1- Piensa en una creencia limitante que ya no quieras tener. Por ejemplo,
que tendrás un problema por el resto de tu vida, o por mucho tiempo. 2- Piensa en una creencia ingeniosa que quieras tener. Por ejemplo, que estará libre de su problema por el resto de su vida y vivirá feliz para siempre. 3- Imagina la creencia limitante de la que quieres deshacerte en el horizonte, lanzándote de regreso a los patrones de submodalidad de incertidumbre. 4- Al mismo tiempo, imagine la creencia de recursos en el horizonte, retrocediendo hacia los patrones de submodalidad de la creencia fuerte. 5- Repite el procedimiento unas cuantas veces, cada vez más rápido, hasta que notes cambios en tu forma de pensar.
Nota: Cuando tienes control sobre lo que crees, puedes comenzar a
crear nuevas creencias con más recursos que te ayuden a vivir una vida mejor y más feliz que antes.