Manifiesto Profético 2022:

el año del Sacerdocio

Ministerio Internacional Avivamiento
Héctor Domínguez & Damariz Becerra

Dios envió a su hijo para que todas las personas que creyeran en Él fuesen salvas, que no se
perdieran.
Todos agradecemos a Dios por Jesús
Pero no todos entienden qué pasa después de nuestra salvación.

La salvación no sólo nos provee la salida del infierno y la entrada al cielo, desde aquí en la
Tierra, sino que también nos provee del propósito de Dios para nuestras vidas.

¿Qué viene después de mi salvación? La respuesta es muy sencilla: mi propósito en la Tierra

¿Cuál es ese gran propósito de Dios para nuestras vidas? Parte de uno sólo, de ahí se deriva
la multiforme Gracia de Dios, y es precisamente servirle a Dios.

“Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el
ministerio de la reconciliación;”
2 Corintios 5:18

Nacimos de Nuevo, gracias a que Dios nos dio a su hijo y éste fue a pagar por nuestros
pecados en la cruz del calvario. Jesús nos reconcilió con Dios, pues estábamos fuera de Su
Presencia por causa de nuestros pecados

Cuando Cristo nos salva, nos entrega un ministerio, y esto es a todos, no hay nadie que haya
nacido de nuevo y no tenga un ministerio, que no lo quiera ejercer es otra cosa, pero como
tiene que ver con responsabilidad, huyen de esto.

La ley nos dictamina que sólo los de la tribu de Levi y sus descendientes podían servirle a
Dios, sólo los levitas podían ser los sacerdotes de Dios, sin embargo, Jesús vino a cambiar
esto, no porque estuviera mal, pues venía de Dios, simplemente porque fue el plan de Dios
hacer un cambio a determinado tiempo y cuando lo fue, Jesús entró en acción para lograrlo

“Porque cambiado el sacerdocio, necesario es que haya también cambio de ley; y aquel de
quien se dice esto, es de otra tribu, de la cual nadie sirvió al altar. Porque manifiesto es que
nuestro Señor vino de la tribu de Judá, de la cual nada habló Moisés tocante al sacerdocio.”
Hebreos 7:12-14

Jesús vino a tomar nuestro lugar en todo, Él es nuestro sumo sacerdote y por obvias razones,
un sumo sacerdote necesita de sacerdocio a su servicio, es ahí donde entramos nosotros, al
servicio de Jesucristo

“y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra.”
Apocalipsis 5:10

Jesús quiere que este 2022 te afirmes como rey y sacerdote para nuestro Dios, ya te hizo el
llamado, ahora depende de ti reaccionar
No dudes del llamado de Dios a tu vida, en lugar de estar lloriqueando por lo que perdiste o no
supiste hacer, es tiempo de enderezar tu caminar con Dios y vivir para servirle

Te van a rechazar, por supuesto, y quién dijo que servir a Dios era todo de color de rosa
Hay momentos en el servicio a Dios que parecen ser amargos, pero eso sólo eso, un parecer,
porque quien en verdad ama a Dios no se anda lastimando con traiciones, con chismes,
desánimos o niñerías como esas, quien en verdad ama, hace, no espera a que le hagan.

Hombres y mujeres por igual, Cristo quiere que le sirvan, sin importar la edad, por lo que hoy
no hacemos una proclama profética, sino lo que está escrito de nosotros, traemos a este
tiempo, en el ahora, nuestro MANIFIESTO PROFÉTICO, los decretos que el cielo han
declarado sobre nosotros y que a cada uno, nos toca reaccionar.

No te quedes a mitad del camino, lo que empezaste, solo tiene un final. Destruye la
mediocridad, la procrastinación y los miedos que te intimidan, no los permitas en tu vida

Ya es tiempo de parar a una vida sin propósito

Ya es tiempo que tu propósito sea vivido como debe de ser, no con mediocridad
Vives calamidades porque quieres, pero Dios tiene siempre algo mejor para ti

Pregúntate ¿hasta cuándo vas a darle a Dios tus migajas?

Dices darle lo mejor, pero le entregas lo que te sobra, eso no es una mentalidad de reino

Un rey se merece lo mejor

La mayor parte de la gente ve a un rey para pedirle favores, pero sólo porque esa gente es
precisamente eso: el proletariado, gentusa o gentiles que solamente piden

¿Sabes por qué Dios nos hizo reyes y sacerdotes?

Date cuenta y despierta, recibe la revelación que necesitas vivir, naciste de nuevo para
cambiarte a la mentalidad de dar

Ya no es pedir y pedir, comienza a dar y verás como Dios te da lo que tanto esperas de Él

Pierdes el tiempo siendo gentil, pierdes mucho siendo una persona cualquiera, no eres
cualquier persona, eres un hijo de Dios

Redimido para ser mejor hijo que antes

Salvado para salvar a otros
Perdonado para perdonar y pedir perdón
Liberado para liberar a los cautivos

Eres un sacerdote de Jesucristo, eres un servidor de Dios, necesitas entender eso y vivirlo
Sirve a Dios por encima de tu vida propia
Ya es tiempo de tomar tu propósito en serio, no estar de depresivo a cada rato
Madura y enfréntate a tus defectos
Permítele al Espíritu Santo un verdadero cambio en tu vida, uno que te transforme
sobrenaturalmente

Que cada cambio que Dios haga en ti, permanezca para siempre en tu vida, ya no retomes el
camino. Dijo de la comodidad

¿Por qué no creces? Porque quieres seguir cómodo con tu ida, no quieres enfrentarte a
nuevos desafíos
Jesús te hizo rey, no para estar pide y pide ¿en donde queda tu dignidad? Eres un rey, eres
una reina para dar…

Pregúntate: ¿cuándo un rey suplica al César? ¿Cuándo un rey pide favores? ¿Cuándo un
sacerdote actúa conmiseradamente? Si has madurado, has entendido que estamos para
ofrecer a Dios nuestra vida entera

¿Cuándo me has visto hacer algo por una ofrenda de amor? Nací para dar, no para pedir

Soy sacerdote para ministrar a Dios

Sólo los sacerdotes pueden ministrar a Dios

Somos escogidos para dar
Somos sacerdotes para siempre, según el orden de Melquisedec, Jesús es nuestro sumo
sacerdote

Enseñamos a ofrendar, enseñamos a diezmar, enseñamos a sembrar, pero somos los primeros
en hacerlo

Nadie me ha escuchado en esta Tierra enseñar para acaparar

Como sacerdotes cumpliremos las promesas de Dios para nuestras vidas

Hoy traemos nuestro siguiente MANIFIESTO PROFÉTICO, no para profetizar que Dios hará
esto en este año 2022, sino porque nosotros necesitamos ver cumplidas las promesas de Dios
en nuestras vidas, y SÍ, POR DIOS SERÁN CUMPLIDAS, PERO MANIFESTADAS POR
NOSOTROS AQUÍ EN LA TIERRA, PORQUE ES NECESARIO ESPERAR EL REGRESO DE
JESÚS GOBERNANDO LA TIERRA PARA ÉL Y POR ÉL, YA QUE SUYO ES EL PODER, EL
REINO Y LA GLORIA.

1. Creemos en el único Dios omnipotente, omnisciente y omnipresente que ha creado el

universo entero para sus propósitos, Él es YAHWEH, Elohim, Jehová de los Ejércitos y que
nos ha dado a su unigénito para nuestra salvación, no sólo a nosotros, sino a nuestra casa
y descendencia para siempre
2. Decretamos que nosotros y nuestra casa, servimos y serviremos a Jehová para siempre, ya
que nuestra descendencia está marcada en sus postes y dinteles de sus vidas por la
Sangre Preciosa de Jesús
3. Somos sacerdotes del Dios altísimo para siempre, ministramos y serviremos a Dios en
nuestros hogares, en nuestros trabajos, negocios y empresas, en las calles, en nuestra
iglesia y en las naciones del mundo. Somos reyes, por eso peleamos batallas contra las
tinieblas que siempre ganamos por la victoria de Cristo en la Cruz del Calvario.
4. Levantamos una generación sobrenatural que ama y cree en Jesús y en el Espíritu Santo,
hombres y mujeres sin importar la edad y la raza, que viven el llamado del Padre para sus
vidas, haciendo milagros y señales en el nombre de Jesús
5. Creemos más que siempre, en el Poder de la Siembra y la Cosecha, ya que estamos
viendo la Gloria Postrera manifestada sobre nuestras vidas, en la que Jesús se lleva toda la
gloria.
6. Hacemos discípulos a las naciones, construimos Casas de Avivamiento y establecemos la
Iglesia de Jesucristo a través del Ministerio Internacional Aviamiento a donde quiera que el
Espíritu Santo nos envíe a levantar iglesias.
7. Nuestro modo de vida es PROActivo, ya que hemos sido liberados y por eso establecemos
el Reino de Dios en nuestras vidas con PODER Y GLORIA
8. Vivimos para Dios y así elegimos vivir para siempre
9. Declaramos que hacia el norte, el sur, el oriente y el poniente de nuestras vidas diarias,
somos quienes harán correr y predicar la Palabra de Dios sobre nuestras ciudades y
naciones del mundo
10. Al Padre rogamos y suplicamos, pero a los cielos demandamos que traigan a nosotros
todos los recursos necesarios para que expandamos el Reino de Dios en la Tierra, así
como los que nos servirán a nuestras familias para nuestra prosperidad, trabajos, negocios
y empresas, como los que nos seguirán para vivir en la abundancia que Jesús nos da y la
sobreabundancia que el Padre quiere para nuestras generaciones actuales y futuras.
11. Decretamos que las promesas de Dios se establecen a nuestro favor y las reclamamos a
los cielos, que vengan a imponerse en nuestras vidas, pues amamos hacer la voluntad de
Dios y no la nuestra
12. Implantamos la Palabra de Dios en nuestras vidas, violentamos los cielos aquí en la Tierra y
suplicamos que nos prepares para tu regreso Señor a Jesús.