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Inequidades sociales.

En nuestra sociedad son muy evidente las inequidades, pues podemos mencionar
desde el tema de ser menor de edad hasta de la negación de atención de salud.

Un claro ejemplo son aquellos menores de edad de las diferentes comunidades


indígenas de la sierra, donde por lo general no tienen escuelas para siquiera tomar
estudios básicos, y al momento de emigrar a las “ciudades civilizadas” llegan a ser
agredidos física y verbalmente pues no son aceptados como parte de la sociedad.

Por otro lado también en las mismas ciudades y en realidad no solo en las
ciudades, sino en todo el país, la mayoría de nosotros los ciudadanos somos de
escasos recursos, lo cual somos quienes sufren de inequidades sociales, pues
donde se al no tener manera de remunerar algo económicamente por algún
servicio básico que por derecho humano debes de recibir, no serás apto para
recibirlo.

Otro claro ejemplo es de aquellas personas que buscan un trabajo llegan a ser
agredidas por no ser de la aceptación de los contratantes solo por no ser, ya sea
hombre o mujer.

Y uno de los tratos más conocido son los servicios de salud, pues muchos ven el
tema de salud como una caja de dinero, pues si no tienes dinero para la consulta
y/o el medicamento no puedes recibir la ayuda del servicio, poniendo en riesgo la
vida de esa persona.

La sociedad debería ser capaces de actuar con respeto hacia con cada uno de
sus miembros pues de ahí parte el funcionamiento de la misma; de la igualdad,
armonía, generosidad y respeto hacia cada uno de los miembros.
Conclusiones:

Debemos ser capaces de ser seres realmente seres racionales, sin actuar solo
mirando por nuestro propio beneficio. La sociedad necesita quitar esos estigmas
que perjudican a las personas que no pueden recibir algún tipo de apoyo básico
por parte del mismo gobierno por derecho propio desde el nacimiento, pues ese es
el objetivo de una sociedad, luchar con fines lucrativo.

Debemos hacer valer nuestros derechos como personas, exigir nuestro derecho a
la educación, a la vivienda, a la salud, pero en especial, nuestro derecho a la
libertad, claro, diferenciándola del libertinaje.

Solo tengamos en cuenta que no solo podemos exigir, pues de igual manera
debemos de cumplir con nuestras obligaciones como ciudadanos.

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