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NOMBRE: EYNER ANDRES DUQUE OSPINA

Podemos iniciar con una transcendencia muy importante, y sorprendente en el ultimo

cuarto de siglo la ciencia y la técnica, la economía y la política y cultura. Nos podemos

dar una idea rápida como capturar el desarrollo y la evolución de la ciencia política de

Colombia enfrenta enormes desafíos. Por tratarse de un tema relativamente nuevo, su

dinámica se caracteriza por las vicisitudes de un proceso de fortalecimiento paulatino y

desigual, en el que la complejidad del proceso político del Estado, el desconocimiento y

los temas destacados por sus principales interlocutores (Estado , Profesionales y

académicos nacionales, políticos profesionales, otros profesionales de las ciencias

sociales y jurídicas, etc.), así como las dificultades inherentes a la definición del espacio

teórico y metodológico de la asignatura.

Es así tanto esta evolución que tiene un contraste o choque con las religiones y Desde

una perspectiva religiosa, si en otro tiempo el gran problema al

que debían enfrentarse las religiones era el ateísmo, la situación actual

ha variado notablemente. Los mayores problemas son el indiferentismo y


pluralismo religioso. Dios no interesa, no entra dentro de las preocupaciones

de muchas personas de hoy. Viven la vida sin contar con él, ni siquiera
es objeto de sus conversaciones. Actitudes que han sido descritas como

“pasotas”. La Teología de la muerte de Dios (T. Altizer, Paul Van Buren y G.

Vahanian) han expresado en sus obras que el Dios trascendente ha muerto,


se lo ha tragado el mundo. (Serrano, 2015.)
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Con lo anterior dicho podemos deducir que a menudo, el principal problema que

encontramos al desarrollar la esperanza es la realidad de nuestras vidas. Por mucho que

soñemos que desearíamos poder anhelarlo, la mayoría de las veces nuestras expectativas

deben estar expuestas al duro golpe de la realidad que generalmente rompe lo que

queríamos para el futuro. Nos guste o no, hay sufrimiento en el mundo, nos pasarán cosas

malas y no siempre lo lograremos. ¿Cómo se puede sostener esta confianza en el futuro

sobre la base de tales certezas? Por tanto, para mantener una esperanza plena e

inquebrantable es necesario algo más allá de la realidad, algo que trascienda el mundo

sensible en el que vivimos. Podemos llamarlo Dios, Logos, Tao, Destino, etc., pero el hilo

conductor es que necesitamos tener "algo" superior en lo que depositar nuestra confianza,

en lo que podemos creer aunque no tengamos pruebas. . Ese es el concepto principal de

creencia.

La esperanza como tal, independientemente de nuestra situación actual, es esperar a

que suceda algo bueno en algún momento, a que logremos nuestro objetivo, a que las

cosas se arreglen en algún momento, sin importar cuán doloroso y traumático pueda ser

nuestro contexto. Este tipo de seguridad de creencia no puede ocurrir a menos que esté

bajo el techo de algo más alto. Aquí encontramos el coraje y la fuerza para actuar y seguir

adelante. Como lo define Tomás de Aquino: "Virtud infundida que permite al hombre

tener confianza y plena seguridad de alcanzar la vida eterna, y los medios, tanto

sobrenaturales como naturales, para alcanzarla, con la ayuda de Dios. " Es decir, la

persona sola no puede alcanzar la esperanza. Necesitas ayuda externa, divina.

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