Delegación del Estado de Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte

Lucero Garzón Sepúlveda / Nicol Galvis Suarez

Documento de posición para el consejo de seguridad de Naciones Unidas

Honorable mesa directiva, miembros del consejo de seguridad y colegas, tengan todos muy buen día.

La delegación de Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte se siente honrada de poder dirigirse
hacia ustedes en uno de los momentos más críticos para la estabilidad, la paz y la seguridad
internacional. Como miembro permanente del consejo de seguridad de Naciones Unidas, Reino Unido de
Gran Bretaña e Irlanda del Norte esta hoy en este espacio con el fin de poder unir esfuerzos para llegar a
una pronta y eficaz resolución que contribuya a la lucha por la escalada de la amenaza representada por
el programa de misiles nucleares de la república democrática de Corea del Norte.

El Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte siempre ha abogado por la paz y la estabilidad
internacional, como lo dice la carta de las Naciones Unidas en el capítulo VI: Solución Pacífica de
Controversias (artículo 33-38). Esta delegación considera que la manera correcta de resolver los
conflictos es por medio de la diplomacia y el dialogo, promocionando la democracia y el mantenimiento
de la paz y la seguridad mundial, pero la situación actual demanda una respuesta contundente y
coordinada por parte de la comunidad internacional.

Los antecedentes históricos del programa de misiles nucleares de Corea del Norte iniciaron desde el año
1985 cuando se adhirió al Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), durante 1993 y 1994 hubo una
crisis debido a que las sospechas internacionales de que se disponía de más plutonio que el declarado,
Pyongyang rechazó unas inspecciones propuestas por el Organismo Internacional de Energía Atómica,
con el que había firmado un acuerdo de garantías en 1992, y amenazó con abandonar el TNP, durante
este periodo de tiempo Corea del Norte estaba llevando a cabo pruebas nucleares subterráneas, lo que
ocasiono sanciones por parte de la comunidad internacional, en 1995 se creó un consorcio llamado
KEDO debido a la construcción de los reactores y el envío de petróleo, formado por 13 países pero
financiado fundamentalmente por Washington, Seúl y Tokio. Todo parecía iba ir bien, pero como bien
sabemos, desde el año 2002 las cosas tomaron un rumbo diferente debido a que en Washington se
originó un discurso en donde se afirmaba que Corea del Norte realizo una violación al TNP y a diferentes
acuerdos internacionales firmados anteriormente al realizar un desarrollo de un programa nuclear secreto
de enriquecimiento de uranio, al igual que el presidente Bush criticó a Corea del Norte por “armarse con
misiles y armas de destrucción masiva, mientras que su población muere de hambre”, a lo que Corea del
Norte respondió que para cancelar el programa nuclear exigía una nueva negociación con EE.UU.

La delegación de Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte afirma que es un problema
internacional debido a que Corea del Norte a lo largo del 2022 había disparado más de 60 pruebas de
misiles, en los cuales mas de 40 son de tipo balístico, es decir que son capaces de volar a cierta altura y
caer en un lugar en específico, lo cual resulta amenazador para los demás países porque afecta su
seguridad y territorio nacional. A su vez como Estado, nos importa mantener nuestra seguridad nacional
porque la amenaza que presenta Corea del Norte influye directamente en el Estado de Reino Unido de
Gran Bretaña e Irlanda del Norte a través de la Unión Europea y la OTAN ya que Corea del Norte ha
amenazado con lanzar misiles nucleares a EE. UU. y a países aliados de la OTAN como miembro de
estas organizaciones este conflicto podría atentar contra la vida de los ciudadanos británicos, y los
ciudadanos de los Estados aliados, como lo menciona el articulo 5 de la carta de la OTAN que hace
referencia a la seguridad colectiva. Así mismo, las amenazas nucleares de Corea del Norte han
generado que el gobierno británico implemente un mayor gasto militar y diferentes métodos de vigilancia
sobre aquellas personas que tengan vínculos con este Estado. El primer ministro británico Theresa May
dijo ante el consejo de seguridad de la ONU en 2017: "las amenazas nucleares de Corea del Norte son
peligrosas y crecientes. Si bien nuestro país no amenaza el territorio de Corea del Norte, hemos estado
muy claros en nuestro compromiso con la defensa de nuestros aliados. La fuerza nuclear de Corea del
Norte se considera una amenaza real y urgente”; esto hace referencia a que esta inestabilidad impacta
directamente la seguridad global, y como miembros responsables de la comunidad internacional, nos
preocupa cualquier amenaza potencial.

La delegación de Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte insta a Corea del Norte a cambiar su
rumbo y abandonar el programa de armas balísticas, que solo le aísla más y le expone a mayores
sanciones, debido a que esta delegación considera que es más beneficiosa una solución pacífica y
diplomática a esta crisis, y apoya la idea del presidente surcoreano, Yoon Suk Yeol, de ofrecer un apoyo
económico a Corea del Norte, pero a cambio necesita el compromiso al dialogo y la cooperación
internacional. Si este no es el caso la delegación de Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte
adopta una postura firme y radical con el fin de garantizar el cumplimiento de las resoluciones del
consejo de seguridad, por medio de sanciones en apoyo a la opción de medidas de presión
internacionales en colaboración con Corea del Sur, Japón, EE.UU, y organizaciones como la Alianza de
Seguridad del Pacifico (ASP) y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE),
de la misma manera imponiendo restricciones económicas, comerciales, de inversión y en el banco
central; así mismo restringiendo el intercambio de bienes y tecnologías para el uso militar y el apoyo al
desarrollo de los programas nucleares. El Estado de Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte no
tolerara que se ponga en peligro la paz y la seguridad mundial por ambiciones nucleares de un régimen
irresponsable y desafiante.

Por último, la delegación de Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte agradece la atención
prestada y el tiempo otorgado en sesión y esperamos encontrar prontas soluciones para un mejor futuro
en cada nación.