“La educación es el arma más poderosa que puedes usar para

cambiar el mundo”

Buenas tardes honorable presídium. Directivos, profesores, padres de familia,

compañeros y público en general. Es para mí un honor y satisfacción estar
pronunciando estas palabras de agradecimiento y plenitud en nombre de los
graduados.
En este día nos hemos reunido aquí para compartir la satisfacción de culminar una
etapa de uno de los caminos más importantes de nuestra vida, es por ello que
estamos aquí compartiendo la alegría, una alegría por haber conseguido una meta
personal que nos propusimos hace unos años.
En primer lugar, quiero agradecerle a DIOS por ayudarme a cumplir este gran
proyecto, gracias por darme la fuerza y el coraje por hacer este sueño realidad,
por estar conmigo en cada momento de mi vida.
Gabriela mistral decía que la escuela era como la casa y que para
humanizarla había que romper el hielo y la rigidez.
Muchos son los momentos que hoy recordamos con mucho cariño en nuestro
proceso educativo, 4 años cargados de esfuerzos, dedicación, responsabilidad
sacrificios, miedos, compromisos e incertidumbre.
Durante este tiempo tuvimos el acompañamiento de varios de nuestros maestros,
quienes no se conformaron con cumplir con un horario y nos entregaron además
del conocimiento, el amor a la profesión, la pasión de sus enseñanzas, no fueron
dictadas para ejercer una profesión, cumpliendo lo que un día fue un sueño.
Damos gracias a ese gran equipo de docentes, por su labor, por sus respuestas,
por las exigencias y por su ayuda. Porque más de alguna vez, hicieron un poco
más de lo que deben, y supieron entregarnos afecto y una palabra de ánimo.
Este logro no es sólo nuestro, también es de aquellos quienes día tras día
estuvieron ahí, detrás de nosotros, impulsándonos a seguir adelante, siendo
siempre nuestros más fieles aliados, nuestras familias.
En especial a nuestros padres que en todo momento han estado con nosotros, en
nuestras alegrías, en nuestros miedos, en nuestros tropiezos y en nuestros
triunfos.
Hoy, más que nadie, nuestros padres sienten que han culminado uno de sus
mayores retos, vernos aquí; lo que no saben. Es que ellos son nuestro orgullo y
que les estaremos eternamente agradecidos por todos y cada uno de los
sacrificios que han hechos por nosotros. Muchísimas gracias porque tocaba
ahorrar para poder pagar el semestre, los pasajes y fotocopias. Muchas gracias
por su vocación porque son ustedes nuestros primeros y más representativos
maestros y muchas gracias sobre todo porque ustedes están más felices que
nosotros por vernos aquí.

Tampoco olvidar a nuestros amigos, tanto a los que teníamos antes de llegar aquí,
como los que acabábamos de conocer en la carrera, que eran los que te
ayudaban y apoyaban cuando tenías tantas prácticas que no sabias ni por cual
empezar, los que te animaban cuando fallabas en alguna asignatura, los que te
aconsejaban y pedían consejo en aquel momento de crisis, o bueno también
decirlo, te ibas de fiesta un fin de semana.
“es muy difícil encontrar un buen amigo, más difícil todavía dejarlo, pero
imposible olvidarlo”
Compañeros, o más bien colegas, hoy somos ganadores, no de lo que finaliza,
sino de los retos que empiezan, esta fue nuestra etapa de entrenamiento, para
poner en práctica los conocimientos adquiridos.
Se comienza un nuevo trayecto donde nuestro compromiso debe ser fomentar una
buena educación, donde solo se recordará todos los sacrificios que hicimos para
estar en este momento aquí y ahora, es ahí donde cada uno de nosotros pondrá
nuestra responsabilidad para hacer las cosas bien.
No puedo dejar de mencionar que el camino jamás se recorre solo, siempre hay
personas que lo recorrerán contigo, y compartirán esos sueños que llevas en el
corazón, aquellos que el primer día fueron desconocidos y que hoy son más que
amigos, son colegas.
Así, iniciamos un desafío nuevo, que exige cualidades y habilidades que ya han
sido forjados en estos años, que es momento de ponerlos a la práctica, requieren
estar acompañadas de actitudes como la entrega de honestidad, valentía, bondad
y amor por la docencia y por quienes nos rodean, características esenciales por
educar y construir la sociedad que todos y todas soñamos.
Será un paso adelante y un salto más lejano. La paciencia será nuestra aliada y la
sabiduría nuestro escudo. compañeros no tengamos temor porque la será difícil y
agobiante. Los valientes no han nacido por que estos se hacen en el andar.
Bueno llega el momento de despedirse, de decir adiós a la licenciatura, llega el
momento de empezar una nueva etapa, mirar e ir hacia delante, pero eso sí, sin
olvidar el pasado.
Cada uno debe seguir trabajando para lograr todo lo que se proponga, por eso no
debemos olvidar de que, si logramos mantenernos positivos, continuar y luchar por
nuestros sueños, aún con la incertidumbre y con la preocupación que todos
vivimos, entonces, lograremos vencer y lograr cualquier reto en nuestra vida.
Mi más sincera enhorabuena a todos y les deseo lo mejor para este nuevo
comienzo.
FELICIDADES..