Yo, MARIELA JOSEFINA CASTILLO SUÁREZ, venezolana, mayor de edad, soltera,
domiciliada en la ciudad de Caracas, titular de la cédula de identidad número V.- 6.847.129, así como del Registro de Información Fiscal (R.I.F.) número V068471296, por medio del presente documento declaro que: “Confiero poder general de administración amplio y suficiente en cuanto a derecho se requiere a JOSÉ GREGORIO CASTILLO SUÁREZ, venezolano, mayor de edad, soltero, domiciliado en la ciudad de Caracas, titular de la cédula de identidad número V.- 5.218.842, así como del Registro de Información Fiscal (R.I.F.) número V052188420, para que represente y defienda mis derechos e intereses. En el ejercicio del presente mandato general de administración, podrá el prenombrado apoderado ejecutar en mi nombre operaciones en cualquier institución bancaria o financiera, pudiendo movilizar cuentas en las respectivas instituciones; preparar, presentar, enmendar, ejecutar y retirar todo tipo de aplicaciones, solicitudes, confirmaciones, certificaciones, transacciones u operaciones cambiarias a través de cualesquiera de los sistemas cambiarios que sean establecidos por la normativa aplicable y ante cualesquiera de las autoridades competentes; recibir en mi nombre cualquier suma de dinero o prestaciones, rentas, frutos e intereses que me correspondan por cualquier concepto; celebrar, modificar, resolver o rescindir contratos de todo género; recibir cantidades de dinero o valores que las representen otorgando los correspondientes recibos y finiquitos; otorgar documentos públicos o privados por ante las Oficinas competentes y suscribir los documentos, protocolos y libros que fueran necesarios; gestionar, solicitar, peticionar y hacer declaraciones de todo género por ante los organismos y poderes públicos de la República, dependencias oficiales o entes de la Administración Pública, ya sean nacionales, estadales, municipales; inscribirme en cualquier tipo de registros ante órganos de la Administración Pública; y preparar, suscribir y presentar cualquier tipo de declaraciones tributarias. Igualmente, el prenombrado apoderado podrá defender y sostener mis derechos, acciones e intereses en cuanto a asuntos administrativos de cualquier índole que puedan presentarse; interponer, tramitar y seguir en todas sus incidencias recursos administrativos y/o fiscales de cualquier naturaleza contra decisiones o actos administrativos, emanados de cualquier organismo, oficina o dependencia de la Administración Pública tanto centralizada como descentralizada, así como contra aquellos emanados de autoridades u organismos estatales o municipales, bien sea de acuerdo con lo dispuesto en leyes, decretos, reglamentos, resoluciones y ordenanzas especiales, pudiendo presentar u oponer toda clase de pruebas, conclusiones, informes y argumentos que considere necesarios para la mejor defensa de mis intereses; representarme en consultas, trámites o gestiones de cualquier índole por ante las autoridades administrativas nacionales, incluyendo ministerios y sus dependencias u oficinas sectoriales y regionales, corporaciones o empresas del estado, institutos públicos o autónomos, universidades nacionales, fondos, inspectorías de tránsito como de trabajo, comisiones de cualquier índole así como por ante la Contraloría General de la República y/o Procuraduría General de la República y autoridades estatales y/o municipales; gestionar, tramitar y representarme extrajudicialmente en cobros y acreencias de cualquier índole con personas naturales y jurídicas, así como con cualquier organismo del Estado, pudiendo recibir a mi nombre cantidades de dinero por tales conceptos, otorgando los correspondientes recibos y finiquitos. En fin, el referido apoderado podrá realizar todos los actos de administración que sean necesarios para la mejor defensa de mis derechos e intereses, toda vez que la anterior enumeración es meramente enunciativa, no taxativa y menos aún limitativa, quedando excluida la posibilidad de sustituir este Poder, en todo o en parte”. En Caracas, en la fecha de su autenticación.