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ACTIVIDAD 1 Método On Line
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ACTVIDAD 1
Consigna
día de Reyes. Con 9 años, deslumbrado, abrió una caja de madera que
contenía un serrucho, una tenaza, un formón y un martillo. No te los trajo un
rey mago, sino una reina maga, deslizó Margarita, acaso para abrirle los ojos
con delicadeza y sin dolor a aquel niño que aún creía en un mundo de fantasía.
Esas herramientas se perdieron con los años, menos el martillo. Por alguna
razón, el niño lo reforzó con la ayuda del herrero del pueblo, que cambió el
mango de madera original por un cabo de hierro. Así se hizo fuerte, tal como se
iba haciendo fuerte sin advertirlo ese chico al que le encantaba acompañar a su
padrino en sus recorridas por el obraje maderero que manejaba. Allí aprendía a
distinguir los sonidos de los hachazos sobre quebrachos enormes, que debían
ser volteados en yunta. Un hacha golpeaba hacia arriba, la otra hacia abajo, y
cuando el árbol se rendía los dos hacheros lanzaban un sapucai que repicaba en
todo el obraje.
Me gustaba hacer las cosas que hacían los grandes cuenta Luis. Por entonces
no había superhéroes, y el héroe a imitar era tu viejo. En mi caso, mi padrino. Yo
no conocí otra ternura que la de ellos. Además de quererlo, a mi padrino lo
admiraba. Este es mi hijo, me presentaba a los hacheros. Tiene otro apellido,
pero es mi hijo. Yo nunca me fui a dormir sin un beso en la frente.
Landriscina se reencontraría con su padre biológico en los años 70. Una tarde
recibió una carta suya en Canal 13, donde grababa un programa con libro de
Gius. Se vieron en Resistencia, Chaco. Fue un encuentro raro. Me alegró, pero
abracé a un extraño. Nos había dejado con los padrinos para que tuviéramos
una buena educación, dijo. Le organicé una fiesta con mis hermanos para que
muriera tranquilo, sin cargo de conciencia.
gusto. Sólo que en lugar de números se puso a contar historias, un arte que
empezó a despuntar en el secundario, con el estímulo de sus maestras, y en el
que descollaría. El cuento es un viaje. Si el viaje no es entretenido, el pueblo a
donde vas queda lejos. Lo mío es pintar en el aire con palabras.