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* sy: $5 HENRI LEHMANN P _ LAS CULTURAS © PRECOLOMBINAS ~ ‘Titulo de la obra original: ss INTRODUCCION las crnuesnions ralcotoumennes resses Universitaires de France, Parts, tae LAS CULTURAS PRECOLOMBINAS ‘Traducida de la segunda edicién, 1958, por MARIANA PAYRO DE BONFANTI SR rile cheaica eevvo: a cargo ve puteo mnarovicxas Desde la iniciacién del siglo xvi, cuando se difun- Lig por toda Europa Ia noticia del descubrimiento He un nuevo continente, se produjo gran curiosidad los objetos que los primeros navegantes traian de janas tierras. Esas piezas se hallaban, sin embargo, a alejadas de las formas convencionales de la épo~ Fa que apenas se vio en ellas otra cosa que un extra~ ‘agante derroche de materiales preciosos en chuche- ias de salvajes. El primer europeo que aprecié su valor puramente alemin Durero. En Decimoprimera edicién: febrero de 1977 a sus vasal Durero escribe al respecto en su diario: toda clase de armas, excudos, bombardas, sorprenda Trabajos arqueolégicos PANT ele, curios yexiduranstavics Go noche | a ee MNT Ubjeies de divers uso, muche MM) jos teebsics srqucolégicos rvalisades en Arsdriea detente BUM Tai fueron ‘ebjecor sorprendenses. TAR jg 8sinoe ereints sfior han promovido wna refarme soul ds SPTIRIA eslss precioesn, Rabidndossan ctimado (MM eronolesi correspos lience 4 las cultucas peecolonbinsy pelea Eo mi vids be vieo nads que boys regiiiigiedscto de un sislo de ix vestisaciones, En México, por éjaies tanto mi corazin com: coms, Pees be concede blo, # dencmina shors “medias” o “de formacién’” a les eul- evils otjicce artificisies y me ha scombradolM gra que en otro tiempo se colificabs de arcaless, Ee Amiéries util de los hombres de lot paises extrafos | fal Sue results atm mix elocvente el caso de Ia cultura de | ‘Tiahuanaco: hace algunos afior x Ia tenia por una de ta nis antiguas del continenté; en la actualidad se sabe que no ® Hem sino a Laie antes de la conquista incaica, vale : decir, hacia el siglo x1 de nuestra era. Se aceite de la dence de Durero son muchos fal Betas nuevas concepciones no dcben induci¢nos a subesti- América. una sola obra donde se trata de manera extes ‘Va la arqueologia precolombina: la de Beuchat. Pe blicada en 1912, se la considerd en su momento ob} tan necesaria como monumental. Sin embargo, Ihabiendo cesado de progresar los estudios sobre materia, el manual de Beuchat se encuentra completamente envejecido. En Francia, por otd parte, no ha aparecido ninguna actualiz ral del tema, No pretendemos llenar esta laguna dentro de los estrechos limites de este trabajo. Bien hubiér: -querido, para dar una idea del estado actual de to - conocimientos relativos a la América precolombina en un estudio francés moderno tan exhay como el de Beuchat. A falta de una obra ¢ hemos debido recurrir a diversas p que tratan aspectos particulares, y no especializadas se han procurado abundantes objeto, ry del mayor interés, con propésitos comerciales, La primera excavacién cientifica en América se ef Gurance ls vegunda mitad del siglo xvi, El médico narmah francés Eugene Dombey, envisdo al Perd por Luis XVI, manecié alli de 1778 a 1785 y realiz6 excavaciones, Sys lecciones se encuentran en el Museo del Hombre, de P, y también en Madrid. Durante el siglo xm, otros arqued Angrand, de Cessacy Wiener, Ber, Charnay, formaron col ciones peruanas y mexicanas que figuran Museo del Hombre, Todos ellos recogieron un material tremadamente rico y variado, pero omitieron revelar las diciones de yacimiento, Excepto Jos trabajos de Seler y de Boas, que siempre p den servir de ejemplo, Ia investigacién arqueoldgica se tuvo en estado anirquico hasta la primera guerra mund Fue en el Perd, con las excavaciones de Uhle, y en Maxi especialmente en Teotihuscin, donde se comenzé a ‘metédicamente. Los mejores ejemplos de excavaciones i ficamente conducidas ton las practicadas por Caso y mds tat Por Acosta, en Monte Albin, lo mismo que las de Vail ‘en diversos sitios del valle de México, Se distinguen dos clases de excavaciones: 1) E ayaciin de antiguos edificios arquitect6nicos d rruidos que se presentan con el aspecto de monti cubiertos de una vegetacién exuberante; 2) E Yaciones en las cercanias de aclomeraciones anti! ¥y artistas que rindieron homenaje a los indiog in embargo, no existe en francés =i ns mat el esfuerzo de nuestros predeccsores; tanto mis cuanto fque an hoy trabajamos sobre la bave de sus clasficaciones, En un comienzo, por ser totalmente deficientes los datos téricos, Ja unica fecha cierta era la de la conquista, Gradual mente se ha logrado jalonar Ia prolongady historia de América intos de referencia cada vez mas orectsos. Los descu~ brimientos contemporineos acerca de ta radiactividad de ma- tefias organicas tales como el carbén vegetal, la madera o las ‘asmentas, permiten inclusive revisae, quizis definitivamente |) envesta oportunidad, la deverminacids de la edad de los monu~ mentor. Se ha enssyado el método en construcciones egipcias fechadas; el resultado ha sido satisfactorio. Como todo nuevo miétodo, éxte ain se halla sujeto a un margen di do w lo determine en forma estricta permitira ibm cientificamente exacta de la situacién en Amés La bisqueda de vestigios precolombinos comenzé ya en la poca exspafola, pero no guiaba a los primeros excavadores ¢L ‘ters de a ciencia, Al referie Ia costumbre india de emterrat tos jefes con sus fabulosos resoros, los eronistas swicitaron Ia codicia de los aventureros, que s¢ dedicaron fs ‘Mente a localizar antiguas tumbas de Colombia tl fin de despojarlas del metal precios que tenet, También en México, pese a que alli los ENSAYO DE CORRELACCION CRONOLOOICA DE De fasibn de conserve sin de ciud dee Expansionins ‘Teotthusedn 4 Monte Albi 3 Paenplons- “Teotthuscdn 3 Monte Albin 3] —Armle (@apoceca) Teouhusedn 2 Hiyactees 2) Teochusein 1 tenes Alb 2| tls bs sal tte fon em en sitios donde se acumularon por espacio de sig Cantidades de desperdicios y objevos desechados. el primer caso se comienza por climinar la veg cién y cl humus, se buscan después los elementos d construccién que han permanecido en su sitio: o pe lienzos st pared, etcétera, Se los consolid 8e reconstituyen las partes del edificio que de 4 deducen Idgicamente, Para excavar una ac an si ali LAS CULTURAS ANTIGUAS DE MexIco y Pere Pert rb Pera mi Yecetls | retin | cove | cova | Ste a | } Inca de Inca | inca ahs (chim {2} Cascay{ te enh Cabin | chind | chaneap cand | epgeat-| “Ancin’ | ex mado ae iahuanaco | Tishasnsco| clinic | de Is cone Pacheco Pueari | Moshics B y Tepen |-Tishuansco| Mochica | Lima | Nazca B em | anciguo fcuay A | Glinaza seca A Tad | “ye x Chirips CChanapate | Salinar Necrépatis ‘Chanel a Blanco havin |Cupimigae | cbse sje dancin | Caveenss antiguo pero Chiles? mu sr mente de una cronologia provisional que debest rectificarse a medida que se produzcan deseuby Re guo) Ibe iniciucién| La Perea de Is agricul] Focus Pree Diablo | Chuptewsro acts | Focus | Tepexpin lacién de desperdicios se efectiia un corte del terreno. que permica estudiar de arriba abajo los depésitos cada vez més antiguos. Merced a la observacion de todos los detalles, merced a una minuciosa estrati- grafia, se logra distinguir las diferentes fases de la evolucién industrial y social en un mismo sitio, Los conocimientos adquiridos en cada tna de las culturas de México y del Perit permiten establecer ahora un cuadro comparativo de esos dos grupos de culturas (véase el cuadro 1). Por razones de orden prictico, no hemos de ajus- tarnos estrictamente a ese plan. Los periodos mas antiguos, aquellos que figuran al final del cuadro y para los cuales ef material no es muy abundance, serin descritos al mismo tiempo, en corte horizontal si asi puede decirse, en el capitulo correspondiente a la prehistoria'. A partir de la época de formacién, preferiremos examinar la sucesién de las culeuras en cada zona geogrifica, por columnas verticales, Des- deitaremos ciertos periodos de los cuales solo quedan como testimonio algunos fragmentos de alfareria. que no permiten una reconstruccién de sus culturas. En cambio, mencionaremos culturas de las cuales no tenemos ain conocimientos precisos, pero cuy2 apa~ rente importancia justifica una descripeién aproxi~ mada. De todas maneras, se trata aqui iva 1 Por una confusién de términos y. conceptos, autor fir icel iettte hn Se lace compart ‘ vocablo. prebsstori'» aquellas épocas mis antiguas

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