiento,


inflamación, granitos, costras o cualquier otro signo de infección.

Ventajas de la luz pulsada intensa (IPL)

La IPL permite actuar con diferentes longitudes de onda, lo que ofrece una importante
versatilidad en relación a las características de cada persona.
– Facilita la personalización del tratamiento depilatorio.

Tras realizar un estudio de las propiedades de la piel y el vello del paciente, el aparato de IPL se
ajusta a las características obtenidas en el mismo.

- Se pueden tratar más tipos de pelo con un único aparato.


Las máquinas de IPL cubren las mismas prestaciones que diferentes tipos de láser, cada uno de
los cuáles tiene indicaciones precisas.

- Actúa tanto sobre el vello fino como el grueso.

Permite eliminar vellos con menor coloración.

No obstante, en los muy rubios y los pelirrojos no resulta eficaz.

Por supuesto, no permite eliminar las canas, ya que estos pelos carecen de melanina.

Su mayor eficacia se obtiene cuando el pelo es oscuro y la piel clara.

- Cada disparo de luz cubre una superficie de 5 cm2.

A diferencia del láser, que concentra la luz del disparo sobre un punto.

Así, la ILP permite eliminar más vello por cada disparo, lo que acorta significativamente la
duración de cada sesión.

- Permite tratar y depilar grandes extensiones de piel.


Esto hace que sea una técnica especialmente indicada para los hombres ya que,
además de tener una mayor densidad de vello, este cubre mayores superficies.

- Es una técnica indolora.

La IPL no produce dolor. Tan sólo una ligera sensación de calor en la piel y el equivalente a un
leve pinchazo con cada disparo.

Esta característica hace que esta técnica sea muy adecuado para el tratamiento de las zonas
más sensibles de la piel: cara, axilas, inglés, glúteos, interior de piernas y muslos y pecho.

- Los efectos adversos son mínimos.


Apenas se produce un enrojecimiento de la piel, con una leve sensación de calor, que
desaparecen en pocas horas.

En ocasiones puntuales pueden aparecer pequeñas manchas en la piel.

Desventajas de la luz pulsada intensa (IPL)


Pese a sus numerosas ventajas, también tiene algunas limitaciones y ciertos inconvenientes.
Por ejemplo:

- No debe usarse en pieles oscuras o bronceadas.

- No es eficaz en todos los tipos de pelo. No elimina las canas, los pelos muy rubios o los
pelirrojos.

- Es menos preciso que los láseres.

- Se necesita realizar una o dos sesiones de mantenimiento al año.

- Para ofrecer los mejores resultados, los equipo de IPL deben ser manejados por
técnicos con mucha experiencia.
Quienes no pueden hacerse:
- Con melanoma o antecedentes de cáncer de piel – La luz puede estimular la
proliferación de células cancerígenas.

- Con pecas o lunares en la zona a tratar – La luz puede dañarlos.

- Uso de medicamentos fotosensibles como anticonceptivos, antidepresivos, diuréticos,


etc. – Causan fotosensibilidad.

- Infecciones virales activas como herpes simple o herpes zóster – El tratamiento puede
reactivar los síntomas.

- Trastornos hemorrágicos o uso de anticoagulantes – Mayor riesgo de moretones y


sangrado.

- Fotodermatosis – Condiciones que causan sensibilidad extrema a la luz como urticaria


solar, porfiria, etc.
- Antecedentes de cicatriz queloide – Cicatrices gruesas y oscuras que se extienden más
allá del área lesionada.

- Lesiones precancerosas – La luz puede agravarlas.

- Rosácea o telangiectasias – La luz intensa puede empeorar estos trastornos capilares.

- Piel muy bronceada – Reduce la efectividad del tratamiento y aumenta el riesgo de


quemaduras.

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