Universidad Católica del Maule

Magister en Educación Mención Currículum y Administración

Informe Escrito:
“Carencias en la formación docente
para una educación inclusiva”

Estudiante:

Ana Cifuentes Chacón

Docente:

Andrew S. Philominraj
 Introducción

Durante los últimos años el concepto de inclusión ha tomado cada vez mayor
protagonismo en el contexto de la educación, esto ha quedado en evidencia en las
diferentes políticas públicas y gubernamentales que se han implementado durante el
último periodo, todo con la finalidad de poder atender a la diversidad de estudiantes que
están presentes en la actualidad en las aulas de nuestro país. Este tipo de educación
pretende que todos los estudiantes aprendan juntos, independiente de sus condiciones
sociales, culturales, étnicas religiosas, entre otras, en un ambiente donde esté presente
la equidad y respeto por su entorno.

Sin embargo, a pesar de que se está trabajando para atender a la diversidad todavía
se logra evidenciar algunas carencias con respecto a la formación de los docentes tanto
antes de egresar como cuando ya están ejerciendo su profesión. Estas carencias tienen
que ver con aspectos que tienen relación con la valoración de la diversidad, evaluación
de los estudiantes y las competencias que debe poseer un profesional de la educación
para poder generar un ambiente inclusivo en las salas de clases.

En este trabajo se analizarán tres fundamentos como lo son; la valoración de la

diversidad, evaluación del desempeño escolar y las competencias necesarias que debe
poseer el profesorado para atender la diversidad e inclusión, estos argumentos tienen
relación con las carencias que se logran evidenciar en la formación docente para generar
una educación inclusiva. Es por ello, que para esto se plantea el siguiente objetivo que
consiste en analizar las carencias presentes en la formación docente respecto a la
educación inclusiva en los diferentes establecimientos educacionales chilenos.

1. Valoración a la diversidad
La diversidad es un aspecto que obliga a los docentes a replantearse constantemente su
forma de enseñanza, esto para lograr un aprendizaje efectivo en todos los estudiantes. Sin
embargo, por lo general los docentes ven la diversidad como un aspecto desfavorable,
cuando como meta pretenden conseguir el mismo objetivo con todos sus estudiantes sin
considerar las características individuales de cada uno de ellos.

Pero esta poca valoración viene desde la formación como docentes, ya que cuando
se orientan a los docentes en las universidades no se considera ni siquiera la diversidad de
los propios estudiantes, no existe ningún tipo de inclusión intelectual dentro de la carrera
de pedagogía. No existen adaptaciones de pruebas para estudiantes de pedagogía que
presenten diagnósticos como TDA, TEA o TEL por ejemplo. En General en la educación
superior existe una valoración negativa frente a la diversidad, ya que ese docente que está
en formación lo más probable es que no alcance el logro de los objetivos planteados en el
currículum.

Por otro lado, dentro de las mallas curriculares de algunas universidades, una gran
mayoría de éstas no cuentan con la implementación de un ramo sobre la diversidad y
cómo abordarla en la realidad laboral, en cuanto a este punto es realmente necesario
entregar las herramientas a los docentes para que ellos puedan tener las competencias
necesarias para enfrentar la situación dándole una valoración positiva a la diversidad,
pero ¿Cuál es el punto de partida de las competencias de los docentes?, según el
proyecto llamado “Formación del profesorado para la educación inclusiva” son valores
que se les entregan a docentes en formación, entre ellos: “valorar la diversidad del
alumnado, apoyar a todos los estudiantes, trabajar con toda la comunidad y fomentar
el desarrollo profesional y personal” (2012, perfil profesional del docente en la
educación inclusiva Odense). Es a partir de esto, que cada docente debe trabajar para
una educación inclusiva y de esta manera lograrà valorar positivamente la diversidad
del alumnado, asumiendo sus diferencias como un recurso y un valor dentro de la
educación.

2. Evaluación el desempeño escolar

Otra carencia en la formación docente para la educación inclusiva es la evaluación de
desempeño escolar; ¿Cómo saber si todos nuestros estudiantes aprendieron? ¿Está bien
implementar una evaluación “equitativa”? en la cual las estrategias que se utilicen sean
de organización y ambiente en el aula o ¿Será mejor tomar decisiones curriculares o
didácticas?.

Existen marcos legales como la Ley de Inclusión Escolar, que busca generar
condiciones para el avance hacia un sistema educacional más inclusivo, también a
través del Decreto Nº 170/2009, el cual busca dar importancia al trabajo colaborativo y
a la co-enseñanza, actualmente a través del Decreto Nº 83/2015 los docentes están
impulsados a tomar decisiones curriculares más contextualizadas y a través de la
diversificación desarrollar variadas alternativas para abordar el currículum, de esta
manera hacemos que todos nuestros estudiantes sean partícipes del contenido que
estamos tratando. Es por esto que debemos analizar nuestra práctica, evaluando si
nuestros estudiantes están aprendiendo de la forma en que les enseñamos y si estos
aprendizajes fueron o no significativos.

Para esto se debe utilizar una amplia gama de recursos didácticos, evaluar el
aprendizaje y la enseñanza para mejorarlo, evaluar a corto, mediano y largo plazo,
evaluar de forma continua para reorientar y cambiar estrategias, establecer prioridades
con los objetivos a evaluar, acomodar la enseñanza y adecuar los materiales, propiciar
diálogos y situaciones evaluativas destinadas a la reflexión de las diferentes culturas y
los distintos tipos de aprendizaje de cada uno de los estudiantes.

Todo esto ayuda a poder abarcar de mejor manera la diversidad de estudiantes en

cuanto a contenidos pero ¿Cómo se evalúan estos aprendizajes de forma diversificada?
Existen muchos métodos, no obstante cómo elegir el que evalúe de forma diferencial a
cada estudiante, es aquí donde entra el nuevo Decreto Nº 67 , el cual permite al docente,
identificar los niveles de logro de aprendizajes curriculares, que alcanzan aquellos
estudiantes que por diferentes necesidades educativas están en una situación temporal o
permanente, distinta de la mayoría, de esta manera y con este nuevo decreto ir
disminuyendo esta carencia y aumentar las evaluaciones diversificadas en donde se
pueda saber cuál es el aprendizaje real de cada uno de los estudiantes.
3. Competencias del profesorado para atender la diversidad e inclusión

La formación de profesores con relación a la educación inclusiva, es un tema

fundamental para poder avanzar hacia una educación igualitaria, equitativa y de calidad,
es por eso que otro punto importante con respecto a las carencias que tiene la formación
docente, es el tema de las competencias que adquieren o tienen los docentes para
enfrentarse a una educación inclusiva en las aulas del siglo XXI, dentro de los cuales se
encuentran carencias en el diseño de innovaciones en el quehacer docente, la
flexibilización y diversificación de las experiencias de aprendizaje y la incorporación de
la TIC´S en la planificación de las clases (Garcia, Herrera & Venegas, 2018). Estas
competencias ponen de manifiesto la importancia de generar instancias en las que los
formadores de profesores puedan analizar, criticar e intercambiar opiniones acerca de su
práctica pedagógica, incorporando las herramientas necesarias para que todos los
estudiantes adquieran los mismos conocimientos y se beneficie toda la comunidad
escolar, siendo unas de las herramientas el trabajo colaborativo y articulado entre los
profesionales, como también el diseño de una planificación y práctica universal, con la
finalidad de desarrollar propuestas pedagógicas contextualizadas, desarrollo de mejoras
e identificación de barreras que obstaculizan el aprendizaje de todos los estudiantes.

Otra competencia que debería tener el docente para atender a la diversidad es

analizar críticamente y comprender las políticas públicas nacionales que orientan a la
educación inclusiva para promover el desarrollo de culturas y prácticas inclusivas en el
sistema educativo. De tal forma que el profesorado ejecute de forma responsable las
actuales políticas en materia de inclusión, es por esto que la formación del docente debe
proporcionar modelos y herramientas adecuadas para la realización de esto.

También está la competencia de la responsabilidad profesional, la cual también

presenta deficiencias debido a que algunos docentes solo se quedan con la enseñanza
tradicional y no buscan desarrollar la capacidad de transformación para poder llegar a
ser un docente que reconoce y valora su acción pedagógica, buscando e integrando
herramientas y conocimientos actualizados para mejorar su ejercicio profesional.
 En relación a la inclusión educativa existe la competencia de liderazgo, la cual
también presenta debilidades en la formación de profesores, ya que muchos de los
docentes poseen bajas habilidades interpersonales, no sabe manejar conflictos y toma
decisiones inoportunas en cuanto a la diversidad presente en los establecimientos y no
cumple con uno de los requisitos fundamentales de una práctica inclusiva que es crear
un clima de confianza y comunicación entre profesor-alumno, profesor-familia.

Se debe considerar también que en la actualidad algunos docentes carecen de

competencias interactivas, esto es importante en la formación de profesores, ya que son
ellos los que deben entender, apoyar y sobre todo ser empáticos con el estudiante;
además de crear un ambiente óptimo para una buena convivencia, promover la
solidaridad y la cooperación con aquellos estudiantes con dificultades.

Sin embargo, uno de los desafíos fundamentales para disminuir estas carencias es
construir al desarrollo de las competencias que los formadores de profesores requieren
para una pedagogía inclusiva, como también fortalecer la eficacia de la enseñanza en las
aulas.

Conclusión

Como propone la UNESCO (2015), es necesario replantear los fines de la educación y la

construcción de los conocimientos en un mundo cambiante y complejo, y para ellos la
figura de los docentes seguirá siendo factor de cambio y transformación.

El desarrollo de la inclusión necesita a docentes que crean en lo que están haciendo,

que transmitan valores, que posean una actitud positiva, estos son aspectos esenciales que
debe tener todo docente para ir en pro de la inclusión de todos los y las estudiantes. Esto
exige que la formación de los futuros profesionales de la educación sea modificada, con el
propósito de construir una sociedad más justa e igualitaria, donde todas las personas
puedan tener mejores oportunidades para su desarrollo integral.

En lo anteriormente expuesto, se logra visibilizar algunas de las carencias presentes

en la formación docente que tienen directa relación con la generación de una educación
inclusiva la que se logra observar en las prácticas pedagógicas al interior de la sala de
clases. Los profesores deben ser responsables de ejecutar las políticas públicas, crear
condiciones para una escuela sin barreras e inclusiva.

En relación con lo antes mencionado, es fundamental que los docentes sean capaces
de considerar la diversidad como una oportunidad dentro del aula en donde los estudiantes
sean enriquecidos con las diferentes estrategias, metodologías, culturas, pensamientos, etc.
Así como también debe existir una evaluación al desempeño escolar diferenciada la cual
pueda realmente medir el aprendizaje de cada estudiante. Es así que, los docentes lograrán
las competencias necesarias para atender a la diversidad, ya que en nuestro país falta tomar
más conciencia de los que es la diversidad e inclusión, ya que por ejemplo no se enseñan
otros tipos de idiomas (mapudungun, aymara), faltando reconocimiento por el otro.

Referencias

Agencia Europea para el Desarrollo de la Educación del Alumnado con Necesidades

Educativas Especiales, (2012) .Perfil profesional del docente en la educación
inclusiva Odense

Calvo, G. (2013). La formación de docentes para la inclusión educativa. Páginas de

educación, 6(1), 19-35.

Fernández Batanero, J. M. (2013). Competencias docentes y educación inclusiva. Revista

electrónica de investigación educativa, 15(2), 82-99.
García-González, C., Herrera-Seda, C., & Vanegas-Ortega, C. (2018). Competencias
docentes para una pedagogía inclusiva. Consideraciones a partir de la experiencia
con formadores de profesores chilenos. Revista latinoamericana de educación
inclusiva, 12(2), 149-167.

León, T. C., & Lobos Gormaz, A. (2019). Profesores nóveles de enseñanza básica:
Dilemas, estrategias y obstáculos para abordar los desafíos de una educación
inclusiva. Revista latinoamericana de educación inclusiva, 13(1), 37-53.

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https://www.ayudamineduc.cl/ficha/en-relacion-la-evaluacion-diferenciada-5

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Presutti, F., & Armijo, P. C. FROM TRADITION TO INNOVATION IN TEACHER

TRAINING INSTITUTIONS Project reference number: 573685-EPP-1-2016-1-
ES-EPPKA2-CBHE-JP La educación inclusiva en la formación inicial docente en
Italia y en Chile.