Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
El Estado Republicano y Dictaduras Militares
El Estado Republicano y Dictaduras Militares
La República Peruana como institución de Estado, tiene como antecedente al período colonial,
cuyos fenómenos económicos, sociales y políticos fueron parte del proceso de evolución en la
construcción del Estado Republicano. El Estado formalizó su organización política y jurídica sobre
el territorio que históricamente ejercía dominio; sin embargo, el referido proceso siempre obedeció
a la realidad social objetiva e histórica del período republicano.
Al respecto, J.C. Mariátegui al referirse a la Sumaría Revisión Histórica de esa época, explica:
“Mientras el Virreinato era un régimen medieval y extranjero, la República es formalmente un
régimen peruano y liberal. Tiene por consiguiente, la República deberes que no tenía el virreinato.
A la República le tocaba elevar la condición del indio. Y contrariando este deber, la República ha
pauperizado al indio, ha agravado su depresión y ha exasperado su miseria. La República ha
significado para los indios la ascensión de una nueva clase dominante que se ha apropiado
sistemáticamente de sus tierras. En una raza de costumbre y de alma agrarias, como la raza
indígena, este despojo ha constituido una causa de disolución material y moral. La tierra ha sido
siempre toda la alegría del indio. El indio ha desposado la tierra. Siente que “la vida viene de la
tierra y vuelve a la tierra”. Por ende, el indio puede ser indiferente a todo, menos a la posesión de
la tierra que sus manos y su aliento labran y fecundan religiosamente”. Prosiguiendo la descripción
social y política del nuevo Estado y la población, Mariátegui manifiesta: “La servidumbre del
indio en suma no ha disminuido bajo la República. Todas las revueltas, todas las tempestades del
indio han sido ahogadas en sangre. A las reivindicaciones desesperadas le ha sido dada siempre
una respuesta marcial. El silencio de la puna ha guardado luego el trágico secreto de estas
respuestas. La República ha restaurado, ese fin, bajo el título de conscripción vial, el régimen de
las “mitas” (7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana pp. 39,40 y 41).
De las afirmaciones del gran Amauta, deducimos que durante el proceso social y político de
formación de la nueva República, la población mayoritaria, marginada y sometida a las
condiciones de explotación fueron los indios. Durante el período de gestación de la independencia
así como las políticas iniciales de la República se alzaron voces de protección y defensa de la raza
indígena; las primeras disposiciones fueron aparentemente de reivindicación; sin embargo, no
habiendo surgido una clase social dirigente que represente y promueva la defensa de los intereses
materiales y propios de la población indígena como es la tierra, la condición social de explotación
y la clase social aristocrática colonial ha mantenido sus dominios feudales sobre la tierra y los
indios, y esa es la reflexión que extraemos de los primeros años de la República.
Habiendo puntualizado y definido la situación política y social del nuevo Estado Republicano,
consideramos de vital importancia describir y explicar las características territoriales, poblaciones,
las condiciones económicas, sociales y políticas de gobierno y los acontecimientos producidos
durante la primera República.
La República Peruana se creó teniendo como fundamento a la libre determinación de los pueblos,
sobre el territorio del Virreinato que en ese entonces comprendía las Audiencias de Lima y Cuzco,
así como las Intendencias de Trujillo, Arequipa, Huamanga, Huancavelica, Puno y Tarma; la
Comandancia General de Maynas y del Gobierno de Guayaquil. Dichos territorios, de acuerdo a
la libre determinación de sus habitantes y a su voluntad de pertenecer a la nueva República y a la
Nación Peruana, complementada por el principio de “UTI POSSIDETIS” que disponía y honraba
los títulos coloniales y límites jurisdiccionales, fueron los territorios sobre los que se constituyó la
nueva República como se puede comprender, los territorios de la nueva República no estuvieron
muy definidos con sus límites jurisdiccionales, y con la determinación de las fronteras, el país tuvo
que afrontar discusiones y delimitaciones internas y externas con los Estados fronterizos.
El desarrollo económico de la nueva República fue afectado por la inestabilidad causada durante
las controversias producidas por la independencia; así como, las guerras sostenidas con los
españoles; sin embargo, debemos tomar nota, cuáles fueron las principales características de la
economía del Estado y la población:
- El nuevo Estado se encontraba sin mayores recursos económicos debido que los
monopolios de la época colonial habían dejado de operar, y producir las rentas.
- El gobierno provisorio de Bolívar restauró el tributo indígena que fue la renta más
importante.
- El impuesto en las aduanas se pagaban por importación de productos.
- La actividad comercial adquirió una participación activa de los comerciantes extranjeros,
como: Ingleses, Alemanes, Franceses, Norteamericanos, Italianos que se pusieron a
disputar el comercio con la presencia de muchas empresas y casas comerciales.
Durante los primeros años de la República el país afrontó una inestabilidad política de gobierno
hecho que dificultó la implementación y aplicación de políticas de progreso y bienestar. La
inestabilidad política tiene su expresión en la constante sucesión de gobiernos militares llamados
“caudillos militares” que profusamente detentaban el poder; y por otro lado, las contradicciones
surgidas entre los civiles que eran grupos políticos que pertenecían a las corrientes liberales y
conservadores. La ideología liberal planteaba el ejercicio de las libertades y derechos de los
ciudadanos, y el poder ejecutivo bajo el control del Congreso. Por su lado, los conservadores
asumían la defensa de un poder ejecutivo fuerte y absoluto en sus disposiciones, al mismo tiempo,
la limitación de los derechos ciudadanos con restricciones en su ejercicio.
El Segundo Congreso Constituyente convocado por el Presidente interino Andrés de Santa Cruz
se instaló el 04 de Junio en la ciudad de Lima, siendo elegido Presidente del Congreso Francisco
Javier de Luna Pizarro y como el congreso tenía el encargo de elegir al Presidente de la República,
Luna Pizarro presentó la candidatura del General José de la Mar, siendo elegido por 58 votos el
09 de Junio de 1827 como Presidente de la República. El Congreso Constituyente de 1827 declaró
nula la Constitución de 1826, por haber sido sancionada de un modo ilegal atentando contra la
soberanía nacional, para el efecto puso en vigor la Constitución de 1823.
Los constituyentes de 1827 se concentraron en debatir sobre el federalismo, debido a las ideas
liberales de sus integrantes del Congreso Constituyente, siendo aprobado este sistema de
organización del Estado, se crearon las Junta Departamentales, y se estableció 5 años para la
reforma de la Constitución. José De la Mar, quien en su condición de Presidente militar autorizado
por el Congreso tuvo que enfrentar la primera guerra del Perú con la Gran Colombia por límites
de territorios de Jaén y la Comandancia General de Maynas, y luego extender su dominio sobre
los territorios de Tumbes. La guerra al mando del presidente La Mar tuvo éxito con intervención
del ejército peruano ocupando los territorios de Loja, llegando hasta Guayaquil, luego firma el
Convenio Girón, retirando su ejército a Piura. En este lugar fue sorprendido por un golpe militar
realizado por Agustín Gamarra y luego deportado a Costa Rica, tomando posesión del gobierno
peruano el General Gamarra, el día 07 de Junio de 1829. Gamarra en su condición de gobernante
y Presidente firma el Armisticio de Piura el día 10 de Julio de 1929 por el que transfería Guayaquil
a favor de Colombia. Esta controversia culmina con el Tratado de Paz realizado el 22 de Setiembre
de 1929 entre los representantes del Perú y Colombia, tomando el acuerdo que el Perú aún sin
límites territoriales definidos se quedaba en posición de Tumbes, Jaén y Maynas y el territorio de
Guayaquil transferido a favor de Colombia.
Como se puede observar, la elección y el ejercicio de los gobiernos llamados caudillos militares
que pertenecían al período de la anarquía militar, asumieron sus funciones en un espacio de luchas
políticas internas relacionadas con los límites territoriales. El gobierno de Agustín Gamarra
producto de un golpe militar fue inicialmente elegido como Presidente provisorio, luego elegido
por el Congreso presidente constitucional a partir del 19 de diciembre de 1829.
Confederación Peruano-Boliviano:
Luego del gobierno de la anarquía militar, se culminó por constituir la Confederación Peruano-
Boliviano a cargo de su protector el Mariscal Andrés Santa Cruz, habiendo previamente
organizado el Estado Sud peruano, para federarse con el Estado Nor Peruano y con el Estado de
Bolivia respectivamente. Formado los estados integrantes, A. Santa Cruz mediante Decreto de
fecha 28 de Octubre de 1836 declaró establecida la Confederación Peruano-Boliviana disponiendo
que en un Congreso compuesto por tres representantes de cada Estado deberán concretar y
establecer las bases de la Confederación. Reunidos los nueve representantes de los tres Estados el
primero de Mayo de 1837 en la ciudad de Tacna, se celebra el llamado “Pacto de Tacna” donde
los integrantes de la Confederación tomaron los siguientes acuerdos:
Sin embargo, durante el período de formación del Estado republicano, el Perú fue presidido por 7
presidentes en forma sucesiva: Andrés De Santa Cruz Protector de la Confederación; Agustín
Gamarra, Presidente Provisorio del Perú; Luis José De Orbegoso, Presidente del Estado Nor
Peruano; José De la Riva Agüero, nombrado por Santa Cruz como Presidente del Estado Nor
Peruano; Pío Tristán, Presidente del Estado Sur Peruano; Domingo Nieto, Jefe Supremo del Norte,
expedido por Luis Orbegoso; Vicente Vidal, Jefe del Norte apoyado por el ejército restaurador.
Presidentes que conformaron la anarquía militar en la formación del Estado Republicano.
El espacio histórico del período republicano descrito nos muestra las siguientes conclusiones:
2.- Silva Santisteban, Fernando, Historia del Perú Republicano, Ediciones Buho, Lima 1984.
3.- Zelada Bartra, Jaime Victor, Derecho Constitucional y Ciencia Política, Edición
Corporación Gráfica Suiza SAC, Lima, 2014.
4.- Roldan Aquino, Julio, Perú, Mito y Realidad, CONCYTEC, Lima 1989.
5.- Roel Pineda, Virgilio, El Sendero de un Pueblo, Editorial Garcilaso, Lima 1965.