EL ESCANDALO ELECTRICO
Y LA
INVESTIGACION
DE LA
CANARA DE DIPUTADOS
Por
JORGE DEL RIO“Los pueblos deben estar siempre atentos a la con-
servacion de sus intereses y derechos, y no fiar sino en si
mismos. E] extranjero no viene a nuestro pais a trabajar
en nuestro bien, sino a sacar cuantas ventajas pueda pro-
porcionarse. Recibamoslo enhorabuena, aprendamos las
mejoras de su civilizacion, aceptemos las obras de su in-
dustria, y franqueémosle los frutos que la naturaleza nos
reparte a manos llenas, pero miremos sus consejos con la
mayor reserva, y no incurramos en el error de aquelios
pueblos inocentes que se dejaron envolver en cadenas, en
medio del embelesamiento que les habian producido chiches
y abalorios.”
MARIANO MORENOPROLOGO
ON et presente trabajo, en que el doctor Jorge det Pio. con su alta antoridad técnica y morad, aco
C mete la critica de la farsa investigadora representada en la Cémara de Diputados, F.O.R.J.A.
reinicia sus publicaciones suspendidas desde noviembre de 1939, es decir, desde el comienzo de la
actual guerra, Ese voluntarin silencio con que F.O.R.J.A, quiso puntualizar su absoluta prescindencia
de toda pareialidad europea; solamente fué alterado por la emisién de comunicados en que se confire
maba ta voluntad de permanccer neutrales en ta contienda.
El del mantenimiento de la neutralidad fué para los miicleos directivos de F.O.R.J.A, un
tema absorbente, porque so entendia que frente a las inmrensas fuerzas desencadenadas, se estaba
juanndo un dilema de subsistencia que subalternizaba todos los. problemas de la economia y de la
politica doméstica. Subsistir coma nacién soberana,
n menoscabos de dignidad ni de territorios, nos
pareciu wna tarea ardua, capaz de consumir las energias mejores de la nacién. .
Ya una vez la Repiblica Argentina, con la inspirada y enérgica conduccién de Hipdlito Yrigoyen,
realizé el prodigio de mantenerse al margen de un conflicto extendido por todo el orbe. De esa neutra
Tidad anterior nacié la fuerza espiritual, econémica y moral que goz6 la nacién entre 1920 y 1930. Ta
repeticién de tan habil actitud diplomatica daria al pats una jerarquia espiritual de tan amplio calib
que todos tos males que nos aminoran -en el orden moral y en el orden material hallarian fécit
solucién, La intervencién, en cambio, cualquiera fuese el preterta o los argumentos 0 promesas con que
se conjugara, nos hundiria para siempre en la innoble legién de Tos paises esencialmente subordinados.
Los hombres dirigentes de F.O.R.T.A, en mérito a tan fundamentales consideraciones, estimaran
que toda accién no directamente encauzada al mantenimiento de la paz podria perjudicar la unidad
centralicacién de roluntad que el pats necesita para contrarrestar todas las maniobras intervencionistas,
Pero las grandes compaiiias extranjeras que succionan dvidamente los veneros mix substanciosos de
nuestra riqueca y de nuestro trabajo y que con su aceién colaterat enervan el cardcter de los dirigentes,
corrompen el ambiente politico y relajan-hasta los impulsos més nobles, prosequian, mientras tanto,
perfeccionando sus concesiones y ascyurando, ladinamente, la futwra impunidad para sus gestiones
‘ilegitimas,
La Uamada Compaiia Argentina de Electricidad, que es una de las sapréfitas més dafinas deb
organismo argentino, indiferente al catachsmo que ensombrese al mundo, continuaba sus ilicitas manio~
Bras con una impudicia que revela todo su desdén para la opinién priblica, La abusiva concesién que et
Concejo Deliberante To otorgs en 1936 tenia puntos débiles que era indispensable fortalecer. Era
indispensable subsanar lados sus vicios
n
para anwar futnras acciones redhibitorias y climinar las ame-
ray en que pudicra basarse una denuncia de lo pactado, Una de esas amenazas estaba constituida por
‘una investigacién parlamentaria, Una fingida investiqacién es el medio més efica: para impedir una
investigacién verdadera y es ese arbitrio, en que !a simonia comin tuvo mids influcncia que las diferen-
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Pag. 4 _ Cuadernos de F.0. R. J. A.
i «
cias politicas, el que produjo ese paso de comedia que se titula investigaciones eléctricas de la Cémara
de Diputados.
El doctor Jorge del Rio nos relata en este cuaderno las diversas escenas de la comedia represen-
tada en la Cémara, en que, como en las antiguas tragedias griegas, los verdaderos protagonistas no
aparecen en escena, Don Rafael Vehils, gerente de la C.A.D.E, es el genuino Jipiter, siempre presente,
aunque invisible, en las escenas que el doctor del Rio nos ofrece en su orden cronolégico.
Nadie con més autoridad que el doctor Jorae del Rto podria haber afrontado tan ingrata tarea
en que la acusacién de indignidad estd flotando en cada pigina y vibrando en cada constancia, El doctor
del Rio es un defensor incansable de los intereses priblicos. Su actividad de jurisperito y su preocupacién
de hombre de bien esti casi enteramente dedicada a sefalar los manejos inmorales de las compafitas
extranjeras de luz y fuera y a amparar por todos los medios a su alcance la obra liberadora que
tratan de realizar las cooperativas de electricidad.
Para el doctor del Rio, como para todo argentino consciente, el problema eléctrico es uno de los
problemas fundamentales de la patria, porque es una parte esencial del problema de la energta, que
alguna vez deberemos afrontar con esptritu resolutivo. Y el problema de la energta no es mds que une
parte del gran proWema politico argentino en que nuestra liberacién o nuestra sumisién estin en juego.
Este silogismo, en que se llega del problema cléctrico al problema de la liberacién, es casi wna sintesis
biogrdfica del doctor del Rio. El mismo tema le amplié paulatinamente el horizonte de su accién y de
sus preocupaciones y de la simple queja domfstica lo Nevd al dmbito en que actiian las grandes fuerzas
econdmicas y financieras que dominan el mundo,
El doctor del Rio tiene hoy esa conviccién decidida y tranquila, propia de quien ha formado sus
idbas en la dura experiencia de la realidad. Esa conviccién inconmovible le permite pasar indemne @
través de las tentaciones y proporciona a su franqueza sencilla una irreductible reciedumbre en todo lo
que atafie a ta salud de la patria. Vistos con perspectiva histérica, son esos los elementos esenciales en ,
que una legitima grandeza nacional puede asentarse y consolidarse. Ello sabe y por eso esté a nuestro
lado en F.O.R.J.A,
RAUL SCALABRINI ORTIZ
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INVESTIGACION
DE LA CAMARA DE DIPUTADOS
Palabras preliminares que explican esta publicacion
Las. razones de esta disertattgn en F.O.R.J.A. y
de su correspondiente publicactén, son varias: 10
La necesidad de descubrir y poner de manifiesto
una conjuracién contra los intereses publicos, de-
ber de un ciudadano que cree conocer el problema;
20. Mi obligacién moral de contestar imputaciones
de baja categoria, con las que se ha calumniado a
los hombres que, desde hace largos aiios, estamos
empeitados en una lucha de sacrificio personal,
para imponer las soluciones honestas que los gran-
Antecedentes
El origen de esta inyestigacién fué un hecho
easual. El diputado Danie] Videla Dorna, en la
asamblea legislativa realizada en el mes de sep-
tiembre del aiic pasado, a raiz de uno de los epi-
sodios del debate, se refirié a la transeripcién de
un anénimo publicado por el diario ‘Ua Van-
guardia”, en el que aparecia un grupo de radie
les denunciando el detalle de las eantidades reci.
bidas por el Dr. Marcelo T. de Alvear, por otros
politicos de figuracién y por los eoncejales. que en
diciembre de 1936. en la forma por todos conoeida,
aprobaron las ordenanzas 8028 vy 8029. que pro-
rrogaron las concesiones de las empresas de elec-
tricidad C. A.D. E. y C. 1. A. E. en la ciudad de
Buenos Aires. Como tres de los concejales que
aprobaron estas ordenanzas, los sefiores Rophile,
Stanchina y Turano, eran diputados nacionales. se
planteaha la respectiva cuestién de indignidad y
privilegio.
Fl mismo autor de la denuncia, dipntado Videla
Dorna, no tenia una nocidn precisa de la impor-
tancia del asunte y de la cantidad e importancia
de los personajes complicados en ambos bandos
politicos (radicales electoralistas, antipersonalistas
Y conservadores).
Recordamos que ésto oewrria en ese perfodo tur-
bulento de nuestra politiea, que provoed el} asunto
de El Palomar y la renuncia del presidente Ortiz,
que Inego fuera rechazada.
des problemas del pats reclaman; 30. Mi cardcter
de autor del libro: “El Servicio Piiblico de Eleo-
tricidad de la Ciudad de Buenos Aires”, que —sin
husearlo— dié pie al planteamiento de la euestién
parlamentaria, que me obligaria a rectificarme, st
se hubiera demostrado que he cometido errores 0
a ratificarme como to hago hoy, al comprobar que
todas las afirmaciones contenidas en mi obra som
exactas e irrefutables.
del asunto
La denuncia causé cierto sentimiento de terror
entre los sefiores diputados, por la indole de los
personajes que se sabia complicados y por los ru-
mores de revolucién que flotaban en el ambiente.
El primer impulso fué tapar el asunto, Se pidié
poco menos que por favor al diputado denuncian-
te, que no formalizara la denuncia y se pretendié
restar importancia al asunto, ya que el mismo —
se dijo— se fundaba en un anénimo. A pesar de
los esfuerzos realizados, en los que rivalizaron to-
dos los sectores politicos, aquellas palabras pros
nuneiadas ineidentalmente por el dipniado denun-
jante corrieron por todos los fimbitos de la ciu+
dad, porque en realidad existia un estado de indig-
nacién popular y de conviceién piibliea de que el
negaciado era realmente un esedndalo, en el qué
estaban complieados importantes hombres ptiblicos.
A la sesién signionte. el dia 4 de septiembre de
1940. ¢1 diputado Videla Dorna, de acuerdo a sw
promesa de traer elementos mis serios, ratified st
denuneia con una corta disertacién que figura em
la pig. 2 del Diario de Sesiones. de la que
transeribiremos las siguientes palabras -
“La denuncia formulada, seiores diputados, tie-
por origen la framitacién de wna concesién
otorgada par la Municipalidad de Buenos Aires,
una concesién que tenia por delante 15 (1) afios
de vigencia y que fué prorrogada por 25 afios
mds, El monto anual del producido de energia
nePag. 6
eléctrica ascicnde a 150 millones de pesos, por lo
menos, que, mulliplicados por los anos de prorro-
ge, alcauzan a une swna sideral,
La concesion did pur resultado lo siguiente:
Jo. La prévroga por 40 aiios de uni concesion que
tenia todavia 15 (1) de vigencia; 2o. La renuncia
@ favor de las empresas, de derechos patrimon.ales
del municipio adquiridos por el transeurso de tos
dios en cumplimicnto de la anterior concesion, que
otorgaba el pase total y gratuito de lus usinas e
instalaciones que se construyeran; 30. La Muniei-
palidad deberd, en consecuencia, abonar a lus em-
presas, por su valor de uso, las instalaciones exis-
tentes al término de la concesibn en virlud de la
renuncea anterior; 4o: El aumento real de las tari-
fas; 50. La incidencja sobre el piblico consumidor
de las obligaciones de las empresas, de efectuar et
aporte patronal destinado a constituir el fondo de
la Ley de Jubilaciones que ampara a los emplea-
dos; 60, La renuncia de la Municipalidad a redue-
ciones de las tarifas para los consumidores, en vir-
tud de la disminucién del costo de produccién de
la energia mediante los adelantos téenicos; To. La
derogacién del laudo arbitral, que (rajo come con-
Secuencia estas otras renuncias, que también, bre-
vemente, vamos a mencionar,
a) La devolucién de los depdsitos retenidos inde:
Bidamente para la extensién de cables a los barrios
Suburbanos; b) el ajuste de las bases en las insta-
laciones domiciliarias ¢ industriales que las empre-
sas calculaban en perjuicio de los usuarios; ¢) al™
control de las tarifas de fuerza motriz ¢ industrial
y de alumbrado de negocios; a) al principio de
igualdad de tratamiento en las tarifas, lo que cons-
La nota del Dr. Mario Bravo
En la misma sesién, del 4 de septiembre, pasé
la denuncia a la Comisién de Negocios Constitu-
cionales, para que aconsejara lo que correspondia.
Esta Comisién, que presidia el diputado Emilio
Ravignani, en su afin de restar importancia a la
acusacion, insistiendo en que sélo se fundaba en
mn anénimo, amé a declarar al doctor Mario Bra-
vo, director del diario ‘‘La Vanguardia”, que ha-
bia transeripto el volante que eontenia la imputa-
eidén, Se queria colocar al doctor Bravo en la ined-
moda situacion de probar los heehos publicados —
cosa dificil por su naturacza— o aparecer com un
ealumniador, u obligarlo a manifestar simplemen-
te, que la publicacién de wn volaite an$nimo del
que no se podia responsabilizar, habia sido una
negligencia. Con estas explicaciones me se descon-
taba, se esperaba terminar con cl asunto, pues
desde un principio se vid clara la tendeneia de
climinar los elementos més serios aportados al de-
pate, para insistir siempre.en el anénimo.
Pero las cosas tendian a agr rse. El Dr. Ma-
rio Bravo, después de declarar ante la Comisién,
NOTA (1) son 21 y 26 afios de anticipacién y no 15,
Historico de Revistas
Argentinas
Cuadernos de F.0. R. J. A
titwye a las empresas en arditradoras de las activi-
dades industridles; e) a las conseeucncias de la
comprobacion de haberse alterado la clasificacion
de locales y violady las ordenanzas sobre control
de medidores,
“A estas conclusioncs he Ucgado por el estuiio
del laudo arb.tral, al que he comparado con las
nuevas ordenanzas de concesién; por el estudio det
informe det asesor tetrado de la Municipalidad, y
pow otros elementos de juicio que se han hecho pix
blicos, como la obra del doctor Jarge del Rio sobre
el problema eléctrico titulada: “EL Servicio Pibli-
co de Electricidad en la Ciudad de Buenos Acres.
Antecedentes de las Ordenanzas 8028 y 8029 que
prorrogaron las Concesiones” (1). Todos estos an-
tecedentes expresan la suma de intereses publicos
comprometidos y la trascendencia que el pueblo les
ha dado. Basta destacar que el monto de la recau-
dacién, en un transcurso de 40 aios, importaria
mis de 6.000, millones de pesos y las ganancias pa-
ra las empresas seria superior @ 1.500 millones, ¥
no me reficro a estgrantecedentes para enunciar-
los, sino para dar at pats la significacién que tiene
en la economia nacional la explotacién de tos ser-
vieios piblicos por las empresas particulares y la
influencia social derivada de la relacin ude estos
intereses”.
Como vemos, ya no era sélo un anénimo el que
respaldaba la denuneia, sino elementos mas serios,
con autores responsables, Por otra parte, todo se
encontraba corroborado por una unénime convie-
cién piiblica de repudio a los que actuaron con tal
osadia.
publieé una nota dirigida a la misma, en la que,
si bien reeonocia el caricter andnimo del yolante
publicado, afirmaba los caracteres de negociado
que tenia la prérroga de las coneesiones. En los
parrafos salienges, esta nota decia:
“Mientras fui director, el diario se publicd a ex
pensas de una entidad juridica auténoma, consti-
tuida en sociedad de responsabilidad limitada, que
arrendé cl titulo y otros efectos del diario a la so-
ciedad anduima que lo publicaba como érgano ofi=
cial del Partido Socialista, Asi lo hice constar en
el mimero del lo. de julio de 1939 en carta a los
lectores”,
“sta aclaractén preliminar es necesaria, pues
de ahi deriva mi respoxsabilidad personal de direc-
tor en el orden periodistico y en el orden legal, ¥
siendo yo director, yo debo responder ante quien
corresponda —sca lu opinién general, el Partido
Socialista al que pertenezco, el Congreso Nacional
0 los jueces— de cuanto se haya publicado con mi
aviso 0 sin mi aviso, siluaciones que para el caso no
tienen importancia y que explicitamente rechazo”.
Enumera el Dr, Bravo la sintesis de una serie
(1) Debo advertir que yo no conocla al diputado Vi-
dela” Dorna,
Wwww.ahira.com.arCuadernos de F.0.R. J. A.
de articulos escritos sobre servicios ptblicos, pu-
blicados por “La Vanguardia” mientras fué su
director, para demostrar la oricutacién continua-
da del diario frente a estos problemas, expresin-
dose asi en uno Ue los parrafos mas salientes de
nota:
“No se podria consentir, sin airada protesta,
que una nueva sin‘estra conjuracién, como en et
caso de la C.A.D.E., despoje de sus derechos a la
cindad y se la someta al vasallaje del imperialismo
capitalista para que unos cuantos perdularios pue-
dan tence antomovil a pagarse wna campaia clec-
toral, Ante los intereses de le industr‘a eléetrica,
cacn los intereses populares y los del Estado, como
si fucran arcna, No pueden funcionar cooperativas
de esta clase sn antes pasar por el cuerpo de alqu-
nos gobernantes, inspeetores 9 cuerpos colcyiados;
lus Obras Sanitarias de la Nacién han cerrado sw
usina poderosa para favorecer a la compaiia ex-
tranjera; y la mayoria del Conesjo Deliberante,
quince aitos antes de terminar el plazo de un mono-
polio que explota sin entraias a la poblacién, a las
industrias y al comercio, le concede graciosamente
un nuevo plazo de modo que lu coyunda que ahoga
¢ inmor'liza a Ta
ciudad csté ajustada hasta et
Brayo en otro pasaje de en
“Una decision parlamentaria de esta extension
aplicada con cnergic, mediante una designacién
inobjetable, como cs de presumir, importaria wn
gran paso en la restauracién de la buena voluntad
poplar hacia sus institucioucs representativas del
govicrno”.
“BL cslado de corrupcién existe as tal modo ex-
tendido, que el Presidente de la Repiblica se ha
apresurado « denunciarlo en su illimo mensaje al
Congreso. Se ha revelado en la reciente campana
politica, donde el Partido Socialista ha tomado la
bandera de lucha contra las monopolios de la elec-
tricidad, del gas y de los teléfonos: ha ten‘do com-
probacién cn lus investigaciones desqarradoras, de
estas altimas semanas; ha s'do exhibida, en lo que
se refiere a las concesiones de clectricidad, por
campaias publicitarias de organismos politicos de
priblica cxistencia, en carteles fijades en las pare-
des. en falletos, cn libros y puesta en jwicia dentro
de la veda de los partidos, uno de los enales, Ia
Unién Civien Radical, ha acbatide con ardor, en
su convencién metropolitana, Ia conducta de sus
partidarios y las conscenencias pithlicas de sus vo-
tos, Ha sido erpuesta la irreqularidad de las san-
ciones y la necesdad de revisarlas por los conce-
jales del Partido Soc‘alista en cl seno del Concejo,
cn milliples aportunidades y finalmente, duro, en
el instante mismo de la votacién en general de la
ardenanza, su cxpresién civica y humana en el re-
cinto del Conecjo Deliberante, La sesiébn transcu-
Repercusion en
En esos dias, el agsnto adquirié una nueva reso-
nancia en el Senado Nacional. En la sesién del 1’
Archivo Histérico de Revistas Argentinas | www.ahir
Pag. 7
rria en medio de la expectacién propia del asunto,
Ya eslabu cn cl ambiente el rung de la corrup-
cién Uegada hasta et cuerpo colegiado, que tenia
cn sus manos el medio de favorecer los intereses dé
la poblacién metropolitana, Terminada la discus
sién, se procedié a volar en general la ordenanza
de prérroga de lu concesién. El presidente procla-
mé el resultadn favorable para la empresa. En ese
preciso momento descendid desde la barra hasta et
centro del recinfo una persona que enfrenténdose
a uno de los concejales, le increpa en ulta voz, pre-
sa do intensa emocién: “;Vendido! ; Has ultrajado
cl honor de nuestro padre! ;Coimero!”. Era nada
menos que un hermano de un concejal votante 3
ambos militantes de un mismo partido, El hecho
conmovié por su sincera dramaticidad, pero no la
conturo. La mayorta siguid después la votacion y
sancioné f nalmente la ordenanza a favor de la
empresa”.
“Desde entonces no ha cesado la vampaita on
‘contra de la sancién de los que Ia otorgaron y de
las entidades del capital privado que han recibido
sus beneficios”,
“Este rolante andnimo, aunque irresponsable y
personalista, es pucs una expresién del ambiente”.
“Se intentard detener la mano de la comisién,
por la especulac’én politica que siempre encuentra
nn ataque a la democracia, en el castigo de los homs
bres que se sirven de ella para sus fines, Mas, todo
cl mundo convendrd en que no es digno que la
democracia conserve, para sus altos fines politicos
y sociales, en cl seno de sus instituciones capitales,
« esos grupos de hombres que son el vémito de los
partidos y que han Ucqado a la funcién, para dar
sdnciones como la que ha sido sentenciada a muerte
moral, en favor de la empresa de elcctricidad”.
“No ha habido reaccién popular suficiente con=
tra esa mayaria concejil, porque no ha encontrado
dliento en los altos poderes. Pero si esta comision
acouseja Ia investigacién con la amplitud que ella
merece, ha de encontrar cl mds franco apoyo en la
inmensa masa, que esté enferma de incredulidad,
pera que ha de reaccionar en enanto sea conducida
por las caminos de la verdad aunque sean doto~
roses”
Pido a la honorable comision encontrar justifi=
cativo para esta nota en la circunstancia tan hone
rosa parasmi —ademds de imi direceién periodise
tica— de haber puesto mi csfuerzo como parlamene
tari para la sancién de la vigente ley que implane
16 el sufragio universal municipal, la representas
cién proporcional y cl Concejo Deliberaite clec=
tivo, instituciones creadas para el servicio civil de
una poblacién inmensa que las merecia y las mee
rece. La crisis ane ahora denuncio no es de las
instituciones, ex de los hombres que no saben sere
virlas con decencia”.
el Senado ‘
de septiembre de 1940 el senador Benjamin Villa
gaie formulé una denuncia concreta y refiriéndo
com.arPag. 8
Se a unos cuantos documentos que habfa presenta-
do dias antes en la sécretaria del Cuerpo, como
prueba irrefutable del negociado qne importaba
Ja sancién de las ordenanzas 8028 y 8029, dijo:
“Como todo el mundo, 0 mds bien, como todos
aquellos que se interesan por la marcha politica y
administrativa del pats, conacia yo lo que habla
sucedido con las compafifas eléctricas, Guardé si-
lencio porque la atencién del Senado estaba absor-
dida por el asunto de El Palomar, y porque vrei
y creo que el Senado no puede constituirse en co-
mité permanente de salud publica, en tribunal ju-
dicial sin otra preocupacién que organizar proce
sos a los funcionarios infieles que perpetran delitos
de malversacién de caudales piiblicos”.
“Resulta que hace aproximadamente un mes, el
sefior diputado Videla Dorna reprodujo en la Cd-
mara de Diputados la acusacién de “La Vanguar-
dia” y con tal motivo se produce en esa Cémara
un debate sobre si debe o no hacerse lugar al pedi-
do de investigacién, Entonces he cretdo que, para
contribuir a desvanecer las dudas de la Camara,
me encontraba en el deber de hacerle saber que es-
taba cn posesion de documentos que podrian alum-
brar el fondo de la cuestidn. No crei que debia dir
girme a la Comision de Negocios Constitucionale.
porque por el reglamento y por lo resuelto por la
Cémara, no tiene facultades de comisién investi-
gadora, Entendi, ademds, que se trata de una cues-
tién nacional de importancia extraordinaria, cuyo
debate se encuentra en mora por razones que no he
de analizar, pero que fuera de duda lo reclama el
decoro del pueblo argentino y la defensa de sus
intereses. Fué enlonces que resolvi dar a luz el
comunicado que origind el debate de referencia en
la Cémara de Diputados y que tuvo como resulta
do el pedido que acaba de leerse sobre remisién de
documentos cn mi poder”.
. “Ahora bien; los documentos que entregué al
séitor Secretario, en sobre cerrado y lacrado, puc-
den ir a la Comisién de Negocios Constituctonales
de la Camara de Diputados, pero bajo la condicié:
de que se me permita un breve anélisis,de ellos,
para que la conciencia nacional juzgue si so impo-
ne o no la investigacién pedida”.
“Las pruebas a que me refiero cn mi comuni-
eado, consisten en lo siguiente: on este trabajo, del
que es autor el sefior Jorge del Rio, bajo el epi-
grafe de “El Servicio Piiblico do Eleetricidad en
la Ciudad de Buenos Aires", Antecedentes de li
ordenanzas 8028 y 8029 que prorragaron las con-
cesiones”.
‘Aqui se encuentra la historia del servicio pii-
Blico de electricidad nacional en la ciudad de Bue-
nos Aires, desde que alwnbrara por primera vez
hasta hoy, Todas sus afirmaciones estin documen-
tadas, desde la primera ordenanza o contrato, Puc-
do afirmar que he verificado su autenticidad. Se
trata de un libro que no debe dejar de leer ningin
senador ni diputados nacional y hasta ningtin ar-
gentino a quien interesen los destinos del pais”.
“Este libro se encuentra en venta en todas las
. " Cuadernos de F. 0. R.J. A.
Ubrerfas y vid la luz en el mes de marzo de este
ajo”.
“De los documentos que contiene, voy a ocupar-
me tinicamente de aquellos que se refieren a las
aillimas ordenanzas dictadas por la Municipalidad,
en las que, como en el caso de El Palomar, se en-
cuentra ¢l cuerpo del delilo, Este aswnto de la luz,
no requiere investigacién, esta investigado, Hn las
concesiones otorgadas en las ordenanzas del ato
1936, cuyos ntimeros he citado, se encuentra, como
he dicho, el cuerpo del delito”.
“Voy a dar los antecedentes de lo sucedido”,
Agregé luego: “Por estas ordenanzas, cl Conce-
jo Deliberante liberd a las companias de la obli-
gacién que tenian de entregar al término del con-
trato —para lo que sélo faltaban 15 afios (1)— @
la comuna los edificios, terrenos, maquinarias, y
lodos sus accesorios, con la red completa de cables,
elcétera, es decir, le hizo a las empresas una cesion
gratuita para la cual no tenia facultades el Con-
cejo Deliberante. Dispuso de lo que no era suyo"s
“Segiin informes de los téenicos, esa donacidn
importé alrededor de 150 millones de pesos, y todo
esto se hizo sin consultar a las oficinas técnicas de
lu Municipalidad y después de una tramitacion
Lochornosa que ha avergonzado al pueblo de Buc-
nos Aires”.
“Yo no he de seguir comentando las incidencias
que preccdieron la concesién y he de pedir tmica-
mente que se inserten las dos ordenanzas que he
citado para que el pueblo de la Republica y en par-
ticular el de la Capital, vea lo que ha sucedido en
este asunto, Yo sostengo, setior presidente, que bas-
ta esto, para que se decrete la nulidad de estas dos
ordenanzus, Los sehores concejales que han dis-
puesto del patrimonio de la comuna, no tenian nin-
guna autorizacién por ta ley para hacer lo que han
hecho. Es mis, establecen las ordenanzas que la
comuna de Buenos Aires al térinino del contrato, en
1971, debe pagar todas las instalaciones y todo lo
que pertenece a las empresas al precio que justi-
precien tres peritos”.
“De manera que se ha cometido un delilo doble:
primero, una donacién a las empresas de lo que
no les pertenece; segundo, obligar a la comuna a
que pague més tarde lo que ellos les obsequian gra-
tuitamente”. (2),
Se refirié después el senador Villafafie a la im-
portancia moderna del servicio piblico de genera-
cién y distribucién de electricidad que subordina
a 61 todas las mis vitales actividades, a la
existencia y estructura del trust. Transcribimos
ahora los siguientes pirrafos que han de servirnos
para caracterizar en forma sintética fa naturaleza
’ magnitud del problema que motivé la investiga-
jon:
“EL problema de la electricidad en nuestro pais
adquicre los mds graves caracteres en la Capital
ra la coneesion de
G@) No faltanan 15 aos sino 21 pi
A aa je la C.I.A.
la C.A.D.E. y 26 para la concesién
(2) El delito como Jo expreso en la pég, 166 de mt
libro es e} previsto en el articulo 261 del Cédigo Penal.Cuadernos de F.O.R. J. A.
Federal, por la importancia de su poblacién, por las
grandes industrias en ella radicadas, por su gran
sistema de traccién eléctrica: tranvias, subterrd-
neos y ferrocarriles suburbanos, La ciudad de Bue-
nos Aires y los pueblos que la circundan y que re-
ciben de las usinas en ella estaldecidas la energia,
constituye cl mds importante mercado de venta de
electricidad de toda Sudamérica”,
“Basta decir que de los 1.800.000,000 de kilova-
tios horas anuales, cifra a la que asciende, segin
la Direccién de Estadistica, el consumo de todo el
pais, 1.200.000.000 los absorbe la Capital Federal y
sus ciudades y pueblos adyacentes, para darnos
cuenta de la magnitud del asunto”.
“La explotacion del servicio eléctrico de la ciu-
dad de Buenos Aires se caracterizé en los veinte
tilimos aiios por la mas desmedida e inicua explo-
tacién del piblico, resultantes de groseras viola-
ciones a sus ya generosas concesiones”.
“Contenares de millones de pesos extrajeron in-.
debidamente las empresas del piblico consumidor.
Asi, exigieron de los vecinos depésitos de dinero
para extender los cables do distribucién, de los que
$¢ apropiaron a pesar de haberse ewmplido las con-
diciones y plazos a que estaba sometida su devo-
lucién, Fueron adulteradas las bases de las insta-
laciones domiciliarias, Sélo en concepto de tarifas
convencionales de fuerza motriz y alumbrado de
negocio, que ultrapasaron los limites establecidos
en su concesién, la C.H.A.D.E. extrajo indebida-
mente de la ciudad mds de 6000.000 de pesos, Se
clasificaron arbitrariamente los consumidores con
el propésito de aplicarles al mayor nimero las ta-
rifas mdxinas”.
“Se cargé al piblico indebidamente el aporte
que la ley de jubilaciones niimero 11.110 pone a
cargo de las empresas para la jubilacién de susper-
sonal. Nunca cumplieron, ni se hizo cumplir a las
empresas la llamada cldusula del ‘‘progreso técni-
co”, prevista en el articulo 19 de la concesién de
la Compaitia Italo Argentina y en el articulo 14 de
la concesién de la C.H.A.D.E., que establecian la
reduccién de las primitivas tarifas cuando se adop-
taran inventos 0 perfeccionamientos que disminu-
yeran los costos de produccién de la energia”,
“Qued6é demostrado que las empresas distribuian
sin autorizacién legitima, corriente alternada a al-
tos voltajes no awtorizados por sus cencesiones, co-
rriente que pone en peligro la seguridad publica,
4 que determina a diario accidentes mortales, cnya
responsabilidad recae sobre las compaiias y sobre
la municipalidad”,
‘Los movimientos de protesta de los consumido-
res, no hallaron nunca satisfaccién a la sistematica
violacién a sus més elementales derechos”.
“Como he dicho, no quiero referirme a los ins
Pag. 9
tantes tristes que precedicron @ la concesién del
ano 1936. Quiero tnicamente hacer notar que el
otro documento que tengo, cuya copia fotografica
he entregado al sefior secretario, es un expediente
originalisimo. La copia la he tomado del archivo de
los tribunales. Un seitor, que no hay para qué nom-
brar, se presenta ante el juez Maschwitz, deman-
dando por locacién de servicios a la C.H.A.D.E.
De la relacién que hace,*en casi 30 paginas, resul-
ta que los servicios prestados son gestiones ante los
concejales para obtener lo que consiguieron mds
tarde. La imaginacién mds fértil no puede inventar
lo que dice este senor. Por otra parte, la demanda
termina con el desistimiento de la misma persona
que presenta el escrito, escrito autorizado con la
firma de dos abogados del foro de Buenos Aires.
No es un trabajo anénimo, La Camara puede re-
solver que se inserte 0 no en el Diario de Sesiones.
“Yo he crefdo, sefiores senadores, que debia ha-
cer esta cuestién. Es muy posible que los seftores
diputados, que san todos personas hanorables, no
canozean estas ordenanzas de 1936 que significan
un delito que ha debido acusar el ministerio fiscal
u que puede acusar en cualquier momento cual-
quiera del pueblo como un delito comin. Porque
si hubieran tenido conocimiento de estos anteceden-
tes y documentos, ni por un instante hubiesen tre-
pidado en resolver la investigacién pedida por el
Seftor diputado Videla Dorna.
“Quiero decir, también, otras dos palabras para
terminar, respecto de la prédica que se hace en
periédicos, en tribunas de todas clases, acerca de
que investigaciones de esta naturaleza amenazan
@ la democracia, también son una amenaza de per-
turbacién para la paz piiblica”.
“Yo nunca he crefdo que la democracia pueda
salvarse ocultando la consumacién de delitos, de
verdaderas bandas organizadas para saquear el te-
soro de la Nacién, Creo que, por el contrario, para
salvar a la democracia, hay que hacer luz sobre
cla para erpurgar, como decia muy bien el senor
senador Palacios, los partidos de esas bandas ra-
paces, que hacen de la politica una industria tan
Tucratira que, sean los diarios, enada se realira-
ba la diltima lucha de elecciones de diputados na-
cionales, Meaahan a dar las cifras de lo que habla
recibido cada conceial por cancenta de su gestién
en esta concesién de la C.H.A.D.E. Esto acaba de
ser reproducido en estos dias por tres periddicos,
que tienen una gran cireulacién en el pats,
‘Yo creo, sefiores senadores, que ha legado et
momento de que todos pongamos nuestro empeno
para que la democracia se salve sobre la base da
la honestidad y de la decencia en las gestiones pi-
blicas”,
“Nada més”.
Despacho de la Comisién de Asuntos Constitucionales de designacién de la C. Investigadora
Por esta denuncia concreta del senador Villafa-
fe quedaba también incorporado a la euestién de-
hatida un elemento inseparable de la misma: mi
libro, en que hago denuneias coneretas y nombro
Archivo Histdorico de Revistas Argentinas | www.ahira.com.arPag. 10 .
a los autores materiales del negociado.
Por las inesperadas derivaciones, no obstante
todos los esfuerzos realizados, no pudo matarse a
la cuestién promovida en el momento mismo de st
nacimiento. La opinién publica se agitaba. Con
mucha mala voluntad, fué necesario eubrir las
formas ‘y emprender la investigacién.
Fué asi cémo la Comisién de Negocios Constitu-
cionales de la Cimara de Diputados se vid. preci-
sada a aconsejar la designacién de una comision
investigadora, en una resolucién en la que prejuz-
gando sobre el resultado de la investigacién, se
trataba de eludir desde ese mismo momento la in-
dignidad de los diputados afectados.
No se logré, a pesar de todas las gestiones reali-
zadas por diputados, senadores y otros personajes
influyentes vincwlados a las empresas y a las esfe-
ras oficiales, obtener un despacho uniforme de la
Comisién de Negocios Constitucionales, de manera
que hubo dos despachos, Uno de mayoria, firma-
do por el Presidente, diputado Ravignani, y los
diputados Adolfo Mugiea, Juan I. Cooke y Rodol-
fo Reyna, en el que se declaraba lo siguiente:
o.—Que los elementos de j que obran en
poder de la comisién no dan base para considerar
afectado el privilegio de la H. Camara. ‘
20.—Designase una Comisién especial compues-
ta de cinco miembros, a fin de que estudie la re-
percusién y resultados de las ordenanzas 8028. y
8029 de la Municipalidad de la Capital, referentes
al suministro de cnergia eléctrica, frente a los inte-
reses generales y al de los consumidores; como ast
tambien para que se investigue los antecedentes
de la sancién de las mismas, y la exactitud o ine
Cuadernos de F.0.R. J. J
exactitud de las cuestioncs promovidas a su res-
peco.
30.—Paciiltase a dicha comisién a los efectos del
cumplimiento del articulo anterior, a utilizar los
servicios de téenicos, a citar personas y a efectuar
todas las diligencias necesarias para Ulenar su co-
netido, La comisién esté autorizada para actuar
durante el receso. <
Del primer artiewlo de este despacho resulta
que los diputados firmantes pusieron buen cuida-
do en eludir, con demasiado apresuramiento, la
cuestién de privilegio, es deci, la indignidad que
se habia atribuido a tres diputados:
El diputado Vicente Solano Lima y ef diputado
Carlos Sanchez Viamonte, se expidieron en disi-
dencia con el artieulo primero.
El diputado radical por Cérdoba —también
miembro de la Comisién— Ernesto Peiia, suscri-
Lié otro despacho, redactado en los siguientes
términos:
“Nombrar wna comisién especial investigadora,
compuesta de cinco miembros, con amplias facultae
des, a objeto de que proceda al esclarecimiento de
las responsabilidades personales, emergentes de la
tramitacién y sancién de las ordenanzas 8028 y
8029, que cl setor diputado Daniel Videla Dorna
—promoviendo, bajo su responsabilidad, wia cues-
tidn de privilegio— ha sometido a la consideracién
de la H. Camara”.
Este despacho se cefifa exelusivamente a la in-
vestigacién del negociado y a la participacién que
cabia en él a los tres diputados que como conce-
jales habian aprobado las ordenanzas. Era tal vez
el mas acertado de todos para llegar a una fina-
lidad conereta y de acuerdo a la cuestién-promo-
vida
Elementos que debian ser vir de base a la investigacion
Al discutirse estos proyectos de la Comisién de
Negocios Constitucionales, en las sesiones de los
dias 26 y 27 de septiembre de 1940, quedé acorda-
do —a pesar de las divergencias—-- que los ele-
mentos que debian servir de base-a la investiga-
eién y que respaldaban la seriedad de la denuncia,
eran los siguientes:
lo.—Los diseursos mediante los cuales habia
formulado su denuncia el diputatlo Daniel Videla
Dorna.
20.—La nota explicativa del Dr. Mario Bravo,
en su caracter de ex-director de “La Vanguardia’’,
diario que habia publicado el volante anénimo.
30.—La denuneia del senador nacional Benjamin
Villafaie.
40.—El libro titulado “El servicio piblico de
electricidad de 1a Ciugad’de Buehins Aires. Ante-
cedentes de las ordenanzas 8628 y 5029 que pr
rrogaron las concesiones”, de Jorge del Rio.
50.—La demanda contra la C.A:D.E. de Euge-
nio Regaldic.
60.—Un diseurso del diputado Enrique Dick-
mann, pronunciado en la época que se aprobaron
las concesiones.
7o—Las denuncias periodisticas reiteradas.
So.—El ambiente piblico.
Sobre estos elementos estaban de acuerdo los
diversos miembros de la Comisién de Negocios
Constitucionales que intervienen en el debate de
las sesiones de los dias 26 y 27 de septiembre de
1940.
Para comprobar la exactitud de lo que expreso,
puede verse el diario de sesiones de las fechas ci
tadas: discurso del diputado Ravignani pig. 3660
y 61; del dipntado Solano Lima, pag. 3664; del
diputsdo Sanchez Viamonte, pag. 3669; del dipu-
tado Mujica, pag. 3683,Cuadernos de F.0.R. J. A.
Pag..11
. Plan de trabajo de la Comision Investigadora
Quedé ‘designada la Comisién Investigadora, que
integraban los siguientes: diputados: Emilio Ra-
vignani y José Luis Cantilo —a quien Inego susti-
tuyé el diputado Juan I. Cooke—, por la U. Civica
Radical; el diputado Reynaldo A, Pastor, presi-
dente del block conservador; el diputado Fausti-
no Infante, de! antipersonalismo de Santa Fe; el
diputado Amérieo Ghioldi por el Partido Socialis-
ta, que renuncié Inego y fué sustituido por el dipu-
tado antipersonalista por la Capital, Rieardo A.
Moreno.
La prepayacién del plan de la investigacién
constituy6é una tarea laboriosa, que tendié, inteli-
gentemente, a alejarse del centro de la cuestién,
a huir de los puntos esenciales, a evitar las zonas
peligrosas, donde se encontrarfa el nticleo del ne-
gociado y la identificacién de sus autores.
Siguiendo el camino que lo alejaba de la com-
probacién, la Comisién Investigadora incluyé en
su plan de trabajo todos los puntos que no intere-
saban a la verdadera dilucidacién.
Por eso se opuso a las investigaciones persona-
les, relacionadas con el aumento del patrimonio
del ex-intendente Dr. Mariano de Vedia y Mitre y
del ex-seeretaric de Obras Ptiblicas de la Munici-
palidad, doctor Amilear Razzori, que defendieron
¥ promulgaron los proyectos de ordenanzas, y de
los concejales que los aprobaron con sus votos.
Se opuso también esa comisién “investigadora”
a la averiguacién del costo de produccién de] ser-
vieio piblico, elemento primordial, alegindose pa-
ra ello que Ilevaria mucho tiempo y que, adem:
el Concejo Deliberante ya habia dispuesto esa in-
vestigacién, es decir, que se abandonaba este as-
pecto del asunto al cuerpo deliberante en que
actuaban todavia los participantes del negoclado
y sus amigos.
Se eludié, también, enidadosamente, uno de los
aspectos mas graves de las ordenanzas 8028 y 8029:
el punto relativo al despojo que se hizo al patri-
monio municipal de las usinas e instalaciones ya
amortizadas, que se regalaron a las empresas.
Ni el plan de trabajos, ni el despacho, se ocupan
de mi libro, ‘El servicio ptiblico de electricidad
en la Ciudad de Buenos Aires”, que tiene puntos
de apoyo coneretos, denuneias definidas y que ha-
bfa sido considerado como una de las bases de la
investigacién.
Menciono mi libro como una prueba de la vo-
luntaria inoperaneia de la comisién, porque él se
encuentra vineulado a Ja solucién de un problema
fundamental para el pais y porque, en realidad,
al eludirse su consideracién, se prueba en forma
categérica que no se pndieron desvirtuar ni des-
conocer la veracidad de las afirmaciones que con-
tiene. Mi libro. que escribi con el pensamiento
puesto al servicio del interés publico, se encontra-
ba identifieado con la investigacién y no se lo
podia descartar.
En el perfodo de un aiio, durante el cual la Co-
misién investigadora desarrollé sus tareas, se pro
dujeron dos hechos salientes y sintomaticos: la re+
nuneia del diputado socialista Amérieo Ghioldi,
fundada en la negativa de la comisién de investi
gar el patrimonio del ex-intendente de Vedia ¥
Mitre, del secretario Razzori y de los concejales
que actuaron en la preparacién y sanéién de las
ordenanzas y, ademas, la renuncia de uno de los
téenicos, el Ing. Julio R. Castifieiras, motivada por
la naturaleza deficiente del plan de la investiga-
cién preparada por la Comisién
El despacho de la Comisién Investigadora
Aproximadamente al afio de constituirse, pro-
dujo su despacho la Comisién.
Ademas del despacho propiamente dicho. expi-
di6é la comisién cinco anexos 0 trabajos comple-
mentarios, a saber: un informe de los Contadores
Alberto 0, Argento y Mauricio E, Greffier; un in-
forme de los ingenieros Juan Frikart y Francisco
Sabelli: un resumen de las nctas de la Comisién:
un folleto tifulado: Antecedentes de los artienlos
de las ordenanzas 8028 y 8029; otro. titnlado : Tex-
to Comparativo de las Concesiones de 1907 y 1912
otro Namado: “b) C.A.D.E. Comparacién conee-
sién 1907, convenio adicional de 1928 y ordenan-
zas Nos. 8028 y 80! y otro titulado “Substan-
a eién del expediente judicial “Eugenio Regal-
i
Todo este material es pobre, preferentemente ex-
> Historic
trafio a la esencia del problema. Es el producto de
una miopta, que, honestamente, resulta dificil ex-
plicar: no se ha querido ver.
La Comisin dice en su despacho cosas como
esta: “Que del estudio de la tramitacién y sancién
de las ordenanzas 8028 y 8029 no resulta la exise
tencia de procedimicntos irrequlares que compor=
ten responsabilidades legates, ni morales, para lag
personas que han intervenido en estos actos”.
ta es una efirmacién completamente invélida
desprovista de todo fundamento. porque la Co-
idn se news a investigar los hechos que la hue
bieran autorizado para Negar a esa eonclusién, co-
mo la verifieacién de las variaciones del patrimo-
nio de los funcionarios que habian interyenido en
la sancién, negativa que motivé la renuncia del
diputado Ghioldi.
Tampoco podia la Comisién negar la existencia
m
www.ahira.con