La navidad de Paul

Había una vez en la ciudad de Lima un pequeño niño llamado Paul que tenía, más o

menos 7 o 8 años de edad, el no tenia ropa fina, dientes limpios ni estar bien aseado;

solo tiene ropa vieja, dientes amarrillos, todo sucio e polvoriento, el no tiene madre ya

que murió cuando el nació y su padre está muy enfermo para no poder cuidar de él, su

casa es de un piso, no esta bien pintada, los sillones rotos y sucios, no había agua ni

electricidad y ni hablar de la comida ya que como su padre esta enfermo no hay que

comer.

El niño todo pequeño empezó a buscar trabajo para poder conseguir dinero para

poder alimentarse y para sacar cita en el hospital para su papa, buscaba y buscaba y

nada nadie lo quería contratar por ser un niño, el no se rendía seguía buscando un

trabajo a el no le importaba que trabajo era con tal de obtener dinero, horas pasaba y

nada así que juro que mañana saldría otra vez a buscar algo. Llego a su casa cansado e

triste y aun peor ver a su padre que se pone cada vez peor y no podía hacer nada, solo

se durmió teniendo esperanzas que mañana será mejor.

A la mañana siguiente volvió a pasar lo mismo no tuvo trabajo así que siguió

caminando por mucho tiempo hasta llegar a un parque, se sentó en una banca viendo

a la gente pasar de pronto ve aun señor con una ropa que si la miras alto que dices que

es un millonario, con unos lentes oscuros, con un peinado bien arreglado, con unos

zapatos negros y un reloj de oro; el señor paso frente al chico y se le callo su billetera,

así que la recogió y noto que tenía muchos billetes, se quedo asombrado por la gran

cantidad de dinero, pensó que con este dinero sus problemas se solucionarían pero
este dinero no era suyo asique fue en busca del señor para devolverlo, vio que el

señor estaba buscando por todas su billetera asique vie a fue a darla.

Paul: disculpe señor se le cayó su billetera.

Señor: Ha gracias la estaba buscando yo ya estaba pensando que me lo habían robado

sin que me hubiera dado cuenta.

Miro al niño atenta mente

Señor: No te habrás quedado con algo de mi dinero no.

Paul: Eso me ofende señor soy pobre pero honrado, la verdad si se me había cruzado

por la mente llevarme algo ya que mi padre está muy enfermo y no tenemos nada que

comer, haci que empecé a buscar un trabajito pero nadie me lo quiere dar porque aun

soy chiquito.

Señor: Mnn... Cómo te llamas.

Paul: Mi nombre es Paul.

Señor: Bueno Paul para empezar mi nombre es Carlos y como devolviste mi billetera te

voy a devolver el favor, llévame con tu padre quiero conversar con él.

Paul: ok

Caminaron un rato hasta llegar a la casa de Paul, entonces Carlos le pidió poder hablar

con su padre a soles, hiso caso y se fue.

Carlos: Un gusto conocerlo señor deje que me presente mi nombre es Carlos su hijo

me conto que usted está grave y que no tienen nada que comer.

Padre de Paul: Si joven lo que mi hijo le dijo es verdad.

Carlos: bueno le debo un favor a su hijo asique vera soy el dueño de una empresa y

nos falta personal y bueno me gustaría que trabaje conmigo pero antes hay que

llevarlo al hospital.

Padre de Paul: Ok y gracias por la oportunidad.

Fueron al hospital y atendieron al padre de Paul, les dijeron que tiene que tomar estas

medicinas por una semana y se pondría mejor.

Pasaron los meses y lo que antes era una casa no pintada, con sillones rotos y sucios,

sin agua ni electricidad, ni comida ahora su casa esta total mente nueva sus paredes

están pintadas, sillones suaves y limpios, con agua y electricidad y con una gran

refrigeradora.

Era noche buena Carlos los visito para la cena navideña y Paul se da cuenta que es su

primera navidad ya que como antes no tenían plata no podían comprar un pavo, árbol,

regalos, era como un día como otro mientras veía en la ventanas de una casa como

como una familia se divertía en la cena y él quería sentir lo mismo, ahora el siente ese

amor de la navidad con su padre recuperado y con trabajo y su amigo Carlos.

Él sabe que las cosas mejoraran para aquellas personas con un corazón bueno y

bondadoso por eso le deséanos ¡Una feliz navidad!