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ORNITOWGIA NEOTROPICAL 7: 177-183, 1996

@ The Neotropiatl Ornithological Society

DENSIDAD y DINAMICA EsPACIO-TEMPORAL DE LAS


POBLACIONES DE CIGÜEÑAS (CICONIIDAE)
EN LOS LLANOS INUNDABLEs DE VENEZUELA

José A. González*

Asociación Amigos de Doñana, Panamá 6, 41012-Sevilla, España.

Palabras claves: Ciconiidae, Ciconia maguari, Jabiru mycteria, Mycteria americana, densidad, dinámica espacio-tem-
poral, llanos de Venezuela.

El marcado régimen estacional sequía-inunda- marcado régimen estacional de sequía-inundación


ci6n que impera en los llanos inundables de Vene- (Ramo & Ayarzagüena 1983). El promedio de
zuela es el factor abi6tico con mayor influencia precipitación anual es de 1653 m m (período:
sobre el ciclo anual y la ecología de la fauna 1969-88). Más del 80% de esa precipitación se
llanera (Ramo & Ayarzagüena 1983). La fuerte recoge entre los mesesde mayo y octubre durante
estacionalidad de las precipitaciones actúa de los cuales la mayor parte del área de estudio se
forma especialmente crítica sobre las aves que encuentra inundada (época de lluvias); el resto
dependen de las zonas húmedas para su alimenta- del año se caracteriza por la escasezde precipita-
ci6n y reproducci6n, las cuales, para poder sub- ciones y la falta de agua (época de sequía). Las
sistir, han de sincronizar sus ciclos vitales con las temperaturas se mantienen bastante uniformes a
fluctuaciones en el nivel de las aguas.Este hecho lo largo del año; el mes más cálido es marzo con
determina la existencia de una íntima relaci6n 28.6 oC de temperatura media y el menos caluro-
entre la época del año y la densidad, distribuci6n so julio con 25.4 °C (período: 1972-86).
y comportamiento de las distintas aves acuáticas El paisaje del área de estudio pertenece al tipo
(KahI1964, Morales et al. 1981, Aguilera 1988). denominado "sabanas de banco, bajío y estero"
En la presente contribuci6n, aportamos datos (Ramia 1967). A primera vista, estas sabanas
referentes a la variaci6n estacional de los patrones presentan una topografía muy plana pero en
de distribuci6n espacial, selecci6n de hábitat, realidad existen ligeros desniveles que provocan
comportamiento social y densidad poblacional que, con la llegada de las precipitaciones, deter-
de las tres especiesde cigüeñas existentes en los minadas zonas no se inunden en absoluto mien-
llanos: el Gabán (Mycteria americana), la CigÜe- tras que otras se inundan a diferentes profundida-
ña Maguari (Ciconia maguan) y el Jabirú (Jabiru des. Según la terminología llanera, se llaman
mycteria), como respuesta a las fluctuaciones bancos a las zonas elevadas de la sabana que
estacionales en el nivel de las aguas. presentan suelos de textura arenosa y que no
llegan a inundarse nunca; los bajíos son zonas
AREA DE ESTUDIO y METODOS que permanecen sin agua durante toda la época
de sequía pero se encharcan superficialmente
El trabajo de campo se llevó a cabo en el Hato
durante la época de lluvias como consecuencia de
El Frío, una finca ganadera de 78,000 ha de
las precipitaciones; los esterosson las zonas más
superficie situada en el Estado de Apure, entre las
poblaciones de El Samán y Manteca!. La wna bajas de la sabana,que se inundan en la época de
se encuadra dentro de los denominados llanos lluvias como consecuencia del desborde de los
inundables o meridionales, caracterizados por su ríos y que mantienen agua hasta bien entrada la
época de sequía (Ayarzagüena et al. 1981). El
* Presentaddress:
Apdo. PostalR18-017,Mirnflores, Lima 18, paisaje del área de estudio se completa con los
Pero. ríos, los caños (brazos de río o anastomosis entre

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FAUNISTIC

un río y una laguna), los préstamos(excavaciones a medida que avanzaba el período de lluvias,
artificiales para la extracción de tierra) y las hasta alcanzar sus mínimos en los mesesde octu-
grandes lagunas permanentes. Una descripción bre y noviembre. El escasonúmero de individuos
completa de las diferentes unidades paisajísticas y observados durante estos últimos meses del año
comunidades vegetales existentes en el Hato El se debió, en gran medida, a que prácticamente la
Frío se encuentra en Castroviejo & López (1985). totalidad de la población estaba concentrada en
Entre febrero de 1989 y diciembre de 1990 se las colonias reproductivas que se hallaban fuera
realizaron recorridos periódicos a lo largo de de nuestros itinerarios (González 1993). La
siete itinerarios (total: 123.8 km) cuyo trazado mayor densidad registrada correspondió a abril
.aprovechaba las pistas de tierra elevadas existen- de 1990 con un valor de 10.5 individuos/km2,
tes en el área de estudio. Cada itinerario fue mientras que la mínima se registró en noviembre
prospectado desde un vehículo todo terreno de 1990, cuando no se observó ningún Gabán en
(velocidad media: 20 km/h) al menos una vez al el área de estudio.
mes, a primeras horas de la mañana o al atardecer La densidad de Cigüeñas Maguari se mantu-
y siempre en días despejados. En cada recorridb vo bastante uniforme a lo largo del año y no se
se registró el número total de individuos de cada observó un patrón claro de fluctuaciones estacio-
especieobservados dentro de una banda de 500 m nales (Fig. 1). El anormal aumento registrado en
a cada lado del itinerario, el tipo de hábitat en mayo de 1989 se debió a la observación de una
que se encontraba cada individuo (bajío, estero, gran bandada pre-reproductiva en las inmediacio-
laguna, caño, banco,...), y el tamaño y composi- nes de una de las colonias de cría, que elevó
ción específica de cada bandada en caso de que considerablemente el número de individuos
los individuos observados formasen parte de un censados durante dicho mes.
grupo. La población de Jabirús exhibió un patrón de
Para el análisis de datos, ya efectos de consta- fluctuaciones de densidad algo similar al del
tar la posible existencia de variaciones estaciona- Gabán, aunque siempre en números muy in-
les en los distintos parámetros estudiados, se feriores a éste.Los valores de densidad más eleva-
dividió el ciclo anual en cuatro períodos: época dos correspondieron a los últimos meses del pe-
de sequía real (enero-abril), época de lluvias e
ríodo de sequía. Tanto en 1989 como en 1990 se
inundación (julio-octubre), entrada de lluvias
registraron fuertes máximos durante el mes de
(mayo-junio) y salida de lluvias (noviembre-di-
abril, cuando toda la población se agrupaba
ciembre). Teniendo en cuenta que los períodos
alrededor de las pocas charcas que conservaban
de entrada y salida de lluvias representan etapas
agua en esas fechas. Las densidades mínimas
intermedias de transición entre sequía e inunda-
se registraron entre los meses de septiembre y
ción, y podrían enmascarar las diferencias reales
noviembre, coincidiendo con el comienzo del
existentes entre las dos grandes estaciones, no
período reproductivo de la especie en los llanos
fueron tenidos en cuenta a la hora de establecer
inundables (González 1996).
las comparaciones estadísticas,aunque sí se inclu-
yeron en el cálculo de los totales anuales. Selecciónde hábitat. Se observaron diferencias
estacionales altamente significativas en cuanto al
uso de los distintos hábitats por parte de los
RESULTADOS Gabanes (X2= 1029.6, ?<0.001). Las lagunas y
Fluctuaciones de densidad. La población de Gaba- préstamos fueron los hábitats más frecuentados
nes mostró marcadasvariaciones de densidad a lo durante los meses de sequía (72.9% de los
largo del año (Fig. 1). ws valores máximos se Gabanes; n = 2322), mientras que en la estación
obtuvieron hacia el final del período de sequía, de lluvias fueron utilizados por sólo e126.1 % de
especialmentedurante 1990, año en el que se cons- los individuos observados (n = 909). Con los
tataron dos fuertes picos en los mesesde febrero esteros y los bajíos sucedió exactamente lo
y abril; en 1989 las mayores densidades aparecie- contrario. Durante los meses de sequía apenas
ron un poco más tarde, coincidiendo con la llega- fueron usados (7.6 % y 0.2 % de los Gabanes,
da de las primeras lluvias. A partir del mes de respectivamente), mientras que durante la época
julio la densidad de Gabanes fue disminuyendo de lluvias se convirtieron en los hábitats más

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)MMUNJCATIONS

N° indiv./km2

12

M. americana
10
c. maguari

J. mycteria
8

'6 ~

A
41
/
2 ~

~
o
FMAMJJASONDEFMAMJ JASOND
I 1989 I 1990 I

FIG. 1. Fluctuaciones mensuales en la densidad poblacional de las tres cigüeñas estudiadas en el Hato El Frío.

frecuentados por la especie (38.8 % y 16.0% de cambio, apenas fueron utilizados durante la
los individuos; Fig. 2). estaci6n lluviosa, en la cual los Jabirús prefi~ie-
El tipo de hábitat seleccionado por las Cigüe- ron los esteros {65.5 %) y, en menor medida, los
ñas Maguari también varió significativamente en bajíos {15.7 %).
función de la época del año (X2= 403.06, Patrones de asociación. Los Gabanes se mostraron
?<0.001). Las lagunas y préstamos fueron, con como aves altamente gregarias. Se observaron
gran diferencia, los hábitats más utilizados en el bandadas de forrajeo compuestas por más de un
período de sequía, siendo visitados sólo acciden- centenar de Gabanes {hasta 670 individuos en
talmente durante el resto del año. Los esteros y una ocasi6n), generalmente en uni6n con otras
bajíos inundados resultaron ser los hábitats más especiesde aves ciconiiformes. Sin embargo, este
frecuentados durante la época de lluvias. Los carácter gregario vari6 de forma altamente signi-
bancos también fueron utilizados por las Cigüe- ficativa en relaci6n a la época del año
ñas Maguari como hábitat secundario de alimen- {X2= 1036.1, P<0.001). Durante la época de
tación durante los meses lluviosos (Fig. 2; en sequía se observ6 un claro predominio de los
"otros"). grupos de más de 50 individuos y de 11-50 indi-
Los Jabirús mostraron una gran semejanza viduos {Fig. 3), que representaron el 77.2% de
con los Gabanes en sus preferencias de hábitat y los Gabanes observados. En la estaci6n lluviosa,
en la variación estacional de este parámetro (Fig. en cambio, las mayores frecuencias correspondie-
2). La diferencia entre los hábitats utilizados por ron a individuos solitarios {35.6 %) ya grupos
esta especie en sequía y en lluvias resultó alta- compuestos por menos de 10 individuos
mente significativa (X2= 575.69, ?<0.001). Du- {32.2 %).
rante la estación secael 72.3 % de los individuos La Cigüeña Maguari fue la especie menos
emplearon las lagunas y préstamos como áreasde gregaria de las tres estudiadas. Los individuos
descanso y alimentación. Estos hábitats, en solitarios predominaron durante todo el año

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'AUNISTICS

Caños -Bajlos Esteros -Lag. y Prést -Otros

10

(/)
o
~
"O 60 l
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c:

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Q)
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-
c:
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() 20
...
o
Q.
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o~ Ii [~
Mycteria Ciconia Jabiru Mycteria Ciconia Jabiru
Estación seca Estación lluviosa

FIG. 2. Variación estacional en las preferencias de hábitat por parte de las tres cigüeñas estudiadas. Se represent;
el porcentaje de individuos observado en cada tipo de hábitat a lo largo de los itinerarios de censo.

(42.6 %; n = 1322), siendo poco frecuentes los que, en el global anual, los individuos empareja-
grupos de tamaño mediano o grande (Fig. 3). La dos constituyeron la clase predominante (37.7 %;
única excepción a esta tendencia fueron las Fig. 3).
bandadas pre y post-reproductivas observadas en
las inmediaciones de las colonias de cría. Se apre- DISCUSION
ciaron diferencias significativas en el comporta-
Fluctuaciones de densidad. La poblaci6n de Gaba-
miento gregario de las Cigüeñas Maguari aunque
nes y Jabirús asentada en el área de estudio
no resultaron tan acusadascomo las observadas
presenta máximos de densidad hacia el final de la
en las otras dos cigüeñas (X2= 15.85, 0.001 < P
época de sequía, con mínimos durante el período
< 0.01). de salida de lluvias. Aguilera (1988) encuentra
El comportamiento social de los Jabirús fluctuaciones similares para la comunidad de
también varió estacionalmente de forma signifi- ibises (Threskiornithidae) del Hato El Frío, con
cativa (X2= 206.36, P<0.001). Durante los meses
máximos en el mes de marzo, cuando el área
de sequía predominaron los grupos de 11-50 inundada es menor, y mínimos en octubre y
individuos y los grupos de más de 50 individuos noviembre, coincidiendo con los mayores niveles
(la bandada más numerosa estabacompuesta por de inundaci6n.
166 Jabirús), mientras que durante la estación Morales et al. (1981), en la regi6n de los
lluviosa los individuos solitarios predominaron M6dulos de Mantecal (a 30 km de nuestro área de
sobre los grandes grupos. A lo largo de todo el estudio), constatan que la densidad de aves
año y especialmente durante las épocas de entra- piscívoras se mantiene en valores altos durante la
da y salida de lluvias se observó a un elevado nÚ- estaci6n secahasta que la biomasa de pecesdispo-
mero de Jabirús asociados en parejas, de forma nible comienza a disminuir, momento en el cual

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~
SHORT COMMUNICATIONS

las aves emigran hacia otras zonas; durante el


resto del año, la densidad de aves piscívoras
permanece baja, con un segundo pico al comien-
zo de la estaci6n lluviosa. Este patr6n de fluctua-
ciones resulta ligeramente diferente al observado
por nosotros para los Gabanes y Jabirús del Hato
(/)
el Frío, debido probablemente a que los M6dulos o
::¡
de Mantecal se encuentran sometidos a un mane- -0
jo artificial de los niveles de agua mediante ">
-0
diques y compuertas. c:
Resulta especialmente significativo el valor de
Q)
5.3 Jabirus/km2 registrado en abril de 1990, con -0

un total de 384 Jabirús observados en un solo día Q)


"m
de censo, lo cual constituye un número excepcio- -
c:
nal para una especie relativamente poco abun- Q)
o
dante como ésta (Ogden & Thomas 1985~Luthin ...
o
1987). no
La poblaci6n de Cigüeñas Maguari presenta
fluctuaciones muy poco acusadasa lo largo del
año. La constataci6n de su presencia en el área de
estudio durante todo el ciclo anual, incluyendo la
época de sequía,contradice el hábito migrador de
esta especie en otras regiones de Venezuela.
Thomas (1987) observa una importante disminu-
ci6n en el número de Cigüeñas Maguari durante
los mesesde sequía en los llanos centrales (Estado
Guárico), y propone que la especie debe migrar
hacia otras zonas húmedas al Sur del ecuador FIG. 3. Variación estaciona! en el comportamiento
durante dicho período. Esta no parece ser la gregario de las tres cigüeñas estudiadas.

pauta seguida por las Cigüeñas Maguari en los


llanos meridionales (Estado Apure) donde, inclu-
so durante una sequía tan intensa como la de
1990, existi6 siempre en la zona una poblaci6n componen el paisaje del llano inundable. La hete-
remanente cuyas densidadesno difirieron signifi- rogeneidad ambiental existente en los llanos y
cativamente de las registradas en época de lluvias las diferencias estacionales de productividad,
(t-test, ts=1.18, P<0.05; González 1993). El hecho determinan el que exista una utilización secuen-
de que nuestro área de estudio se encuentre en cial de los diferentes hábitats a lo largo del año
una zona más húmeda que los llanos centrales, por parte de las aves (Aguilera 1988).
unido a la existencia de pequeñas tapas (diques de Las lagunas y los préstamos constituyen los
tierra artificiales) que interrumpen el curso de los hábitats más frecuentados por las tres cigüeñas
caños y aumentan la disponibilidad de agua durante los mesessecos.A medida que avanza el
durante el período de escasez, podrían ser las período de sequía, la profundidad del agua en
razones que expliquen el carácter residente de las estas zonas disminuye ( <50 cm), lo cual las
Cigüeñas Maguari asentadasen el Hato El Frío, convierte en hábitats idóneos para las técnicas de
a diferencia de otras poblaciones establecidasmás captura utilizadas por las cigüeñas (Thomas
al Norte o en regiones más secas. 1985), a diferencia de los bajíos yesteros que, al
Selecciónde hábitat. Las tres cigüeñas estudia- secarsepor completo, resultan inadecuados. Por
das mostraron un patr6n muy similar de selec- otra parte, el descensodel nivel de agua hace que
ci6n de hábitat y exhibieron diferencias estacio- en lagunas y préstamos se concentren grandes
nales altamente significativas en cuanto a la utili- cantidades de peces,muchos de ellos moribundos
zaci6n de las distintas unidades fisiográficas que debido a la anoxia (Machado-Allison 1987), que

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constituirán la basede la dieta de las tres cigüeñas ción de Gabanes y Jabirús tiende a concentrarse
durante los meses más secos{González 1993). alrededor de las lagunas y charcas que conservan
Con la llegada de la época de lluvias el nivel algo de agua. El hecho de que estos hábitats
del agua sube,convirtiendo a las lagunas y présta- alberguen densidadesmuy elevadasde pecesfavo-
mos en lugares poco apropiados para la búsqueda rece a forrajeadores táctiles como los Gabanes o
del alimento ya que la profundidad del agua visual-táctiles como los Jabirús (Thomas 1985).
supera generalmente los 100 cm y las presasestán La concentración de un gran número de indivi-
demasiado dispersas. En cambio, los esteros y duos en una zona donde el alimento es temporal-
bajíos, que permanecieron secos durante buena mente muy abundante hace desventajosa la de-
parte de la época de sequía, se encharcan super- fensa de territorios, favoreciendo la formación de
ficialmente debido a las precipitaciones y al des- bandadas de forrajeo (Brown 1964, Kushlan
borde de los ríos y caños; las aguas de desborde 1978).
aportan a los esteros una gran cantidad de peces Las tendencias gregariasdel Gabán y el Jabirú
que utilizarán este hábitat para su reproducción en época de sequía contrastan con el comporta-
{Taphorn 1988); los anfibios y la mayor parte de miento de las Cigüeñas Maguari, que prefieren
los invertebrados acuáticos también utilizan los mantenerse en solitario tanto en época de sequía
esteros y bajíos para reproducirse durante los como en época de lluvias, con la única excepción
meses de lluvias {Kushlan et al. 1985). Así pues, de las bandadas pre y post-reproductivas que se
en estos hábitats encuentran las cigüeñas abun- forman durante los meses de mayo-julio y sep-
dante alimento y profundidades adecuadaspara tiembre-diciembre en las inmediaciones de las
sus técnicas de alimentación, lo que explica el colonias de cría (Thomas 1986, González 1993).
hecho de que sean los ambientes más frecuenta- Este carácter solitario podría estar relacionado
dos en la época de lluvias. con el hecho de que la Cigüeña Maguari es un ca-
La Cigüeña Maguari suele utilizar las zonas zador eminentemente visual (Thomas 1985), lo
completamente secascomo hábitat secundario de que hace necesariala defensade un mayor territo-
alimentación. Los bancos en época de lluvias, o rio por parte de cada individuo (Goss-Custard
los bajíos y esteros en época de sequía, son 1970).
frecuentados por esta especie,a diferencia de las Resulta significativo el elevado número de
otras dos cigüeñas estudiadas que no utilizan Jabirús observados en parejas a lo largo de todo
nunca para alimentarse los ambientes despro- el año, especialmente durante las épocas de entra-
vistos de agua. da y salida de lluvias. Los datos existentes sobre
Patrones de asociación. En general, todas las aves la biología reproductiva de esta especie parecen
zancudas defienden a su alrededor una distancia indicar que los Jabirús forman parejas estables
individual que puede agrandarse o reducirse que permanecen fieles durante varias temporadas
dependiendo de las condiciones en que el ave se de cría (KahI1971, Thomas 1981). El hecho de
encuentre {Kushlan 1978). Durante la época de que en nuestro área de estudio se pueda observar
lluvias la mayor parte del área de estudio está un gran número de parejas a lo largo de todo el
inundada y el alimento se encuentra distribuido año, apoya la idea de una fidelidad que se man-
de un modo uniforme. Las poblaciones de cigüe- tendría no sólo durante la época de cría sino
ñas tienden entonces a dispersarse por toda la también durante el resto del ciclo anual (Gonzá-
región y los individuos prefieren alimentarse en lez 1996).
solitario o en pequeños grupos. En estas condi-
ciones, las aves solitarias suelen defender agresi-
AGRADECIMIENTOS
vamente su territorio de alimentación frente a
otros individuos que intenten aproximarse {Gon- Estoy en deuda con la familia Maldonado, pro-
zález 1993). pietaria del Hato El Frío, por su gran hospitali-
Esta territorialidad va disminuyendo a medi- dad. Un agradecimiento especial a F. Ibáñez, C.
da que avanza el período sequía, se reduce el nú- Lasso, P. Quiñones y A. Aguirre por su ayuda en
mero de zonas con agua disponible y aumenta la el trabajo de campo. c. Ramo, E. de Juana y dos
densidad de peces en las áreas de alimentación. revisores anónimos enriquecieron con sus sugL'-
Así, durante los meses más secos, toda la pobla- rencias las versiones previas del manuscrito.
SHORT COMMUNICATIONS

Durante la realización de este estudio conté con Luthin, C. 1987. Status and conservation priorities for
el apoyo económico de la Asociación de Amigos the world's stork species. Colonial Waterbirds 10:
de Doñana y la Universidad Complutense de 181-202.
Madrid. Machado-Allison, A. J. 1987. Los peces de los llanos de
Venezuela: un ensayo sobre su historia natural.
Universidad Central de Venezuela, Caracas.
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