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Este estudio esta sacado del libro escrito por Cornel Marais titulado Así que
crees que tu mente está renovada.
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Lo que pensamos en nuestros corazones es lo que creemos. Lo que
creemos determina lo que somos. Si alguna vez soñaste con ser algo para
Dios en Su Reino, seguramente estarías de acuerdo en que sería mejor
pensar Sus pensamientos en tu corazón. Descubrir lo que Dios piensa de ti
y comenzar a pensar y actuar de acuerdo con eso es lo que te impulsará a
vivir lo que Él se propuso para ti. Tu vida en las manos de Dios tiene un
potencial ilimitado. Para comenzar a caminar en ese potencial, hay algunas
verdades que primero debemos absorber y pensar de acuerdo con ellas.
Si la verdad tiene que hacerte libre, significa que estás siendo prisionero de
una mentira ya. Si estás prisionero, significa que un área de tu mente no
se ha renovado. Por eso tenemos que romper los malos pensamientos y
reemplazarlos con los pensamientos que Dios tiene hacia nosotros (2 Cor
10:5). Los pensamientos e ideas que tenía acerca de Dios cuando fui salvo,
de ninguna manera representan al Padre que ahora conozco. Crecí en la
iglesia, y para mí Él era este "ser" en algún lugar que aparentemente me
amaba, pero que me enviaría al infierno cuando muera a menos que ponga
mi fe en Su Hijo.
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través de pastores, amigos, padres o quien sea, pero usted es responsable
de renovar su propia mente porque la revelación no lo hace
automáticamente por usted. La forma en que piensas es probablemente la
más sencilla cambio importante que necesitarás hacer, además de creer en
Cristo, para caminar plenamente en la gracia que abunda para cada uno de
nosotros. Este libro está destinado a aquellos que desean caminar en
mayores medidas de la plenitud que todos hemos recibido.
Animará a los que han empezado, así como a los que quieren empezar.
Tampoco quiero poner presiones de rendimiento sobre nadie, solo deseo
alentar los deseos y deseos que Dios ya ha puesto dentro de ti.
Copié todas las notas que usaba para enseñar y tomé prestados todos sus
libros sobre el tema. Tenía que conocer a este Espíritu Santo que tocó mi
pierna y mi vida ese día. Llegué al punto en que sabía mucho sobre el
Espíritu Santo, pero nunca llegué a conocerlo realmente como persona.
Afortunadamente para nosotros, Él quiere que lo conozcamos más de lo
que queremos, así que un día, mientras estaba sentado en mi sofá leyendo
mi Biblia sobre sanidad, mi vecino de al lado entró. Tenía mi Biblia en mi
regazo, estaba fumando un cigarrillo, y sostenía una cerveza en la otra
mano.
Me preguntó qué estaba haciendo y le dije que estaba leyendo sobre Jesús
y la sanidad y esta 'persona del Espíritu Santo'. Estaba muy sorprendido ya
que él era el líder de adoración en la iglesia estudiantil local y no sabía que
yo era cristiano. Le expliqué lo que entonces sabía y entendía acerca de la
sanidad y el Espíritu Santo. Nunca oramos ni hicimos nada más 'espiritual'
ese día.
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Al día siguiente estaba de nuevo en casa cuando escuché la bocina de un
auto afuera. Entonces escuché que alguien gritaba mi nombre muy
emocionado.
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Todo lo que necesitas hacer es creer. Para creerlo, necesitas cambiar tu
forma de pensar. Pablo escribió sobre esto en Romanos, en un versículo
muy citado, pero muy mal entendido.
Lo nuevo y lo viejo no se mezclan. Jesús nos dijo eso cuando dijo que no
se echa vino nuevo (Nuevo Pacto) en odres viejos (Antiguo Pacto). Si
construyes nuevos patrones de pensamiento sobre los viejos, terminarás
luciendo exactamente como la mayoría de la iglesia hoy: confundido,
frustrado, gnóstico y con muy poco o ningún poder. Jesús nos enseñó que
construir sobre la arena no vale la pena, pero eso es exactamente lo que
hace la gente cuando mantiene las tradiciones del hombre.
Renovar tu mente tampoco es tan fácil como tener una bombilla encendida
sobre tu cabeza. Necesitas ser recableado, por así decirlo. ¿Alguna vez has
escuchado el término "ingeniería regresiva"? Es entonces cuando un
competidor compra el producto de una empresa rival y lo desarma pieza
por pieza para averiguar cómo lo construyeron, cómo se mantiene unido y
cómo funciona.
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nueva forma a través de la antigua configuración predeterminada es lo
más inútil, y frustrante que alguien puede intentar hacer. Es mucho más
fácil averiguar cuáles son los nuevos valores predeterminados y vivir de
acuerdo con ellos. Por lo general, es en este proceso de recableado donde
lo perdemos más a menudo, porque muchos cristianos van en busca de la
verdad y la revelación, solo para encontrarlas. En sí mismo, este no es el
problema. Es detenerse en recibir la revelación lo que se vuelve
problemático.
¡Sí! ¡Con todo tu corazón, pero busca las revelaciones acerca de Jesús!
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contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo
pensamiento a la obediencia a Cristo, (NKJV)
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revelación es NO tratar de leer entre líneas. Hay más en las líneas reales
que entre líneas.
Sólo lee las líneas, LENTAMENTE. Si lee rápido, tiende a leer todo con una
mentalidad de 'Oh, sí, he leído esto, sé esto' y terminará perdiendo
fragmentos vitales de revelación en versículos que sabe de memoria.
También es mucho más fácil volver a conectar antes de una crisis que
tratar de volver a conectar cuando hay presión. No es el momento de
averiguar cómo funciona tu arma cuando estás bajo fuego del enemigo. Un
soldado entrena en el campo de entrenamiento y en el campo de tiro y se
familiariza tanto con su armamento, que cuando llega la batalla, está listo.
La razón por la que Pablo dijo que necesitamos renovar nuestra mente es
para que podamos probar cuál es la buena y agradable voluntad
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de Dios. Note que dijo que podemos probar la voluntad de Dios, no
simplemente conocerla. Ahora puedes argumentar esto de diferentes
maneras. Una forma es decir que a medida que aprende las Escrituras y la
verdad, puede probar teológicamente cuál es la voluntad perfecta de Dios
de la Biblia.
Pero ahora has salido del bote, por así decirlo, y comienzas a decirles
versículos de las Escrituras para tratar de probarlo teológicamente, si es
que aún no se han escapado.
También te das cuenta de que no sabes tanto sobre Dios como pensabas,
ni en qué parte de la Biblia dice lo que estás tratando de citar, o incluso si
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lo dice de la manera en que lo dices. No te preocupes. También he estado
allí.
Entonces, ¿por qué los cristianos piensan que solo leer la Biblia es la
respuesta? La Biblia es la palabra inspirada de Dios, sí. Tiene todas las
respuestas que necesitas, sí.
Aquí Pablo dice que no solo predicó palabras, sino que desplegó poder, y lo
hizo con mucha seguridad. La palabra en griego para "mucha seguridad"
significa probar completamente, convencer completamente y asegurar
completamente. En otras palabras, no quedaba ninguna duda. Predicar es
una cosa, pero convencer por completo requiere una demostración
de poder.
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Rom 15:18-19 Porque no me atreveré a hablar de nada de lo que
Cristo no haya hecho por medio de mí, de palabra y de obra, para
hacer obedientes a los gentiles, 19 con poderosas señales y
prodigios, por el poder del Espíritu. de Dios, de modo que desde
Jerusalén y por los alrededores hasta Ilírico he predicado
plenamente el evangelio de Cristo. (NKJV)
Pablo deja muy claro que para poder predicar el evangelio de manera
plena o completa, tiene que haber evidencia en forma de señales y
prodigios por el poder del Espíritu. Sin poder, dejas lugar a la duda. El
Reino de Dios es uno de poder, y debe ser predicado, demostrado y
avanzado en ese poder. Jesús mismo tenía esta misma actitud que tenía
Pablo, de predicar con poder y no solo con palabras. ¿De dónde crees que
lo sacó Pablo? Juan 10:37-38 “Si no hago las obras de mi Padre, no
me creáis; 38 mas si las hago, aunque no me creáis a mí, creed en
las obras, para que conozcáis y creáis que el Padre está en mí, y
yo en él.
Jesús le dijo a la gente que no le creyera si Él no hacía las obras del Padre.
¿Cuáles fueron las obras del Padre? Bueno, para responder a eso,
responda: '¿Qué hizo Jesús?' Sanó, liberó, liberó y predicó el Evangelio del
Reino. Él satisfizo las necesidades del hombre en el poder del Espíritu. El
versículo 38 también es un versículo muy clave. “Para que sepáis que el
Padre está en mí, y yo en él”. Unos pocos capítulos más adelante, Jesús
oró para que los que creen en Él también sean en el Padre y en Él como lo
son el uno en el otro.
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Juan 17:20-21 “No ruego solamente por éstos, sino también por
los que han de creer en mí por la palabra de ellos, 21 para que
todos sean uno, como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti; para que
también ellos sean uno en nosotros, para que el mundo crea que
tú me enviaste.” (NKJV)
¿Sabes que la oración de Jesús fue respondida? Llegar a ser uno con el
Padre en Jesús a través del nuevo nacimiento nos reconcilió y nos conectó
directamente con Dios. Él está en nosotros como nosotros en Cristo.
Nuestros espíritus están unidos con Él. En realidad, somos un espíritu con
el Señor.
También creo que hay una diferencia entre recibir el Espíritu Santo en el
momento de tu salvación y recibir poder para ser testigo de Cristo con
señales y prodigios a través del bautismo de fuego.
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Juan 20:19-22 Entonces, el mismo día por la tarde, siendo el
primer día de la semana, estando cerradas las puertas donde
estaban reunidos los discípulos, por temor a los judíos, Jesús vino
y se puso en medio, y dijo: ellos: "La paz sea con vosotros". 20
Habiendo dicho esto, les mostró las manos y el costado. Entonces
los discípulos se alegraron al ver al Señor. 21 Jesús les dijo otra
vez: ¡Paz a vosotros! Como me envió el Padre, así también yo os
envío. 22 Y dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo: Recibid el
Espíritu Santo. (NKJV)
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Juan 14:16-17 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador,
para que esté con vosotros para siempre: 17 el Espíritu de verdad,
al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce;
pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros y estará en
vosotros. (NKJV)
El Espíritu Santo fue prometido a los creyentes y no puede ser recibido por
el mundo, por lo que solo se recibe a través del nuevo nacimiento cuando
nos convertimos en nuevas criaturas. Entonces, para que los discípulos
hayan recibido el Espíritu Santo cuando Jesús sopló sobre ellos, tenían que
haber nacido de nuevo al mismo tiempo. Así que ahora son creyentes
salvos que han recibido el Espíritu Santo, pero Jesús les dice que esperen
hasta que reciban el poder para ser testigos.
Recibir este poder a través del bautismo del Espíritu es muy importante.
Jesús, aunque siempre fue perfecto en el espíritu, nunca hizo un milagro
sin antes ser bautizado en el Espíritu. Inmediatamente después de que Él
se levantó del Jordán, el Espíritu descendió sobre Él. Después de eso, fue
llevado para ser tentado y luego regresó en el poder del Espíritu (Mateo
3:16, Lucas 4:1).
Eso nos lleva de vuelta a probar el evangelio. Jesús sabía que no ayudaría
enviarlos sin este poder, ya que lo necesitaban para hacer cumplir lo que
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iban a predicar. Inmediatamente después de que el Espíritu fue
derramado, esos 120 hombres temerosos y temerosos se convirtieron en
hombres confiados y poderosos testigos. Este empoderamiento o bautismo
está disponible y creo que es vital para cada uno de nosotros hoy.
Puedes ser salvo sin él, pero ¿por qué no lo querrías? Si somos realmente
serios acerca de difundir el Evangelio y ser testigos de Jesús, creo que es
mejor que hagamos lo que Jesús dijo e ir en el poder de Su Espíritu.
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Como es Él, como es Cristo, así somos nosotros en este mundo. Note el
tiempo usado. Como es Cristo, así somos nosotros. Como Cristo está,
ahora, en este momento, glorificado, sentado a la diestra del Padre,
teniendo ya todas las cosas puestas bajo sus pies y habiendo recibido todo
poder y autoridad, así somos nosotros, ahora, en el mundo, exactamente
como él. .
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