“Vivir no es esperar

que pase la tormenta,

sino aprender a bailar
bajo la lluvia”
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Tenemos que aprender a vivir nuestro día a día, aprender a ser felices, aprender a
aprovechar cada momento y cada oportunidad, sin desperdiciar ni un solo segundo,
porque nuestro tiempo es valioso.
Tenemos que ser consientes de que vida hay una sola, el tiempo pasa, los segundos y
minutos corren, y se van sin posibilidad de recuperarlos.
Cada segundo que vivimos con apatía, negatividad, tristeza, enojo, banalidad, etc., son
segundos desperdiciados.
Y si bien durante nuestra vida pueden presentársenos obstáculos, complicaciones,
tristezas y “tormentas”, tenemos que aprender a vivir con ellos y no convertirlos en una
escusa para encerrarnos en nosotros mismos. Es cierto que no es fácil vivir con ellos , es
cierto que es todo un desafío seguir adelante, pero tenemos que lograr ser fuertes ante
los momentos difíciles, tenemos que lograr mantener nuestra cabeza siempre en alto, y
sonreírle a la vida, sea cual sea la cara que esta nos presente.

“La vida está para vivirla. Vivir la vida solo se logra siendo felices. La felicidad no se halla
en lo banal. Lo banal es simplemente un caparazón del mundo exterior, que nos abstrae y
nos convence de que estamos viviendo cuando simplemente estamos dejando el tiempo
fluir.”