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Carnet: 2020-0146U
Aula: IC-43D
La primera fase
Si la intensidad de la lluvia es menor que la capacidad de infiltración del suelo, parte del
agua retenida retornará a la atmósfera posteriormente; ahora, si la intensidad de la lluvia
es mayor que la deficiencia de humedad del suelo habrá un aumento gradual del
contenido de humedad en su zona de aireación. En el Hidrograma de la figura esta fase
queda definida por el tramo comprendido entre el inicio de la precipitación y el punto
“A”, notemos que, la tendencia descendente se mantiene hasta que las pérdidas por
infiltración e Intercepción (entre otras) son excedidas por la Intensidad de la
Precipitación. En este momento la curva tiende a ser horizontal, para iniciar el cambio
de pendiente, precisamente en el Punto A.
La segunda fase
Se considera que desde el punto B hasta el punto D, además de las tres componentes del
Hidrograma que estaban contribuyendo en la fase anterior, está contribuyendo el flujo
su superficial. En este intervalo la componente que menos interviene es la precipitación
directa sobre la corriente, la cual debió haber cesado antes del punto D.
Por último, hay que destacar que un Hidrograma puede presentar picos múltiples debido
a posibles aumentos en la intensidad de la lluvia, a una sucesión continua de lluvias o a
una no sincronización de las componentes del flujo, por ejemplo, con relación a la
siguiente figura, podremos ver cómo sería el Hidrograma total generado para dos lluvias
consecutivas, en los que el caudal Pico aumenta, dadas las condiciones de saturación del
suelo, cuando ocurre la segunda lluvia.
Métodos para la determinación de un hidrograma.
El método del Servicio de Conservación de Suelos (SCS, por sus siglas en inglés) es
uno de los métodos más utilizados para la determinación de hidrogramas en cuencas
pequeñas y medianas. Este método se basa en la curva número, que es una medida de la
capacidad de infiltración del suelo y de la humedad previa al evento de lluvia.
La curva número se determina en función del tipo de suelo, el uso del suelo, la cobertura
vegetal y la humedad previa al evento de lluvia. Una vez que se ha determinado la curva
número, se utiliza para calcular la escorrentía directa y la infiltración.
La escorrentía directa se calcula como la cantidad de lluvia que excede la capacidad de
infiltración del suelo. La cantidad de lluvia que se infiltra se estima en función de la
curva número y de la cantidad de lluvia total.
El hidrograma se obtiene a partir de la distribución temporal de la escorrentía directa.
La forma del hidrograma dependerá de la duración y la intensidad de la lluvia, así como
de las características de la cuenca y del suelo.
El método del SCS es relativamente sencillo y requiere pocos datos, por lo que es
ampliamente utilizado en la práctica. Sin embargo, puede subestimar la escorrentía en
cuencas con suelos muy permeables o en eventos de lluvia intensa.
Método racional
El método racional es uno de los métodos más utilizados para la determinación de
hidrogramas en cuencas pequeñas y medianas. Este método se basa en la ecuación de
diseño racional, que relaciona el caudal de escorrentía directa con la precipitación, la
pendiente y el uso del suelo.
La ecuación de diseño racional es:
Q = CIA
Donde:
Q = Caudal de escorrentía directa (m3/s) C = Coeficiente de escorrentía, que depende
del uso del suelo y de las características de la cuenca I = Intensidad de la lluvia (mm/h)
A = Área de la cuenca (ha)
Para obtener el hidrograma, se debe calcular la intensidad de la lluvia para cada
intervalo de tiempo y luego aplicar la ecuación de diseño racional para cada intervalo de
tiempo. La forma del hidrograma dependerá de la duración y la intensidad de la lluvia,
así como de las características de la cuenca y del suelo.
Es importante destacar que el método racional asume que la escorrentía directa se
produce instantáneamente después de que la lluvia alcanza el suelo, lo que no siempre
es cierto en la realidad. Además, el método no tiene en cuenta la infiltración, por lo que
puede sobreestimar la escorrentía en cuencas con suelos muy permeables o en eventos
de lluvia de larga duración. Por lo tanto, se recomienda utilizar el método racional en
combinación con otros métodos para obtener una estimación más precisa del
hidrograma.
Método del volumen unitario:
El método del volumen unitario es un método para la determinación de hidrogramas que
se basa en la idea de que la escorrentía directa se produce a partir de un volumen de
agua que se mueve a través de la cuenca. Este método es ampliamente utilizado en la
práctica, ya que es relativamente sencillo y requiere pocos datos.
El método del volumen unitario se basa en la ecuación:
Q = kA
Donde:
Q = Caudal de escorrentía directa (m3/s) k = Coeficiente de escorrentía A = Área de la
cuenca (ha)
El coeficiente de escorrentía, k, se calcula como el cociente entre el volumen de
escorrentía directa y el volumen total de lluvia. Para determinar el volumen total de
lluvia, se multiplica la intensidad de la lluvia por el tiempo de duración del evento. Para
determinar el volumen de escorrentía directa, se resta el volumen infiltrado del volumen
total de lluvia.
Una vez que se ha determinado el coeficiente de escorrentía, se puede utilizar la
ecuación del volumen unitario para calcular el hidrograma. La forma del hidrograma
dependerá de la duración y la intensidad de la lluvia, así como de las características de
la cuenca y del suelo.
Es importante destacar que el método del volumen unitario asume que la escorrentía
directa se produce instantáneamente después de que la lluvia alcanza el suelo, lo que no
siempre es cierto en la realidad. Además, el método no tiene en cuenta la variación en la
capacidad de infiltración del suelo, por lo que puede subestimar la escorrentía en
eventos de lluvia intensa. Por lo tanto, se recomienda utilizar el método del volumen
unitario en combinación con otros métodos para obtener una estimación más precisa del
hidrograma.
Método del tiempo de concentración
El método del tiempo de concentración es un método para la determinación de
hidrogramas que se basa en el tiempo que tarda el agua de lluvia en llegar al punto más
alejado de la cuenca. El tiempo de concentración se define como el tiempo que tarda el
agua en recorrer la distancia máxima desde el punto más alejado de la cuenca hasta el
punto de salida.
El método del tiempo de concentración se basa en la ecuación:
Q = (CIA)/3600
Donde:
Q = Caudal de escorrentía directa (m3/s) C = Coeficiente de escorrentía I = Intensidad
de la lluvia (mm/h) A = Área de la cuenca (ha)
El tiempo de concentración se calcula a partir de la suma de los tiempos de recorrido de
los diferentes tramos de la cuenca. El tiempo de recorrido se calcula dividiendo la
longitud del tramo por la velocidad de la escorrentía.
Una vez que se ha determinado el tiempo de concentración, se puede utilizar la ecuación
para calcular el caudal de escorrentía directa. La forma del hidrograma dependerá de la
duración y la intensidad de la lluvia, así como de las características de la cuenca y del
suelo.
Es importante destacar que el método del tiempo de concentración no tiene en cuenta la
infiltración, por lo que puede sobreestimar la escorrentía en cuencas con suelos muy
permeables o en eventos de lluvia de larga duración. Por lo tanto, se recomienda utilizar
el método del tiempo de concentración en combinación con otros métodos para obtener
una estimación más precisa del hidrograma.
Método de la lluvia-distribución:
El método de la lluvia-distribución es un método para la determinación de hidrogramas
que se basa en la distribución espacial de la lluvia en la cuenca. Este método es
especialmente útil para cuencas con una topografía compleja o una variación
significativa en la intensidad de la lluvia.
El método de la lluvia-distribución se basa en la ecuación:
Q = ∑ (CiAi)
Donde:
Q = Caudal de escorrentía directa (m3/s) Ci = Coeficiente de escorrentía para la i-ésima
subcuenca Ai = Área de la i-ésima subcuenca
Los coeficientes de escorrentía se determinan a partir de la relación entre el volumen de
escorrentía y el volumen de lluvia para cada subcuenca. El volumen de lluvia se
determina multiplicando la intensidad de la lluvia por el tiempo de duración del evento
para cada punto de la cuenca. El volumen de escorrentía se determina restando el
volumen de infiltración del volumen total de lluvia.
Una vez que se han determinado los coeficientes de escorrentía para cada subcuenca, se
pueden utilizar en la ecuación de la lluvia-distribución para calcular el hidrograma total
para la cuenca. La forma del hidrograma dependerá de la duración y la intensidad de la
lluvia, así como de las características de la cuenca y del suelo.
Es importante destacar que el método de la lluvia-distribución puede ser bastante
complejo y requiere datos detallados sobre la distribución espacial de la lluvia en la
cuenca. Además, el método no tiene en cuenta la variación en la capacidad de
infiltración del suelo, por lo que puede subestimar la escorrentía en eventos de lluvia
intensa. Por lo tanto, se recomienda utilizar el método de la lluvia-distribución en
combinación con otros métodos para obtener una estimación más precisa del
hidrograma.
Estos son solo algunos de los métodos más comunes para determinar hidrogramas. La
elección del método depende de las características de la cuenca y de la disponibilidad de
datos.
Conclusión
Existen varios métodos para la determinación de hidrogramas, cada uno de los cuales se
basa en diferentes supuestos y consideraciones. El método del SCS se basa en el uso de
factores de escorrentía que dependen de las características del suelo y del uso de la
tierra en la cuenca. El método racional hidrograma se basa en la ecuación del balance
hidrológico y en la consideración de que el caudal de escorrentía es proporcional a la
lluvia intensa. El método del volumen unitario se basa en la suposición de que el
hidrograma de la cuenca es proporcional al volumen de lluvia que cae en la misma. El
método del tiempo de concentración se basa en la determinación del tiempo que tarda el
agua de lluvia en recorrer la cuenca. Por último, el método de la lluvia-distribución se
basa en la distribución espacial de la lluvia en la cuenca.
Es importante destacar que cada método tiene sus propias limitaciones y supuestos, y
que su elección dependerá de las características específicas de la cuenca y de los datos
disponibles. Además, se recomienda utilizar varios métodos en combinación para
obtener una estimación más precisa del hidrograma. La determinación precisa de los
hidrogramas es esencial para la gestión adecuada de los recursos hídricos y para la
prevención de desastres naturales como inundaciones y sequías.