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GUÍA N° 6: “El mercado y las instituciones financieras en Chile”

INSTRUMENTAL CONSUMO Y CALIDAD DE VIDA


PRIMER NIVEL
UNIDAD III “La Economía de mercado en Chile”
Contenidos El mercado y su funcionamiento en Chile. El sistema financiero y
su funcionamiento.
Comprender y caracterizar los principales conceptos del mercado
Objetivos y su funcionamiento en Chile, y de las diferentes instituciones
financieras.

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La microeconomía: el mercado y su funcionamiento en Chile.

Habiendo comprendido los principales temas o conceptos de la economía como ciencia a nivel
general y los principales elementos de la economía de mercado tanto a nivel general como en
Chile, abordaremos brevemente el funcionamiento de interno de la economía, a través de
conceptos tales como mercado, comprenderemos el desarrollo y funcionamiento que la
economía tiene al interior del país, fundamentalmente a partir de algunos conceptos básicos
y algunas instituciones elementales que entregarán nociones básicas del funcionamiento de
la economía.

En este ámbito de la economía se suele hablar de microeconomía, para referirse a un área


de la economía referida al comportamiento de los sectores económicos individuales y los
diferentes factores que actúan e influyen en el funcionamiento y la toma de decisiones
individuales o empresas en la economía. Desde esta perspectiva, la microeconomía se enfoca
en definir y estudiar el comportamiento del mercado, la fijación de precios, las formas en que
se comportan y toman decisiones tanto las familias, como las empresas y como todos esos
factores confluyen para las decisiones finales respecto de la producción de bienes y
satisfacción de necesidades.

Para definir o comprender dicho comportamiento, desde la perspectiva de la microeconomía,


hace falta definir algunos conceptos que serán fundamentales, principalmente para la
comprensión del funcionamiento del sistema y el mercado financiero en Chile y sus
principales componentes.

Un primer concepto fundamental para la comprensión de la microeconomía o el


comportamiento individual de los diferentes agentes económicos es sin duda el mercado, que
puede ser definido fundamentalmente como el escenario físico o virtual en el que se producen
el conjunto de transacciones e intercambios de bienes y servicios entre compradores
(demandantes) y vendedores (oferentes).

Según estas definiciones o concepciones de mercado – y considerando los contenidos de las


clases anteriores – este medio o escenario de los intercambios y transacciones es el que regula
la economía a partir de las mismas relaciones que se dan en su interior, entendiendo que
dichos intercambios o transacciones pueden ser a distancias pequeñas o bien, en el contexto
actual, pueden ser transacciones virtuales de carácter global. Desde esta perspectiva, el
mercado y sus transacciones están fundamentalmente movidos o dinamizados por dos
importantes conceptos y que se estructuran en torno a una teoría o “ley”, es decir, mediante
una idea que se generaliza y se asume como tal en el estudio de la economía.
Esta ley o idea que maneja o es el motor de las fuerzas del mercado es la “Ley de oferta y
demanda” a través de la cuál – o cuales, entendiendo que tiene diferentes formas de
comprenderla o más de una aplicación – el mercado regula las transacciones y los
intercambios, regulando fundamentalmente el precio, como también aquellos productos o
bienes que se moverán en el mercado.

Para esto hay que definir algunos conceptos básicos y elementales que, como hemos visto, ya
se han ido desplegando en la medida en que nos disponemos a definir algunos otros
conceptos:

• Precio: es el medio por el cual se intercambian productos, bienes o servicios en el


mercado. Este medio está generalmente asociado o materializado en dinero (asociado a
una moneda o un objeto que se ha designado en las sociedades para servir de intercambio),
dicho elemento (el dinero) facilita el intercambio y permite establecer aspectos fijos o
generales para dicha actividad. El precio es, en definitiva, una relación por medio de la
cual se intercambia un bien por otro.
• Demanda: Es la cantidad de bienes y servicios que un consumidor está dispuesto a
comprar a un determinado precio o en un tiempo dado. Para que una persona o
“consumidor” demande un bien o servicio, es porque dicho bien le resulta útil para la
satisfacción de la necesidad que ha manifestado.
Generalmente a los compradores de los productos referidos se les llama también
“consumidores” o demandantes.
o Ley de la demanda: La ley asociada a la demanda como recién se ha definido,
señala que la cantidad de demanda – o de personas dispuestas a comprar – varía
o disminuye en relación inversa al precio. Es decir, si el precio de un bien o
servicio sube, su demanda disminuye; y por el contrario, si el precios de un bien
disminuye, su demanda aumenta.
• Oferta: La oferta se define específicamente como el monto que los productores están
dispuestos a vender en el mercado durante un periodo de tiempo (productos). Está
constituida por todas las mercancías producidas o que se encuentran en el mercado, que
pueden ser bienes o servicios y que son ofrecidas al consumidor por los productores o
distribuidores en el mercado.
Se entiende la oferta como aquel producto que se “ofrece” o pone en el mercado. Por lo
cual a los vendedores o productores también se les reconoce como “oferentes”.
o Ley de la oferta: Esta ley o idea general se refiere fundamentalmente a la
relación entre la oferta y el precio. Esta establece una relación positiva entre el
precio y la cantidad ofertada. Esta ley señala que, si el precio de un bien o
servicio aumenta, la oferta de dicho producto – o la cantidad que se produce de
ese bien – también aumentará, asumiendo que, de ser así, los productores o
vendedores buscarán aprovechar el consumo positivo que está teniendo dicho
producto.

A partir de estos diferentes conceptos, es que se puede apreciar que la economía es muy
dinámica y depende en su funcionamiento, de varios factores que tanto en su conjunto como
también de manera individual pueden generar diferentes variaciones o comportamientos, y
que la misma ciencia económica se ha encargado estudiar o ir resolviendo. Desde esta
perspectiva, la idea de la oferta y demanda, como reguladora de precios dice relación
fundamentalmente con el comportamiento que ambas variables tienen el la dinámica de la
economía, y como la combinación de sus diferentes leyes – tanto la ley de la oferta y la de
demanda – influyen en la fijación que el mismo mercado hace del precio.

En este mismo sentido, tanto las leyes y comportamiento de oferta y demanda, apuntan en la
dirección de una búsqueda de equilibrio en la economía. Desde la mirada de lo precios y la
oferta y demanda, es decir, de la dinámica del mercado, se busca generalmente establecer
una especie de equilibrio tanto en la oferta como en la demanda, que permita una fijación de
precios acorde con las características y comportamiento que tienen los diferentes mercados.
Para esto es que se denomina Punto de equilibrio o equilibrio cuando en el mercado logran
coincidir los deseos de los oferentes y los demandantes en las cantidades que quieren
comercializar para un precio determinado. Es, según los economistas, el punto en donde se
logra igualar la cantidad ofrecida con la cantidad demandada.

En otras palabras, el mercado – y por tanto los precios en este de algún bien o servicio – se
equilibran en la medida en que la cantidad de bienes ofertados es similar a la cantidad de
bienes demandados, generando así dicho equilibrio, que no permite que las curvas o leyes de
oferta y demanda alteren los precios de los productos a partir de las diferentes alteraciones
descritas.

Par la comprensión del funcionamiento del mercado en su totalidad y para lo que refiere
también a la fijación de precios y la dinámica del equilibrio recién mencionado, es necesario
también comprender una serie de conceptos que se originan a partir de la idea de una
economía de mercado desde la perspectiva de la competencia, y específicamente de una
competencia perfecta.

La economía de mercado se basa en la idea de que el mercado y sus fuerzas de oferta y


demanda regulan la dinámica de esta y, por tanto, en la medida en que existan mayores
variedades de ofertas según las necesidades de consumidores, el mercado tendrá mayores y
mejores formas de satisfacer las necesidades de las personas y que sean estas quienes elijan
cuál oferta cumple mejor sus expectativas. Es por eso que a las economías de mercado se les
denomina también como economías de LIBRE mercado, pues el concepto de libertad está
fuertemente asociado a la idea de poder escoger libremente los bienes o productos a consumir,
como también los diferentes medios por los que se ofertará.

Desde esta perspectiva, existen diferentes factores – desde la teoría de las economías de
mercado – que alteran el funcionamiento de este concepto de competencia y libertad, y
termina repercutiendo en el funcionamiento del mercado y sus diferentes dinámicas. En este
sentido, la competencia perfecta o mercados de competencia perfecta se entienden como
aquellos basados en el libre juego de la oferta y la demanda. Hay una cantidad suficiente de
oferentes y demandantes distribuidos de manera equitativa, por lo que ninguno puede
controlar los precios. Además, existe transparencia en la información y todos compiten sin
ponerse de acuerdo. Los compradores saben que hay varios vendedores a quienes comprar y
los vendedores saben que ofrecen productos similares a otros; mientras que por competencia
imperfecta o mercados de competencia imperfecta se entenderá a aquellos en que los
productores pueden tener cierto control sobre los precios con intervenciones de distinta
naturaleza. A partir de esto es necesario tener en cuenta algunos de los factores más
importantes que alteran este equilibrio y competencia en el mercado:

• Monopolio: este se entiende fundamentalmente como el control del mercado por un


solo vendedor u oferente. Esta situación se da cuando hay una única empresa que
produce un bien o servicio que no tiene competencia o sustitutos cercanos, por lo que
tiene casi completa potestad para fijar precios o condiciones del intercambio, pues sus
bienes o servicios – considerados para necesidades humanas – no son producidos por
nadie más.
Los monopolios tienen diferentes orígenes o formas de crearse, pero están
generalmente asociados al poder o control que tienen diferentes empresas respecto de
ciertos recursos o aspectos fundamentales para la producción de un bien, ya sea como
por ejemplo la posesión de una materia prima fundamental para producir un bien – es
decir, se posee el elemento básico para producir algo y por tanto, solo esa empresa lo
puede producir – o bien, la posesión de una patente o derecho sobre algún factor de
la producción que también le permita monopolizar dicha producción del bien y por
tanto eliminar la competencia.
• Oligopolio: Se considera un oligopolio cuando existe un número reducido – pero más
de uno – de empresas o productores que manejan la producción y la oferta de un bien
o servicio en el mercado, lo que les permite intervenir o alterar el funcionamiento de
dicho mercado, fijar precios en conjunto a partir de sus diferentes intereses y anular
la libre competencia y las dinámicas naturales del mercado. Este tipo de alteraciones
al mercado está generalmente asociado con el concepto de colusión, conducta muy
adoptada en la dinámica del mercado chileno que, ante la débil regulación del Estado
en materias de libre mercado, pueden capturar un mercado para ellos y controlar su
funcionamiento, fijando precios que no son reales o equilibrados, permitiéndoles
grandes ganancias sin que exista la posibilidad de que los consumidores escojan entre
diferentes ofertas.

Estas diferentes formas o factores que alteran el mercado, nos


permiten comprender que aún cuando existen diferentes
teorías económicas que suponen comprender los
comportamientos del mercado y el perfecto funcionamiento de
un sistema económico, este puede tener también diferentes
alteraciones y desventajas, que en el caso de la economía de
mercado o de libre mercado, están muy asociados al rol que el
mismo modelo otorga al Estado, como un agente solamente
regulador y en lo posible, lo más alejado de la actividad
económica. Lo que permite justamente, a las empresas con
gran poder productivo y económico, modificar las fuerzas y
dinámicas del mercado para su beneficio propio.

El sistema financiero en Chile: conceptos, instituciones y funcionamiento.

El sector financiero o sistema financiero, tanto en Chile como en el mundo, cumplen un rol
fundamental en el desarrollo de la economía – bajo los lineamientos de una economía de
mercado – principalmente relacionado con la posibilidad o función de movilizar los ahorros
de las personas a través de diferentes instituciones, permitiendo que sean utilizados con
mayor eficiencia para la economía, dotando de liquidez a otros agentes económicos y,
fundamentalmente, permitiendo así la creación de empresas o emprendimientos que permitan
dinamizar o mover la economía.

Aún cuando estos conceptos suenen complejos de comprender, debemos comenzar a precisar
algunos elementos fundamentales para tener en cuenta el funcionamiento y los objetivos del
sistema financiero y quienes lo componen, entendiendo también que gran parte de nuestras
acciones o decisiones en el consumo y la participación en un mercado, estarán insertas en
estas dinámicas.

• Ahorro: El ahorro resulta de aquella parte del ingreso de una persona, una empresa o
un país que no se utilizó para el consumo inmediato de productos y servicios. Este
ahorro, por lo general, lo llevan o cabo las personas y las familias, por motivos tan
diversos como mantener una reserva en dinero para atender un gasto eventual en el
futuro, financiar más adelante la educación de los hijos, com-prar una vivienda e
inclusive para garantizar estabilidad económica en la vejez (mediante sistemas
especiales de pen-sión y seguros de vida).
El salario o el ingreso disponible de una persona es destinado, en primer lugar, al
consumo; la mayor parte de la producción de mercancías y servicios en el país se
encuentran hacia esta finalidad, la otra parte del ingreso, que no se utiliza en el
consumo, se debe ahorrar. Por ejemplo, si un empleado de una fábrica recibe un salario
de 800.000 pesos mensuales y utiliza 700.000 pesos en el consumo de productos y
servicios, es decir, en el pago de alimentos, vestuario, transporte, salud, educación,
arriendo de la vivienda y recreación, entonces puede disponer de 100.000 pesos para
ahorrar.
• Crédito: El dinero que utilizan los bancos, corporaciones y cooperativas para el
otorgamiento o suministro de créditos, proviene de los recursos que estos
establecimientos financieros recogieron como depósitos del público, a través de
cuentas de ahorros, depó-sitos a término (CDT), valores y títulos. El crédito se define
como la transferencia de dinero a cambio de una promesa de pago en el futuro. Su
significado etimológico es creencia o confianza.
Al tratar de identificar las razones económicas que mantienen determinados patrones
de comportamiento frente al ahorro y al crédito, se encuentra que las familias, en
general, se caracterizan por consumir sólo una parte de su ingreso y destinar el
excedente al ahorro. En cambio, las empresas se destacan como agentes que gastan
de forma inmediata su ingreso y, además usan el crédito para financiar inversiones en
cualquier campo de producción o distribución. Cuando las empresas utilizan el crédito,
están comprometiendo el ingreso futuro que obtendrán en la venta de sus productos o
servicios.
o Tipos de crédito: Dentro del concepto de crédito, existen diferentes tipos de
créditos a los cuales se pueden optar, tanto como persona natural (persona
individual o consumidor) o también como empresa.
Crédito comercial: Consiste en el otorgamiento de préstamos para financiar
inversio-nes en equipos, maquinaria, materias primas y modernización de
instalaciones. Es decir, para mantener la dinámica de los negocios y las
empresas.
Crédito hipotecario: Se trata de préstamos dirigidos exclusivamente a financiar
la compra de vivienda nueva o usada, lo mismo que a la remodelación de
inmuebles. Este tipo de crédito también es otorgado a las constructoras para
distintas obras, entre ellas, urbanizaciones, parques y centros comerciales.
Crédito de consumo: Esta línea o sistema de financiación es utilizada
especialmente por las familias, pues se trata de un crédito otorgado a una
persona particular, con el propósito de que pueda comprar vestuario,
electrodomésticos, vehículo, pasajes aéreos o planes de vacaciones. El
instrumento más común en esta modalidad de financiación es la tarjeta de
crédito, que sirve para comprar prácticamente toda clase de productos y
servicios.
Tarjeta de crédito: Instrumento financiero que actúa como medio de pago para
la compra de productos y servicios. Se le conoce también como dinero plástico y
consiste en el uso de una línea de crédito otorgada por una entidad financiera a
una persona o empresa, la institución que expide la tarjeta se compromete a
pagar las facturas que le presenta un comerciante y que portan la identificación
de la tarjeta y la firma del usuario.
• Liquidez: Se habla de liquidez, en el contexto de una empresa o de la dinámica del
sistema financiero, la capacidad que pueda tener dicha empresa para poder solventar
sus obligaciones al corto plazo mediante el efectivo, especialmente en dinero. Esto
dice relación con pagar aquellas deudas o aspectos que son fundamentales para el
desarrollo de la empresa.
Es por esto que, cuando se habla de dotar de liquidez en el sistema financiero, se habla
de traspasar esos ahorros – en forma de préstamo o crédito – a otros agentes
económicos (empresas) para dotarlos de liquidez o de capacidad para solventar su
empresa a través del efectivo.
Comprendiendo estos conceptos elementales, es que se entiende la importancia del sistema
financiero y fundamentalmente, de conocer los elementos centrales de este, debido a que
estamos – al estar insertos en la economía de mercado – en constante relación con ellos. Este
sistema además, agrupa una serie de importantes instituciones que permiten dinamizar esta
principal función ya descrita. Desde esta perspectiva, algunas instituciones importantes que
cumplen con este rol del sistema financiero son:

• Bancos: Los bancos son las principales instituciones financieras en Chile y son
entidades que se organizan de acuerdo a leyes especiales y que se dedican a trabajar
con el dinero, para lo cual reciben y tienen a su custodia depósitos hechos por las
personas y las empresas, y otorgan préstamos usando esos mismos recursos, actividad
que se denomina intermediación financiera.
Para realizar la actividad de recibir dinero y luego darlo en préstamo, los bancos le
cobran a quienes lo necesitan y piden préstamos; asimismo, a quienes les entregan
dinero en depósito, les pagan por la confianza depositada. La diferencia entre lo que se
les paga y lo que ellos pagan, representa uno de los negocios que realiza el banco (Portal
de Educación financiera).
• Compañías de seguro: Las Compañías de Seguros Generales son empresas que
ofrecen seguros que cubren el riesgo de pérdida o deterioro en las cosas o en el
patrimonio. En forma excepcional, también cubren los riesgos de accidentes personales
y los seguros de salud.
También pueden dedicarse a la intermediación y liquidación de seguros.
Las compañías de seguros generales nacionales sólo pueden reasegurar riesgos del
grupo en el cual se encuentren autorizadas para operar, es decir, del primer grupo.
• Asociación de Fondos de Pensiones (AFP): Las asociaciones de Fondos de Pensiones
en Chile son instituciones que reciben los ahorros de los trabajadores para el
financiamiento de sus futuras pensiones, con el objetivo de entregar al fin de su vida
laboral una pensión – bajo el sistema de capitalización individual – pero además, esos
ahorros son ingresados o reinvertidos en los mercados – específicamente de capitales
y financieros – por lo que muchos de los ahorros o fondos ahorrados llegan muchas
veces a constituir fuentes de créditos para otros agentes económicos.

Aunque en general existen muchas más instituciones financieras que cumplen con la
característica principal del sistema financiero de intermediar entre el ahorro de unas personas
y la necesidad de otras de liquidez o capacidad de consumo, estas instituciones son
probablemente las más reconocidas, fundamentalmente por el alcance y reconocimiento que
tienen; tanto los bancos como la principal institución con dicha función, pero también otras
que han estado en tela de juicio, a propósito de que a través de otras funciones o necesidades
que se requieren de ellas, entran en la dinámica del sistema financiero aprovechando la
cantidad de dinero que ingresa por concepto de ahorro o por otros medios, como por ejemplo,
las AFP.

Los derechos de los consumidores en Chile: El SERNAC y sus principales funciones.

Un último elemento a tener en cuenta en esta dinámica de la economía en el papel más local
o cotidiano o como llamamos al principio, microeconomía, es sin duda el rol que juegan los
consumidores como agentes económicos dinamizantes de la economía y, en este sentido, la
protección que requieren ante posibles señales de abuso de empresas que los proveen de
bienes o servicios.

Desde esta perspectiva, en Chile se ha consagrado la idea de los derechos de los


consumidores, como aquel precepto basado en la necesidad de proteger algunos elementos
básicos que deben asegurarle al consumidor una participación protegida del mercado,
fundamentalmente para evitar que las empresas abusen ya sea poniendo precios no acordes
a las dinámicas del mercado, o bien, no respetando algunos elementos básicos del servicio o
producto que entregan, como por ejemplo ciertas garantías.

Para estos efectos, en Chile existe una institución que tiene por objetivo velar por el
cumplimiento de las leyes y normativas vigentes para proteger el derecho de los
consumidores, y es el Servicio Nacional del Consumidor (SERNAC), que se caracteriza
fundamentalmente por:

• Informar, educar y proteger a los consumidores, promoviendo el cumplimiento de la


normativa vigente, mediante la vigilancia y fiscalización de los mercados, en un marco
técnico de eficacia y eficiencia de la acción institucional, potenciando el equilibrio y
transparencia en las relaciones de consumo, a través de un SERNAC moderno y ágil al
servicio de las personas.
• Ser una institución capaz de trabajar con los distintos actores del mercado para
disminuir las asimetrías que afectan al consumidor; fuerte en el ejercicio de sus
atribuciones; proactiva, moderna y capaz de adelantarse a los temas emergentes
(página del Sernac www.sernac.cl).

Como se observa, esta institución se encarga de velar por la gestión y protección de los
derechos de los consumidores, que se podrían resumir principalmente en:
1. Derecho a elegir libremente la compra de un producto o la contratación de un servicio.
2. Derecho a la información veraz y oportuna.
3. Derecho a no ser discriminado arbitrariamente por las empresas al usar un servicio o contratarlo.
4. Derecho a seguridad en el consumo.
5. Derecho a recibir información de servicios financieros y cobranzas.
6. Derecho a cuentas claras y cobros justos.
7. Derecho a la garantía legal (Garantía generalmente fijada en 3 meses, en donde la empresa tiene
por obligación hacerse cargo en caso de falla o desperfecto en el producto).
8. Derecho a que las cobranzas de las empresas respeten la tranquilidad familiar del deudor y su
estabilidad laboral.
9. Derecho a que las empresas cumplan sus promesas publicitarias.
10. Derecho a indemnización. Si la empresa no respeta la Ley de Protección al Consumidor y le causa
algún daño moral o material.

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