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Gestión

UNIDAD DIDACTICA
8

Aplicaciones Informáticas de Cálculo financiero

Aplicaciones informáticas

1. Manejo básico de Excel

1.1. Ejecución del programa

2. Herramientas de Excel relacionadas con la inversión

2.1. Principales Conceptos

2.2. Función TIR

2.3. Función VAN

3. Análisis de Balances. Caso práctico

4.1 Características técnicas, económicas y financieras

de las partidas patrimoniales del activo y del pasivo

4. Riesgos ligados a las condiciones de seguridad y

ambientales en el uso de material informático

5.1 El entorno de trabajo

5.2. Trabajo en la oficina

Recuerda
1. Aplicaciones informáticas

La mayoría de las empresas realizan sus anotaciones en los libros de registro


utilizando una hoja de cálculo. Su manejo es sencillo, los programas están
muy generalizados y es fácil encontrar personal que sepa utilizarlos.

En las empresas con un mayor volumen de operaciones, es fácil encontrar


programas diseñados de forma específica para su actividad, de manera que
relacionan este registro con el resto de apuntes y operaciones registradas en
otros programas como facturación, personal o contabilidad. Aquellos
personalizados tienen un coste elevado.

Además de este tipo de programas, el mercado ofrece otros más


generalizados, su precio es menor y relacionan archivos o datos que se
encuentren dentro del mismo paquete informático.

El utilizar unos u otros, dependerá del volumen de negocio, de la liquidez de


la empresa y de la existencia de personal capacitado para su manejo.
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2.1. Ejecución del programa

Excel es uno de los programas más utilizados por la variedad de recursos y


herramientas que ofrece para el trabajo con datos. Por ello, a continuación se
va a hacer referencia a algunas de las funciones más importantes de Excel en
su versión de 2016.

La hoja de Excel se divide en filas y columnas, así como también posee


diferentes elementos de entrada en una hoja de cálculo.

2.1.1. La ventana de Excel

La ventana de Excel se abrirá automáticamente cuando inicie la aplicación.


Una vez ejecutada, el entorno contará con los elementos siguientes:

Barra de herramientas de acceso rápido

Esta barra de herramientas es personalizable y en esta están ubicados


un conjunto de comandos independientes de la ficha en la cinta de
opciones que se visualiza. Se pueden agregar o quitar botones que
representan comandos.

Barra de títulos

Aparece una vez el documento se guarda y utiliza el nombre del


archivo. Por defecto, aparece Libro1–Microsoft Excel.
Ficha Archivo

Es una opción que reemplaza al Botón Microsoft Office en versiones


anteriores. Al hacer clic en la ficha Archivo, permite abrir, guardar e
imprimir el archivo, junto con otros comandos tales como Información
o Reciente.

Figura 2.4. Ventana inicial de Excel.

La cinta de opciones: compuesta por las fichas Inicio, Insertar, Diseño


de página, Fórmulas, Datos, Revisar, Vista, Desarrollador y
Complementos. Mantiene a la vista todas sus funciones para una rápida
accesibilidad a sus distintas opciones.
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Barra de fórmulas: consta de cuadro de nombres y barra de fórmulas.


Cuadro de nombres: cuadro ubicado en el extremo izquierdo de la
barra de fórmulas que determina la celda, elementos de gráfico y
objeto de dibujo escogido.
Barra de Fórmulas: Es la parte superior de la venta de Excel que
se utiliza para escribir o editar valores o fórmulas en celdas o
gráficos. Muestra la fórmula o el valor constante almacenado en la
celda activa.
Área de trabajo: es la hoja de cálculo propiamente dicha, es la zona
que contiene las celdas en las que se introducirán los datos. Puede
minimizar, maximizar y cerrar el área de trabajo haciendo clic en sus
respectivos botones situados a la derecha de los nombres de las fichas
de la cinta de opciones.
Barra de Desplazamiento: permiten moverse con rapidez por las
celdas. Están situadas una en la parte derecha de la zona de las celdas,
para desplazarse verticalmente, y otra en la zona inferior, para
desplazarse horizontalmente. A la izquierda de esta última existen unas
fichas que permiten moverse por las diferentes páginas del Libro.
Barra de Estado: muestra información sobre el documento que está en
activo. Se puede ver el número de celdas, filas y columnas, grabación de
macros, ente otros, y un control deslizante para alejar o acercar la zona
de texto. Esta barra es personalizable.

2.1.2. Cinta de opciones y barra de acceso Rápido

En la versión de 2016, los menús tradicionales se han aunado para convertirse


en la Cinta de opciones.
Para cambiar de una ficha a otra, es necesario hacer clic sobre las pestañas
que poseen el título, seleccionando aquella opción que se desea.

Por su parte, la barra de herramientas de acceso rápido ha variado poco entre


las versiones, ofreciendo de manera instantánea diferentes funciones que
realizar sin necesidad de acudir a distintas barras.

2.1.3. Nombres y Fórmulas

Justo debajo de la Cinta de Opciones puede ver los apartados que se


denominan Cuadro de nombres y Barra de fórmulas. A medida que desplace el
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foco de entrada por las celdillas, se puede ver que en el Cuadro de nombres
aparece el nombre de la celdilla seleccionada, mientras que en la barra de
fórmulas aparece su contenido.

No parecen ser elementos de mucha utilidad. No obstante, tanto el Cuadro de


nombres como la Barra de fórmulas no son simples visores informativos, sino
que, al contrario pueden ser utilizados para varias tareas.

El Cuadro de nombres se usa para asignar nombres a las celdillas o conjuntos


de celdillas, así como para seleccionarlas.

Por defecto el nombre de las celdillas es una combinación de la letra de la


columna y el número de la fila. Es posible, sin embargo, asignarles un nombre
más lógico.

Para realizar una prueba sencilla pueden seguirse los siguientes pasos:

Seleccionar la celdilla A1, si es que se desplazó el foco de entrada a otro


punto de la hoja de cálculo.
Mover el puntero del ratón hasta situarlo sobre el cuadro de nombres y
haga clic en él.
Introducir un nombre para la celdilla y pulsar Intro.
Mover el foco de entrada por la hoja, viendo que al ponerlo en la cedilla
A1 el Cuadro de nombres muestra el nombre introducido.
Desplazar el foco a cualquier punto de la hoja y, a continuación,
desplegar la lista adjunta al Cuadro de nombres. Elegir el nombre para
desplazarse directamente a la celdilla A1.

Asignar un nombre a las celdillas es una posibilidad que, tal y como se verá
más adelante, puede simplificar ciertas tareas.
La Barra de fórmulas, mostrada a la derecha del Cuadro de nombres, muestra
el contenido de la celdilla seleccionada. Si dicha celdilla contiene un número,
en la barra de fórmulas aparece eses número. Con los textos ocurre lo mismo.
Si la celdilla contiene una fórmula, sin embargo, en la celdilla propiamente
dicha, lo que aparece es el resultado, mientras que en la Barra de fórmulas sí
que aparece la fórmula.

Si teniendo seleccionada una celdilla se procede con la introducción de un


dato o su modificación, para lo cual bastaría la pulsación de la tecla F2, la
Barra de fórmulas tomaría el aspecto de la siguiente imagen. El contenido de
la celdilla, en este caso la fórmula, se mostrará en la barra propiamente dicha.
A su izquierda aparecerán tres botones y más a la izquierda una lista
desplegable de funciones.

Los dos primeros botones que han aparecido a la izquierda, yendo de


izquierda a derecha, son equivalentes a la pulsación de las teclas Esc e Intro,
respectivamente. El primero anula las modificaciones efectuadas, mientras
que el segundo las introduce. El tercero, justo a la izquierda de donde aparece
el contenido de la celdilla, abre una ventana de ayuda para la inserción de
funciones. La lista desplegable, que hay más a la izquierda sirve para insertar
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en la fórmula funciones predefinidas de Excel.

Por regla general, los valores y fórmulas se introducen directamente en la


celdilla que interese. La barra de fórmulas, por el contrario, es útil
principalmente cuando quiere editarse una fórmula previamente introducida.

2.1.4. Moverse por la hoja

La mayor parte de la interfaz de Excel está ocupada por la hoja activa del
libro recién creada. Una hoja de Excel puede tener hasta 16384 columnas y
algo más de un millón de filas, lo que hace un total de más de más de dieciséis
mil millones de celdillas disponibles. Lógicamente, todas no pueden estar
visibles, porque el espacio en pantalla no suficiente, siendo preciso
desplazarse por esa área visible.

También es fácil deducir que el número de celdilla con contenido, y la


extensión de éste, estarán limitados por la memoria disponible, más que por
un límite físico en el número de columnas o filas. Si se usa la versión de 64
bits de Excel 2016 en un ordenador con suficiente memoria será posible
trabajar con hojas de cálculo mucho más grandes, al no existir el límite de 4
gigabytes que se aplica a la versión de 32 bits.

El método instintivo para desplazarse de un punto a otro de un documento,


que consiste en usar las teclas de desplazamiento del cursor. Mediante dichas
teclas, no solo se desplaza el foco de entrada sino que, además, también
puede moverse la hoja completa en la dirección que interese.

Además de las cuatro teclas que permiten moverse arriba, a la derecha, abajo
y a la izquierda, también pueden usarse teclas como Inicio, Fin, RePág y
AvPág, consiguiendo un movimiento más rápido. La combinación de la tecla
Control con las teclas de desplazamiento de cursos llevará la selección
directamente a la primera o última cedilla en sentido horizontal o vertical,
según el caso.

Si el punto al que se desea realizar el desplazamiento requiere muchas


pulsaciones de tecla porque la hoja de cálculo es amplia, seguramente, la
forma más eficiente de hacerlo, será utilizando la opción Ir a. Puede
ejecutarse directamente mediante el atajo de teclado F5.

La opción Ir a muestra una ventana en la que aparece una lista con todas las
referencias de celdillas con contenido, así como aquellas que tienen un
nombre. Es posible seleccionar cualquiera de los elementos de la lista,
haciendo doble clic sobre él. También, como alternativa, puede escribirse una
referencia justo debajo de la lista, en caso de que se desee mover a un punto
concreto que no aparece en ella.

Las primeras filas y columnas de una hoja de cálculo suelen utilizarse para
colocar rótulos y títulos. Al mover el foco de entrada fuera del área visible, ya
sea por toda la parte derecha o inferior, dichos títulos no aparecen.

Para evitar esta situación, será necesario ubicar el foco de entrada en una
celdilla que esté justo abajo y a la derecha de los títulos, eligiendo a
continuación la opción Inmovilizar paneles de ficha Vista, en la Cinta de
Opciones. Cuando se desee su desbloqueo, se usará la opción Movilizar
Paneles.
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2.1.5. Títulos para las columnas

Habrá que crear un nuevo libro de Excel, empezando con la introducción de


los títulos que identificarán a las columnas. Se puede empezar a introducir
datos desde el punto actual en el que se encuentra el foco, en la celdilla Al.

Para comenzar a introducir un dato, por ejemplo las siglas que actuarán como
título de la primera columna, bastará escribir directamente.

A medida que se vayan introduciendo caracteres éstos irán apareciendo, tanto


en la celdilla que tiene el foco como en la Barra de fórmulas. Se puede
observar que el cursor aparece en el interior de la celdilla.

Finalizada la introducción del dato, puede pulsarse la tecla Intro, caso en el


cual el foco se moverá a la celdilla que está más abajo, o bien usarse
directamente la tecla de desplazamiento a la derecha, de tal forma que el foco
pase a la celdilla donde va a introducirse el dato siguiente.
Siguiendo exactamente el mismo método, introducir los títulos para el resto
de las columnas. Al terminar, el aspecto de la hoja de cálculo debe ser el
siguiente: cinco columnas, de la A a la E, cada una con un título.
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2.1.6. Títulos para las filas

Cada una de las columnas contendrá, justo debajo de los títulos ya


introducidos, los datos correspondientes a los números de personas de cada
colegio. Los títulos de las filas, por lo tanto, deberían quedar a la izquierda. El
problema es que la primera columna ya está ocupada. Se debería de haber
iniciado la introducción de los títulos de columna a partir de la columna B y no
de la A.

Las filas y columnas de una hoja de cálculo pueden insertarse y eliminarse. En


este caso concreto,interesará insertar una columna nueva delante de la
primera, de tal forma que se puedan introducir los títulos de las filas.
Haciendo clic con el botón secundario del ratón sobre cualquier celdilla de la
columna A y seleccionando la opción Insertar. En la ventana que aparece,
idéntica a la de la figura 3.3, elegir la opción Insertar toda una columna y
hacer clic en Aceptar.

Ejecutada la opción anterior, se puede ver que la columna que hasta entonces
era la A para a ser la B, que la B pasa a ser la C y así sucesivamente. El
resultado es que los datos se han desplazado una columna a la derecha y, por
lo tanto, existe una nueva columna a la izquierda en la que poder introducir
los títulos de las filas.

Esta es una operación que afecta a la hoja completa, otra posibilidad habría
sido mover el contenido de las celdillas de la posición en que se encontraban a
la nueva.

Ya existe el espacio necesario para introducir los títulos de las filas. Puesto
que la primera celdilla en la que podría introducirse un dato será la B2, el
primer título será colocado en la fila 2, concretamente en la celdilla A2. Los
títulos, puesto que se está creando una hoja de uso genérico, no serán los
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nombres de los colegios, sino la palabra Colegio seguida de un número entre


1 y 10.

Introducir en la celdilla A2 el primer título: Colegio 1. Pulsando Intro el foco


pasará automáticamente a la celdilla de más abajo. El título a introducir es
Colegio 2. Al introducir el primer carácter, Excel muestra automáticamente el
mismo texto que hay en la celdilla anterior, ya que al comenzar por el mismo
carácter asume que se va a introducir el mismo dato.

Esta característica de Excel, conocida como autocompletado, permite seguir


introduciendo caracteres de este nuevo título. Si van coincidiendo se sigue
mostrando el valor propuesto, de tal forma que bastaría con pulsar Intro para
aceptarlo e introducirlo directamente. En el momento en que se encuentre la
primera diferencia, el autocompletado se desactivará a menos, claro está, que
se encuentre una coincidencia con otro dato facilitado con anterioridad.

Puede aceptarse el autocompletado de Excel, introduciendo de nuevo el título


Colegio 1, y que sea modificado después. En este caso, no obstante, el ahorro
de trabajo no resultará muy significativo.
2.1.7. Introducción de valores en rangos de celdillas

Tras establecer la dirección de movimientos del foco, a medida que se pulsa la


tecla Intro introduciendo datos puede observarse que ahora la tarea es algo
más fácil. Tras la colocación en la celdilla B2 e inicio de la introducción de los
datos del primer colegio, introducir el primer número y pulsar Intro, hacer lo
mismo con el segundo y avanzar hasta la última columna de la fila. En ese
momento, al pulsar de nuevo Intro, la selección pasa a una columna en la
que, presumiblemente, no habría datos.

Los valores que el operador va a introducir se almacenarán en un rango de


celdillas, un recuadro que comienza en la celdilla B2 y finaliza en la F11.
Conseguir que el foco de entrada se mueva sólo en el interior de ese rango,
facilitando aún más el trabajo, es una tarea bastante sencilla.

El primer paso es colocarse en la primera celdilla del rango, en este caso la


B2. A continuación, manteniendo pulsada la tecla Mayús, utilizar las teclas de
desplazamiento para moverse hasta la última celdilla, la F11. A medida que se
produce el desplazamiento, se puede ver que el rango seleccionado aparece
con un color de fondo distinto.

Además del método descrito, con la tecla Mayús y las teclas de


desplazamiento del cursor, existen otros para marcar un rango. El más
intuitivo seguramente es usar el ratón, desplazando el puntero hasta la
primera celdilla, haciendo clic con el botón principal y arrastrando hasta la
última celdilla. Otra posibilidad, también utilizando el teclado, es moverse a la
primera celdilla, pulsar la tecla F8 y, a continuación, moverse a la última. Es
equivalente a la primera, pero sin necesidad de mantener pulsada la tecla
Mayús.
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En cualquier caso, en este momento ya está seleccionado el rango de celdillas


en el que deberán introducirse los datos. Ahora bastará con escribir números
y pulsar Intro. Será posible ver, al llegar a la última columna de una fila, que
el foco de entrada salta automáticamente de una fila a otra. Al llegar a la
última celdilla de la última fila, el foco de entrada pasa de nuevo a la primera.

2.1.8. Almacenar un libro de Excel

Para guardar el libro que está abierto, existen varias opciones:

Hacer clic en el botón Guardar localizado en la Barra de herramientas


de acceso rápido.
Seleccionar la opción Guardar en la vista Backstage.
Por la combinación Control-G.
El panel de la izquierda representa, desde una serie de iconos, las carpetas
normalmente utilizadas para guardar los documentos. Es posible hacer clic
sobre uno de estos iconos para escoger directamente la carpeta
correspondiente.

Una vez que el documento ha sido guardado, ejecuciones posteriores de la


opción Guardar, usando cualquiera de los tres métodos anteriormente citados,
tendrán como resultado el almacenamiento directo del libro. No será preciso
preguntar el nombre, ya que el nombre ya se asignó previamente.

En caso de que se desee guardar el libro con un nombre diferente al que tenía
originalmente, no tiene más que usar la opción Guardar como de la vista
Backstage.
3.1. Principales Conceptos

VAN

El Valor Actual Neto implica la suma de los flujos de fondos actualizados


correspondientes con un proyecto de inversión.
Mide la riqueza del proyecto que se mide en moneda del momento
inicial.
Para realizar la actualización de los flujos de fondos, se utiliza la tasa de
descuento.
La decisión del VAN implica la siguiente regla: Aceptar los proyectos
con VAN>0; también se puede rechazar los proyectos con VAN<0; o
bien ser indiferente con VAN=0
Entre dos proyectos alternativos, se debe seleccionar el que tenga
mayor VAN.
Existe un único VAN para cada proyecto.
Considera todos los flujos de fondos del proyecto.
Considera los flujos de fondos adecuadamente descontados.
Mide la rentabilidad en términos monetarios.

TIR

Son todas aquellas tasas que hacen que el VAN=0.


Considera todos los flujos de fondos del proyecto.
Considera los flujos de fondos adecuadamente descontados.
La regla de decisión es la siguiente:
Aceptar los proyectos con TIR>r, siendo r la tasa de corte previamente
definida.
Puede existir más de una TIR por cada proyecto, en función del
comportamiento de los flujos de fondo.
Es posible la presencia de una única TIR en un proyecto si está bien
comportado, es decir, que se produzca un único cambio de signo de los
flujos de fondos.
Mide la rentabilidad en términos porcentuales.

PRI

Se interpreta como el tiempo necesario para que el proyecto recupere el


capital invertido.
Mide la rentabilidad en términos de tiempo.

255
No considera todos los flujos de fondos del proyecto, al no responder
ante aquellos que se producen posteriormente al plazo de recuperación
de la inversión.
No permite jerarquizar proyectos alternativos.
No considera los flujos de fondos adecuadamente descontados.

La regla de decisión es la siguiente:

Aceptar los proyectos con PRI

En caso de PRI Descontado:

Considera los flujos de fondos adecuadamente descontados.


Mantiene las demás características del PRI.

256
3.2. Función TIR

La función TIR es capaz de devolver la tasa interna de retorno


correspondiente con una serie de flujos de caja.

Sintaxis:

=TIR (matriz que contiene los flujos de caja)

Debido a que Excel calcula la TIR mediante un proceso de iteraciones


sucesivas, opcionalmente se puede indicar un valor aproximado al cual se
estima que se aproximará la TIR, si no se especifica ningún valor, utilizando
Excel el 10 %.

=TIR (matriz que contiene los flujos de caja; valor estimado de la TIR).
3.3. Función VAN

En Excel la función para el cálculo del VAN se llama VNA. Se caracteriza


porque devuelve el valor actual neto desde un flujo de fondos y de una tasa de
descuento.

En este caso, Excel considera los pagos futuros como sucedidos al final de
cada período, por tanto, el primer valor de la matriz de pagos debe ser
actualizado con la tasa de interés correspondiente. Por ello, no es posible
incluir a la inversión inicial en esta matriz, actuando solo con pagos futuros.

Sintaxis:

=VNA (tasa de descuento; matriz que contiene el flujo de fondos futuros)+


inversión inicial

Notas:

Como se ha podido observar en el flujo de fondos, en el período inicial se


incluye un flujo de caja negativo. Esta salida de fondos representa la inversión
inicial, y quedando ello reflejado en la fórmula del TIR. En caso de que todos
los flujos de fondos son positivos, la TIR tiende a infinito.

Si la inversión inicial se ingresó con valor positivo, la fórmula del VAN debe
incluirse con signo negativo.

=VNA (tasa de descuento;matriz que contiene el flujo de fondos futuros)-


inversión inicial
4. Análisis de Balances. Caso práctico

El Análisis de Balances se define como aquel conjunto de técnicas que,


mediante el estudio del Balance de una empresa, permite diagnosticar la
situación empresarial, poniendo de relieve las relaciones existentes entre
elementos técnicos, económicos y financieros de la gestión. En definitiva, se
trata de una serie de técnicas empíricas y sofisticadas a la vez, cuyo
significado concreto y operativo emergerá claramente del examen de los datos
extraídos de la Cuenta de Resultado del ejercicio de cada ejercicio económico.
Se trata pues de un instrumento técnico capaz de medir la estabilidad
económica y financiera de la empresa.

En los mercados modernos, definidos como altamente competitivos e


instaurados en una sociedad capitalista, el empresario debe agudizar al
máximo su estrategia y extremar sus controles para alcanzar el cumplimiento
de sus estrategias y objetivos de mercado.

Sin embargo, la empresa moderna se caracteriza por su complejidad


creciente. Y es en este entorno económico donde el trabajo del empresario
resulta cada vez más complicado y extenso, de cara al control de su empresa.
Así, para que el control sea efectivo, es absolutamente necesario que la
información de que disponga sea eficaz y eficiente, es decir, que sea tan breve
como significativa.

En la elección de la información adecuada y su interpretación correcta


radicará, la mayoría de las veces el éxito de los buenos gerentes de empresa.

El Balance es uno de los principales elementos de información de que


dispone la empresa y constituye la base más completa de información para
detectar los puntos débiles de la organización económica y financiera de la
empresa, proporcionando el punto de partida para ejercitar la acción
correctiva imprescindible en cualquier control adecuado

Necesidad, tipos y objetivos del análisis de balances

En muchos empresarios o gerentes de Pequeñas y Medianas Empresas


(PYMES), existe una debilidad importante, ya que no sólo es necesario saber
producir materialmente, sino que igual de importante es saber producir
económicamente; es decir, no sólo es necesario tener unas óptimas
instalaciones, materias primas y mano de obra cualificada y una estructura
organizativa correcta, capaz de dar respuesta a las necesidades de demanda
del mercado, sino que es necesario que todas las operaciones estén
organizadas previamente de tal forma que, la suma total de los ingresos
procedentes de la venta de productos acabados sea superior a la suma total
de los costes originados para producirlos. Sólo así es posible realizar una
producción económica que origine beneficios y que proporcione así una
rentabilidad adecuada. Del estudio de esta Rentabilidad es de lo que se ocupa
el Análisis Económico de Balances.

Así pues, no es suficiente con vender mucho, sino que hay que saber vender
bajo control financiero, lo cual significa conducirse responsablemente
procurando que todas las operaciones de gestión se desarrollen dando lugar a
un flujo de ingresos de dinero suficiente en el tiempo, para hacer frente a las
necesidades de desembolsos monetarios. Es evidente que, para conseguir
esto, es necesario un atento control de todas las operaciones que crean
reducciones de dinero líquido (inversiones en máquinas, materias primas y
mercaderías, concesión de créditos a la clientela, pagos…), y de todas las
operaciones que determinan ceración de dinero líquido (beneficios
procedentes de las ventas, ingresos, préstamos obtenidos de los Bancos y
Cajas de Ahorro…).

En definitiva, el Análisis de Balances, no debe considerarse un resumen de


una situación pasada, sino más bien una forma de profundizar en los hechos
acaecidos en la empresa, con el fin de extraer unas previsiones de este
análisis con las que desarrollar las relaciones económicas y financieras, que
son las bases del proceso de crecimiento.

Objeto del estudio del Análisis de balances, serán fundamentalmente, dos


documentos contables integrados en las Cuentas Anuales de cada ejercicio:

1) El Balance de Situación:

Este documento describe la situación patrimonial de la empresa en un


momento determinado en el tiempo, es decir, recoge el aspecto estático de la
realidad empresarial. En definitiva, describe los activos, los pasivos y el
consiguiente capital neto de la empresa, en la fecha de cierre de cada
ejercicio económico.

En otros términos, es un inventario de los activos y pasivos de la empresa en


un momento dado, en cuanto describe y registra el valor que en un día
determinado (en general, al final de cada ejercicio) tienen los terrenos, las
construcciones, las instalaciones, las mercancías, el dinero en bancos, las
deudas con proveedores y entidades de crédito, etc.

Las cuentas que formarán este estado contable son las del grupo 1 al 5 del
cuadro de cuentas.

2) La Cuenta de Resultado del ejercicio

Este documento contable describe los gastos producidos y los ingresos


obtenidos imputables al ejercicio, poniendo de relieve el resultado económico
del mismo.

En general, mientras el Balance de Situación fotografía la empresa, en un


momento determinado; la Cuenta de Resultado del ejercicio, filma los hechos
sucedidos en la empresa, en un período determinado, normalmente desde 1
de enero a 31 de diciembre.

Las cuentas que formarán este estado contable son las del grupo 6 al 7 del
cuadro de cuentas.

4.1 Características técnicas, económicas y


financieras de las partidas patrimoniales del
activo y del pasivo

4.1.1. El balance de situación como síntesis de los activos y pasivos de la empresa

Cualquier empresa que se precie, mantendrá una estructura que la ponga en


condiciones de adquirir, producir y vender. Tal estructura representa el Activo
de la empresa y está constituida por:

Terrenos e inmuebles industriales en los que se realiza la actividad de la


empresa, por las instalaciones generales, y máquinas, por equipos,
muebles…
Por los créditos concedidos a la clientela.
Por las existencias adquiridas por la empresa, destinadas a su venta
directa o a su transformación.
Por la disponibilidad en caja y bancos, precisa para hacer frente a las
necesidades.

Para poder disponer de tal estructura, la empresa debe tener los capitales que
permitan la adquisición de los terrenos, inmuebles, instalaciones, máquinas,
equipos, etc., y su tesorería debe poder financiar las necesidades de materia
prima, mercancías, etc.; debe disponer del capital suficiente para financiar los
productos dados a crédito a la clientela y debe disponer del capital capaz de
asegurar una cierta disponibilidad en Caja y Bancos para las necesidades
corrientes más inmediatas.

Tales capitales se consiguen recurriendo a los medios puestos a disposición de


la empresa por los propietarios o accionistas, o recurriendo a préstamos
bancarios, créditos de los proveedores…

El capital propio y los acreedores representan el Pasivo de la empresa y está


constituido por:

Capital social.
Reservas.
Deudas Bancarias.
Proveedores.
Deudas con Hacienda y Seguridad Social.

Es posible comprobar como el Capital Social aportado por los socios, las
Reservas constituidas por los beneficiarios no distribuidos a los accionistas y
retenidos por la empresa, los Proveedores que han servido mercancías a
crédito a la empresa, los Préstamos obtenidos por la empresa de Bancos o
Cajas de Ahorro, el dinero que se debe a Hacienda y la Seguridad Social y que
aún no hay que pagarles y, en caso de beneficios, el Resultado positivo
obtenido en el ejercicio anterior y aún no distribuido; todo lo anterior se ha
empleado en adquirir Terrenos, Construcciones, Instalaciones, Equipos,
Mercancías para su venta, productos entregados a crédito a los Clientes y en
mantener en Caja y en Bancos dinero líquido para hacer frente a los gastos
corrientes.

Las consideraciones descritas permiten ver la situación patrimonial de un


modo concreto, el sentido al hablar del Activo y del Pasivo. Se establece que:

ACTIVO = Inversiones de capital (formas en que son invertidos los


cpitales a disposición de la empresa).
PASIVO = Fuentes de financiación del capital (fuentes que han
financiado las inversiones hechas por la empresa).

El Beneficio va en el Pasivo porque es una fuente de financiación. Para


financiar las inversiones que figuran en el Activo, la empresa puede recurrir a
los beneficios obtenidos.

La Pérdida eventual va en el Activo porque es una forma (anormal) de


inversión (o en el Pasivo con signo negativo). En el caso de que una empresa
opere en pérdida, en efecto, la empresa recurre a las varias fuentes de
financiación, no sólo para financiar las inversiones en terrenos,
construcciones, etc., sino también para financiar (cubrir) las pérdidas.

4.1.2. Partidas que componen el activo y su valoración

A. Inmovilizado

Bajo el concepto de Inmovilizado se incluye el conjunto de bienes y derechos


adquiridos por la empresa, destinados a permanecer en ella bajo la misma
forma de una manera duradera.

Por ejemplo, una empresa dedicada a la impresión de libros: una máquina de


impresión no agota su utilidad en la confección de un libro, por el contrario,
distribuye su utilidad en la impresión de miles de libros, y tal utilidad se
manifiesta en el curso de varios años sucesivos, y lo mismo puede decirse de
las demás máquinas, instalaciones… A la valoración en euros del consumo de
dicha utilidad a lo largo de cada ejercicio económico, es a lo que se denomina
Amortización.

Así, si una máquina de impresión es utilizada durante un número determinado


de años, y si cada año contribuye a producir libros impresos, el precio de
adquisición de la máquina deberá dividirse en tantos años como esté prevista
la utilización de la máquina, para obtener así la cuota anual de amortización.

En definitiva, la amortización debe ser considerada como una coste de


producción, al igual que las nóminas de los trabajadores o cualquier otro
gasto, ya que la pérdida de valor o desgate experimentado por los bienes de
inmovilizado se debe normalmente, en su mayor parte, al uso productivo.

Es posible realizar tres grupos homogéneos pertenecientes al inmovilizado:


Inmovilizaciones intangibles (cuentas del subgrupo 20 de P.G.C.).
Inmovilizaciones materiales (cuentas del subgrupo 21 del P.G.C.).
Inmovilizaciones de tipo financiero (cuentas de los subgrupos 24, 25 y
26 del P.G.C.).

Valoración

El inmovilizado Material e Intangible se valorará a tenor de lo establecido por


el Plan General de Contabilidad, por su precio de adquisición o coste de
producción, del cual se deducirán las amortizaciones practicadas, así como
cualquier depreciación que se considere reversible (deterioro) y las
depreciaciones irreversibles (pérdidas de inmovilizado), y ambas a efectos de
atribuir a cada elemento componente del mismo el inferior valor de mercado
que le corresponda al cierre de cada ejercicio.

El inmovilizado financiero se valorará por su precio de adquisición a la


suscripción o compra, incluyendo el precio de adquisición el total satisfecho o
que deba satisfacerse, incluidos los gastos inherentes a la operación. De dicho
precio de adquisición se deducirán también los deterioros correspondientes.

En cuanto a los gastos amortizables o Activo Ficticio, también se valorarán


por el precio de adquisición o coste de producción de los bienes o servicios
que los constituyan.

Por todo ello, a la hora de examinar un Balance habrá que poner especial
atención, en averiguar con qué criterios se ha llegado a determinar el valor
neto del inmovilizado, es decir, el grado de actualización de los valores
iniciales y el sistema de cálculo de las amortizaciones, pues puede suceder
que los valores reflejados en el Balance sean totalmente irreales.

B. Realizable

En contraposición al inmovilizado, se puede entender el realizable como el


conjunto de valores en los que la empresa ha invertido fondos por exigencias
de la actividad que ha de desarrollar, pero que carecen del carácter de
permanencia que poseen las inversiones de inmovilizado.

Son valores que generalmente integran el denominado proceso de maduración


de la empresa y que están sujetos a un proceso continuo de renovación, ligado
al ciclo productivo y comercial de la misma.
En el desarrollo de la actividad productiva, la empresa se ve forzada a realizar
una serie de desembolsos correspondientes a la adquisición de materias
primas y al pago de otros gastos, tales como nóminas, energía, gastos de
conservación etc. Desde que la empresa inmoviliza estos fondos, hasta que
recupera mediante el cobro a los clientes de los productos vendidos,
transcurre un cierto tiempo que se denomina Período de Maduración.

Es posible distinguir dos grandes grupos de partidas importantes dentro de lo


realizable:

b.1) Realizable no de explotación:

Clientes y Efectos a cobrar.


Anticipos a proveedores.
Deudores varios (créditos ostentados por la empresa frente a terceros,
no derivados de relaciones con clientes o proveedores con carácter de
tales).
Otros realizables (tales como fianzas constituidas o inversiones
financieras temporales).

b.2) Realizable de explotación o Existencias (grupo 3 del P.G.C): Está


compuesta por los stocks que la empresa necesita mantener en almacén para
desarrollar su actividad productiva y comercial. En él se distinguen, como
mínimo, un almacén de materias primas, stocks de fabricación en curso y un
almacén de productos terminados o de mercaderías.

Llegados a este punto debemos hacer una importante puntualización:

No todas las materias primas son inmovilizaciones temporales, ya que


una parte de las mismas constituye la provisión mínima por debajo de la
cual es imprudente y arriesgado el encontrarse, si no se quiere paralizar
el proceso productivo, esto es la parte de materias primas que deben
estar presentes en el almacén, que constituye una auténtica
inmovilización permanente.
En relación a los stocks de fabricación en curso, también hay que tener
en cuenta que, de no ser por circunstancias excepcionales que
comportan acumulaciones anormales a pie de máquina o entre
secciones, se puede considerar que la existencia de productos en
proceso de fabricación es constante y constituyen una auténtica
inmovilización permanente, ya que el proceso de transformación no se
detiene.
En relación a las existencias de productos terminados o mercaderías, la
experiencia demuestra que ningún almacén de materias
manufacturadas queda completamente vacío, dado que haría imposible
una salida y rápido cumplimiento de los pedidos de la clientela.

Deriva de este hecho que casi todas las empresas consideren necesario
disponer en cualquier momento de una reserva mínima de productos
terminados o mercancías para poder hacer frente a pedidos imprevistos. El
valor de esta reserva es una inmovilización permanente.

Valoración del Realizable no de explotación

Clientes

Los saldos que se incluyan en la cuenta de Clientes han de ser


totalmente cobrables, ya que si existen saldos que no tengan este
carácter, se estará sobrevalorando indebidamente el activo de la
empresa, dando lugar a la existencia de una Contrareserva. Si existen
saldos de Clientes cuyo cobro sea dudoso, deberán reflejarse en un
epígrafe separado del resto de los clientes.

Deudores varios y otros activos realizables

Ambos epígrafes deberán ser objeto de un análisis minucioso a la hora


de estudiar un Balances, ya que pueden dar lugar a un falseamiento
del valor real del Activo.

Valoración del Realizable condicionado, de explotación o Existencias

Al existir productos iguales valorados a precios distintos será necesario


determinar en qué forma deben valorarse las salidas de los productos que se
vendan, lo cual tendrá incidencia directa en el resultado del ejercicio.

Se pueden aplicar los siguientes métodos: FIFO, coste medio (vistos en el


Módulo de Contabilidad Básica) y el NIFO (“próxima en entrar, primera y
salir”, es decir, la valoración de las unidades salidas de almacén se hace en
función de los costes de las próximas unidades que entrarán el reponer las
existencias).

El método que se recomienda es el Coste medio o Precio Medio Ponderado. Si


se sigue el método FIFO, los resultados se fijarán tomando como base unos
costes relativamente anticuados; con el sistema del coste medio, los
resultados se basarán en un coste intermedio entre el antiguo y el actual; si se
sigue el NIFO, los resultados se basarán en los costes de reposición, con lo
que serán los más reales y actualizados.

La inexactitud en la valoración de los stocks puede deberse a una


sobrevaloración o infravaloración de los bienes inventariados, o al hecho de
no incluir en el inventario bienes que formen parte del activo, o a introducir
en el mismo bienes que no deberían tenerse en cuenta, aunque el criterio de
valoración hubiera sido correcto. La valoración incorrecta de estas partidas da
lugar a la existencia de reservas (infravaloración) o contrareservas
(sobrevaloración) ocultas, que deben tenerse en cuenta a la hora de estudiar
el balance.

C. Disponible

Toda empresa debe contar con una cantidad de fondos líquidos para hacer
frente a las necesidades financieras de tipo corriente, que se originan como
consecuencia de su actividad.

El Disponible está representado por dos partidas: La Caja y los Bancos.

4.1.3. Partidas que componen el pasivo y su valoración

A. No exigible o Neto

Está compuesto por aquellos recursos que son propios de la empresa y de los
que nadie excepto ella tiene derecho a disponer.

Como no exigible hay que considerar dos partidas fundamentales: el Capital,


las Reservas y los Resultados de cada ejercicio aún sin distribuir:

El Capital de una Sociedad está constituido por las aportaciones de sus


socios. Este Capital se divide en un número determinado de acciones,
cada una de las cuales representa una parte alícuota de aquel.
Las Reservas son aquellos beneficios obtenidos por la empresa y que no
han sido repartidos entre accionistas en forma de dividendos,
permaneciendo por tanto invertidos en ella.
Los Resultados: La empresa se obtiene en cada ejercicio unos ingresos y
se le producen unos gatos para obtener dichos ingresos. La diferencia
entre unos y otros puede dar lugar a un beneficio o una pérdida.

Si los resultados son positivos, esto es, si se han producido beneficios, su


importe aparecerá en el Pasivo del Balance, con signo positivo, lo que
supondrá un aumento del No exigible o Neto de la empresa.

Por el contrario, si son negativos, es decir, si se ha producido pérdidas en el


último ejercicio cerrado, su saldo aparecerá también en el Pasivo, pero con
signo negativo, y supondrá una disminución del Neto de la Empresa.

Las cuentas de Resultados de cada ejercicio permanecerán en Balance hasta


que se decida su destino. Este podrá ser, en caso de beneficio, su distribución
entre los socios en forma de dividendos, o su permanencia en la empresa en
forma de Reservas. Si por el contrario se trata de pérdidas, su permanencia
en el Balance durará hasta que se compensen reservas ya constituidas o
beneficios futuros.

Valoración

El Capital Social

El importe de la cuenta de Capital debe coincidir con aquel que figure


en la escritura pública de la sociedad.

Las Reservas

El valor debe considerarse como un beneficio real que ha sido reservado


por distintos motivos en la empresa. Puede estar invertido en bienes de
Activo. Su valor vendrá determinado por la suma de dotaciones hechas
hasta el momento en que se considere, menos las utilizaciones
correspondientes a dichas dotaciones.

B. Exigible

Este bloque está constituido por aquellos valores que son deudas para la
empresa, es decir, constituyen los medios financieros de procedencia ajena a
la empresa. Se puede dividir en dos grandes grupos:
b.1) Exigible a largo plazo

Se incluyen aquellas deudas contraídas por la empresa, cuyo vencimiento


tiene lugar en un plazo superior a un año. Las cuentas que aparecerán en este
bloque serán representativas de los fondos líquidos recibidos por préstamo a
la empresa. Las partidas que se agrupan en este epígrafe son:

Los empréstitos (emisión de obligaciones o deuda por la empresa, que


son suscritas por los particulares u otras empresas entregando una
determinada cantidad de dinero a cambio, dinero que se compromete a
reembolsar la empresa que emite las obligaciones, además de unos
intereses pactados, en unos determinados plazos).
Los créditos concedidos a la empresa a más de un año por Bancos y
Cajas de Ahorros.

b.2) Pasivo corriente

Aquí se agrupan aquellas deudas en las que ha incurrido la empresa, y a las


que tendrá que hacer frente dentro del período de un año. Estas deudas son
fundamentalmente de dos tipos:

Deudas contraídas por la empresa como consecuencia de la recepción


de dinero en concepto de préstamo: son deudas a corto plazo que la
empresa solicita a entidades financieras: Créditos a corto plazo
obtenidos de entidades financieras, descubiertos en cuenta corriente y
el descuento comercial de efectos.
Deudas que la empresa contrae con Proveedores, Acreedores Diversos,
Administraciones Públicas y Anticipos de Clientes, como consecuencia
de recibir materiales y utilizar servicios a crédito, o producirse el
devengo de algún impuesto o prestación, cuyo momento de pago aún no
ha llegado.

4.1.4. Otra opción de presentación del balance

Hasta ahora han sido agrupadas las cuentas de Activo de mayor a menor
liquidez, y las cuentas de Pasivo de mayor a menos exigibilidad, obteniendo la
siguiente estructura del Balance:

Activo: disponible, realizable cierto, realizable condicionado,


inmovilizado.
Pasivo: exigible a corto plazo y largo plazo, o no exigible o neto.

Otra presentación sintética del Balance resulta de contraponer liquidez y


exigibilidad, útil desde el punto de vista del Análisis de Balances:

Activo: corriente o no corriente.


Pasivo: corriente o no corriente.

Ello implica lo siguiente:

El Activo corriente: estaría compuesto por el Disponible, el Realizable


no de Explotación y el Realizable de Exploración o Existencias.
El Activo no corriente: estaría compuesto por el Inmovilizado.
El Pasivo no corriente: compuestos por el Capital, las Reservas, los
Resultados pendientes de distribución y el exigible a largo plazo.
El Pasivo corriente: estaría compuesto por el exigible a corto plazo.

Así pues las inversiones en Activo No corriente son las típicas inversiones a
largo plazo, ya que se van recuperando lenta y gradualmente, por lo general,
después de varios años, por medio del proceso de amortización.

Las inversiones en Activo Corrientes, son inversiones a corto plazo.

La prudencia junto con la lógica, aconsejan que las inversiones a largo plazo
sean financiadas con pasivo no corriente, cuyo grado de exigibilidad es
también débil. Nunca las deudas a corto plazo deben financiar las
inmovilizaciones, ya que no existiría correspondencia entre la naturaleza de la
inversión (a largo plazo), y del crédito (a corto plazo), y la empresa tendría
que estar renovando constantemente sus deudas a corto plazo, lo que
constituiría una amenaza permanente de suspensión de pagos.

Sin embargo, en el activo corriente cabe distinguir dos partes: una que se
caracteriza por su estabilidad en el tiempo y otra que varía por cortos
períodos de tiempo. Todas las partidas del Activo Corriente están vinculadas
al ciclo a corto plazo o ciclo de explotación, también llamado ciclo dinero-
mercancías-dinero, y, por lo tanto, se convierten en dinero al final de cada
ciclo, pero de estas disponibilidades, parte tienen que volver a ser
reinvertidas en el siguiente ciclo de explotación, si no se quiere paralizar la
actividad de la empresa, con los consiguientes costes.
Así, la parte estable del Activo Corriente, constituye una inmovilización
similar al Activo No corriente desde el punto de vista financiero, y es por lo
que debe financiarse con pasivo no corriente. En contraposición, la parte
fluctuante del Activo Corriente, debe financiarse con deudas a corto plazo.

El Activo: Evolución de su valor cont able con el valor de la empresa

a. Crecimiento de la empresa con resultados positivos

El valor contable del Activo Corriente tiende a crecer al igual que las
ventas.
El Activo no corriente material suele crecer a saltos por razones
tecnológicas.
El Activo No corriente Financiero e Intangible, normalmente, pierden
peso relativo, al crecer a un rito inferior al de los otros activos.

b. Estancamiento de la empresa con beneficios

El Activo Corriente se estabilizará, y las demás masas patrimoniales irán


reduciendo como consecuencia del proceso sistemático de amortización.

c. Estancamiento de la empresa sin beneficio

El Activo Corriente se estabilizará, y la disminución del valor contable de los


inmovilizados se ralentizará, pues tenderá a amortizar menos.

d. Recesión de la empresa

El Activo Corriente decrecerá al igual que las demás rúbricas del


inmovilizado.

En cualquiera de las cuatro situaciones, el Activo Corriente se adaptará al


entorno de manera más flexible que los inmovilizados.

El Pasivo: Evolución de su valor contable con la evolución de la empresa

a. Crecimiento de la empresa con resultados positivos

Todas las fuentes tienden a crecer (Proveedores y Acreedores) y las


Reservas se incrementarán al existir beneficio.
El resto de los pasivos tenderán al aumento. El capital social se elevará,
por inyección de nuevos recursos o por conversión de las reservas.
b. Estancamiento de la empresa con resultados positivos

Casi todo tiende a la estabilización, aunque puede producirse un aumento de


las reservas de la empresa.

c. Estancamiento de la empresa sin beneficio

Los Fondos propios o Neto decrecerán dependiendo de la intensidad de


las pérdidas; La empresa puede pretender un aumento respecto de las
cuentas de Proveedores y Acreedores.
El resto de los pasivos, puede que presenten problemas de vencimiento,
lo que complicará su renovación.

d. Recesión de la empresa

Dependerá de la naturaleza y cuantía de las pérdidas.

Análisis del equilibrio contable

a. Situación de máxima estabilidad

NO EXIGIBLE O NETO = ACTIVO CORRIENTE + ACTIVO NO CORRIENTE

b. Situación normal

ACTIVO CORRIENTE > PASIVO CORRIENTE


ACTIVO CORRIENTE + ACTIVO NO CORRIENTE > PASIVO
CORRIENTE + EXIGIBLE A LARGO PLAZO.

c. Situación de suspensión de pagos

ACTIVO CORRIENTE < PASIVO CORRIENTE


ACTIVO CORRIENTE + ACTIVO NO CORRIENTE > PASIVO
CORRIENTE +EXIGIBLE A LARGO PLAZO
NO EXIGIBLE O NETO > 0

d. Situación de quiebra

ACTIVO CORRIENTE + ACTIVO NO CORRIENTE < PASIVO


CORRIENTE + EXIGIBLE A LARGO PLAZO
NO EXIGIBLE O NETO < 0
Supuesto práctico

Sea la empresa “EUROINNOVA” la que presenta a 31/12/0X el siguiente


Balance de Situación:

Se pide calcular:

El activo corriente.
El activo no corriente.
El pasivo corriente.
El pasivo no corriente.

Solución: se define en la siguiente imagen.


5.1 El entorno de trabajo

Dentro del Entorno de Trabajo se diferencia entre:

Espacio de trabajo.
Iluminación.
Ruido.
Calor. Climatización.

El Espacio de Trabajo

El puesto de trabajo debe contar con una dimensión suficiente y estar


acondicionado para promover los movimientos y permitir los cambios de
postura. Es conveniente dejar practicable el perímetro de la mesa de forma
que se aproveche bien la superficie de trabajo y así promover la movilidad del
trabajador.

Detrás de la mesa quedarán 115 cm así como 2 m2 para moverse con la silla.

La Iluminación

La iluminación general y la iluminación especial, en caso de necesidad,


deberán garantizar unos niveles adecuados de iluminación entre la persona y
la pantalla, en base a las necesidades de la persona, el tipo de trabajo y el tipo
de pantalla que utilice.

Las fuentes de luz no pueden provocar deslumbramientos ni tampoco reflejos


molestos en la pantalla o en otras partes del equipo.

Las fuentes de luz, ventanas y otras aberturas, no podrán provocar


deslumbramientos ni molestias en la persona.

En caso necesario, las ventanas deberán disponer de un equipamiento para


mejorar la calidad de la luz natural.

El ruido

El ruido producido por los equipos de trabajo se considera en el diseño del


lugar de trabajo, favoreciendo la atención y la inteligibilidad de la palabra.
Calor. Climatización

Los equipos instalados en el puesto de trabajo no podrán molestar a los


trabajadores, por lo que se recomienda obtener una temperatura y humedad
que causen confortabilidad.

Toda radiación, salvo la parte visible del espectro electromagnético, se


reducirá según la normativa de la protección de la seguridad y de la salud de
los trabajadores.
5.2. Trabajo en la oficina

La masiva incorporación de terminales y tecnologías a los puestos de oficina


incrementa la incidencia de patologías ocupacionales. Entre las problemáticas
más frecuentes destacan las alteraciones de cuello y espalda, estrés o fatiga y
alteraciones visuales.

Aunque la gravedad de la mayoría de los problemas en oficina es menor que


en otros sectores, es preciso abordar soluciones efectivas, atendiendo a
aquellos que son fáciles de resolver.

Prevención en la oficina:

Diseño de instalaciones.
Selección de equipos.
Organización de tareas.
Formación e información.

La prevención en el campo del trabajo de oficina requiere atender lo


siguiente:

Un adecuado diseño de las instalaciones: implica disponer de


condiciones ambientales correctas, según normativa.
Una correcta selección del equipamiento. En el caso del mobiliario,
deberán cumplir los requisitos de calidad ergonómica para prevenir las
molestias de tipo postural. De la misma forma, utilizar equipos
informáticos con protecciones visuales favorecerá la salud ocular.
Una correcta organización de las tareas, evitando desmotivaciones y
situaciones de estrés continuas.
Importancia de la formación e información de los trabajadores. Ofrecen
un alto grado de autonomía en la organización del espacio y de trabajo y
del propio desempeño. Si no se conoce cómo funcionan, los buenos
equipos no actúan por sí solos.

5.2.1. Descripción de los principales riesgos asociados al trabajo de oficina

A continuación se describen los principales riesgos asociados al trabajo de


oficina, las causas que los determinan y las posibles consecuencias sobre la
salud y bienestar de los trabajadores. También puede consultarse un cuadro
resumen de los principales problemas ergonómicos asociados al trabajo de
oficina.
Riesgos relacionados con la Carga Física.
Riesgos relacionados con las Condiciones Ambientales.
Riesgos relacionados con Aspectos Psicosociales.

5.2.2. Principales problemas ergonómicos asociados al trabajo de oficina

5.2.3. Problemas músculo-esqueléticos asociados al trabajo de oficina

Los problemas de tipo músculo-esquelético asociados al trabajo de oficina, se


asocian con:
Movilidad restringida, asociada al trabajo sedentario.
Malas posturas.

Ambos determinan la existencia de esfuerzos musculares estáticos, que se


asocian a unas pequeñas contracciones de diferentes grupos musculares,
mantenidas a lo largo de la jornada de trabajo. El nivel el suficiente para
provocar fatiga y dolores musculares, especialmente en personas sedentarias.

Además, la posición sentada conlleva una sobrecarga en la zona lumbar de la


espalda, que soporta esfuerzos mecánicos superiores a cuando se está de pie.
En personas con lesiones de espalda puede provocar la aparición de
alteraciones lumbares.

Finalmente, la posición sentada también se asocia a problemas de tipo


circulatorio (como puede ser el entumecimiento de las piernas), por la
continua presión del asiento en los muslos y corvas así como por la poca
movilidad asociada.

5.2.4 El entorno de trabajo

Un espacio reducido de trabajo favorece las posturas estáticas o provoca


posturas forzadas. Cuanto más estático y sedentario sea un trabajo, mayor
flexibilidad del entorno se requiere.

Silla de trabajo

Sus formas, dimensiones y la adecuada regulación de la silla repercuten


principalmente a la postura del tronco, a la movilidad de la espalda y además
a la movilidad de las piernas. Los reposabrazos facilitan el apoyo de los brazos
en determinadas tareas, disminuyendo la tensión muscular en los hombros. El
asiento de trabajo deberá ser estable, dando libertad de movimiento, así como
ruedas y posibilidad de giro. Los brazos quedan apoyados en el sueño y tener
una base de apoyo de 50 cm o más de diámetro.

La altura del asiento deberá ser regulable, siendo el asiendo de forma


cuadrangular y con esquinas redondeadas, evitando compresiones en muslos y
rodillas. Se recomienda un relleno de 2-3 cm sobre una base dura, y cuyo
tapizado favorezca la transpiración e intercambio calorífico.

La profundidad óptima del asiento debe permitir usar el respaldo evitando


que haya una presión excesiva tras las rodillas. Para usuarios bajos, la
solución es un reposapiés, solicitar una silla más pequeña o regular la altura
de la silla. En el caso del reposapiés, este deberá tener 33 cm de profundidad
e inclinación entre 10 y 25º, junto con una anchura de 45 cm. La superficie
será antideslizante.

También se requiere un adecuado apoyo lumbar, siendo el respaldo una parte


media de la espalda de la persona, aunque en tareas informáticas debe ser
más alto.

El respaldo no puede ser demasiado ancho en la parte superior ya que ello


reduciría movilidad. También deben tener respaldo reclinable y regulable en
altura, siempre y cuando el trabajo sea más de 4 horas diarias con el
ordenador.

La comodidad del respaldo aumenta si la silla dispone de sistemas tales como


el contacto permanente o sincronizado. La persona debe disponer información
sobre cómo estar sentado en la silla así como de su regulación, siendo esta
sencilla y ergonómica.

Las butacas de dirección tienen diferentes utilidades que las sillas de oficina,
por lo que se recomienda utilizar cada silla para cada tarea específica, en
lugar de cambiar comodidad por estética.

Mesa de trabajo

Los profesionales que trabajan en una oficina, consideran que su silla de


trabajo tiene gran importancia en las molestias musculares que padecen,
olvidando que la mesa de trabajo, tiene aquí también gran importancia, por no
decir más importancia.

Las dimensiones del tablero de la mesa determinan la posibilidad de distribuir


correctamente los elementos de trabajo, de forma especial el ordenador,
evitando las posturas con torsión de tronco o giros de la cabeza. El espacio
libre debajo de la mesa establece la posibilidad de aprovechar mejor la mesa y
favorece la movilidad.

Existen además, otras características de la mesa, como sus acabados, que


están relacionados con cuestiones de seguridad (bordes y esquinas
redondeadas, etc.). Finalmente, la existencia de determinados complementos
puede mejorar la funcionalidad y ergonomía de la mesa (superficies auxiliares,
bandejas para documentación, reposapiés, etc.).

Deberá poseer las dimensiones suficientes y permitir la colocación flexible de


la pantalla, el teclado, los documentos y el material accesorio.

Las medidas mínimas de una mesa serán de 160 cm, de ancho por 80 cm de
profundidad, siendo recomendables las de 180x80 cm. Si se emplean
monitores de gran tamaño, debe aumentarse la profundidad de la mesa (90
cm e incluso 100 cm), para que el operador pueda mantener una adecuada
distancia visual a la pantalla.

Es conveniente que se disponga de planos auxiliares adjuntas y al mismo nivel


que la superficie de trabajo principal, sobre todo en puestos de oficina con
tareas muy variadas. De esta manera, el usuario podrá configurar diversas
zonas de actividad dentro de su puesto de trabajo y se aprovechará mejor el
espacio.

Debajo de la mesa debe haber un espacio holgado para las piernas que
permita los movimientos de las piernas. Deben impedirse los cajones y otros
obstáculos que restrinjan su movimiento debajo de la mesa o que puedan ser
fuente de golpes. Este espacio libre mínimo debajo del tablero debe ser de 70
cm de ancho y con una altura libre de al menos 65 cm. Es recomendable que
la altura libre alcance los 70 cm y que la anchura libre supere los 85 cm.

Por lo general, se prefiere que los bloques de cajones no se encuentren fijos a


la mesa, ya que de esta forma el trabajador podrá colocarlos en la zona que
más le convenga y aprovechará mejor la superficie de trabajo.

Las recomendaciones para la altura de una mesa fija son de 72 ± 1,5 cm, o
bien hasta 75 ± 1,5 cm para personas muy altas, debido quedar la persona a
la altura del codo cuando esta se siente en ella.

En general, las mesas de altura regulable se utilizan tan solo con personas
con discapacidad motora, de forma que la regulación se realizará entre 68 y
76 cm, así como realizar otras adaptaciones necesarias.

La mejor mesa para trabajar con el ordenador es una mesa de despacho,


facilitando su desempeño intensivo. Las "mesas informáticas" tipo carrito, que
poseen varios niveles y tienen muy poca superficie para trabajar, dan
movilidad a los ordenadores para desplazarlos y usarlos de forma ocasional,
pero no se consideran útiles para un trabajo continuo.

Además, deberán estar electrificadas, evitando el contacto con cables, y


disponer de atriles para colocar los documentos, de forma que reduzcan los
movimientos de la cabeza cuando se esté trabajando con ellos.

La superficie de la mesa debe ser poco reflectante, utilizar colores suaves y la


ausencia de contrastes fuertes entre el documento y el tablero. Tampoco debe
disponer de bordes cortantes, cantos agudos ni salientes, así como los cajones
deben deslizarse suavemente (guías con rodamientos). Deberán tener topes
de apertura, así como dispositivos antivuelco para prevenir accidentes.

Ubicación del ordenador

Algunos de los problemas más frecuentes del uso del ordenador, descritos a
continuación, se solucionan con una buena ubicación de este:

Ordenador situado a un lado, provoca un trabajo en continua torsión del


tronco y giro de la cabeza, realizando esfuerzos estáticos en la zona del
cuello-hombres y espalda.
Pantalla demasiado alta.
Pantalla demasiado cerca de los ojos.
Manejo del ordenador o teclado sin apoyo para muñecas y antebrazos.

Por lo general, la ubicación del equipo se ve influenciada por la falta de


espacio de la mesa o el espacio de trabajo, por lo que la comodidad del
trabajador se ve afectada.

Pantalla del ordenador

Los caracteres de la pantalla deben estar bien definidos además de


contar con una dimensión suficiente.
La imagen debe ser estable, evitando destellos, centelleos o cualquier
inestabilidad posible. La pantalla no tendrá reflejos ni reverberaciones
molestas.
Se ajusta el contraste entre los caracteres y el fondo de la pantalla así
como la luminosidad, adaptándose al entorno.
La pantalla deberá ser orientable e inclinable según se requiera.
El borde superior del monitor queda a la altura de los ojos del usuario,
entre 43-47 cm aprox., y se coloca sobre la CPU elevando un poco el
monitor sin que sea excesivo. Otra opción es emplear soportes
regulables.
La distancia de la pantalla a los ojos no debe ser inferior a 55 cm,
aunque varía según forma y tamaño de la misma.
La postura de trabajo será con la cabeza de frente al ordenador,
evitando giros, disponiendo de 35 grados o más para girar la cabeza.

Teclado y ratón

El teclado debe ser inclinable así como ser independiente de la pantalla, de


esta manera se evita la aparición del cansancio y las molestias en los brazos.

Además, el teclado no debe ser demasiado alto, quedando a menos de 3 cm de


altura sobre la mesa la fila que corresponde con la A. En los equipos portátiles
suele ser menos frecuente, por lo que se aconseja el empleo de almohadillas
para apoyar correctamente los antebrazos y las muñecas.

En ordenadores de mesa, este espacio será 10 cm mínimo entre el teclado y el


borde de la mesa.

De la misma forma, la superficie deberá ser mate para evitar los reflejos, así
como la ubicación de estos equipos deben facilitar el uso de los mismos. El
teclado, por su parte, deberá ser legible y los símbolos estar en perfecto
estado desde una posición normal de trabajo, así como el ratón deberá ser
cómodo tanto para diestros como para zurdos (modificar configuración de las
teclas en caso de necesidad).

Programas informáticos. Comunicación ordenador – persona

Cuando se procede a elaborar, comprar o modificar un programa, e incluso


definir las tareas a realizar, es necesario considerar diferentes aspectos de
este tipo de programas informáticos:

Los programas informáticos se adaptan a las tareas a realizar.


Los programas son fáciles de usar y poseen el nivel de complejidad
adaptada al usuario.
Los dispositivos cuantitativos o cualitativos serán utilizados en caso de
que el trabajador tenga constancia de ello y lo acepte.
Los sistemas aportan indicaciones de uso al trabajador.
Los sistemas estarán coordinados con el equipo, de manera que
funcionen al mismo ritmo.
Los principios de la ergonomía serán aplicados al tratamiento de la
información que realice la persona de forma particular.
Condiciones ambientales

Las condiciones ambientales más frecuentes que afectan a las personas son la
Iluminación, Climatización y Ruido, así como los aspectos psicosociales.

Iluminación: Las tareas de oficina más frecuentes hacen referencia a la


lectura en la pantalla del ordenador, por lo que se necesitan unas adecuadas
condiciones de iluminación para prevenir problemas visuales y molestias.

La aparición de reflejos en las pantallas de los ordenadores es lo más


frecuente que se produce en la oficina, puesto que existen focos directos de
luz, de manera que se requiere un análisis de la distribución de los mismos
para evitar que se produzcan deslumbramientos y reflejos en las pantallas,
utilizando en caso necesario elementos difusores, como persianas, cortinas,
etc. En ocasiones, la solución rápida es cambiar la ubicación de la mesa, pero
ello puede conllevar problemas posturales que provocarían nuevamente
molestias en la persona.

En caso de detectar reflejos, no hay que modificar el ordenador sino los


elementos difusores del entorno, o bien utilizar equipos que incluyan
tratamientos de antirreflejos, filtros u otras alternativas que eviten los reflejos
en las pantallas. En caso de fuentes de luz directa muy intensa, se pueden
provocar deslumbramientos, especialmente en superficies claras, por lo que
es necesario utilizar los elementos difusores y tratamientos adicionales.
Otro problema frecuente es la ausencia de iluminación o iluminación
insuficiente, para lo que se emplea luz difusa de forma homogénea, y
aplicando focos complementarios donde sea necesario.

Finalmente, hay que cuidar el contraste entre las diferentes superficies de


trabajo. Actualmente, el empleo de caracteres negros sobre fondos claros
facilita esta tarea, aunque no siempre se cumple en un ambiente exterior al
informático. Por este motivo, es necesario ver el contraste entre la mesa de
trabajo y el resto de superficies, utilizando mejor colores crema, madera
natural o gris claro para obtener contrastes adecuados. En cualquiera de los
casos, se utilizan mejor los acabados mate por la evitación de reflejos.

Climatización: En la actualidad, se utilizan sistemas de climatización


compartida tanto para verano como para invierno, lo que implica una
regulación poco conforme para los trabajadores, ya que algunos que están
más cerca perciben más energía que los que están más retirados, generando
molestias en ambos. El resultado es una continua modificación del termostato,
que agrava el problema en lugar de solucionarlo. En caso de notar la salida de
aire, se debe avisar al personal técnico para que modifique la orientación del
flujo de aire o bien la velocidad del mismo. En este caso, en invierno el aire
requiere más velocidad al tender el aire caliente a subir, mientras que en
verano se le da menor velocidad para que el aire salga despacio.

Otro problema frecuente implica la ausencia de mantenimiento en las


instalaciones, provocando que la suciedad y gérmenes se acumulen en las
conducciones y filtros, lo que implica el aumento del riesgo de constipados e
irritaciones de los ojos, especialmente en la época de verano. Por este motivo,
es necesario realizar un mantenimiento adecuado de los equipos e
instalaciones.

Ruido: En la actualidad el trabajo se lleva a cabo en una misma sala donde


muchos trabajadores desempeñan su actividad, por lo que se genera gran
cantidad de ruidos, sobre todo de impresoras, teléfonos, ventilación e incluso
las voces de las personas. Aunque estos niveles de ruido no son suficientes
provocar problemas de salud, se producen interferencias para concentrarse
en el trabajo e incluso mantener una conversación de trabajo. Para evitar esta
problemática, es necesario atender a la disposición de materiales absorbentes
del ruido que se ubiquen en el techo, suelos o mamparas de separación que se
utilicen en los puestos de trabajo.

Aspectos psicosociales: Es necesario, además, atender a los aspectos


psicosociales, ya que la organización del trabajo y las relaciones entre
compañeros pueden estar relacionadas con el malestar psicológico en el
puesto de trabajo. Las recomendaciones del Instituto Nacional de Seguridad e
Higiene en el Trabajo INSHT indican que se recomienda evitar lo siguiente:

Situaciones de sobrecarga o subcarga.


La presión indebida de tiempos.
La repetitividad de la rutina, provocando monotonía e insatisfacción.
Las situaciones de aislamiento que no permitan el contacto social en el
lugar de trabajo.

Una opción para dar confortabilidad en el puesto de trabajo es que el usuario


se marque su propio ritmo de trabajo, evitando la fatiga mediante diferentes
pausas de poco tiempo distribuidas en su jornada laboral. Si esto no es
posible, las pautas deberán ser establecidas o bien cambiar las actividades
para disminuir la carga de trabajo con el trabajo en el ordenador.

Además, hay otra serie muy extensa de factores a considerar en este campo
(ritmos de trabajo, contenidos de la tarea y su adecuación a la formación y
expectativas de los trabajadores, tipo de supervisión del trabajo que se realiza
por parte de los superiores, percepción de la valoración del trabajo por otros
trabajadores de la organización, niveles de autonomía en el trabajo,
conocimiento de los resultados del propio trabajo, potencial motivacional del
puesto, satisfacción con el sueldo o la seguridad del empleo, etc.).

Todas estas cuestiones tienen poco que ver con el tipo de equipos que se
utilizan y mucho con el tipo de organización, estando en un campo más
relacionado con la política de recursos humanos en lugar de utilizar la política
de prevención, considerando sus efectos al relacionarse con problemas como
el estrés, la monotonía o la falta de motivación en el trabajo.
Recuerda

La mayoría de las empresas realizan sus anotaciones en los libros


de registro utilizando una hoja de cálculo. Su manejo es sencillo,
los programas están muy generalizados y es fácil encontrar
personal que sepa utilizarlos.
Excel es uno de los programas más utilizados por la variedad de
recursos y herramientas que ofrece para el trabajo con datos.
El Análisis de Balances se define como aquel conjunto de técnicas
que, mediante el estudio del Balance de una empresa, permite
diagnosticar la situación empresarial, poniendo de relieve las
relaciones existentes entre elementos técnicos, económicos y
financieros de la gestión.

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