Está en la página 1de 6

ISFD N° 21

Profesorado en Historia
Perspectiva Pedagógico didáctica II

EL TIEMPO HISTÓRICO Y LA ENSEÑANZA DE LAS CATEGORÍAS


TEMPORALES

«Aunque la conciencia de los fenómenos temporales parezca inherente a nuestra experiencia


personal, implica un esquema conceptual abstracto, que sólo aprendemos a construir de manera gradual.»
G. J. Whitrow1

En la enseñanza de nuestra disciplina somos conscientes de que presentamos a nuestros


estudiantes fechas básicas, periodizaciones y contextos. También esperamos que nuestros
alumnos recuerden mínimamente esta información. Las dificultades en el aprendizaje de la
historia se relacionan con un inacabado trabajo sobre dos aspectos que hacen a la comprensión
del tiempo histórico: la cronología y las categorías temporales que se utilizan para analizar los
fenómenos del pasado.

La noción de tiempo

En el texto de Cristófol Trepat2, cuya lectura les


propuse, el autor nos introduce en tres apartados en
las nociones de tiempo histórico. En primer lugar se
nos presentan las construcciones históricamente
elaboradas y vivenciadas por las culturas del pasado de
la noción de tiempo. Es interesante el planteo de un
tiempo que no fue entendido como nosotros lo comprendemos hoy. Así de las nociones circulares
del tiempo del mundo antiguo, a las lineales y teleológicas de la tradición judeocristiana hasta las
modernas concepciones einstenianas de un tiempo relativo a la velocidad y la masa de los objetos,
el relato nos permite dar cuenta de la historicidad misma de la noción de tiempo en las
sociedades.
En el caso de nuestra disciplina, Fernand Braudel ha teorizado sobre las dimensiones temporales
que inciden en el análisis y comprensión de los procesos del pasado. Para retomar en función de
esta clase aspectos de su teorización, recordemos que para el historiador una categoría central en
el análisis se refería a las duraciones, o dicho de otro modo a la velocidad de los cambios. En ese
sentido distinguía procesos de larga duración que correspondían a fenómenos que caracterizaba
como estructurales. Los elementos espaciales y las mentalidades corresponden a este nivel
temporal donde los cambios son casi imperceptibles, y que en la concepción analítica de Braudel
constituyen el marco para una explicación más acabada de los procesos históricos.
1
Whitrow G. J. El tiempo en la historia. La evolución de nuestro sentido del tiempo y de la perspectiva
temporal. Barcelona: Crítica.1990. Un texto muy interesante. Si desean ampliar sobre el tema se los puedo
enviar
2
Cristófol Trepat. Fundamentos teóricos para una didáctica del tiempo en las Ciencias Sociales. En Trepat,
Cristófol; Comes Pilar. El tiempo y el espacio en la didáctica de las Ciencias Sociales. Barcelona: Ice-Grao
2006 https://drive.google.com/file/d/0BwXY5xra4pbyODYxTjNhWWxZcFU/view?
usp=sharing&resourcekey=0-LXdJpR99l0eqHdupkbAfqg

1
En la media duración o tiempo de la coyuntura, el historiador situaba procesos de índole
socioeconómica cuya duración podía establecerse aproximadamente entre 100 a 200 años. En
este nivel se debían incluir los fenómenos de corta duración para poder aventurar una posible
explicación. El tiempo corto o “acontecimiental” refería a aquellos sucesos de índole política
generalmente cuya breve duración, es decir su continuo cambio era comparado con la espuma del
mar. En el sentido que es producto de movimientos más profundos.
Nos quedaremos por ahora con esta última perspectiva sobre la noción de tiempo, la braudeliana,
la más operativa para la enseñanza de nuestra disciplina

El tiempo cronológico

La enseñanza de la historia parte a veces apresuradamente de un supuesto que deberíamos


desbrozar: la creencia que nuestros estudiantes de la escuela secundaria conocen y pueden aplicar
nociones básicas de cronología3.
El texto sugerido para esta clase tiene en ese sentido ventajas: por una parte introduce una
historización, que debería enseñarse, acerca de la construcción de nuestra noción actual de
tiempo cronológico. Y por otra presenta una
propuesta de categorías temporales para la
enseñanza que trabajaremos en el siguiente
apartado.
Bajo la denominación de tiempo civil, hay en el texto una descripción de los orígenes de la
constitución de los días, meses, y calendarios que hoy utilizamos de forma natural y que merecen
ser repasados por ustedes en función de su aplicación en sus futuras clases.

Categorías temporales

El aporte más significativo del texto que les propuse radica en la clasificación de las nociones
temporales que pueden organizar cualquier propuesta de enseñanza y aprendizaje de la Historia.
La primera de ella se refiere a los tiempos míticos. En cualquier proceso, especialmente en los
tiempos de la antigüedad, podemos rastrear este aspecto de la constitución de las primeras
explicaciones por parte de las sociedades. Elegí la primera de las categoría temporales: tiempos
míticos para proponerles un esquema que les será de utilidad en la explicación de esta noción-

3
En este sentido comparto la idea Valdeón:”Puede afirmarse, con toda rotundidad, que no hay historia sin
cronología. Sin ella no puede hablarse de conocimiento histórico. El problema del enseñante consistirá en
iniciar al niño en la noción de «tiempo histórico», pero lo que nunca tendrá justificación es hurtarle a lo
histórico uno de los ingredientes fundamentales de su esencia con el pretexto de las dificultades que
presenta su comprensión por los alumnos.» J. VALDEÓN «¿Enseñar historia o enseñar a historiar?". En J.
RODRÍGUEZ FRUTOS (ed.). Enseñar historia: nuevas propuestas. Barcelona: Laia.1989 p. 26

2
Características
MITO
finalidades Carece de cronología

Es una narración

maravillosa
protagonismo divino

es la primera
idea de gobierno
explicación a una
teocrático
pregunta que se
TIPOS
planteban las cargada de

sociedades imaginación

carácter pedagógico

concibe una historia

cíclica

constituido por

contrarios

Otra categoría temporal que nos propone Trepat, es la de periodización. Su potencial para
trabajar el resto de las nociones temporales es clave. Recordemos que toda periodización implica
trabajar con algún recurso gráfico que la represente: línea de tiempo, friso. etc.

Periodizar implica establecer etapas en un proceso dado a partir de algún criterio que se repite
cuando se marcan los cambios, es decir en el pasaje de una etapa a otra. En nuestra disciplina
continuamente nos encontramos con periodizaciones más o menos implícitas. Por ejemplo la
tradicional y eurocéntrica periodización por edades de la historia universal. Enseñar a partir de la
periodización permite trabajar dos nociones temporales básicas: el cambio y la continuidad.
Asimismo permite trabajar la noción de diacronía o sucesión.

También podemos visualizar en ellas (por una simple mirada a los recortes temporales) los ritmos
del proceso, esto es la velocidad de los cambios en sus tres dimensiones: rápidos, estancados,
lentos. O en su versión autoalimentada como el take off.

Es interesante realizar la distinción entre la periodización y la simple cronología – ambas suelen


representarse en la línea de tiempo. Esta última se refiere a la sucesión de fechas y hechos
correspondientes sin establecer ningún criterio. En la periodización, por el contrario, al pautar
etapas con un criterio determinado, la cronología que se introduce en cada etapa debe estar
relacionada con aquel. En este sentido constituye una herramienta de selección de la información
sobre una temática dada.

Les dejo un ejemplo de periodización sencilla para trabajar introductoriamente. ¿Se animan a
pensar los criterios?

3
Por trabajo de mi
Infancia, hasta que
Nos mudamos papá me mudo a La Estancia en La Reja.
realizo
a Moreno Reja. Curso en el Instituto
tercer grado en San
Termino la primaria La secundaria en el presente
Miguel
completa

Las otras categorías temporales que completan la propuesta de Trepat refieren a la duración, que
ya trabajamos anteriormente a propósito de la teoría de Braudel.

Dos nociones básicas en la enseñanza y aprendizaje de la Historia refieren a la sincronía y a la


simultaneidad. En ambos casos el análisis se centra en los procesos que funcionan como contexto
general del tema que intentamos enseñar en la periodización y que hacen posible su
inteligibilidad.

La importancia de trabajar con todas estas categorías en nuestras propuestas didácticas reside en
que será el único modo de acercarles a nuestros estudiantes una visión más compleja de la
causalidad de los fenómenos sociales en el pasado.

Las siguientes propuestas están tomadas de otro texto de C. Trepat4 que realmente nos será de
mucha utilidad. Refieren a procedimientos que se pueden trabajar en nuestras clases para
favorecer el aprendizaje de las nociones temporales.

Les propongo que en equipos (de no más de tres integrantes) elijan dos procedimientos y
ejemplifiquen cómo los usarían para un tema de enseñanza a elección. Si elijen la opción 1 por
ejemplo, deberán incluir el relato que trabajarían para ese procedimiento. O si elijen el punto 4
deberán consignar el objeto en cuestión que propondrán. O si elijen imágenes deben incluir en el
documento las mismas y las consignas.

Procedimientos

1. Análisis y clasificación de tiempos de relatos en función del


ritmo (intervalos de tiempos, frecuencia de tiempos), la
orientación (pasado, presente y futuro), la sucesión, la

4
Cristófol-A Trepat, Procedimientos en historia, España, Grao/Instituto de Ciencias de la Educación,
Universidad de Barcelona, 2006. pp. 233-247

4
simultaneidad (posición relativa de los momentos en el
tiempo: antes, después, durante), la duración (variabilidad o
permanencia de la acción narrada).
2. Redacción de situaciones con orientación temporal de
pasado, presente y futuro.
3. Análisis de la utilización del tiempo personal propio en
función de las categorías de ritmo, sucesión, orientación y
duración.
4. Lectura del ciclo evolutivo de un producto agrícola o del
proceso de transformación de un objeto. Confección de
dibujos sobre la evolución y/o transformación de un objeto y
temporización de sus distintas fases.
5. Confección de dibujos sobre la evolución y/o
transformación de un objeto y temporización de sus distintas
fases.
6. Clasificación y ordenación de conjuntos de dibujos o
fotografías sobre la evolución de un producto, objeto, cosa...
7. Lectura de textos para averiguar las etapas y la evolución de
la acción descrita y la temporización de estas etapas.
8. Ordenación de distintos fragmentos de un relato,
previamente proporcionados de manera desordenada.
9. Redacción sobre hechos importantes de la propia vida
ordenando los distintos acontecimientos.
10. Análisis e interpretación de expresiones temporales
habituales para ejemplificar distintas maneras de vivir y
percibir el tiempo.
11. Establecimiento de comparaciones de cómo se vive y
percibe un mismo tiempo en ambientes distintos (trabajo,
casa, escuela, vacaciones...) y de cómo se distribuye el tiempo,
qué actividades se realizan y cuál es la sensación que se posee
del paso del tiempo.
12. Análisis de la sensación de duración de un mismo tiempo
según las actividades que se realicen.
13. Observación de fotografías de manifestaciones o
actividades que ejemplifiquen la manera de vivir en medios
distintos o realizando trabajo distintos.
14. Observación de imágenes (dibujos, fotografías...) a fin de
averiguar y comparar cómo trabajan la tierra o cómo son los
medios de transporte, viviendas, etc., de dos o tres
colectividades distintas (por ejemplo, lo observable en la
comunidad autónoma, un país de África y otro de Asia...).
15. Identificación a partir de textos o imágenes de aspectos,
actividades, personas que constituyan anacronismos, es decir,
que no sean propias del tiempo presente.
16. Análisis de los cambios producidos, mediante la
comparación de las características de la sociedad actual con
las del pasado próximo.
17. Identificación de diferentes duraciones de hechos

5
históricos: estructurales o tiempos de larga duración, tiempos
medios y tiempos cortos.
18. Clasificación y ordenación de distintas imágenes sencillas y
claras referidas a distintas épocas históricas

Elena Mohorade

También podría gustarte