Yo, ADRIANA ESTEFANIA HERNANDEZ PEREZ, de nacionalidad

venezolana, nacida el 05 de Febrero de 1994, en la ciudad del Estado

Barinas, del Municipio Bolívar, parroquia Barinitas Venezuela, de 29
años de edad, de profesión Técnico Superior en Ciencias Policiales,
portador de la cédula de identidad N – 21.170.478, y portadora del
pasaporte de la República Bolivariana de Venezuela número
098137260, ex funcionaria del Cuerpo de Investigaciones Científicas
Penales y Criminalísticas (CICPC), con dirección carrera 11, con calle 3 y
5 del sector el centro, específicamente frente a la farmacia las
MALVINAS, del Municipio Antonio José de Sucre, Parroquia ticoporo,
del estado Barinas, ocurro ante el Servicio de Ciudadanía e Inmigración
de los Estados Unidos de América, con la finalidad de exponer los
hechos que fundamentan mi solicitud de asilo en los Estados Unidos,
por ser víctima de persecución política por parte del gobierno de
Nicolás Maduro.
He sido funcionaria desde el año 2015 hasta mi cese de funciones en el
año 2022, en la  ciudad del estado Barinas, la cual ha estado asediada y
sitiada por la violación de los derechos fundamentales y
principalmente, como es la vida humana, la libertad y el libre
desenvolvimiento de la personalidad, donde han habido muertos
provocadas por armas de fuego, secuestro, extorsiones, por
organismos adscrito al ejecutivo Nacional por el régimen de Nicolas
Maduro tales como; la Guardia Nacional Bolivariana, Policía Nacional
Bolivariana (PNB), Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN), la extinta
Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) que ahora es DIEP, a estos se
suman la DIGCIM y los grupos armados tales como los COLECTIVOS,
TUPAC, TUPAMAROS, entre otros. Entre los organismos adscritos al
ejecutivo y régimen de Nicolas Maduro se suma el Cuerpo de
Investigaciones Científicas Penales y Criminalística CICPC, como el
encargado de tergiversar, y alterar el sitio del suceso o escena del
crimen.
En el año 2019 empezaron los operativos, por cuanto habían
concentraciones, marchas y protestas en contra del gobierno
de Nicolás Maduro, el ejecutivo Nacional a través del Ministro para las
relaciones Interiores, Justicia y paz “NESTOR REVEROL” giro
instrucciones a todo los organismos de seguridad de infiltrar, perseguir
y justiciar a líderes de la oposición, en esta operaciones se sumaban los
llamados “COLECTIVOS”, incluyendo al cuerpo de investigaciones
Científicas penales y Criminalísticas del CICPC por medio del Director
Nacional “Douglas Rico”, el cual, era al cuerpo de investigaciones que
mi persona estaba adscrita, en el desempeño como funcionario con
jerarquía de “Detective Agregado”. Los operativos y trabajo de
inteligencia eran mayormente liderados por los funcionarios del FAES
del cuerpo de Policía Nacional Bolivariana, estos se encargaban de
seguir encubierto a civiles hasta sus domicilios, y los mismo ejercían
plan y ejecución de sicariato conjuntamente con los COLECTIVOS,
donde los mismos daban con el perímetro y paradero de los
manifestantes y le cegaban la vida. Posteriormente llegaba a la escena
del crimen o sitio del suceso, el Cuerpo de Investigaciones Científica
Penales y Criminalística CICPC, a los fines de llevar a cabo los
procedimientos del levantamiento del Cadáver, y el supuesto proceso
de investigación, una vez estas quedaban a disposición del Comisario
General Ildemar Soto, jefe de la delegación Municipal del CICPC del
estado Barinas, el mismo ordenaba que se viciaran los procedimientos
e involucrar a personas inocentes, tales como estudiantes y
particulares, en crímenes consumados y cometidos por el gobierno de
la dictadura de Nicolas Maduro. Los lamentables hechos atroces en
perjuicio de estas personas que ejercían la libertad de expresión,
quedaron impunes por vicios, manipulaciones y artificios ordenadas
por quienes en un tiempo fueron mis jefes inmediatos en el Cuerpo de
Investigaciones Científicas Penales y Criminalística CICPC y en la cadena
de mando.
El 23 de Enero del año 2019, día de la proclamación como Presidente
Interino de la República Bolivariana de Venezuela el diputado Electo
Juan Guaido, se me comunico de un caso en funciones de guardia, del
ciudadano Wilmer Mendoza de 39 años de edad, quien se desempeñó
como radiólogo que fue justiciado por un disparo en la región pectoral,
ocasionándole la muerte inmediata por un efectivo de la Guardia
Nacional Bolivariana (GNB), los occiso Gustavo Ramírez de 30; Wilmer
Mendoza 25 e Iván Antonio Álvarez Fernández de 21, hecho que se
cometió un miércoles en una marcha que protagonizaba la oposición,
que partió en la avenida 23 de enero de Barinas, frente a la iglesia
Nuestra Señora del Carmen, anticipó su recorrido y el mismo pasarían
frente al Comando de Zona 33 de la Guardia Nacional Bolivariana
(GNB), para finalizar a la altura del parque Los Mangos, en la avenida
Cuatricentenaria. Cuyo caso de homicidio pasó al Cuerpo de
Investigaciones Científicas Penales y Criminalística CICPC y a orden de
mi comisión, el jefe Comisario General ILDEMAR SOTO, responsable de
la delegación Municipal Barinas, quien al tener conocimiento que se
trataba de un manifestante de la oposición decidió ordenar y cesar
toda investigación de una forma extralegal, asimismo de archivar
parcialmente el caso, en eso participó el Fiscal Superior del Ministerio
Público de la circunscripción Judicial del estado Barinas “Luis Francisco
Ramírez”. Las reuniones para planificar las artimañas y alterar la
dirección de las investigaciones pertinentes, así como desaparecer
pruebas, por parte de quien un tiempo fue mi jefe ILDEMAR SOTO, el
fiscal Superior y el ex gobernador del estado Barinas ARGENIS CHÁVEZ,
estas mismas se celebraban en el salón de usos múltiples de la
gobernación del estado Barinas, conjuntamente con el jefe de la
división de homicidio y mi persona que iba en resguardo de la
seguridad del comisario General. Ahora bien, como se planificaron tales
actos que iban en omisión de los derechos fundamentales y en
detrimento al derecho de la defensa se cometieron muchos, que me
son imposibles enumerar. Se ordenó al personal del Ministerio público
y a los detectives cuyo casos llevaban de aplicar los protocolos de
persuasión a las madre y familiares del dolor, como así de manifestarles
que; “QUE LA INVESTIGACIÓN ESTÁN EN PROCESO” cuando
notablemente los cabecillas habían arreglado todo a su favor, de esta
forma el régimen de Nicolas Maduro lograba cansar y agotar los
hechos de ver justicia. Este es el tratamiento que el régimen de la
dictadura en Venezuela aplicaba para dejar impune todo hecho de Lesa
Humanidad cometido en el estado Barinas.

En principios del año 2022 tenía planes de retirarme del organismo de

seguridad (CICPC) y deponer las armas, ya que, por tales actos de
arbitrariedad y bajo órdenes de superiores me encontraba como
funcionario en la obligación de ejecutar actos contrarios a derecho,
como por ejemplo la violación al domicilio y la correspondencia, alterar
la escena del crimen o sitio del suceso, hacer pasar de forma simulada
mediante actuaciones de carácter policial por enfrentamientos o
resistencia a la autoridad a persona inocentes, para así incriminarlo en
hechos que no cometieron, o colocarle armas que no accionaron, entre
todas y cada una de ellas esta; la violación a la libertad personal y el
libre desenvolvimiento de la personalidad a los militantes de los
partidos políticos opositores, persecución y seguimiento en perjuicio
de los líderes políticos.

Ahora bien, el motivo el cual desencadeno mi “RENUNCIA DEFINITIVA”

es por la recepción de una llamada el cual hace mi Ex jefe ILDEMAR
SOTO, manifestándome que me presente en la sede principal del CICPC
caracas, al siguiente día llegue a la capital y en ese momento fui
interceptada casualmente por un compañero vestido de civil en las
inmediaciones del terminal la “BANDERA”, quien por nombre responde
a EDITH MOSQUEDA, por lo que me saludo con mucha discrepancia, y
en vista que éramos promoción me dijo; que si llegaba a la Sede me
iban a colocar a orden de fiscalía y me iban a imputar el delito de
“TRAICIÓN A LA PATRIA”, la pregunta que le hice fue; ¿Pero por qué si
yo no he hecho nada?, por lo que él me dice; “Como trabajaste con el
jefe ILDEMAR, se dice que te vas a retirar y vas decir lo del 2019, la orden
es APREHENDERTE y colocarte un peine al teléfono con personeros de la
oposición, “váyase”, si te puedes ir en carro particular hasta barinas
mucho mejor, ”. En vista de lo que se había presentado en la capital
llame al Dr. YONNY MORENO, abogado en libre ejercicio, para que me
asistiera a los fines de solicitar la renuncia en la delegación a donde yo
correspondía en el estado Barinas, por lo que inmediatamente fecha 08
de septiembre del año 2022 me la otorgaron por la exigencia del
defensor privado.

Después de los acontecimientos me quede residenciada en la carrera

11, con calle 3 y 5 del sector el centro, específicamente frente a la
farmacia las MALVINAS, del Municipio Antonio José de Sucre,
Parroquia ticoporo, del estado Barinas, bajo código postal 5216, por lo
que al límite de una semana mi ex jefe ILDEMAR SOTO al tener
conocimiento de yo haber renunciado, encabezó la persecución, donde
inició todo tipo de persecución en mi contra. Por el hecho de tratarse
de una ex funcionaria como yo, enviaban a las afueras de mi domicilio
camionetas sin placas, color negro, a funcionarios vestidos de civiles
con armas largas y cortas, donde se identificaban con un logo con una
calavera en el medio de los vehículos del Servicio Bolivariano de
Inteligencia Nacional (SEBIN), a una semana de haber presenciado tales
actos de intimidación y sin poder dormir, por cuanto cada vez se
intensificaba más y más los seguimientos hacia a mí, en las esquinas e
intercesiones del sector donde vivía, en vista que soy exfuncionaria de
ese organismo de seguridad, sé de que manera opera sin ceses a la
persecución; finalmente decido salir de mi país en fecha 19 de
septiembre del 2022, en horas de la mañana, por cuanto tome un bus
hacía la frontera de Cúcuta con el estado Táchira, decisión que tome a
la ligera por temor a mi vida y mi libertad personal.

No era posible que estuviera más tiempo, resistiendo, la persecución, y

las amenazas y además era evidente que el jefe del CUERPO DE
INVESTIGACIONES CIENFIFICAS PENALES Y CRIMANISLISTA CICPC, es
encabezado por quien hoy es ILDEMAR SOTO adjunto del Director
nacional DOUGLAS RICO, en complot con demás organismos de
seguridad, por cuanto tales actos de amenazas y actos de intimidación
se iban a convertir en la cárcel, tal como ha sido para muchos de ex
funcionarios que hoy en día están privado de libertad en los calabozos
del helicoide o en sedes del SEBIN, por tal, motivo me vi en la
necesidad de salir de mi país, por correr peligro mi vida, lo hice vía
Colombia, con la ausencia del sello migratorio de la salida de
Venezuela, y seguir camino hasta este país por resguardo y garantía de
mi integridad física.

En fecha tres 3 de abril del previsto año 2023 se trasladó una comisión
de dos patrullas negras con logos del Servicio Bolivariano de
Inteligencia (SEBIN) a la casa de mi madre MILEDYS YRIS PEREZ TORO,
con domicilio en el Municipio Bolívar, parroquia Barinitas, del estado
Barinas, con dirección en calle 2, casa número 10, de la urbanización la
haciendita, donde llegaron funcionarios adscrito a ese organismo y sin
identificarse o reconocerse sus rostros por estar encapuchados
ingresaron arbitrariamente y mediante a la fuerza, sin ninguna orden
judicial. Una vez dentro de la casa le preguntaron de forma repetida
con pistolas y armas largas en mano, a mi madre que “donde estaba
yo”, en eso le manifestó un funcionario a mi madre que yo tenía una
cuenta pendiente con el estado y que debía ser detenida, por lo que
me parece insólito e inaudito, ya que no estoy a orden de ningún
tribunal penal en mi país, y que por supuesto son actos contrarios a
derecho, solo para llevarme detenida y torturarme como lo han hecho
con innumerables víctimas, en ese mismo día mi madre me llamó
exaltada y con miedo a manifestarme lo sucedido, y decirme que ni me
acercara a Venezuela porque me estaban buscando.

Temiendo por mi vida y mí libertad. Pensado que me enfrento a un

gobierno homicida, arcaico, dictador, torturador, que ha arrebatado la
vida y a privado de libertad a muchas personas inocentes, solo por
pensar diferente o no estar de acuerdo con sus artimañas, no
queriendo ser la próxima víctima, salí huyendo tomando la decisión de
conservar la vida y solicitar una protección en este país.
Por todo lo anterior y ante el peligro que corre mi vida y libertad de
regresar a Venezuela es que sustento mi solicitud de Asilo.

ADRIANA ESTEFANIA HERNANDEZ PEREZ.