0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
69 vistas6 páginas
Jacob le dijo a su tío Labán que quería irse con su familia a otro lugar, pero Labán lo convenció de quedarse ofreciéndole un salario. Acordaron que Jacob recibiría las ovejas manchadas y obscuras a cambio de su trabajo. Jacob enriqueció su rebaño a través de la cría selectiva. Más tarde, Dios le dijo a Jacob que regresara a la tierra de sus padres, ya que Labán y sus hijos se habían vuelto descontentos con él. Raquel y Lea apoyaron a Jacob y los tres
Jacob le dijo a su tío Labán que quería irse con su familia a otro lugar, pero Labán lo convenció de quedarse ofreciéndole un salario. Acordaron que Jacob recibiría las ovejas manchadas y obscuras a cambio de su trabajo. Jacob enriqueció su rebaño a través de la cría selectiva. Más tarde, Dios le dijo a Jacob que regresara a la tierra de sus padres, ya que Labán y sus hijos se habían vuelto descontentos con él. Raquel y Lea apoyaron a Jacob y los tres
Jacob le dijo a su tío Labán que quería irse con su familia a otro lugar, pero Labán lo convenció de quedarse ofreciéndole un salario. Acordaron que Jacob recibiría las ovejas manchadas y obscuras a cambio de su trabajo. Jacob enriqueció su rebaño a través de la cría selectiva. Más tarde, Dios le dijo a Jacob que regresara a la tierra de sus padres, ya que Labán y sus hijos se habían vuelto descontentos con él. Raquel y Lea apoyaron a Jacob y los tres
Jaco habló con su tío Labán para decirle que se iba a ir junto con sus mujeres e hijos a otro lugar. Pero Labán le pidió que se quedara y que le pidiera el salario que deseaba, porque se había dado cuenta que Jehová lo bendecía por causa de Jacob. Se pusieron de acuerdo y Jacob le dijo a su tío laban que no le diera un salario, sino que le diera de las ovejas por las cuales él había trabajado, entonces acordaron que las ovejas y cabras manchadas y salpicadas de color y las de color obscuro serían para Jacob y Labán aceptó el acuerdo. Jacob seguía apacentando las ovejas de Labán y cada vez que el rebaño iba a tomar agua, él ponía varas verdes de álamo, avellano y castaño, y descortezaba sobre ellas mondaduras blancas, para que cada que las ovejas procreaban consiguieran borregos listados, pintados y salpicados de colores. Y los apartaba y los ponía en su rebaño, esto hacía cuando entraban en celo las ovejas más fuertes, así eran las fuertes para Jacob y las débiles para Labán. Y se enriqueció Jacob teniendo muchas ovejas, siervos, siervas, camellos y asnos. Y oía Jacob que los hijos de Labán estaban descontentos, porque Dios lo enriquecía cada vez más, por ello su tio Labán lo empezaba a ver con desagrado. Jehová le dijo a Jacob: regresa a la tierra de tus padres y yo estaré contigo Jacob habló con Raquel y Lea, y les dijo que era tiempo que salieran de esa tierra porque Dios así le había mandado, además que Labán no tenía más un buen trato hacia él, ya que le había cambiado el salario 10 veces, pero Dios había defendido la causa de Jacob no permitiendo que le hicieran mal Cuando Labán decía los pintados serán tu salario todas las ovejas parían pintadas y si decía los listados serán tu salario entonces las ovejas parían listados, así Dios quitó el ganado de Labán y se lo dio a Jacob.
Sucedió que Jacob tuvo un sueño en el que Dios le
dijo que era necesario que se levantara y saliera de esa tierra y volviera a la tierra de su nacimiento. Raquel y Lea al ver la actitud de Labán su padre apoyaron a Jacob y regresaron a su ciudad natal.