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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
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Dedicado
A ti que lees este libro buscando
un cambio en tu vida.
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Ínidice
Prólogo
Se tenía que decir y se dijo
Por: Beatriz del Carmen Medina Arzate / Psicóloga
Capítulo 1
Enamorarse es inevitable, “apendejarse” es opcional
•Atracción y repelencia
•Amor… ¿a primera vista?
•Cómo se construye el amor
•Una copia “pirata” del amor
•Explicando las “mariposas en el estómago”
•Quítale el toque mágico
•Tú tienes el tesoro, el mapa y la llave del cofre
•El sexo anticipado te hace hiper-vulnerable
•El amor no duele, ¡ni que fuera cólico!
•¿En serio piensas quete ama porque está celoso?
•Sin reglas te topas con puros caprichos
•Los 3 componentes del amor
•Amor a ti, no por encima de ti
•Sexualidad… la gran motivación
•¡Uf, ya valió!
•Me pertenezco a mí misma, no a ti
•Patriarcado: Poder absoluto del hombre
•Violencia para controlarte y retenerte
•Individualización e independencia de la mujer
•Casarse o vivir en pareja no es ”¡a hue…rza!”
•Amor sin toxicidad
Capítulo 2
Machismo en noviazgo adolescente
•Matrimonio deja de ser objetivo del noviazgo
•Violencia la ejercen hoy ambos géneros
•Celos = Violencia de Pareja
•Machismo usa el camuflaje de la tecnología
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•Machismo en redes sociales
•¡Qué “retro”! Regresar de Homo Sapiens a Homo Rodhesiensis
•Peligros del “sexting” entre novios adolescentes
•Amor y romanticismo agonizan
•Es frecuente primera relación sin protección
•Cuando la cigüeña se adelanta
Capítulo 3
Machismo: Por qué existe y sigue
•Génesis y machismo
•Eva nació antes que Adán
•Machismo y función del semental
•En la prehistoria, la mujer no dependía del varón
•Cómo surgió el machismo
•La figura del macho mexicano
•Machismo debiera tender a desaparecer, pero no
Capítulo 4
Principales tipos de machismo
•Los machos no nacen; se hacen
•Machismo por causas directas
•Machismo por entidad emisora
•Machismo por grado de violencia
Capítulo 5
Actualización de las conductas machistas
•Neomachismo
•Machismo "light"
•Micromachismo o machismo cotidiano
•Retromachismo o machismo regresivo
•Femichismo
•Ciber-machismo
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Capítulo 6
Una meta machista y tres campos de acción
•Información es poder
•3 campos de acción machista, para dominarte
Capítulo 7
Conociendo las trampas de los machistas
•¿Has creído alguna de estas falsedades?
•Hombre sabe conquistar a la mujer; no preservarla
Capítulo 8
Origen del Día Internacional de la Mujer
•Se reconoció la equidad
•Se plasmaron los derechos femeninos
Capítulo 9
Machos y la "esposa perfecta"
•La “buena esposa”
•”Un destino de sumisión y docilidad”
•Ideología machista de Pilar Primo de Rivera
•Los 12 puntos de la “Guía de la Buena Esposa”
•”Las enseñanzas del hogar”
•Virginidad para solteras; fidelidad para casadas
•Adulterio, imputable sólo a la mujer
•Nenes con nenes, Nenas con nenas
Capítulo 10
Lo que no todas saben de “ellos”
•Acerca de sí mismos
•Hombres inseguros, celos y “ex’s”
•Sexo y compromiso
•¿Y las fantasías sexuales?
•La sensación de lo prohibido
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•El compromiso
•Lo que les disgusta cuando “SÍ van en serio”
Capítulo 11
La vida te lleva a donde tú eliges ir
•Importancia y trascendencia de SER
•A dónde quiero llegar y cuál camino tomar
•La decisión es tuya
•La nueva realidad
Capítulo 12
Acoso y hostigamiento sexuales
•Acoso y hostigamiento son distintos
•Violación y otros tipos de delitos sexuales
•¿Denunciar o no, delitos sexuales ?
•11 prototipos de acosadores
•7 prototipos de hostigadores
Capítulo 13
Maltratadores y maltratadas
•Perfil del maltratador
•Tipos de maltratadores
•Control y manipulación
•14 síntomas del hombre controlador
•Las 4 principales formas de violencia
•El ciclo de la violencia en la pareja
•Los 8 “NO” contra el machista
Capítulo 14
¿Qué terreno pisas? Haz la prueba
•Test de violencia contra la mujer
•El "Violentómetro"
•Test de la falsa encuesta
•El “Iceberg” de violencia contra la mujer
•El "Violentómetro Virtual"
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Capítulo 15
¿Por qué a mí?
•Tu felicidad no está donde te la robaron
•¡Me la vas a pagar!
•No se cómo escapar o terminar
Capítulo 16
Mejora del panorama para mujeres
•Todo cambio comienza a partir de ti
•El copete entero de Donald Trump, en la sopa
•Aferrados a obstaculizar la igualdad de géneros
•El concepto Apache
•Ganando terreno
•Decídete a vivir: Actúa.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Prólogo
Se tenía que decir, y se dijo
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Capítulo 1
Enamorarse es inevitable,
“apendejarse” es opcional
Mujeres y hombres somos un binomio biológico para
preservar y hacer crecer la especie humana; no suena
romántico porque en realidad no lo es.
Te preguntarás ¿y el amor dónde encaja entonces?
¿No se supone que este
libro pretende ayudar-
me a evitar patanes y
deshacerme de ellos?
La respuesta es
sí. Para lograrlo
diremos las cosas como
son, positivas y negati-
vas, aciertos y errores.
Poner los machistas “al descubierto”, conlleva
descubrirte a ti misma y dejar de atarte a creencias sin
fundamento.
Atracción y repelencia
El amor es la fuerza que atrae
y mantiene unido al binomio biológico
humano; funciona igual que la fuerza
magnética, atrayendo y manteniendo
juntos a dos polos o repeliendo entre
sí a los dos entes
Esa fuerza no podemos verla
pero sí sentirla; percibimos sus
efectos.
Sin amor, la relación se limita
a los aspectos físicos y químicos que,
atraen entre sí al binomio biológico
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Cómo se construye el amor
El amor aflora a consecuencia de un proceso
complejo, poco a poco
y a paso más lento que
una tortuga con una
pata enyesada; va
creciendo conforme se
desarrollan vínculos o
puentes emocionales
que, te dejan ir al otro
lado para conocer
mejor lo que hay en la
otra persona, no sólo “por encimita”.
Como toda edificación, los puentes emocionales para
resistir, necesitan una estructura que soporte las cargas,
porque sin cimientos ni columnas… “¡ya valió!”, se caerán.
Mientras más puentes existan, más áreas de “él”
podrás descubrir, y te irás dando cuenta por ti misma de lo
qué hay, cómo es, dónde están zonas hermosas y también
dónde están los baches emocionales o de comportamiento y
lo que está haciendo “él” para repararlos o si no hace nada y
es mejor irte por otro lado, “sacarles la vuelta”.
Observando, puedes saber si ahí- en esa otra
persona- existe o no, lo que tú buscas para “darle una
manita” a tu vida y que tenga mejor calidad, que sea más
tranquila, exitosa, feliz, o de si de plano “no se arma”
porque no te convence lo que hay, o lo que puedes obtener
y… ¡ni pa’ qué complicarte la existencia!
Si tú no te sientes del todo satisfecha con la relación,
tampoco lograrás que tu pareja lo esté; pronto aparecerán
las “broncas” y probablemente no vas “a hacerla” y si no la
vas “a hacer” entonces ¿pa’ que seguir?
Si lo que vas encontrando te gusta, entonces irás
construyendo más puentes que los unirán más a los dos.
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El “por qué” de
las “mariposas en el estómago”
Dicen que las mujeres al
enamorarse, sienten “mariposas en
el estómago” y que los hombres
reaccionan como si tuvieran “Fruti
Lupis”* en el cerebro. Esa sensación
surge porque tu propio organismo
te empuja hacia la función
reproductiva, al percibir inconscientemente un candidato
para ello.
La química interior de tu cuerpo
se altera y propicia que no distingas
entre enamorarte y alucinar.
En el “flechazo” y durante los
primeros 6 a 8 meses de la relación, el
sistema hormonal activa la feniletila-
mina y la dopamina, asociadas con el
placer; se producen altos niveles de
serotonina y oxitocina, que cumplen un
papel crucial para consolidar la relación, pero al mismo
tiempo, desactiva los mecanismos de defensa poniéndote en
estado vulnerable.
Literalmente andas dopada y encima conduciendo a
toda velocidad sin cinturón de seguridad; pasa Igual que con
el uso de drogas, la tolerancia o habituación llega tras cierto
tiempo, porque los receptores neuronales se acostumbran al
exceso de flujo químico y requieren más dosis para seguir
sintiendo lo mismo, y… te envicias.
Por eso no es tan fácil al principio darte cuenta de la
“neta”, ni dejar una relación, ya que tu cerebro tiene que
atravesar por un proceso de recuperación para volver a los
*Froot Loops ® y Fruti Lupi s ® s on ma rca s regi s tra da s por Kel l og’s ®
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El “flechazo” dura seis a ocho meses, tiempo en que
es mayor tu posibilidad de alucinar por la alteración
bioquímica en tu interior;
si le sumas vivir anti-
cipadamente con tu pa-
reja una vida sexual
activa, la prioridad núme-
ro uno en tu vida será
satisfacer repetitivamen-
te tu impulso sexual; si no controlas la “cachondez”, tú
misma estarás cavando el abismo en que más tarde caerás,
porque vivirás una relación muy pasional, pero muy tóxica y
tormentosa, en que te toparás a cada rato con sorpresas
desagradables respecto a lo que “él” exige de ti.
Anticiparte te hace hiper-vulnerable al auto-engaño,
te “apendeja”; y eso es lo que los machistas andan buscando,
una chava que esté “buena y pendeja” pa’ esclavizarla.
Tú tienes el tesoro,
el mapa y la llave del cofre
¿Estás segura que encontraste a tu amor? ¡Chécale
primero! Si ”él” es machista -y según estadísticas 7 de cada
10 hombres lo son en mayor o menor grado- anda buscando
en ti algo muy distinto de lo que tú esperas; ahí va a estar,
pegado como chicle a tu cabello -que si intentas quitártelo se
pega más- porque quiere ilusionarte para llegar a la “cueva
de Alibabá”. ¡Claro que
seguirá a tu lado diciéndote
una y otra vez con halagos y
promesas “¡abracadabra!,
¡abracadabra!” pa’ que tú
sigas abriendo la cueva.
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¿En serio piensas que te ama porque está celoso?
Si crees que los celos forman parte del amor, que
sin éstos no es amor verdadero… te equivocas, la estás
“cagando”.
Los celos no son muestra de amor sino de
desconfianza, y de
hecho son el primer
indicador de que estás
con un hombre tóxico -y
muy probablemente-
violento. Los celos
tienen origen bioquími-
co; los niveles altos de
cortisol son un factor importante que los desata (Ga reth Leng,
neuról ogo ci ta do por Fi s her, H. 2004
El cerebro traduce cualquier pérdida de confianza o
expectativa frustrada, en una emergencia potencialmente
mortal, propiciando un rápido descenso de oxitocina y un
aumento inmediato de cortisol, lo que lleva a sentir miedo,
pánico o ansiedad.
Los celos surgen en las mujeres cuando el hombre ya
está dando motivos para desconfiar de él. En cambio, el
hombre disfraza de desconfianza su actitud, pero en realidad
se desatan en “él” por la probable frustración de su
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tratará de asumir el poder en la relación, ser quien manda
hasta sobre ti.
Una buena comunicación conlleva a un mejor
entendimiento y conocimiento; si revisas la forma en que tu
pareja reacciona a tus planteamientos, podrás darte cuenta si
“él es” o “él no es” con quien te gustaría compartir la vida.
La idea es convencer o ser convencida pacífi-
camente, buscar un punto de equilibrio del que ambos se
beneficien; y no quedar sujeta a los caprichos que “él” vaya
teniendo.
¿Para qué aceptar unirte a quien no responde a tus
intereses? Ni cedas ni forces artificialmente una unión que
para existir debe construir previamente entre los dos,
puentes de amor, no muros; debe convencer, no someter.
1.- Intimidad
Sentimiento dentro de una relación, que promueven
el acercamiento, el vínculo y la conexión no-sexual.
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2.- Pasión
Estado de intenso impulso de unirse al otro, para
expresar anhelos y necesidades con fin de satisfacerlas.
Cariño
La relación es amistosa, hay inti-midad
no-sexual sin pasión ni compromiso; se
sienten cercanía y confianza mutua, pero no
existe el deseo de sostener vida sexual ni
comprometerse como pareja.
Encaprichamiento
En esta relación existe gran deseo por tener
relaciones sexuales, sin la suficiente confianza ni compro-
miso. Se vive una pasión desbordante pero superficial y nada
más, en que ambos probablemente terminarán siendo “aves
de paso”.
Amor vacío
Aquí no hay pasión ni intimidad, pero se siente la “vi-
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bra”” de compromiso y lealtad. Es habitual en relaciones
interesadas y algunas de larga duración; no existe confianza
plena para la relación sexual, pero sí el compromiso por estar
juntos.
Amor romántico
Los miembros de la pareja
tienen confianza y cercanía, sienten
atracción y excitación entre sí. De
continuar con grandes experiencias
compartidas, puede propiciar el
compromiso.
Amor sociable
Común en relaciones duraderas. No existe gran
pasión, pero sí vida sexual activa y compromiso. La
convivencia, los hijos y las experiencias compartidas l os
mantienen unidos. Si esta relación es satisfactoria para
ambos, puede durar mucho tiempo.
Amor consumado
Es el amor completo, ideal o maduro. Integra los
tres elementos de la teoría piramidal de Sternberg:
Intimidad, pasión y compromiso.
Las parejas con amor consumado continúan com-
partiendo el deseo íntimo y la pasión en todos los niveles,
incluso transcurridos muchos
años; es más complicado
mantenerlo que conseguirlo,
porque se demuestra con
hechos y acciones, no con
palabras ni promesas.
Sternberg concluye
que sin la expresión de los
tres componentes, el amor tiende a morir ¡caput!
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En pocas palabras, “le sacan” porque ellos quieren
mandar, no ser
mandados; pero tú
como mujer siempre
tienes la opción que si
no te gusta que te
mande “él”, entonces
tú puedes mandarlo
¡pero a la chiπҨ@ᶑ@!
Cuando su
intención contigo no es seria, si tú frenas el “cachondeo” se
molestan. Otros -más listillos y bien intencionados- van
desarrollando afectividad, confianza y mayor conectividad
emocional para despertar la intimidad y progresar
paulatinamente en el involucramiento sexual.
A algunos hombres les resulta difícil llegar a la etapa
del compromiso en el cual desean amar y mantener el amor
por su pareja (Sternberg 1998) .
Recuerda que aquello que no cuesta esfuerzo no se
aprecia, que nadie intenta conseguir lo que ya tiene o ya
disfruta, así que es preferible no dar todo antes de tiempo
porque se pierde la motivación para que la relación tome el
camino que tú deseas.
¡Uf, ya valió!
La causa principal
del fracaso en las parejas,
es unir su vida a alguien
que realmente no cono-
cen, por pasársela aluci-
nando, o no querer ver la
diferencia entre la
realidad y la fantasía con
que están pactando vivir.
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Me pertenezco a mí misma, no a ti
El machismo se asocia a
subordinar los roles en la familia, en
favor de mayor comodidad y bienestar
para los hombres.
Es parte del machismo recurrir a cualquier tipo de
violencia para mantener el control emocional y de
mando sobre su pareja, para que no “se salga de lugar” la
mujer.
En el siglo XIX se justificaron la división sex ual y los
lugares que ocuparían hombres y mujeres; ellos todos los
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espacios públicos desde calles, trabajo, instituciones hasta
foros. Ellas el hogar y punto. ¿Ves que no está nada
equilibradito el asunto?
El argumento para que las mujeres permanecieran en
la casa, fue su sentimiento amoroso, la maternidad y
disposición natural para el cuidado de otros; los afectos en la
relación madre/hijo(a).
El matrimonio es un Contrato de Convivencia con de-
rechos y obligaciones para ambos contrayentes. Hay
hombres que creen que ellos sólo tienen derechos, y hacen
creer a las mujeres que ellas únicamente adquieren
obligaciones. No es un contrato de compra-venta, no se
expide factura que otorgue en “propiedad” a otra pe rsona,
no se vale secuestrar su voluntad o restringir su libertad.
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15 años, reportaron haber sufrido algún tipo de violencia
“familiar” en su contra. En número directos estamos
hablando de 1.2 millones de mujeres violentadas.
La violencia contra la mujer y los feminicidios en
México muestran un panorama sombrío y alarmante.
Debemos alzar la voz para que las autoridades aceleren los
cambios necesarios en nuestras leyes y protocolos de
atención a las víctimas a fin de recuperar nuestro derecho a
disfrutar nuestra vida sin violencia.
Es muy importante que tomes en cuenta la situación
que reflejan las estadísticas más recientes para que no pases
a formar parte de los millones de mujeres violentadas o de
los miles de mujeres que cada año mueren siendo víctimas
de feminicidio, como lo refleja el informe mexicano
presentado en noviembre 2019 por el INEGI, cuyos aspectos
más sobresalientes aparecen enseguida
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Cada año asciende el número de divorcios y
desciende el de matrimonios,
a nivel nacional casi 90% de
las parejas que viven juntas,
unidas o no legalmente, han
experimentado algún tipo de
violencia familiar.
El matrimonio es un
acuerdo de voluntades entre
dos personas para realizar
una vida en común, que se
manifiesta y asienta por
escrito ante las autoridades; sus bases son el respeto, ayuda
mutua e igualdad.
Así como decidimos y elegimos libremente unirnos a
otra persona, igualmente podemos
decidir y elegir dejar de hacer vida
en común.
Desde el 2017, esto es
posible en algunos estados de la
República Mexicana, como Nuevo
León; basta la voluntad de uno solo
de los cónyuges para pedir la
disolución del vínculo matrimonial a través del Divorcio
Incausado (s i n ca usa), conocido popularmente como “Divorcio
Express”, porque en promedio de 15 días hábiles el conflicto
se resuelve mediante juicio, siguiendo apropiadamente el
proceso y cumpliendo los requisitos.
Así que ya no es necesario darle explicaciones a
nadie, ni a la pareja, ahora sí se puede “nomás porque ya no
quiero”, como debió ser siempre.
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Capítulo 2
Machismo en noviazgo adolescente
La violencia machista se presenta desde las
relaciones de noviazgo, cuando no
existe aún dependencia económica,
ni responsabilidad contractual.
Durante el noviazgo se idea-
liza a la pareja, y se confunde el
maltrato y las ofensas con amor e
interés por parte del compañero (Os ori o y Rui z, 2011; La bra dor,
Ferná ndez y Ri ncón 2010) . La violencia en el noviazgo es vista por
los jóvenes como algo natural o normal (Ra mírez y Nuñez, 2010) .
Es necesario cambiar esta mentalidad, la violencia no
viene en “combo” con la relación y debemos retirarla del
“menú” porque además de intoxicar psicológicamente,
lesiona físicamente, e incluso asesina.
Si seguimos creyendo “a mí no me va a pasar”,
pregúntales si les pasó o no, a las más de 82 mujeres que
diariamente son asesinadas en el mundo por su pareja
actual o su ex-pareja (Da tos ONU 2018) . Haz cuentas, eso quiere
decir que prácticamente aquí, en este planeta, cada 20
minutos del día –digamos que en lo que tú te bañas- una
mujer ya murió asesinada por quien ella “supuso” la amaba.
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10 y 15 años de edad, mientras que el porcentaje de
hombres es de 38.8%, casi el doble.
El 46.8% (ca s i l a mi ta d) de los hombres que
embarazaron a su novia o similar, no se hicieron cargo del
bebé; en 54.38% de las mujeres que han estado
embarazadas (má s de la mita d) siguió dándose violencia física,
emocional o sexual en su contra.
Esto último es como ir a comer, hacer “pisa y corre” y
luego agarrarla a golpes contra la invitada a comer.
En México, la «Encuesta Nacional de Violencia en el
Noviazgo 2007» dejó ver que 76% de los jóvenes han sido
víctimas de violencia psicológica por parte de su pareja.
Según datos de la investigación Rey-Anacona (2013),
85.6% de los jóvenes declararon haber recibido por lo menos
una vez, alguna forma de maltrato por parte de su pareja.
La investigación realizada por Guzmán, Esparza,
Alcántara, Escobedo y Henggeler (2009), indica que 80.3% de
las mujeres han sido víctimas de violencia psicológica en el
noviazgo y 77.4% de los hombres han ejercido violencia
psicológica durante esta etapa.
Saldivia y Vizcarra
(2012) , hallaron que 71.7% de
los estudiantes encuestados
declararon haber experimen-
tado al menos un episodio de
violencia física, psicológica o
sexual en su relación de
pareja.
¡Alto, Stop, Alto! A
ver… vamos a hacer las
cuentas al revés, promediando
las cinco cifras anteriores, quiere decir que sólo 2 de cada 10
parejas de novios o equivalentes, logran “llevar la fiesta en
paz”. ¡Urge tomar acciones preventivas, cambiar creencias,
trasformar la educación en instituciones y hogares! De hecho,
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Velázquez (2011) refiere además la importancia de
“tomar en cuenta los antecedentes de violencia que se
presentan en las familias de los jóvenes”.
Un estudio realizado por Rey-Anacona (2015),
concluye que jóvenes testigos de actos de maltrato entre
sus padres, trasladan esta conducta a sus relaciones de
noviazgo, aceptan el uso de violencia y se adjudican rasgos
agresivos.
El informe revela que jóvenes que vivieron en un
ambiente violento cuando niños, ven con naturalidad las
agresiones y violencia en las relaciones románticas. ¡Pero no
es natural para nada!
El uso de sustancias favorece el maltrato y se
relaciona con la forma en que se ejerce; así, el alcohol está
asociado con el nivel de violencia, con la forma física y no
con el abuso sexual; la cocaína se asocia al abuso sexual y no
al maltrato físico (Rodríguez, Rodríguez y Antuña, s /f) . ¿Y entonces
si el hombre a la vez anda “pedo” y “viajando” cómo va a
comportarse?
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violencia en línea aumentó conforme las nuevas tecnologías
pasaron de ser un lujo a una necesidad de la vida diaria.
Las conductas abusivas vía móvil, entrañan una
invasión contra el bienestar físico, psicológico y emocional de
las chicas; que la violencia sea cibernética no le da
características de menos real o menos destructiva.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) en un
estudio del 2002 revela que la violencia cibernética tiene
género masculino. Las
mujeres fueron víctimas en
el 84% de acosos en línea.
Los resultados en
2011 de un estudio reali-
zado por Turan, Polat, Kara-
pirli, Uysal y Gokce Turan,
resaltan que, la violencia
psicológica recurre al uso de
habilidades técnicas para
tratar de controlar a la
víctima y se materializa vía
mensajes msn, whastapp, messenger y otras aplicaciones
similares.
En el estudio «Machismo a Golpe de Whastapp»
realizado por los departamentos de Trabajo Social y Servicios
Sociales, así como de Psicología y Comunicación de la
Universidad de Alicante, los resultados revelan que la
recepción de mensajes sexistas a través del móvil por parte
de la pareja u otra relación personal, es 16.2% en recepción
frecuente y 15.8% ocasionalmente.
De los estudiantes que recibieron mensajes de
carácter sexista, 26.1% enfrentó directamente a quien los
enviaba, 22.6% lo contó a un amigo o amiga, 21.6% se
desconectó, 17.1% bloquearon los mensajes o cambiaron el
código o clave de acceso, 14.9% lo informó a su familia,
12.6% no hizo nada esperando cesaran, 7.7% decidió poner
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Por su parte, la especialista española Mirian Blanco,
quien condujo el estudio investigativo «Uso de las redes
sociales en la perpetuación del discurso del amor romántico
entre adolescentes» (2017), señala que la “concepción errónea
y desigualitaria de la relación amorosa puede llegar a
traducirse en el control de la otra
persona. Esto constituye frecuen-
temente el primer eslabón de la
cadena del maltrato, el problema
es que chicos y chicas no lo
identifican como tal, sino que lo
consideran como una muestra de
amor”.
¡Hey, la “neta” es que los
celos son todo lo contrario al
amor!.
El estudio revela que 7 de
cada 10 encuestados -de entre 13 y
16 años- creen que los celos son una prueba de amor y 4 de
cada 10 chicas afirmaron recibir reclamos por hablar en
redes sociales con un amigo o conocido que no le cae bien a
su pareja; 6 de cada 10 chicas opinan que la frase: "El amor lo
puede todo" es verdad. Ok, pero los celos no son amor.
A través de las redes sociales se incrementan las
posibilidades de establecer mecanismos de control hacia la
pareja, como sufrir “ciber-acoso”
para obligar a la práctica del “sexting”
(contenidos de tipo sexual íntimo compartido
a tra vés de l a red) .
Amarte no le da derecho a
otro de invadir tu intimidad y mucho
menos de exhibir lo que ocurra en la
misma.
Las Redes Sociales nos connaturalizaron con la
percepción errónea de la relación que sostenemos con otros.
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¡Qué “retro”!
Regresar de Homo Sapiens a Homo Rodhesiensis
Más de la mitad de los encuestados por Blanco en la
investigación ya señalada, justifican las relaciones violentas
-como dar un puñetazo- después de haber vivido una
situación tensa o de gran nerviosismo.
La investigación arrojó que el 82%de las adoles-
centes y 86% de los chicos encuestados no creen en una
relación sin una fuerte pasión que dure más allá del
enamoramiento.
El lema -a nivel global- en gran número de los
actuales adolescentes parece ser “¡Qué viva el sexo y que
muera el amor!”. Esa forma de pensar, junto con la violencia
contra la mu-
jer en las pa-
rejas, para so-
meterlas, nos
regresa 200
milenios, va-
mos en rever-
sa como si
nada, ya éra-
mos Homo Sa-
piens Modernos, pero nos estamos comportando como
Homo Rodhesiensis.
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Esto es una inadmisible retro-evolución
socio-intelectual de la especie, que ya afecta
sectores de la sociedad humana. Los indicios
son, que vamos en ese camino y acelerados de
a m… ¡rapidísimo!
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El “ventaneo” o espionaje morboso, ha evolucionado
hacia un voyerismo tecnificado, donde la ventana se
reemplazó por la cámara y pantalla personal.
Los padres pueden creer que cuando sus hijas(os )
menores de edad se retiran a dormir,
realmente duermen, pero algunos de
ellos recurren al “vamping”, que es,
estar detrás de la pantalla hasta altas
horas de la noche, navegando, socia-
lizando y “sexteando” sin interrupciones
ni supervisión alguna; se contactan con
la pareja y ejercen en silencio una ciber-
relación sexual a distancia, con grandes dosis de erotismo
personalizado. ¡Sopas!.
Algunos padres o tutores se sienten más tranquilos
limitando el uso de celulares en púberes y adolescentes,
restringiéndoles su uso en ciertos horarios o contextos, o
decomisándoselos por semanas enteras, pero de poco sirve.
La conectividad hoy en día está a sólo unos pasos, el “Wifi”
público hace imposible desconectar a los menores
completamente de la Red. Como siempre ha sido, los
púberes y adolescentes recurren a su ingenio para vencer
obstáculos, lo que es parte de su aprendizaje en su paso
hacia la edad adulta.
La intimidad entre dos personas conectadas por
cualquier medio a través de la Red de internet, es sólo
teórica; la vulnerabilidad a que la privacidad sea violada, es
alta; si bien nadie debe “intervenir” las comunicaciones
ajenas, ninguno estamos a salvo de pérdidas
del móvil o del USB, de ladrones de celulares
y hackers. Las mismas empresas que facilitan
esa privacidad, de vez en cuando -bajo
argumentos de acciones preventivas- veri-
fican que todo esté en orden, pero las
empresas no están exentas a la tentación de
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pervertido» (con s ecci ones de memori a s USB pérdi da s , cel ul a res
roba dos, vídeos de hoteles y moteles en la ci udad de México, informa ci ón
de “Guapas que van a OXXO”, “Las polakas más putas del congreso”, “Mini
faldas en Madero”, “Probadores de Ropa Tepito”) .
La gran mayoría de estas publicaciones se hacen sin
consentimiento de la persona exhibida, es una total
violación a la privacidad, y una clara trata virtual con fines
sexuales, lo que signi-
fica que las imágenes
pueden ser utilizadas
hasta para ofertar
presuntos servicios
eróticos; en ocasiones
es tanta la promoción
virtual que, llegan a interceptar a la víctima en su vida real
para exigir el pago sexual que con su imagen en redes
sociales un cliente ha liquidado; en 90% de los casos las
víctimas, ni siquiera saben que su imagen está siendo
explotada sexualmente de forma virtual («Frente Na ciona l pa ra
l a Sorori da d» 2019) .
Desde el arribo de los teléfonos inteligentes, prác-
ticamente cada persona, desde su pubertad tiene consigo
una cámara de fotos y videos fácil de operar, transportar y
operar sin que se percaten quienes están alrededor.
Algunos adolescentes utilizan esta herramienta para
“exitar” a quien tienen o desean tener como pareja,
enviándoles por la Red en privado, fotos e imágenes
exhibiéndose sin recato, desnudos e incluso en acciones con
características psicópatas, como transmitir “en vivo”
mientras se masturban, porque “no aguanto las ganas de
estar contigo” o “no puedo esperar el momento de hacerte
mía”; recurren a manipular para despertar sentimientos de
culpa en su pareja, afirmando “mira lo que me obligas a
hacer porque no puedo tenerte” (Ra s treo de los a utores del libro, en
2019) .
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
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paralelamente una realidad virtual sobresaturada de
pornografía, generada por protagonistas cercanos o directos.
El objetivo de la rela-
ción se ha confinado única-
mente a la obtención inme-
diata del disfrute sexual. El
amor y su romanticismo ago-
nizan, porque algunos inte-
grantes de las nuevas gene-
raciones, sin darse cuenta, están asesinándolos.
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
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Según datos de la Organización para la Cooperación y
el Desarrollo Económicos (OCDE) , en México 23% de las y los
adolescentes inician su vida sexual entre los 10 y 19 años. Lo
anterior, lo confirma el Instituto Nacional de las Mujeres
señalando que anualmente ocurren en México alrededor de
340 mil nacimientos provenientes de menores de 19 años.
En la adolescencia aún no se completa la epitelización
del cuello uterino, pudiendo producirse una ectopia cervical;
el tejido interior del cuello uterino se expone al exterior,
elevando la vulnerabilidad de las chicas a infecciones de
transmisión sexual. La madurez de los órganos genitales
femeninos se presenta aproximadamente a los 20 años de
edad, por eso el embarazo adolescente se torna de alto
riesgo para madre y bebé.
A lo anterior se agrega que los jóvenes recurren con
alta frecuencia a relaciones anales, buscando evitar
embarazos no deseados, pero propiciando el surgimiento de
enfermedades venéreas.
Cuando la cigüeña se anticipa en la adolescencia, una
de las experiencias más felices en la vida de una mujer se
superpone con otras de las peores,
como frustración y posposición in-
definida de sus sueños de reali-
zación individual; la mayoría de las
chicas aún no están aptas física,
psicológica ni económicamente para
asumir la crianza de un nuevo ser.
Los analistas del tema
asocian el fenómeno entre otras
causas, al desconocimiento sobre
sexualidad, la repetición de un
patrón familiar de madres ado-
lescentes, así como las diferencias
de percepción de las relaciones
sexuales en mujeres y hombres.
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Las fotografías e imágenes presentadas en este capítulo para ilustrar “sexting” y “packing”, son reales y
fueron obtenidas de sitios web que en México se dedican a difundir fotos y videos de menores de edad en
situaciones de exhibición sexual. Las imágenes se desenfocaron y cubrieron parcialmente a fin de proteger a
las víctimas, su inclusión se realiza con fines educativos e ilustrativos, conforme a la normativa del Artículo
201, fracción V, párrafo cuarto, del Código Penal para el Estado de Nuevo León.
56
Capítulo 3
Machismo: Por qué existe y prosigue
”Machismo” deriva de “macho”, cuya etimología
proviene del latín "mascŭlus", diminutivo que aplicaba a
cachorros de sexo masculino.
El machismo es un pre-
juicio sexual; sostiene gratui-
tamente que el varón es superior
a la mujer en inteligencia, fuerza y
capacidad; que la hembra es frágil,
débil, dependiente e incapaz de
desarrollar productivamente de-
terminadas labores; por ello -
según los machistas- el varón
debe ejercer los poderes de
decisión y elección, el don de
mando, disponer a su criterio de
la relación afectiva y sexual, entre
otras cosas.
No es una característica
individual o de un grupo de per-
sonas, es una relación en que el hombre ejerce abuso de
poder como expresión del autoritarismo que aprende desde
niño, en que ambos géneros participan y son víctimas. Se
fortalece en la educación del hogar y traspasa sociedades,
culturas, naciones y generaciones, quienes desgraciada-
mente las perciben como algo natural.
Ya que es una falsa creencia, puede y debe
erradicarse; hombres y mujeres tenemos los mismos dere-
chos y debemos gozar las mismas oportunidades.
Génesis y machismo
Gran parte de la existencia y fomento del machismo
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
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Tal vez Adán le comentó a Eva lo que Dios le había
prohibido (a él) y lo hizo extensivo a Eva (al nosotros), ya
que Eva sí menciona tal prohibición de Dios para ambos en
los primeros versículos de Génesis III, donde ella habla en
plural: 1 La serpiente era el más astuto de todos los animales
del campo que Yavé Dios había hecho. Dijo a la mujer: ‘¿Es
cierto que Dios les ha dicho: No coman de ninguno de los
árboles del jardín?ʼ 2 La mujer respondió a la serpiente:
‘Podemos comer
de los árboles del
jardín, 3 pero no
de ese árbol que
está en medio del
jardín, pues Dios
nos ha dicho: No
coman de él ni lo
prueben siquiera,
porque si lo hacen
morirán” 4 La serpiente dijo a la mujer: ‘No es cierto que
morirán. 5 Es que Dios sabe muy bien que el día que coman
de él, se les abrirán a ustedes los ojos, entonces ustedes
serán como dioses y conocerán lo que es bueno y lo que no
lo es”
Es curioso que según el Génesis, Dios haya prohibido
el conocimiento, cuando el hombre real en su evolución
tenía relegada del conocimiento a la mujer, tal vez porque
planeaba seguirlo haciendo y para ello necesitaba una
justificante superior a lo humano, ya que la ignorancia es lo
que conduce a ser dominado y sometido, así como a la
pobreza y con ésta a la dependencia.
La prohibición únicamente para Adán vuelve a
ratificarse versículos más adelante, reafirmando que la
prohibición fue en singular, en Génesis III:17: 17 “Al hombre
le dijo: ‘Por haber escuchado a tu mujer y haber comido del
árbol que Yo te había prohibido comer (…)‘ “
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la finalidad del relato es establecer las bases del monoteís-
mo, que supone la existencia de un Ser divino único, eterno y
trascendente a la materia, y ligarlo a un pueblo en particular
que buscaba autoproclamar su supremacía para poder
recuperar la tierra que les perteneció (hoy Israel), de la que
habían sido expulsados en dos ocasiones, primero por los
Asirios y luego por los Babilonios.
Las leyendas del Génesis de la creación del mundo, la
primera pareja humana, el Diluvio con el Arca de Noé y la de
la Torre de Babel, provienen de escritos que datan de 10,000
años antes de Cristo, y fueron recopilados, traducidos
ordenados y modificados después del año 586 antes de Cristo
por sacerdotes, cuando Judea es conquistada por Babilonia,
que luego de destruir a Jerusalem y al Primer Templo
construido por el rey Salomón, exilia a la mayoría de los
judíos.
En el siglo III a.C. el rey Ptolomeo II invitó a setenta
sabios judíos a reunirse en Alejandría para aportar a la
famosa biblioteca la historia del pueblo de Israel. Durante
meses, pusieron por escrito la memoria de miles de años de
ese pueblo, desde Adán hasta Moisés, incluyendo los libros
sapienciales, proféticos, legendarios e histórico-familiares.
Los documentos se tradujeron
del arameo y hebreo antiguos al
griego. Así nació la llamada Biblia de
los Setenta o Alejandrina en que se
basa el Antiguo Testamento actual.
Esto no pueden rebatirlo ninguno de
los religiosos judeo-cristianos, ni el
mismo Papa Francisco, porque son
hechos documentados.
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
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Si biológicamente la mujer no proviene del hombre,
sino a la inversa, ¿cómo fue que los machos pasaron a ser
“superiores” que las hembras?
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niendo con una mano el garrote y con la otra arrastrando por
la cabellera a la mujer, es contraria a la realidad de entonces;
la mujer fue elemento clave para la supervivencia y organi-
zación social de las comunidades.
El matriarcado prevaleció desde los albores de la
humanidad hasta aproximada-mente los años 9000 a 3000
a.C. en que, el adelanto de la agricultura permitió controlar e
incrementar las posibilidades de supervivencia de las comuni-
dades al lograr fuentes estables de alimento (Rodríguez 1999) .
La especie humana es la única capaz de generar su propio
alimento, así como alimento para otras especies.
El paso de sociedades recolectoras del Pal eolítico
superior a las horticulturas y agriculturas del Neolítico,
conllevó grandes cambios estructurales. La agricultura
permitió controlar e incrementar las posibilidades de
supervivencia con fuentes estables de alimento; no se
detuvo la caza ni recolección de alimentos silvestres, pero la
presión demográfica escaseó estos recursos, dependiéndose
cada vez más de las propias cosechas de cereales y
leguminosas, así como del ganado doméstico (Rodríguez 1999) .
Alimentar a una comunidad creciente exigió más
cultivos y mayor producción, así que los varones tuvieron
que olvidarse de la cómoda y
holgada existencia que llevaron
en la fase horticultora, y ponerse
a trabajar con las mujeres en las
labores de cultivo, pero final-
mente, las nuevas condiciones
laborales, condujeron a que la
única forma de organización social
viable precisara implantar la ex-
plotación y desigualdad (Rodríguez
1999) ; con la horticultura y agri-
cultura comenzó a formarse lo
que conocemos como “propiedad
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
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Una vez apartada la mujer de los conocimientos
sociales básicos -reservados al varón- y mantenida fuera de
la producción, de la gestión de cultura y religión, también
fue excluida del acceso a la escritura; con la segregación
surgieron una serie de tabúes sobre ella que,
pretendiendo justificar su estado, la aislaron
todavía más (Rodríguez 1999) .
La mujer pasó a depender del varón
hasta para su propia supervivencia; primero
del padre, luego de su marido, y acabó
convirtiéndose en un bien comercial; el “ama de casa como
Dios manda” fue un valor de intercambio matrimonial en
nuestra cultura hasta hace pocos años, y sigue siéndolo en
otras (Rodríguez 1999) .
Señala Rodríguez que la mujer fue convertida “en un
bien mueble, de gran importancia socioeconómica, eso sí,
debido a su capacidad para procrear -aportando hijos/mano
de obra a la familia paterna- y para trabajar en la
manufactura de alimentos. Por esa razón se acabó
estipulando el llamado ‘precio de la novia’, un pago o
indemnización que el novio -o su familia- le entrega al padre
de su futura mujer para poder llevársela de su casa; en ese
acuerdo ganaban ambos linajes: el del padre de ella porque
lograba bienes para sí y/o para poder comprarle una esposa a
otro hijo varón; el del padre de él, porque conseguía el
trabajo de una mujer y de los hijos que le daría como
propiedad”.
El proceso tardó algunos miles de años en
completarse, hasta llegar a la total desigualdad entre los
sexos. El machismo -a pesar de la lucha feminista y sus
logros- perdura hasta hoy.
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
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Al estereotipo se sumó la cualidad de virilidad, se
volvió colectivo y el macho-charro identificó a México como
país de charros avecindados en un lugar específico, Jalisco,
símbolo de la mexicanidad, y en especial Guadalajara y la
región de Los Altos, donde abundan las personas con ojos
claros. “Extraña forma de volver puro lo mestizo”, refiere
Machillot.
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Capítulo 4
Principales tipos de machismo
Transformar conductas heredadas desde la prehis-
toria, es difícil y lento. La connaturalización con actitudes
machistas desde el seno familiar entorpece identificarlas con
claridad y conlleva a coartar derechos y libertades del
género femenino.
La masculinidad dominante, plena en fuerza, vio-
lencia y agresividad, se nutre de la discriminación, del
sexismo y la injusticia; se materializa en homofobia, en
segregación de género y machismo (As turi a s , 1997) .
Ser hombre en una cultura patriarcal, exige repro-
ducir patrones sociales y culturales de control sobre la mujer;
los hijos se vuelven garantía de perpetuación del modelo
androcéntrico (Va nega s , 2005) .
Como el comportamiento abusivo se aprende, por
consecuencia puede modificarse estableciendo límites y -de
ser necesario- alejando nuestras vidas de los machistas. Es
importante establecer claramente que ambos géneros
tienen valor por sí mismos; la equidad garantiza la
estabilidad de las relaciones (Becerri l -2014).
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Religiosas
Algunas religiones incluyen en sus
textos referenciales un trasfondo machista.
Fomentan las expectativas masculinas de
subordinación de la mujer, quien debe
seguir los parámetros de su religión en
particular.
Tradicionalistas
Utilizan el valor de las costumbres como justificante
para dejar de lado la opinión femenina, con referencias
como: “siempre ha sido así” o “es lo correcto”.
Un ejemplo claro es criticar a la mujer soltera que
enfrenta un embarazo no deseado, ya que no es la costum-
bre, la tradición dicta “primero te casas, luego tienes hijos”.
Misongistas
Manifiestan desprecio agresivo contra todas las
mujeres en forma generalizada. Los misóginos se caracteri-
zan por odiar a las mujeres y favorecer su trato discri-
minatorio, sin una razón específica.
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Ignorantistas
No sienten empatía por la mujer e ignoran su digni-
dad de ser humano con igual valor y mismos derechos. Jamás
toman en cuenta la perspectiva femenina.
Institucional
Está inscrito en leyes, reglamentos, códigos y estatu-
tos; debe lucharse en términos jurídicos para eliminar sus
rasgos discriminatorios hacia la mujer.
Laboral
Inicia concretamente con la
discriminación femenina; se proyecta en
sueldos más bajos, obstaculización de
acceso a ciertos cargos, ascensos o
beneficios, requisitos excluyentes como
apariencia física y estado civil.
Hasta principios de los 80’s, en México era común
que la mujer podía trabajar en empresas privadas sólo
mientras permanecía soltera; casadas, divorciadas, viudas o
quienes vivían en unión libre no tenían oportunidad.
Aún hoy, el embarazo y la maternidad son causas
comunes de discriminación femenina, ya que según los
machos, reduce su desempeño y productividad.
Compañeros de trabajo y jefes, suelen colocar las
opiniones masculinas por encima de las femeninas,
devalúan sus propuestas, quejas u oposiciones, adjudi-
cándoles veladamente calificativos de absurdas, fuera de
lugar o exageradas.
Mediático
Usa la sexualidad femenina, exponiendo a la mujer a
través de cualquier medio de difusión, de manera directa o
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
De grupo informal
Es expresado por grupos como los integrados por
libre albedrío en Blogs y Redes Sociales, o los grupos mascu-
linos que se integran en fiestas y reuniones.
Se incluyen los mal llamados grupos de anfitriones,
de bienvenida o animación, que existen en antros y bares
para propiciar consumo desmedido de alcohol por parte de
las mujeres, para liberar su libido y causar disfrute a clientes
masculinos, así como las frecuentes alianzas masculinas
cliente-mesero-cantinero para sobrecargar las bebidas de
ellas o adicionar drogas sin que se percaten.
74
gún su proximidad a la violencia física, verbal, psicológica,
sexual o económica:
De confrontación
Se presenta repetidamen-
te como un comportamiento
agresivo hacia la mujer, sólo por
serlo. Su consecuencia más
sobresaliente son los feminicidios.
De permisividad
Consiente mediante argumentaciones legales,
agresiones a mujeres. Deriva de personas generalmente li-
gadas con algún tipo de autoridad oficial.
Sexual
Abarca toda conducta sexual del
hombre sin consentimiento de la mujer,
así sea su pareja. Se incluyen los hom-
bres que la obligan a ejercer prostitución
y quienes usan la Internet para prácticas
denigrantes como el “sexting” y “ciber-venganza”.
De aparente sobreprotección
Esconden trasfondo sexista en aparentes buenas
intenciones; justifican que el hombre debe proteger a la mu-
jer. Ejemplo, el novio o marido que vigila o espía a su pareja.
Perciben a “su” mujer como un ente de deseo por
parte de otros; la rebajan a calidad de objeto exclusivo que
sólo “él” debe poseer. Argumenta protegerla, pero sólo para
limitarla a su disfrute único como macho-protector.
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Capítulo 5
Actualización de las conductas machistas
El machismo coloca en
situación de desventaja a la mujer,
sea que se manifieste con actitudes
primitivas o camufladas por avances
tecnológicos, hábitos o costumbres
actuales, que dan lugar a las clasi-
ficaciones de Neomachismo, Machis-
mo Light, Micromachismo, Retroma-
chismo y Cibermachismo.
Neomachismo
Es menos evidente y escandaloso, con argumenta-
ciones percibidas como “razonables”.
Amparo Rubiales, destacada mujer de la política
española, en sus intervenciones editoriales en el Diario El
País, denominó esta nueva tendencia como “Neo-
machismo”; caracterizado por miedo a la igualdad de
géneros y cuestionamientos sobre los derechos de la mujer
en búsqueda de su autonomía e independencia. Según
Rubiales el neomachismo “es el machismo de siempre pero
con nuevos contenidos y discursos” y las actitudes más
patentes que lo identifican, son:
76
y acceder a la justicia. Evidencian recelo a la autonomía
femenina y ruptura con roles tradicionales patriarcales, con
frases tipo: “buscamos castigar la violencia contra la mujer
pero hay demasiados casos de denuncias falsas” o “muchas
mujeres denuncian sólo para poder recibir manutención del
ex-marido”.
Machismo Light
Cifras de la «Fundación Thomson Reuters», ubican a
México en el puesto 15 en mayor violencia física y sexual
contra las mujeres, debido al machismo y el complicado
acceso al sistema de salud en zonas rurales.
Destaca en su informe que en México “dos de cada
cinco mujeres casadas tienen que pedir permiso a sus maridos
para salir solas de día”, estamos hablando de un 40%.
Rolando Díaz Loving, académico del Departamento de
Psicología de la Universidad Ibero-
americana, asegura que prevalece la con-
vicción masculina que los hombres son
superiores y las mujeres deben ser dóciles y
abnegadas. “Pero este macho también sabe
que para poder cuidar a una familia, debe
ser protector”, y afirma que “el mexicano de
ahora es un macho light”
77
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
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coinciden los expertos, es que están presentes en la socia-
lización de hombres y mujeres resultando casi imper-
ceptibles. Producen un daño sordo y sostenido a la
autonomía femenina que se agrava con el tiempo”.
Bonino clasifica el micromachismo en cuatro tipos:
Utilitario
Abusan de las impuestas capacidades femeninas
para el servicio de cuidar a otras personas, que incluyen a
los propios hijos y en ocasiones a los adultos mayores.
2.- Encubierto
El hombre busca imponer “su
verdad” como absoluta, nulifica así la
voluntad, capacidad de decisión y dignidad
de la mujer, quien se ve sometida a
coartar sus deseos e iniciativas haciendo
lo que él quiere.
De crisis
Surge cuando ellas buscan la igualdad de estilos de
vida, estudios, trabajo o diversión, sobre las que el macho
ejerce presión con sutiles amenazas como “Si trabajas tú
verás cómo le haces para tener limpia la casa”.
Coercitivo
El varón usa la fuerza moral, psíquica o económica
para ejercer su poder, limitar la libertad de la mujer y
restringir su capacidad de decisión.
Afecta espacio y tiempo de ambos, pero siempre
pierde la mujer. Se nota en pequeñas actitudes aparen-
temente intranscendentes, como quién ocupa el mejor sillón
de la casa, quién tiene el control remoto del televisor, quién
dispone del móvil más actualizado, etc.
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Femichismo
Hay mujeres que reiteradamente ejercen conductas y
actitudes que las minimizan y continúan auto-sometiéndose.
Bajo el disfraz del afecto no permiten que los hombres
ayuden en tareas del hogar, con frases como “hija, sírvele la
comida a tu hermano”
80
Es común escuchar comentarios discriminatorios de
mujer a mujer, por ejemplo, si alguna confiesa su disfrute de
la vida sexual, se recrimina su comportamiento, cuando en
un hombre no es tan “mal visto”.
Aquellas que tienen hijos casados, y son visitadas por
éstos, expresan frases como “Ay hijo, qué flaco estás ¿No te
da bien de comer tu mujer?” Condenan abiertamente al
machismo, pero a la vez lo impulsan al lesionar a otra
mujer.
Muchos hombres desde su infancia tuvieron mujeres
dedicadas a atenderlos, cumplir sus deseos y prevenirlos. La
madre, hermanas, novia, esposa e hijas han atendido sus
demandas de forma permanente. Cuando son adultos tienen
convicción profunda de merecer y tener derecho a ese trato,
y lo esperan de todos.
El resultado es una
exigencia perpetua envuelta en
prepotencia, soberbia y egoísmo,
que propicia falta de empatía, in-
tolerancia y autoritarismo; sus ra-
zonamientos tienden a considerar
el desacuerdo como una ofensa,
convirtiéndolo en conflictos (Ál va rez
Cruz-2011) .
El machismo no terminará
si no aniquilamos primero al “femi-
chismo”; la mujer -como principal
educadora de sus hijos- no debe impulsar las diferencias en
roles de género.
La propuesta es fomentar el respeto mutuo,
aprender que somos tan diferentes como iguales, tan
complementarios como independientes. Difundir valores
democráticos como la inclusión, la diversidad, el debate
abierto, el análisis crítico y la equidad, no la subordinación
de un género a otro. (Jul i o Es coto-S/F).
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Ciber-machismo
Aprovechando la Internet y Redes Sociales, ejercen
nuevas formas de control y violencia moral contra la mujer.
Hombres jóvenes y adolescentes masculinos animan al
voyerismo electrónico y explotan a la mujer
exponiendo públicamente los momentos
íntimos vividos como pareja, a través de la
práctica delictiva de “sexting”, “ciber-
acoso”, “ciber-chantaje” o “sextor-sión”,
“ciber-venganza” o “porno-venganza” prin-
cipalmente. Entendiéndose por práctica
“delictiva”, la ejercida sin consentimiento
de parte.
Para obtener resultados distintos hay que hacer las
cosas de manera diferente. Mientras continuemos actuando
igual, seguiremos quejándonos de los mismos resultados. Es
necesario revisar nuestras creencias y actitudes, dejar de
repetir conductas aprendidas que carecen de sentido, ser
congruentes en lo que pensamos, actuamos y transmitimos.
82
Capítulo 6
Una meta machista y 3 campos de acción
Si conforme tu relación avanza, notas que “él”
aumenta su número de “sutiles sugerencias”, pronto esas
“pequeñas e inocentes” invasiones a tus decisiones y
acciones, se convertirán en órdenes y repentinamente te
encontrarás rindiéndole cuentas de todo aquello que haces
o dejas de hacer, piensas o dejas de pensar, vistes o dejas
de vestir, a quiénes frecuentas y dejas de frecuentar, como
si “él” fuera tu amo y tú su esclava.
Todo machista justifica sus intervenciones y
exigencias en tu vida, con frases como “lo digo por tu bien”,
“yo sé lo que más te conviene”, “es que me preocupas” y
otras por el estilo. Cuando te atreves a decidir y actuar por ti
misma, sientes temor a su reacción.
A la mujer le parece normal o natural que al iniciar
una relación el hombre de-
muestre interés y preocupa-
ción por su cuidado y pro-
tección; el comportamiento
masculino luce al principio
como señales del amor que
profesa.
Llamarte por teléfono
o enviarte mensajes varias
veces durante el día, preguntar
dónde anduviste, con quién
estás, o qué te encuentras
haciendo, parecen reflejar un
interés sincero en conocer
cada detalle de tu día porque
anhela estar contigo y quiere
conocer todos y cada uno de
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Información es poder
Es fácil caer en la trampa de “me interesa todo lo que
haces”, pero mientras más
sabe de ti más te controla, e
incrementa la frecuencia con
que pretende dirigir todas
tus acciones, bien sea
manipulándote con contra-
información o imponiendo su
criterio y voluntad. Los
machistas buscan saber
“todo” para tener bajo su
dominio la relación.
Si le haces ver lo enfermizo y patético de su actitud,
quizá argumente que te quiere tanto… tú eres tan linda y
especial que, le es imposible no sentir celos ya que otros te
buscarán para seducirte, andan “sobres” contigo, pero no te
84
aman como “él”. A ti te parecerá natural que desee
protegerte y comienzas a caer en su juego.
Al adularte, hace crecer tu vanidad y te lleva a creer
en sus promesas con pretextos gastados como “no puedo
vivir sin ti”, “es que me haces mucha falta”, “yo sólo quiero
que no te lastimen” y otras similares, pero los incidentes
intromisorios, vuelven a repetirse.
La relación se interna en un “círculo vicioso” del que
es difícil salir; tú intentas que las situaciones desagradables
no se reciclen, pero “él” encuentra una nueva argu-
mentación adulante y te regresa a girar en su órbita.
Cuando le haces saber algunos comentarios u
observaciones sobre “su” comportamiento, que provienen de
tu familia o amigas(os) cercanos, termina convenciéndote que
el amor entre ustedes es “único” y tan “especial” que los
demás no lo entienden y se empeñan en separarlos porque
“tienen envidia”.
En realidad, un machista siempre supervisa y critica
cuanto hagas, te hace sentir culpable y responsable de
probables consecuencias, te
anula y desvaloriza.
Te hace saber cómo le
gusta a “él” que tú seas, cómo
hagas cada cosa, cómo vestirte y
comportarte, te conduce a contar
con su autorización o pedirle su
“permiso” para hacer o dejar de
hacer; no podrás tomar tus
propias decisiones mientras
andes o vivas con él.
El amor no impone condiciones ni límites; busca el
crecimiento individual, genera un buen estado de ánimo, no
restringe la libertad ni la personal forma de ser.
Según estudios del INEGI en México, el 65% de las
mujeres manifiestan que sus parejas ejercen control sobre
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Nulifica tu autoestima
Los machistas controladores enfocan la mira en
adolescentes y mujeres jóvenes, que son un blanco perfecto
por su inexperiencia, inseguridades y preocupación por los
cambios propios de la vida. Los manipuladores, no dudan en
ofrecerles soluciones aparentemente fáciles e ideales para
sus dificultades.
El machista se muestra en inicio muy interesado en
conocer los problemas que te afligen, casi de manera in-
86
mediata te hace saber “no estás sola, cuenta conmigo”;
enseguida se encarga de asignar -sin que lo percibas- los ro-
les básicos de una fantasía manipuladora, donde tú serás
enseguida se encarga de asignar -sin que lo percibas-
los roles básicos de una fantasía manipuladora, donde tú
serás indudablemente la “víctima”, los demás de cualquier
sexo, padres, maestros, jefes, ex-pareja, amigos o
compañeros serán vistos como “villano(s)”, por supuesto a
“él” lo verás como el “héroe” de tu historia porque es el
único rol que dejó por cubrir. Bueno… ese y el de “animalitos
del bosque” que serán meramente ambientales y en el que
encajarán algunas de tus amigas o conocidos. Cada vez que
se preste la conversación, recurrirá al “nosotros”, para que
sientas que él tiene la
capacidad de
solucionar lo que te
aflige y te lleva a
futurizar que estarán
siempre juntos.
Cuando en la
familia de una ado-
lescente se transita
por un proceso des-
tructivo como las se-
paraciones o divot-
cios, ella queda más
vulnerable a las accio-
nes de este tipo de
patanes que recurren
frecuentemente a
promesas de ayu-
darlas viviendo lejos
de su hogar, ¡claro, con ellos! y las hacen visualizar lo bueno,
pero no toda la “…inga” que se aventaran.
87
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
88
durante una cena, o por lo “mal” que lo hiciste ver a “él”
cuando lo contradijiste durante una conversación.
Te llevará a “autoconvencerte” que sin “él” no
lograrás avanzar en nada, que lo necesitas a tu lado, porque
Con cualquier pretexto te
llamará en medio de alguna de reunión
con amigas o familiares, y si te escucha
demasiado divertida o percibe un
ambiente alegre, buscará una excusa
para que anticipes tu salida.
Algunos, se fingen enfermos o
deprimidos para que cambies tu decisión
de ir a “equis” parte y te quedes acompañándolos solidaria-
mente hasta que pase el mal momento; no hacerlo
despertará en ti el sentimiento de culpa por haberte
comportado un poco egoísta.
Sabrás que tu autoestima está anulada cuando te
sorprendas a ti misma pensando o diciendo “¡no voy a
hacerla sin este ‘güey’!” -o peor aún - “no podría vivir sin él”.
89
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
90
•“¿Para qué vas a estudiar? Si cuando vivamos juntos
yo voy a mantenerte”
91
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Capítulo 7
Conociendo las trampas de los machistas
Mientras las mujeres sigamos creyendo que los
hombres son el sexo “fuerte” y nosotras el “débil”, ellos
continuarán ejerciendo su poder, violencia encubierta y su
sistema doloso de esclavitud femenina con o sin sutileza.
92
consulte la toma de decisiones que afecten a ambos, pero
“él” tendrá la última palabra, especialmente si te “mantiene”.
Evalúa si en la vida que comparten ambos, tu
opinión, gustos y preferencias son considerados o si
solamente te manipula con argumentaciones huecas.
“Hombres machistas... piensan que por decir que eres
su media naranja, tienen derecho a exprimirte” (Azul Ishtar en “Ley
Femenina”, Art. 343)
93
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
94
•“Nos casamos y ya”
Tener un hijo cuando ambos en la pareja están
preparados para ello y lo desean, es una bendición, pero
traerlo a destiempo por imprudencia, puede derivar en un
obstáculo para el desarrollo personal de la mujer.
Es ella quien vive
los 9 meses de embarazo
con sus altibajos, atravie-
sa por el parto y los 40
días de recuperación, así
como se encarga del in-
tenso cuidado que todo bebé requiere en sus primeros meses
de vida.
Un bebé inesperado, en madres adolescentes, propi-
ciado por un hombre inmaduro y poco responsable, implica
enfrentar problemas imprevistos. Algunos machistas buscan
embarazar a su novia para retenerla, otros peores sólo para
marcar su historia y abandonarlas.
En el mejor de los casos -si acaso enfrenta el
embarazo- estarás con un hombre que se sentirá enca-
denado a ti y te asignará toda la responsabilidad del bebé,
su salud y buen estado; cuando el niño llore te culpará,
cuando desobedezca o falle en la escuela será tu culpa.
En América Latina los embarazos de adolescentes son
demasiado frecuentes; en países más industrializados como
Japón, Alemania y Estados Unidos tienen mucho mayor
cuidado en la prevención de embarazos no deseados, ya que
la prioridad en las jóvenes no es convertirse en madres, sino
obtener primero una educación que les permita ser inde-
pendientes, autónomas y autosuficientes, una vez logrado
su propósito integran la maternidad como parte de sus vidas.
96
Hombre sabe conquistar a la mujer, no preservarla
La mayoría de los hombres saben cómo conquistar a
una mujer, pero poco a poco abandonan sus galanteos
conforme se sienten seguros de tener a “su mujer”; olvidan
los pequeños detalles que engrandecen la relación, y el
romanticismo sucumbe ante el falso orgullo.
El hombre llora al igual que la mujer, pero donde la
sociedad no lo etiquete de
débil, eso no excluye que por
retenerte llore ante ti y minutos
después se ponga amenazante
o violento si no consigue lo que
quiere. Puedes seguir su juego
o dejar de creer en éste y
liberarte.
97
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Capítulo 8
Origen del Día Internacional de la Mujer
Cada 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la
Mujer, que resume más de un siglo de lucha por la igualdad
derechos con los del hombre.
Si bien el poder femenino comenzó a mostrarse
desde la antigua Grecia, en la leyenda de Lisístrata escrita por
Aristóteles, con una huelga sexual contra los hombres para
poner fin a la guerra, la idea del «Día Internacional de la
Mujer» surgió hasta finales del Siglo XIX, al arribar la
industrialización al mundo.
En 1909 se celebró el último domingo de febrero;
pero en 1910 durante la «II Conferencia Internacional de
Mujeres Socialistas» en Copenha-
gue, Clara Zetkin y Rosa Luxembur-
go propusieron proclamar el «Día de
la Mujer» con carácter internacional
como homenaje al movimiento en
favor de los derechos y el sufragio
femenino universal, es decir el
derecho a votar de las mujeres.
El 19 de marzo de 1911, fue
conmemorado por primera vez el
«Día Internacional de la Mujer».
Se reconoció la equidad
En 1945 se firmó la Carta de las Naciones Unidas, que
fue el primer acuerdo internacional para establecer el
principio de igualdad entre mujeres y hombres
Fue hasta 1975, cuando coincidiendo con el «Año
Internacional de la Mujer», la ONU institucionalizó el 8 de
Marzo como «Día Internacional de la Mujer».
98
Se plasmaron los derechos femeninos
En 1995, 189 gobiernos firmaron la «Declaración y
Plataforma de Beijing», estableciendo la agenda para
materializar los derechos de las mujeres.
Afortunadamente quedó demostrado que las
mujeres poseen tanto física como intelectualmente mayores
y mejores capacidades que pueden aplicar en cualquier
campo donde intervengan.
Si ya había comenzado a establecerse la igualdad de
derechos de la mujer a principios del siglo pasado, ¿cómo
resurgió la postura machista?; una de las respuestas está en
España; lo veremos en el siguiente capítulo.
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Capítulo 9
Machos y la "esposa perfecta"
A pesar que en el Siglo XXI el papel de la mujer en
nuestra sociedad es cada vez más reconocido y son menos las
naciones donde se les continúa viendo como seres inferiores
al hombre, muchas han sido adoctrinadas para que al
casarse desempeñen el rol de “esposa perfecta y madre
abnegada” siguiendo costumbres de sus antecesoras y reglas
machistas que las hacen olvidar y negarse a sí mismas su
valor personal.
Cometen el error de renunciar a su individualidad, su
autonomía e independencia, entregando al hombre de
forma total y absoluta su existencia.
Gracias a muchas activistas a lo largo de la historia, se
está terminando poco a poco con el daño causado por la
subordinación y sumisión de la mujer a la dominación mascu-
lina y patriarcal.
La “buena esposa”
Desde finales de 1937 y por más
de 40 años, España vivió bajo el régimen
de Francisco Franco, un dictador que
buscó transformar el entorno social de su
país de manera radical.
«La Falange», el partido que lo
llevó al poder, a través de su Sección
Femenina enfatizó la misión sumisa de la
mujer en la sociedad, que la dictadura recrudeció más con el
apoyo del clero.
Por inverosímil que hoy parezca, «La Falange» creó la
“Guía de la buena esposa”, una especie de Manual o
Instructivo para ser la “esposa perfecta”; su contenido
100
además de machista, ya era
retrógrado para la fecha; hoy sigue
generando polémica.
Abarca temas ligados a la
figura de la esposa y madre de
familia, desde sus labores domés-
ticas, hasta la actitud frente a sus
relaciones sexuales. Las ideas de la
citada Guía se infiltraron a México a
través de la Iglesia Católica; increíblemente continúan en la
mente de un gran número de personas, no obstante que
pisotea los derechos fundamentales de la mujer.
En su momento fue herramienta para atar a la mujer
a los ideales de los machistas, al maltrato, la discriminación y
la violencia implícitas en las costumbres de sometimiento a la
voluntad de los machos.
Afortunadamente muchas costumbres, ideas y leyes
han cambiado desde mediados del Siglo XX, no obstante los
estereotipos de género prevalecen en gran parte de la
sociedad, la discriminación hacia la mujer continúa latente,
en muchos países del mundo se pretende mantener calladas
las voces femeninas e impera la violencia física, emocional,
económica, sexual y psicológica en contra de ellas; se
prosigue degradando su integridad, devaluando su auto-
estima y anulando su dignidad.
101
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Ideología machista de
Pilar Primo de Rivera
Miles de mujeres fueron
marcadas de por vida con los mensajes
de Pilar Primo de Rivera, que las
invitaban a despreciarse a sí mismas:
•"No hay que ser una niña empachada
de libros que no sabe hablar de otra
cosa... no hay que ser una intelectual";
102
•"No tomes el deporte como pretexto para llevar trajes
escandalosos";
103
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
104
4.- “Arregla tu casa, debe lucir impecable.
Haz una ronda por las
principales áreas de la casa
justo antes de que tu
marido llegue. Levanta
libros de la escuela,
juguetes, etc. Y limpia con
un plumero las mesas”
(Nótese el sugerido estilo “Cenicienta” para limpiar el piso)
105
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
7.-“Minimiza el ruido.
A la hora de su llegada,
apaga lavadora,
secadora y aspiradora, e
intenta que los niños estén
callados. Piensa en todo el
ruido que él ha tenido que
soportar durante su pesado día de oficina” (Ya ves, lo que
pasa es que hay mucho ruido y por eso grita, porque no se
escucha de otra forma)
9.-“Escúchalo.
Puede que tengas una
docena de cosas importantes
que decirle, pero a su llegada
no es el mejor momento
para hablarlas. Déjale hablar
antes, recuerda que sus
temas son más importantes
que los tuyos”.
106
10.-“Ponte en sus zapatos.
No te quejes si llega tarde,
si sale a divertirse sin ti, o
si no llega en toda la
noche. Trata de entender
su mundo de presión y
compromisos, y su
verdadera necesidad de
estar relajado en casa” (Tú “púdrete” y comprende que lo
“obligaron” a irse a la cantina o al “Table Dance”, que quizá
tuvo que bailar con mujeres que ni conocía, exponiéndose a
peligros como que abusaran de él; no te quejes aunque se
haya gastado todo el sueldo, para eso puedes salir adelante
empeñando tu lavadora y lavar la ropa a mano).
11.-“No te quejes.
No lo satures con problemas
insignificantes. Cualquier
problema tuyo es un
pequeño detalle,
comparado con lo que él
tuvo que pasar” (¡LoL!)
107
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
108
La mujer tenía razón de existir, sólo para cumplir con
sus funciones reproductivas, como mantenedora de la familia
y en consecuencia, reproductora del sistema. El sexo se
relegó al ámbito reproductivo, cualquier goce sexual
femenino se consideró pecaminoso. Esto llevó a las mujeres
a negar su cuerpo y percibir su disfrute del sexo como
pecado.
Entre los textos creados por Pilar Primo de Rivera,
destacan los siguientes por su referencia al comportamiento
íntimo ideal esperado de la mujer:
109
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
110
franquismo en otros ámbitos; en lo civil, el marido tenía
representación sobre la mujer; de ser soltera, entonces su
padre la representaba, y si no se encontraba presente,
cualquiera de sus hermanos varones decidía por ella; se le
negó el derecho al voto, se le privó de ocupar cargos
públicos; el único método anticonceptivo aprobado era el
“ritmo”.
Se condenó el aborto; se le imposibilitó a las casadas
el acceso a puestos de trabajo, y se aceptó abiertamente el
ejercicio de la prostitución.
111
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Capítulo 10
Lo que no todas saben de los hombres
Capítulo basado en diversas publicaciones de Crisálida Perenne, A.C.
El hombre parece
seguro de sí mismo, pero al
igual que la mujer, tiene
temores. Un alto porcentaje se
siente inseguro frente a
cotidianeidades como: trabajo,
fuerza, potencia sexual, relación
y convivencia con mujeres.
No lucen acomplejados
ni angustiados, parecen no
guardar secretos, pero hay
información que no todas cono-
cemos acerca de ellos, dispo-
nible en diferentes webs, redes
sociales, libros y estadísticas; enseguida se exponen.
Acerca de sí mismos
La tendencia masculina es no exteriorizar sus
sentimientos y emociones, para no ser juzgados como
“débiles”.
El hombre prefiere ser percibido como el sexo
“fuerte”, el proveedor, estratega, defensor, el valiente; evita
labores que la sociedad destina a la mujer, como lavar,
planchar, cocinar, cambiar pañales; mostrar su lado femenino
es como auto-atentar contra su hombría.
Le disgusta se evidencie su sensibilidad; aprendió
más por imposición que por voluntad propia que "los
hombres no lloran". Cuando algo le lleva a sentir un nudo en
la garganta, procura distraer su mente para no soltar el
llanto, o busca interrumpir la causa que le provoca esa
112
sensación y se retira momentáneamente con cualquier
excusa.
En general le incomoda que alguien le pida hablar de
sus sentimientos. Llora, pero no frente a todo mundo, sólo
con sus amigos muy cercanos, por recuerdos, decepciones,
frustraciones, crisis familiares, etc.
Le cuesta trabajo entender y aceptar los “no”
principalmente en las áreas laboral y sentimental porque lo
asocia al fracaso y odia ser clasificado como perdedor, como
“looser”.
Cuando se enamora de una amiga o confidente
cercana, ante la posibilidad de ser rechazado y perder su
amistad, mantiene en secreto sus sentimientos o los disimula
en lo posible, para en caso de fracasar no ser ridiculizado.
Algunos perciben como “impo-
sible” a la mujer que les gusta porque en
ese momento tiene novio o está casada, o
porque tiene una posición superior.
Aspectos como la timidez, falta de
autoestima o no saber cómo expresar sus
sentimientos, los conducen a no intentarlo
siquiera, o hacerlo por la vía virtual.
Olavarría (2005) refiere que el
modelo de masculinidad hegemónica y
patriarcal les produce grandes satis-
facciones a unos; a otros en cambio,
molestias e incomodidad, fuertes tensio-
nes y dolores que los ponen en conflicto
por las exigencias que impone, por lo que tratan de
diferenciarse de este referente.
Los hombres separan su vida en distintos tiempos y
campos, si es trabajo se concentran en éste, si es convivencia
con amigos se divierten y opinan entre sí, cuando están con
la mujer que aman, intentan apoyarla en solucionar
problemas cotidianos, pero no se involucran, perciben los
113
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
114
más seguros de sí mismos.
Cuando la mujer se esmera en mejorar su apariencia,
quizá no den señales de haberlo notado; la mayoría sí pone
atención sobre la forma en cómo se viste o arregla una
mujer, pero lo demuestra únicamente cuando le disgusta,
para tratar de imponer su percepción.
Al igual que las mujeres, necesitan convivir con
amistades y familiares, o estar solos de vez en cuando, y les
disgusta que alguien les diga qué hacer, sin embargo -de vivir
juntos- ellos mismos proponen que sea “ella” quien indique
cómo hacer determinadas cosas, o qué decir ante una
situación particular. Desde su punto de vista, la mujer
siempre parece estar insatisfecha con lo que ella misma
solicita; lo que buscan es que en próximas ocasiones confíe
más en el proceder masculino.
Algunos prefieren sea la mujer quien decida aspectos
triviales como la temática de sus conversaciones, lugares
para divertirse, ir a cenar o tomar una copa. En este sentido
ocasionalmente se generan disgustos por un aspecto que no
consideran los hombres, y es que la mujer hará una mejor
sugerencia si sabe de cuánto presupuesto se dispone, cosa
que el hombre difícilmente le informa.
115
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
116
Un hombre que acepta la libertad, trabajo y anhelos
de la mujer, que respeta su espacio y su persona, aunque no
esté “buenísimo” o “guapísimo” valdrá más la pena, porque
en realidad no importa tanto como se vea “él”, sino cómo te
trate.
Cuando después de la primera cita, un hombre queda
en llamarte o buscarte, pero luego de 2 días no lo hace,
significa que no desea continuar porque al analizarlo percibió
más problemas que beneficios.
Al igual que a las mujeres, a los hombres no les gusta
hablar del ayer, ni ser interrogados acerca de sus “ex” o de
situaciones que es mejor dejar en el pasado.
Cuando algo un tanto turbio permanece en la vida de
ella, o si le parece que es incongruente consigo misma, o que
enfrenta demasiados compromisos o conflictos familiares, o
si miente con frecuencia, o la siente insegura de lo que
quiere, optará por no prolongar la relación.
Algunos hombres preservan fotos de sus “ex” para
recordar secreta y melancólicamente buenos momentos.
Actualmente, con el uso de redes sociales, a pesar de ser
“bloqueados” tras una ruptura, recurren a trucos para
infiltrarse a las mismas y verificar cómo la está pasando ella
sin “él”. Muchas mujeres hacen lo mismo.
Sexo y compromiso
Mujeres hermosas hay en todas partes, admirar la
belleza femenina es muy natural en todos los hombres. “El
estar a dieta no impide darle un vistazo al menú” (anónimo).
Algunos son muy discretos,
evitan ser obvios por respeto a su
pareja, otros ni lo despistan. Ellos
siempre están alerta y se sienten listos
para momentos eróticos, pero les
aterroriza “quedar mal”, que ella
117
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
En ambos sexos
•90% anhelan tener relaciones al aire libre o en lugares
públicos; en el hogar
su fantasía es tener
sexo en la cocina;
118
En hombres
La sensación de lo “prohibido”
La confianza, lealtad y fidelidad no son cuestión de
género, sino de respeto por la pareja.
“Engañar”, para el hombre no siempre es cuestión de
sexo, los motiva más la emoción del riesgo de hacer algo
prohibido. Otros afirman ser "infieles por naturaleza" por ser
machos.
Para ellos, una “aventura”
es sólo eso, una experiencia
intensa y pasajera en que existe
cierto riesgo, pero no se sienten
comprometidos. Cuando el hom-
bre ve a la mujer como “aven-
119
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
El compromiso
Cada vez más hombres buscan no comprometerse.
Ambos géneros sienten temor a la incertidumbre y dolor de
enfrentar una relación formal que puede afectar su libertad
personal; pero cuando se vive un verdadero amor, el
compromiso existe por sí mismo y la pareja continua.
120
les es más atractivo el “look” natural de una mujer, y les
encanta cuando de vez en cuando son capaces de mostrarse
ante ellos sin artificios.
Les disgusta que la mujer recurra al llanto, gritos o
amenazas. De por sí les resulta difícil entender a las
mujeres… cuando ellas añaden “drama”, no lo pueden
soportar y terminan declarando “¡Estás loca!”; no lo creen
así, pero de esa manera no se sienten responsables, no se
ven obligados a aceptar sus propios errores.
121
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Capítulo 11
La vida te lleva a donde tú eliges ir
La única persona que estará contigo toda la vida, eres
tú misma; es importante que aprendas a amarte, respetarte
y superarte; es necesario que te conviertas en una mujer
triple “A”: Autosuficiente, Autónoma y con Autoestima.
No permitas que la vida te conduzca por donde le
plazca, ni que los problemas te venzan, porque tú eres más
grande que cualquier dificultad. La vida te lleva a donde tú
quieres ir o a donde tú permitas que te arrastre, la
diferencia está en tomar mejores decisiones, poner límites,
saber decir “no” a tiempo, ponerte metas y esforzarte en
conseguirlas.
La felicidad está en ti y depende de ti, no está en la
presencia, compañía o dependencia de un varón. El factor
principal es que tú te sientas satisfecha y realizada con lo que
eres y haces.
122
en concordancia con lo que obtienes, disfrutas; y solamente
cuando ya disfrutas, logras trascender.
La esencia de tu existencia está en tu SER; ya lo
cuestionaba Shakespeare en «Hamlet» su famosa obra…
“¿Ser o no ser?, he ahí el dilema”.
Cuando alteras ese orden te metes en problemas.
Cada vez que pretendas ser lo que no eres, encontrarás
conflictos, no puedes -por ejemplo- ejercer la medicina si no
eres médico, porque lejos de sanar a los pacientes puedes
agravar sus padecimientos e incluso propiciar involuntaria-
mente su fallecimiento.
De acuerdo a lo que eres, haces; si eres Modista,
puedes hacer ro-
pa cómoda, con-
fortable, hermosa
y a la moda; con-
forme a lo que
haces, obtienes; si
eres dentista y
logras que tus pa-
cientes tengan una
dentadura sana, obtienes ingresos o recursos suficientes para
vivir; con lo que obtienes puedes disfrutar, es decir puedes
adquirir satisfactores a tus necesidades de alimento,
diversión, casa, vacaciones, etc.
Mientras más obtienes, más disfrutas; cuando vives
con la tranquilidad de poder disfrutar más allá de lo que
estrictamente necesitas para sobrevivir, entonces puedes
aspirar a obtener otros satisfactores, tener un hijo o hacer
algo en favor de otros, que te permita trascender, es decir
que tú tengas mejor calidad de vida y que otras personas
puedan ser mejores con tus aportaciones y por ello te
recuerden más allá de tu propia muerte.
¿Por qué las tarjetas de crédito se vuelven una
amarga pesadilla para muchas? La respuesta es simple, por-
123
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
124
gustaría alguien que te regale flores o tenga atenciones
contigo, entonces… ¿para qué sigues con él?”.
Meses después la chica del anhelo incumplido se
convirtió en madre adolescente, se mudó a vivir a casa de
sus suegros, donde todo el tiempo es criticada, espiada y
celada no sólo por su pareja, sino por toda la familia de él.
Si quieres viajar hacia el norte, ¿pa’ qué seguir un
camino que va hacia el sur? ¿Pa’ qué acompañar en su viaje
a un tipo que va a otro lado y no al que tú anhelas ir?
125
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
La decisión es tuya
Muchas mujeres latinas fueron educadas
para entregarse de manera total, cuando creen
haber encontrado a su hombre, y dejan a un lado
la esencia de su propia identidad para ser amas
de casa y madres, a la par -en ocasiones- de
trabajar para contribuir al ingreso familiar.
Entre los errores más frecuentes que se comenten,
está no hablar claro con “él”
desde el inicio de la relación,
hacerle saber gustos, convic-
ciones, anhelos y metas pro-
pias, compararlas con las de
“él” y negociar las reglas que
regirán su relación para que
todo funcione.
Idealizar al hombre,
tolerar sus defectos con la
esperanza que algún día
cambiará, no sucederá “mágicamente”; si renuncias a tus
propios intereses y actividades, dejas de frecuentar
amistades y familiares para darle gusto a “él”, pronto te
encontrarás soportando agresiones y abusos por no “marcar
tu raya”, no poner límites, no saber decir “no”.
La lista de errores incluye además una serie de
creencias equivocadas, como renunciar a la propia decisión
de elegir con quien vivir o asumir “es que él ya me eligió”;
tener relaciones sexuales antes de poseer los recursos pa’
hacerse cargo de gastos y responsabilidades que llegan con
todo bebé, un embarazo no planeado no retiene ni “amarra”
a la pareja.
No dejes que sea “él” quien tome las decisiones
trascendentes que a ti te afectan; deja de percibir el
matrimonio o la vida en pareja como la mejor solución para
126
escapar de un entorno familiar no deseado; no te conformes
o aferres a una relación en que “tú no la harás”
Al toparte con un machista, haz una “GH” (Gra ci os a
Hui da ) ya que tú vales mucho; no te dejes deslumbrar por
apariencias, es mejor dejar partir de tu vida a alguien, a que
ese alguien ¡te parta la… vida a ti!
“Cuando perder a alguien significa recuperarte a ti,
sales ganando” (Anónimo citado por Azul Ishtar y Roberto Cisneros
2019. en «Ley Femenina» Art. 654).
La nueva realidad
En el mundo actual, muchas mujeres están
abandonando el rol de víctima, para asumir el reto de gozar
una vida exitosa y plena. Hoy las mujeres se han dado cuenta
que no es indispensable vivir en pareja o casarse para
sentirse realizadas y exitosas.
Cada día será más difícil para los hombres con
complejos e inseguridades, encontrar una pareja dispuesta a
pagar el precio de tener compañía, a cambio de una relación
poco satisfactoria.
127
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Capítulo 12
Acosadores y hostigadores sexuales
Acoso y hostigamiento sexual, violan la libertad
psicosexual de la mujer, atentan contra su integridad y
dignidad, lesionan su entorno familiar y educativo, sus
derechos laborales y estabilidad emocional. Ambos se
consideran delitos sexuales o contra la libertad y el normal
desarrollo psicosexual.
128
dores como hostigado-res sexuales, recurren a mitos o
costumbres con que intentan justificar o minimizar la
gravedad de su proceder.
Existen por igual en acoso y hostigamiento conductas
repetitivas de operación: Hay solicitudes explícitas de tipo
sexual; se amenaza directa, indirecta o veladamente con
algún tipo de represalia o consecuencia a la víctima; se
transgrede la voluntad utilizando la fuerza física o psicológica.
Muchas mujeres no se atreven a denunciar por el
malestar psicológico que se deriva del acoso u
hostigamiento, por temor
al daño en su desarrollo
personal o profesional.
La víctima ne-
cesita apoyo psicológico
por el daño sufrido tras el
acoso u hostigamiento so-
bre su personalidad, auto-
imagen, credibilidad y
reputación ante amistades, pareja, familia y compañeros de
estudio o trabajo.
Es difícil erradicar este tipo de violencia porque
socialmente estas conductas se aprecian como “aceptables”
o “naturales” ya que se muestran y refuerzan por medios
masivos de comunicación tradicionales y electrónicos.
129
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Abuso sexual
Lo comete quien ejecute en una persona sin su
consentimiento, o la obligue a ejecutar para sí o en otra
persona, actos sexuales sin el propósito explícito de llegar a
la cópula. Por “actos sexuales” se entienden los tocamientos
o manoseos corporales obscenos; o los que representen
actos explícitamente sexuales u obliguen a la víctima a
representarlos; también lo es obligar a la víctima a observar
un acto sexual o exhibir su cuerpo sin su consentimiento.
Estupro
Lo comete quien tenga cópula con persona mayor de
quince años y menor de dieciocho, obteniendo su
consentimiento por medio de engaño. Bajo algunas
circunstancias, la seducción puede ser una variante del
engaño, ya que es una forma de manipulación de las
creencias.
130
prisión, según se marca en los siguientes artículos incor-
porados en 2019 al Código Penal Estatal:
131
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Violación
Existe cuando por medio de violencia física o moral
(verba l, psicológica, económica ) se realiza cópula con persona de
cualquier sexo.
Son delitos equiparables a violación, introducir en la
víctima por vía vaginal o anal cualquier elemento o instru-
132
mento distinto al miembro viril, por medio de la violencia físi-
ca o moral, sea cual fuere el sexo del ofendido, o aun cuando
no exista violencia, si la víctima es menor de quince años de
edad, o no tiene la capacidad de comprender el significado
del hecho o que por cualquier causa no pueda resistirlo.
Violencia Familiar
Comete este delito quien habitando o no en el
domicilio de la persona agredida, realice acción u omisión, y
que esta última sea grave y reiterada, que dañe la integridad
psicoemocional, física, sexual, patrimonial o económica de
uno o varios miembros de su familia, de la concubina o
concubino.
Para considerarse Violencia Familiar, este delito debe
cometerse por cual-quiera de los siguientes sujetos:
Cónyuge, concubinario, pariente consanguíneo o en línea
recta ascendente o descen-
dente sin límite de grado;
persona a la que se encuen-
tre unida fuera de matri-
monio aun y cuando no ha-
yan tenido hijos(as) en co-
mún, el hombre o mujer que
vivan juntos como marido y mujer de manera pública y
continúa.
El delito de Violencia Familiar puede ser de tipo:
A) Psicoemocional, que es toda acción u omisión como
condicionamientos, coacciones, intimidaciones, insul-
tos, amenazas, celotipia (manifestación de celos de
manera reiterada o constante), desdén, indiferencia,
descuido reiterado, chantaje, humillaciones, compa-
raciones destructivas, abandono, o actitudes deva-
luatorias, entre otras manifestaciones que provo-
quen en quien las recibe alteración autocoginitva y
133
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
134
Aclarando algunas dudas
Adulterio: No se considera
un delito, sólo es una causa para
solicitar el divorcio.
135
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
136
Incesto: Se considera delito aunque la víctima sea
mayor de edad.
137
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
138
prueba toda comunicación electrónica, siempre y cua ndo a ún exi s ta y no
ha ya s i do borra da por l a vícti ma ) , porque “lanzarte” sin nada,
puede resultar contraproducente. En México, como víctima,
tienes derecho tanto a un defensor de oficio, como a tu
atención psicológica, gratuitamente.
11 prototipos de acosadores
Los acosadores están en todas partes, incluso
cercanos o en relación estrecha. En general, los psicólogos los
dividen en psicótico y no-psicóticos; los categorizan en 11
clases, pero un solo acosador puede presentar diversas
combinaciones de éstas, según la fase que atraviese:
∙El enamorado
Está convencido que su
víctima es su “alma gemela”, “el amor
de su vida” y deben vivir juntos hasta
la muerte. Alucina que no se ha
percatado de estar enamorada de él, o no quiere admitirlo.
∙El depredador
Dedica gran parte del día a
espiar a su víctima; se aprende de
memoria cada paso que da, conoce
sus costumbres, lugares y personas
que frecuenta. Revisa sus redes
sociales, pregunta constantemente a
sus amistades y conocidos acerca de ella. Puede ser
inicialmente pasivo, pero al volverse activo reclama y se
139
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
∙El rechazado
Persigue a su víctima con la intención de vengar
algún rechazo, por ejemplo, cuando una chica no acepta salir
con un chico y éste pasa de insistente a persistente , a pesar
que el rechazo es claro y evidente.
∙El resentido
Asusta o amenaza a su víctima por algo
que pasó entre ambos, o que al menos él tiene
la real o falsa creencia que ocurrió. Da por
asentado -sólo por el hecho que alguna vez
salieron juntos o conversaron, o que fueron
pareja o buenos amigos- que debe existir una relación más
profunda entre ambos, obligatoriamente.
∙El exhibicionista
Se presenta con mayor frecuencia, por
mal uso de redes sociales. Envía “selfies”
exhibicionistas, quizá primero argumente que
fue accidental, pero luego prosigue de forma directa. El o la
exhibicionista igual pueden ser desconocidos, compañeros de
estudio o trabajo, vecinos, amigos, parejas actuales o “ex’s”.
∙El mago
“Aparece de la nada” casual o espontáneamente en
sitios que la víctima frecuenta o acude. De pronto se lo topa
en el supermercado, cafetería, cine, cibercafé, tianguis u
otros lugares, a grado que se evidencia que sigue a su
víctima, pero justifica estas “coincidencias” aseverando que
140
tienen muchas cosas en común y el destino se empeña en
hacerles ver que nacieron uno para el otro.
∙El encimoso
Es cercano a su víctima
en algún ambiente en común.
Habla “de bulto”, aprovecha el
más mínimo pretexto para
acercarse más de lo aceptable,
tocar, abrazar, rozar, ver o sentir más del cuerpo de ésta.
Siempre busca ir más allá aunque se le deje claro que no lo
haga, se le saque la vuelta o se le aclare que molesta.
∙El chantajista
Suele ser alguien con quien alguna vez, la víctima
compartió información, opiniones o puntos de vista, hasta
alguien con quien sí existieron momentos de intimidad.
Cuando se siente fuera de los intereses o vida de la víctima,
se acerca a ésta para hacerle saber que, si no accede a sus
exigencias, enterará a todos de sus errores, dejando en claro
el costo social que le representará.
∙El “sexteador”
Aprovecha las redes socia-
les y su aparente privacidad para
insistir en que su víctima le
comparta fotos íntimas, atrevidas
o al desnudo; si no quiere, le
141
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
7 prototipos de hostigadores
El hostigamiento sexual se concreta en el ambiente
laboral, en empresas formales, informales, y en el libre
ejercicio de una profesión u oficio. Se da cuando alguien
aprovecha su supremacía económico-laboral sobre la
víctima.
Al igual que en los acosadores, un solo individuo
puede manifestar simultánea o combinadamente dos o más
acciones que caracterizan al prototipo.
∙El condicionante
Supedita ingresos, aumentos de
salario, cambios de actividad, horario laboral,
desempeño o contratos en la empresa, a que
acceda la víctima a sus pretensiones lascivo-
sexuales. Lo caracterizan frases como “Pór-
tate bien conmigo”, “Tú ya sabes lo que tienes que hacer para
lograrlo” ó “Yo me encargo de conseguírtelo, pero…”.
En empresas de medios, publicidad y productoras de
espectáculos o eventos, se le identifica más con frases como:
“Yo puedo hacerte famosa”, “Yo te cuelo”, o “Yo puedo hacer
realidad tu sueño”.
∙El salvador
Asegura a su víctima estar “metida en problemas”,
que los jefes pidieron despedirle, o su desempeño es pobre y
no sirve así a la compañía, o que la exposición que hizo en la
última junta molestó a los socios; pero puede salvarle si
accede a su propuesta de intimidad.
142
También puede darse al detectar que atraviesa por
una crisis económica personal; sugiere conseguirle un
préstamo, o recursos que le urgen, a cambio de sexo.
∙El destructor
Amenaza con despido, o truncar el
progreso o superación personal dentro de la
empresa, con hacer creer a otros que actuó
contra intereses de la compañía, o participó
en robo de materiales o productos, si no
acepta tener intimidad.
∙El manoseador
Se auto-permite tocar de forma indeseada a su
víctima, disfrazándolo de roce accidental, muestra de
aprecio o “cariñito”, convencido de que soportará en silencio
y sin reclamo, porque es el jefe y la víctima necesita el
trabajo.
∙El espía
Recurre a tecnologías actuales.
Olvida o pierde su dispositivo móvil
“casualmente” en sitios desde donde
puede obtener ángulos ocultos del
cuerpo de su víctima, sin que lo
sospeche o percate. Algunos colocan cámaras camufladas en
baños y vestidores, para ver y oír todo. Posteriormente
pueden amenazar con hacer público el material si no se
accede a sus deseos sexuales.
∙El tolerante
Afirma a su víctima que ha cometido errores
laborales, pero él puede “pasarlos por alto”; propone
encubrir ausentismo, demoras o dar bonos y permisos
especiales, siempre y cuando “reciba algo más”.
143
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
∙El oportunista
Aprovecha cualquier situación
socio-laboral para propasarse. Se
manifiesta en celebraciones de
cumpleaños en lugares de trabajo,
convivencias entre empleados, posa-
das navideñas de la empresa o viajes de trabajo.
∙El propiciador
Inventa juntas o comidas de trabajo para estar con su
víctima y llevar las cosas más allá. Requiere su presencia en
eventos de la empresa fuera de la misma, como Expo’s,
Convenciones, etc. aunque no sea necesaria. Una vez
alejados de la empresa, aprovecha para hacer su propuesta
indecorosa e incluso forzar su consecución.
144
Capítulo 13
Maltratadores y maltratadas
Perfil del maltratador
Según la revista "Alfa y
Omega" de España, los maltra-
tadores suelen provenir de ho-
gares violentos, donde vieron
maltratar y se les maltrató. Con-
sideran a la mujer como objeto
de su propiedad. Pueden pade-
cer trastornos psicológicos y
algunos potencian su agresividad
bajo influjo de sustancias como
alcohol o drogas. Un maltratador
tiene hábito de trasplantar a su
mujer, la agresividad acumulada
en otros ambientes.
Su perfil psicológico muestra rasgos de inmadurez,
baja autoestima, dependencia afectiva, inseguridad, ines-
tabilidad emocional, impaciencia e impulsividad. Su patología
incluye el arrepentimiento frecuente, que sólo es temporal,
hasta el próximo golpe.
Tiende a ser aislado, se relaciona poco con otros, es
celoso; vulnerable a la frustración; siempre trata de aparen-
tar ser lo que no es. Algunos maltratadores presentan un
lado suave, los hay muy educados y hasta religiosos, pero en
lo sexual su actitud es inflexible, lesionante.
John Bradshaw afirma en su libro «Homecoming»,
que "el niño interno" herido de una persona puede llevarle a
comportarse violenta y cruelmente. La persona no asume la
responsabilidad por sus actos, siempre piensa que son
culpables los demás.
145
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Tipos de maltratadores
En su libro «When Men Batter Women», Simon y
Shuster proponen dos tipos de maltratador:
El Cobra
∙Es directa o indirectamente
agresivo con todos.
∙Abusa de drogas o alcohol.
∙No depende emocionalmente de
otra persona, e insiste en que su compa-
ñera debe hacer lo que él quiere siempre.
∙Es más propenso a amenazar con
navajas, cuchillos o revólveres.
∙Se calma internamente al tornarse agresivo
externamente.
∙Posiblemente haya sido acusado de algún crimen.
∙Es difícil tratarlo con terapia psicológica.
146
El Pitbull
∙Solamente se violenta contra
personas que ama.
∙Posiblemente tuvo un padre
abusivo.
∙Es celoso y tiene miedo que lo
abandonen.
∙Priva a su esposa o novia de su
independencia.
∙Es propenso a la ira, a vigilar y atacar públicamente a
su compañera.
∙Su cuerpo reacciona violentamente durante una
discusión.
∙Probablemente no ha sido acusado de ningún
crimen.
∙Tiene algún potencial para la rehabilitación.
147
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Control y manipulación
La pareja controladora inicia su ataque desde que
apenas se le conoce; de inmediato quiere mandar en la vida
de su “presa”, organiza salidas sin tomar en cuenta la opinión
de ella; le impide se reúna con sus amigos(a s ), inventa
enfermedad o cualquier pretexto para salirse con la suya y
utiliza la violencia.
La pareja controladora nunca
quiere dejar de ejercer su “poder” en
la relación, en ocasiones por celos
enfermizos, otras por soberbia, o por
pensar que su pareja es objeto de su
propiedad. Un porcentaje de parejas
controladoras lo hacen para liberarse y
poder ejercer libertinaje en su propia
vida sin rendir cuenta de ello.
Un controlador siempre “su-
pervisa” todo lo que hace su pareja y
critica su forma de realizarlo; persiste
en culparla y responsabilizarla de toda
consecuencia. Hay personas tan controladoras que
prácticamente anulan a su cónyuge.
Es un manipulador que tergiversa todo para tener
siempre la razón; no se da la oportunidad de mejorar,
siempre cree que los otros están equivocados o son
inferiores a él.
Expertos en terapia de pareja, señalan como caracte-
rística frecuente el interés por controlar la forma de vestir;
hace saber las cosas con que “debe” complacérsele; exige se
cambie lo que no le gusta.
La mayoría de los casos de violencia extrema,
comienzan desde el noviazgo, ejerciendo en primera
instancia maltrato verbal, físico y emocional. El control es una
forma de abuso psicoemotivo.
148
Si tu pareja tiene esa actitud, y haz intentado hablar
con él sin obtener resultados positivos, es mejor alejarte de
inmediato.
9.- Dice que sólo “él” te quiere y nadie más, o que nadie te
quiere como “él”.
149
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Violencia física
Desde un empujón
hasta provocar la muerte;
busca someter a la víctima
por agresiones a su cuerpo
de manera directa o
utilizando todo tipo de
objetos. Siempre vulnera la
integridad emocional de la
víctima (INEGI 2007) .
Se clasifica de
acuerdo a su intensidad en
tres niveles: leve, media y
severa.
150
•Media: Bofetadas, golpes, patadas, romper objetos
personales de la pareja.
151
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Violencia sexual
Comprende toda forma de dominación o coerción,
por medio de exigencias o uso de fuerza física o moral para
tener algún tipo de actividad sexual sin consentimiento de
la persona; la expresión más evidente es la violación. Esta
forma de violencia va acompañada de un impacto emocional
en la víctima (INEGI, 2007) .
Es identificada como contactos sexuales en contra de
la voluntad, impedir el uso de anticonceptivos y forzar a
realizar prácticas sexuales no deseadas. La forma más
contundente de la violencia sexual es la violación, pero no
es la única y, como señala Torres (2005), se incluyen
tocamientos en el cuerpo, obligar a la pareja a tocar el
cuerpo del agresor, llevar a cabo actividades sexuales que
no son deseadas por la víctima, acoso u hostigamiento,
además de burlas hacia la
sexualidad de la otra persona.
Algunos de estos
agresores “marcan” -como si
fuese ganado- a su pareja
durante la relación sexual,
con chupetones, arañazos o
huellas de mordidas tanto en
partes visibles como íntimas,
a fin de dejar claro a
cualquier otro, que esa mujer
“tiene dueño”, y su cuerpo es territorio de “él”.
152
En noviazgos se presenta con mayor frecuencia en
forma de caricias desagradables, lo cual implica ser besada
o tocada de forma que causa incomodidad; existe también la
comparación sexual con otras ex-parejas, obligación a tener
sexo cuando el varón decide y obligar a su pareja a realizar
posiciones sexuales incómodas; exigir la práctica del aborto y
la negación a que la mujer se realice un examen de detección
de enfermedades de transmisión sexual.
Actualmente, en adolescentes y adultos jóvenes se
presenta cibernéticamente, enviando o solicitando fotos y
videos sexuales (“s exti ng”) que el agresor probablemente sin
consentimiento de parte, hará llegar a terceros por Internet,
y de esa forma le nulifica su autoestima.
Violencia económica
Se manifiesta a través del
derroche de dinero por parte del
hombre, quien no da
explicaciones de cómo distri-
buye sus gastos, argumentando
ser quien trabaja y mantiene a la familia.
Stordeur y Stille (1989, ci ta dos en Rey Ana cona ., 2013)
agregan que a la mujer no se le deja trabajar cuando puede
hacerlo y su pareja aprovecha el hecho de su dependencia
económica.
Violencia patrimonial
Se daña intencionalmente
el patrimonio o afecta la super-
vivencia de la víctima sustrayendo,
destruyendo, reteniendo, transfor-
mando o distrayendo a uso o apli-
cación indeseada bienes, objetos,
documentos, valores, derechos pa-
trimoniales o recursos económicos
153
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
El ciclo de la violencia
En las relaciones de pareja, la violencia se manifiesta
cíclica y reiterativamente; Walker (1970) lo denominó «El ciclo
del maltrato». Las fases pueden variar en duración e
intensidad en cada pareja. Walker describe el ciclo en 3
etapas que enseguida se detallan.
Acumulación de tensión
La tensión crece por circunstancias diversas como
situaciones estresantes, problemas de trabajo o
características personales del agresor. Generalmente, inicia
con ataques verbales pudiendo llegar a los físicos. Busca
debilitar la moral de la víctima y auto-justificar la indeseable
conducta.
Explosión violenta
La tensión va en aumento y propicia en el agresor
pensamientos obsesivos res-
pecto del “problema”, vol-
viendo irresistible su deseo
de destruir a su víctima,
liberando así la ira y tensión
reprimidas.
La tensión se descar-
ga a través de los 5 tipos de violencia: Física, psicológica,
sexual, económica y patrimonial. Uno de los riesgos es que el
proceso se potencia a sí mismo, es cada vez más frecuente e
intenso.
En su libro «La violencia en casa», Torres, M.F. (2005)
señala que después de una discusión puede presentarse el
primer golpe, bien sea como un episodio aislado que no se
repite, o como el inicio de una escalada; la violencia puede ir
154
en aumento y preservar las formas leves de maltrato. Del
mismo modo, pueden ostentarse distintas maneras de
incrementar la angustia y la desesperación de la pareja.
155
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
se prácticamente en su rehén.
Por su parte, Almeida y Gómez en su libro «Las
huellas de la violencia invisible» (2005), consideran que a
partir de esta fase de reconciliación o “luna de miel” se
desprende otra fase de aceptación, donde la víctima decide
continuar la relación por no querer que se enteren los demás.
Si tras esta fase se da una separación o ruptura, el
agresor involucrará a personas cercanas a la víctima,
solicitándoles intercedan para que lo acepte de nuevo.
“Cuando te unes al hombre equivocado, ya no pides
que te ame, nomás que no te joda “ (Anóni mo ci ta do por Azul
Is hta r y Roberto Ci s neros -2019- en “Ley Femeni na ” Art. 635).
156
4.- No lo complazcas en todo
Si tú te partes el alma haciendo o dejando de hacer
algo para complacerlo, lo único que ganarás es que cada día
te exija más.
7.- No te sientas
inferior a “él”
Deja de asumir
que él es más fuerte,
más inteligente, más
preparado, o más que tú.
Él es terriblemente inse-
guro. Si trata de contro-
larte es porque no tiene
otra forma de retenerte.
157
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158
Capítulo 14
¿Qué terreno pisas? Haz la prueba
Si vives cualquier tipo de violencia en tu relación de
pareja o en tu familia, recuerda que nada ni nadie debe estar
por encima de tu dignidad, ni de tu integridad emocional y
física.
El problema de violencia no se resuelve por sí
mismo. Tu salud física o mental puede quedar
permanentemente dañada si no la detienes a tiempo; tu vida
puede llegar a estar en peligro en más de una ocasión.
Enseguida encontrarás cuatro Test desarrollados para
que percibas a tiempo si estás viviendo o en peligro de vivir
violencia en tu relación.
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160
161
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El “Violentómetro”
Test mexicano
creado por el Instituto
de Seguridad y Servicios
Sociales de los Traba-
jadores del Estado
(ISSSTE) , publicado por el
Instituto Nacional de las
Mujeres (INMUJERES) de
México, bajo diseño sen-
cillo -como una regla-
realizado por el Instituto
Politécnico Nacional (IPN).
El “Violentóme-
tro” facilita medir la
agresividad en las rela-
ciones de pareja, visua-
lizando de manera grá-
fica y didáctica las dife-
rentes manifestaciones
de violencia que se en-
cuentran ocultas en la
vida cotidiana, y que
muchas veces confundi-
mos o desconocemos.
Permite identificar si
estás viviendo una rela-
ción donde tu pareja
comente abusos emocio-
nales o físicos, además
de alertarte sobre las
medidas que debes to-
mar, conforme a la
calificación de “grave-
dad” de tus vivencias,
162
según la medida de la regla del “Violentómetro”.
El mecanismo advierte claramente del peligro que
representa la violencia en relaciones de pareja, sea durante
el noviazgo, vida en pareja o matrimonio, especialmente en
contra de las mujeres.
Medición
La intención de las autoridades, impulsadas por el
gobierno federal, es eliminar por completo cualquier
manifestación de violencia en la relación de pareja.
Lo importante es que las mujeres conozcan e
identifiquen las situaciones violentas dentro de una relación
sentimental desde las primeras señales.
El “Violentómetro” se divide en tres fases
diferenciadas por colores:
Preventiva
Incluye violencia psicológica y emocional. Señala
cuando la violencia seguramente crecerá. Las acciones son
cotidianas como bromear, mentir, celar, aplicar la '”ley del
hielo”, descalificar o ridiculizar.
Reactiva
Indica que es momento de reaccionar y no dejarte
destruir. La alerta es cuando recibes golpes “por juego”,
empujones, jaloneos o cuando eres tocada sin tu
consentimiento; es momento de actuar ante cualquier tipo
de agresión física.
De urgencia
Es la fase más peligrosa para la integridad física de la
persona. Es una alerta para pedir ayuda profesional; es
cuando ya se experimentan abuso sexual, amenazas de
muerte, violaciones o mutilaciones.
163
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166
Haz creíble que efectivamente se trata de un
encuestador; provee a quien te ayude de una tabla de apoyo
con muchas más hojas; de ser posible hazlo portar algún
gafete que lo identifique como estudiante o encuestador y
asegúrate que sea confiable y esté dispuesto a hacerlo sin
delatarse ni delatarte a ti.
Al terminar de encuestarlo a “él”, pide que aplique
una encuesta más a otro varón, para que tu hombre-objetivo
no sospeche. Posteriormente reúnete con quien te auxilió
para que te entregue la encuesta y brinde detalles de la
reacción o actitud de “él” durante la entrevista. Analiza sus
respuestas y date cuenta de su forma de pensar.
Si varias amigas están de acuerdo en aplicar la “falsa
encuesta” a sus respectivas parejas, y lo hacen estando todos
en un mismo lugar, quizá será más fácil conseguir un solo
“cómplice anónimo” para todas, y la vez resultará más creí-
ble que la aplique a todos los varones de su grupo.
“Iceberg” de
Violencia
contra
la Mujer
En España,
«Amnistía Inter-
nacional» orga-
nización antivio-
lencia, desarro-
lló un gráfico
similar para de-
tectar de mane-
ra sencilla la
violencia contra la mujer. Lo denominó “Iceberg de Violencia
contra mujer”, y emula lo que se ve y lo que no, de la
violencia en la pareja.
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Capítulo 15
¿Por qué a mí?
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©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Te volaste el rojo y
estacionaste en sitio prohibido
Al revisar tu situación, te das
cuenta que las señales de alerta siempre
estuvieron ahí, pero ¡no “las pelaste”!
porque “el amor lo puede todo”, “nadie
es perfecto”, “ya me prometió no hacerlo
de nuevo” o ”n’ombre, no pasa nada”.
Las señales te decían “Encienda
sus luces con neblina, pavimento
resbaladizo, topes a 100 metros, próxima
salida a un kilómetro”, pero le seguiste… ¡y te pasaste en luz
roja el semáforo!… -“Hmm que al cabo no hay tráfico”- y lo
peor, te dio por estacionarte con “él”, justo donde estaba un
mega-letrero que decía “Prohibido Estacionarse”; y ahora te
das cuenta que ese “valemadrismo” te está saliendo caro.
Una vez que eres víctima de un machista controlador,
te pasarás tratando de evitar problemas complaciéndolo y
alejándote de todo lo que le molesta… de tu familia, tus
amigos, tus compañeros de trabajo, intentando con eso que
ya no “te cargue el payaso”, le pare a sus insultos y golpes,
pero… ¿sabes qué? siguiéndole el juego, sólo se pondrán
peor las cosas.
Algunas mujeres idealizan a su
hombre como fuerte, divertido, con
clase, seguro de sí mismo, un poco
dominante, inteligente, sexy y román-
tico; ante sus defectos piensan inge-
nuamente “cuando vivamos juntos mi
amor lo cambiara”. De pronto, se
rompen esos lentes alucinantes con
que lo admiraban- y se dan cuenta que se unieron un necio,
inmaduro, desorganizado, impuntual, incumplido, infiel,
deshonesto y agresivo, que no tiene cuadritos en el abdomen
170
sino una panza “caguamera”, y que cuando se acerca en
busca de romance, según él muy “sexxxy”….. ¡te eructa en la
cara!.
Algunas buscan soluciones mágicas para lograr que
cambie, y modifique su actitud, pero como “él” ya era así, no
logran nada. Es mejor ponerte a salvo, buscar ayuda y
dejarlo.
Tu felicidad no está
donde te la robaron
Perdonar es una de-
cisión que nos llena de paz,
pero hay que marcar una clara
diferencia entre el perdón y
continuar una vida juntos;
perdonarlo no significa que
debas seguir viviendo con “él”
o a su lado; se concede el
perdón sobre un hecho que ya
está en el pasado, perdonar no
incluye seguir tolerando maltratos e imposiciones sobre ti.
Perdonarlo y seguir con “él”, son dos cosas bien distintas.
En el ir y venir por fiscalías, puede verse frecuente-
mente a mujeres seriamente lesionadas cuyo marido o agre-
sor cercano ha sido capturado, pero se compadecen de “él”
al creer en su arrepentimiento y promesas de cambio, no
sólo lo perdonan sino que le dan otra oportunidad… ¡eso es
lo peor que pueden hacerse a sí mismas!, el tipejo quedará
libre, se comportará bien un par de días para que ella se
confíe, pero tan pronto como se sienta seguro de nuevo,
buscará vengarse “pa’ cobrarse” el mal rato que vivió.
Es difícil continuar sola sobre todo cuando se tienen
hijos, pero en poco tiempo verás que la tranquilidad vuelve a
171
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
172
No se cómo escapar o terminar
Es común sentir que es
imposible escapar de una relación
abusiva, violenta, tóxica o controladora.
Deja de darle vueltas, ¡sí se puede!, pero
tienes que tomar acción, dar el primer
paso en vez de continuar sufriendo
“hasta que la muerte los separe”, o de
esperar que las cosas cambien por sí
solas o “mágicamente”.
Cuando “él” sienta que realmente te pierde hará
amenazas extremas como quitarte los hijos, dejar su empleo
o negocio para no pagar la pensión alimenticia y evitar que
puedas mantenerte sola, exponer públicamente sus proble-
mas personales o asegurarte que nunca tendrás una vida en
paz por el asedio continuo que “él” llevará a cabo. Igual
puede optar por el extremo contrario, hacerte creer que se
suicidará y cargarás con el remordimiento siempre.
¿Sabes qué? NO LE CREAS, no caigas otra vez en su
juego. Las leyes protegen a tus hijos menores de edad y a ti.
Para salir del pozo en que te metiste, primero deja de
cavar. En ti está seguir con eso que otro cree debe ser tu vida
o recuperar tu libertad y vivir realmente TU vida.
No será fácil por los cambios que implica, busca ayu-
da y toma las acciones que precises, porque aunque otros te
apoyen y te ayuden no pueden estirarte, ni obligarte, ni
empujarte, “estás en un lugar del que sólo tú puedes salir”*
173
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Capítulo 16
Mejora del panorama para mujeres
Aproximadamente 75 años atrás, internacionalmente
muchas leyes y reglamentos comenzaron a modificarse para
reconocer la igualdad de géneros y dar a la mujer
oportunidades a la par de los hombres.
174
el trato igualitario con el hombre; se avanza a paso
demasiado lento, pero al menos se avanza.
No obstante, de pronto aparecen sorpresas negativas
en países considerados altamente civilizados y líderes de la
democracia, como Estados Unidos.
175
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
Aferrados a obstaculizar
la igualdad de géneros
Aunque en diversos países se han
producido avances legislativos, aún faltan
muchas leyes por reformar y mentes
retrógradas por transformar.
En Irán por ejemplo, hay mujeres
que tras ser víctimas de abusos sexuales
terminan en la cárcel, y también quienes
son entregadas por sus padres para pagar
deudas.
En determinados puntos de
Nigeria, la mujer viuda no tiene derechos
de herencia sobre los bienes de su marido.
176
Durante décadas, activistas y organizaciones de
derechos humanos, que intentan mejorar la situación de
millones de mujeres, se topan con arraigadas tradiciones,
políticas y creencias que, obstaculizan la equidad.
El Concepto Apache
Contrasta con la forma de pensar de algunas
naciones, el concepto de los nativos Apache. Su cultura
apegada a lo natural e interconexión mediante la energía
espiritual de todos los seres vivos, lega grandes lecciones.
Cuando se presenta la primera
menstruación en una adolescente
Apache, es motivo de fiesta para su
tribu, realizan la «Ceremonia de la
Pubertad» o «Ceremonia del Amanecer»,
en agradecimiento a la naturaleza por la
nueva oportunidad de preservar la
existencia de su pueblo y trascender en nuevas generaciones.
Reconocen el valor de la mujer como dadora de vida.
Para los Apache no existen roles específicos por
género, de hecho dos mujeres sobresalen en su historia por
ser grandiosas guerreras: Lozen y Dahtheste, quienes
combatieron bajo las órdenes de Gerónimo, y son
referenciadas en los libros «Gerónimo: A Biography» de
Alexander B. Adams y «Warrior Woman: The Story of Lozen,
Apache Warrior and Shaman» de Peter Alexhire.
A ambas mujeres, su pueblo continúa rindiéndoles
tributo como las heroínas que fueron.
Ganando terreno
Una de las empresas de entretenimiento a nivel
mundial con mayor grado de influencia en la formación psico-
lógica infantil, es Disney. Evolucionó con el cambio de siglo;
sus princesas, más actuales se liberaron de la dependencia
177
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
178
por ser tú; no te quedes en la etapa de planeación, ponte en
marcha rumbo a un nuevo destino, avanza hacia el tipo de
vida que deseas y mereces, despierta y actúa; o das el primer
paso o te quedas en el mismo lugar.
179
©Azul Ishtar / Roberto Cisneros
180
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