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Presentado por:

Maria Eugenia Alonso


Diego López
R-2 Ortodoncia
Presentado a:
Dra. Nancy Castro
Septiembre- 2017

PRINCIPIOS DE LOS APARATOS FUNCIONALES


/

La ortopedia funcional de los maxilares es definida como una especialidad que


diagnóstica, previene, controla y trata los problemas de crecimiento que puede
afectar el correcto desarrollo del arco. Esta aérea surge ya que los pioneros
afirmaban que la ortodoncia fija y removible en muchos casos no podían resolver
las maloclusiones causadas por discrepancias de crecimiento y no podía ser
aplicada en niños. En 1931 Autores como Balters, Frankel, Andresen, Haupl,
Bimler, Klammt, Planas y Simoes a través de los años con publicaciones
reducidas fueron desarrollando aparatos funcionales y forjando lo que hoy se
conoce como Ortopedia Funcional de los Maxilares.

Según Wilma Simoes el objetivo de la ortopedia funciones es “remover


interferencias indeseables durante el crecimiento y desarrollo fisiológico de las
estructuras estomatognáticas, actuando directamente sobre el sistema
neuromuscular que comanda el desarrollo óseo de los maxilares.

Por lo tanto la ortopedia funcional se fundamenta en la premisa de que la


actividad de un órgano estimula la forma de los tejidos y en consecuencia
condiciona su morfología. En este sentido los aparatos funcionales buscan:

 Crear nuevos reflejos posturales y otra dinámica mandibular.


 Producir y mantener la armonía del sistema estomatognático
 Obtener eficiencia masticatoria
 Prevenir mal oclusiones

Para lograr cumplir estos principios los aparatos funcionales actúan sobre la
dinámica mandibular, muscular, facial y ósea con el fin de lograr el un modelado
y remodelado óseo adecuado, esto se lleva a cabo ya que la ortopedia funcional
de los maxilares usa las fuerzas del crecimiento y desarrollo , de la erupción, de
la postura y movimiento lingual y de la postura movimiento mandibular. En otras
palabras, los aparatos funcionales cambian el reclutamiento muscular, inducen
el remodelado óseo y afectan la oclusión.

En resumen, los aparatos funcionales son definidos como aparatos removibles


que utilizan la propia función de la musculatura estomatognática con el fin de
redirigir o acelerar el crecimiento. Una de sus principales características es que
ejercen su acción de forma indirecta, es decir actúan sobre la musculatura para
poder hacer cambios en la oclusión.1

CLASIFICACIÓN DE LOS AOF

Los aparatos funcionales se pueden clasificar según su forma de acción bien


sea sobre el crecimiento o la musculatura, según las características físicas del
aparato o según el grado de mordida constructiva. Pero actualmente la
clasificación más utilizada es la realizada por Bossy en 1992 la cual divide los
aparatos en miodinámicos los cuales causan acortamiento de las fibras
musculares debido a que aumentan la actividad muscular con contracciones
isotónicas y miotónicos que aumentan la contracción isométrica es decir no hay
acortamiento de las fibras musculares, fueron diseñados para ser usados
durante el sueño y asi reducir las horas que debe llevar a las horas de sueño, su
principal característica es que la altura de la mordida constructiva esta muy por
encima del espacio libre oclusal.2

PRINCIPIOS DE LOS AOF

1. Excitación Neural: el equilibrio del sistema estomatognático se consigue


mediante la excitación neural correcta de músculos articulaciones,
periodonto, mucosa, periostio y otras estructuras. Los aparatos
funcionales producen una conducción del impulso nervioso adecuada.
Aparatos como Balters, Frankel, Bimler, Plana y Simoes actúa excitando
determinada aérea del sistema estomatognatico cambiando el tono
neuromuscular y en consecuencia la posición de la mandíbula. El
mecanismo de de acción se lleva a cabo mediante le cambio de postura
terapéutico (CPT) el cual excita los músculos de la propulsión, retrusión y
propulsión mandibular.

2. Cambio de Postura: la postura es la posición la posición de la mandíbula


en relación al maxilar cuando se esta en posición de reposo (no hay
contacto dental). Esta relación postural es el resultado de reflejos
nocioceptivos (mas de dos neuronas), los aparatos funcionales actúan
sobre esta relación maxilo/mandibular con el fin de condicionar nuevos
reflejos monosinápticos para deshacer circuitos neuronales patológicos.

3. Cambio de postura terapéutico: cuando no haya una relación postural


adecuada es necesario que la mandíbula asuma una nueva posición la
cual será un poco más adelantada. Este CPT debe ser realizado dentro
los límites fisiológicos de cada persona siendo óptimo cuando se logra el
contacto incisivo o DA (determinada aérea) el cual debe cumplir con las
siguientes consideraciones: Debe ser en el tercio incisal superior de las
caras palatinas y vestibulares de los incisivos inferiores y debe ser
realizado en dos etapas.1
DIFERENCIAS ENTRE APARATO FUNCIONAL Y ORTOPÉDICO

Aparato Funcional Aparato Ortopédico


Utiliza fuerza ligeras para cambiar la Utiliza fuerzas pesadas para producir
forma de los huesos. cambios morfológicos, redirigir,
modular o inducir el crecimiento óseo.
Fuerzas intermitentes 12 horas al día Fuerzas continuas (mayores a 400gr)
aproximadamente. Efecto vaivén
Aparatos intra orales rígidos o elásticos Aparatos FIJOS como tornillos de
REMOVIBLES confeccionados en expansión, mentoneras, máscaras
acrílicos y alambres de acero faciales y tracción extraoral
Logran Balance muscular. Actúan No logran balance muscular. Actúa
sobre el componente muscular sobre los dientes
3

EQUILIBRIO DE LAS FUERZAS MUSCULARES

El desequilibrio entre las fuerzas musculares externas (labios y mejillas) y la


fuerza muscular interna (lengua) hace que los maxilares crezcan más o menos,
tanto en sentido antero posterior como transversal. Según el crecimiento de los
huesos, si no es homogéneo, surgen las discrepancias entre maxilar y
mandíbula y por tanto la instauración de diferentes maloclusiones. Si aplicamos
un aparato que inhiba la fuerza de las mejillas sobre las piezas dentarias, es la
acción de la lengua la que hace que crezcan los maxilares en sentido transversal
y si lo aplicamos a nivel anterior y evitamos la fuerza de los labios sobre las
piezas dentarias, el crecimiento que se produce es en sentido anteroposterior.
Por ello podemos hacer crecer un hueso cuando queramos. Podemos hacer
crecer la mandíbula en sentido anteroposterior si obligamos su adelantamiento,
los cóndilos salen de la cavidad glenoidea y estos crecen en sentido de ir a
buscar su ubicación en la cavidad. Estas teorías son fuentes de controversias,
pero está claro que en periodo de crecimiento de un niño o adolescente, el
adelantamiento de la mandíbula estimula su crecimiento, fundamentalmente a
partir de los cóndilos. Por ello, la ortodoncia funcional está indicada en la
mayoría de los casos en pacientes que están en periodo de crecimiento y
debemos tener en cuenta que éste es diferente según el sexo, los varones
acaban el crecimiento craneofacial más tarde que las mujeres y por consiguiente
tenemos más margen para tratarlos. En sentido de hacer crecer o detener el
crecimiento óseo, la ortodoncia funcional es totalmente ineficaz cuando el
paciente ha finalizado su crecimiento craneofacial.

Formas de Acción:

Los aparatos funcionales basan su efecto en la puesta en acción de fuerzas que


tienen diferencias claras con los aparatos convencionales. Todas estas fuerzas
actúan sobre los dientes y huesos maxilares propiciando cambios morfológicos y
funcionales. Según el tipo y diseño del aparato, el objetivo de acción es variable
y selectivamente dirigido. Pero todos los aparatos funcionales tienen un común
denominador: son efectivos sin tener miembros activos como elementos
protagonistas de la acción terapéutica; son fundamentalmente rígidos e inerte.

Fuerzas fisiológicas:

El origen de la fuerza proviene de la deformación de la musculatura. El aparato


afecta la posición muscular y al deformarla crea unas presiones que se
transmiten a la dentición. La energía proviene de la alteración del fisiologismo
masticatorio, por lo que ejerce fuerzas fisiológicas bien aceptadas por el
periodonto. Son de pequeña intensidad y permiten larecuperación histica.

Fuerzas Intermitentes:

El paciente lleva el aparato ciertas horas al día. Las 12 o 14 horas de uso


permiten mantener integra la vascularización periodontal, por lo que el
movimiento ortodontico y la remodelación ósea es lenta y gradual. No hay
presiones continuas, como en los aparatos fijos, que son más propicios a
provocar lesiones intra y peridentarias debido al carácter ininterrumpido de las
fuerzas.

Fuerzas Funcionales:

El aparato rígido deforma el músculo y la reacción de este origina la fuerza que


mueve al diente.En la actualidad se consideran tres tipos de fuerza funcionales.

Fuerza Muscular:

Es la responsable de la respuesta ortopédica del activador. Un ejemplo


característico es la respuesta adaptativa ante el desplazamiento mandibular. El
activador obliga a la propulsión de la mandíbula y tensa y estira los músculos
elevadores. La musculatura a su vez tiende a retraer la mandíbula o la
mandíbula se adapta a la postura forzada creciendo para mantenerse en
posición adelantada. El estímulo del aparato condiciona una respuesta muscular
o una adaptación del hueso útil para la corrección de la distoclusion.
 
Fuerzas Oclusales:

El aparato encaja entre los dientes sup e inf que tratan de ponerse en contacto
al elevarse la mandíbula. La interposición del material rígido desvía la trayectoria
y se produce una oclusión adelantada de la mandíbula. El encaje dentario
provoca fuerzas que actúan sobre la posición e inclinación de los dientes, por lo
que ejerce una acción correctiva.

Alivio de presión ambiental:
El diente se mantiene en posición por el equilibrio de todas las fuerzas
ambientales que le rodean. La presión de la lengua, mejillas y de los labios
determina el posicionamiento dentario en el llamado “pasillo de tomes”. Si por
medio de aletas o alambres se evita el contacto de los tejidos blandos, el diente
se moverá hacia el lado en que no hay presión muscular. El alivio de la presión
ambiental facilita un desplazamiento dentario fisiológico.

Fuerzas Eruptivas.
El diente tiende a crecer verticalmente y el potencial eruptivo es mas si el
paciente es joven. Si elmaterial rígido se apoya en la cara oclusal o incisal, se
inhibe parcialmente la erupción. Si elaparato evita el contacto entre los dientes
antagonistas, estos tenderán a hacer erupción hastaencontrar un tope en su
trayecto.

Fuerzas elásticas.
La mayoría de los aparatos actuales contienen algún tipo de arco o resorte que
complementa laacción estrictamente funcional y enriquecen sus posibilidades
terapéuticas.4
MODO DE ACCIÓN Y EFECTOS DE LOS APARATOS FUNCIONALES:

Los aparatos funcionales aplican tres tipos de control a la dentadura: el control


vertical, el control sagital y el control transversal.

Control vertical: Se aplica tanto en el maxilar superior (Erupción hacia
abajo y adelante mayor componente de migración mesial) como en el
maxilar inferior (Erupción ascendente y ligeramente a mesial).

Se puede conseguir la corrección de la clase II con varios tipos de


aparatos funcionales. Los movimientos de mesialización están más
controlados con los aparatos rígidos que con los elásticos. El aparato
elástico permite más la mesialización de los dientes mientras que el rígido
no lo permite. Por ejemplo en un paciente con biprotusión pondremos un
rígido para controlar más la mesialización.

Control sagital: En la parte anterior se realiza de forma indirecta. Puede
aplicarse para la: protrusión de los incisivos (activar arco labial) o para la
restrusión de los incisivos

Activar resortes. Permitirá mover los dientes hacia delante. Si es un


aparato rígido sin resortes (con resina) lo haremos a base de recortar la
resina

En una clase II normalmente los incisivos inferiores son los tocamos ya


que suelen estar bastante verticalizados y lo que queremos es que se
mantenga la inclinación hacia vestibular. Para evitar su movimiento
utilizamos un lip-bumper en los incisivos inferiores para controlar la fuerza
del labio inferior.

En una clase III hacemos un plano inclinado para lo incisivos superiores


para que se vestibularizen.

Control transversal: Siempre es limitado. Expansión Coffin (limitada) o
Expansión Coffin más tornillo. Con mordida abierta se utilizan unos
aparatos abiertos, sin resina entre los incisivos mientras que para las
sobremordidas utilizamos aparatos cerrados con interposición de resina
entre incisivos. 4

TEJIDOS CRANEALES QUE RESPONDEN A TRATAMIENTOS


FUNCIONALES Y/O ORTOPÉDICOS

Los AOF actúan sobre los tejidos cráneo-oro-cervicales por lo cual Wilma
Simoes basa el funcionamiento de sus aparatos sobre la Teoría de las riendas
musculares en la cual clasifica los músculos como riendas, sobres y sábanas
con el fin entender el grado de acción de cada aparato. Las principales riendas
son el Pterigoideo lateral, el estilogloso y el digástrico los cuales tienen origen en
el cráneo y se insertan en la ATM, lengua y mandíbula siendo considerados
como incansables ya que participan y dirigen todos los movimientos
mandibulares. Los sobres están representados por los músculos elevadores ya
que éstos (pterigoideo interno y masetero) envuelven la mandíbula como si la
colocaran dentro de un sobre seguro para dirigir el movimiento de cierre. El
temporal, milohioideo y el hiogloso actúan como sabanas o velas que regulan la
posición de la lengua, hueso hioides y de la mandíbula y a su vez son
sincronizadores de movimientos.

Los aparatos funcionales provocan, como todos, efectos a distintos niveles de la


boca. En este caso tienen una gran influencia tanto a nivel muscular, como a
nivel dentario y a nivel esquelético dentro de los cuales encontramos:

A nivel muscular: Reeducación de la lengua y de los músculos de la
masticación.
El aparato más significativo es el de Frankel. El equilibrio entre labios y
lengua ha sido comentado muchos por autores.
En un adulto con apiñamiento incisivo inferior las musculaturas, al finalizar
el tratamiento, pueden provocar las recidivas, en esta edad es muy difícil
reeducar la musculatura. Por eso tendremos que colocar los dientes
adaptándolos a la musculatura.

A nivel dentario: Efecto de distalamiento relativo: el aparato no deja
mesializar los superiores por lo que hay un distalamiento relativo (no real),
simplemente los deja quietos en el sitio en que se encontraban.

Efecto de extrusión: al poner resina entre incisivos, levantamos la mordida


y los molares no tienen contacto por lo que las piezas posteriores pueden
erupcionar.
Efecto de intrusión relativa: no tocamos la resina de molares de modo que
creamos una barrera que no deja que erupcionen los molares.

A nivel esquelético: Cuando avanzamos la mandíbula, la fuerza muscular
tiende a volver a su posición original = vector de fuerza antero-posterior
funcional (VFF).

Al tirar de la musculatura hacia delante en mandíbula, en maxilar se


produce un efecto de distalamiento por su propiedad elástica.

A nivel de la ATM: La propulsión de la mandíbula estimula el cartílago
condilar y aumenta su longitud.

También habrá una remodelación en la parte anterior de la fosa


glenoidea.1,5

TRATAMIENTO FUNCIONAL MEDIANTE LA SUPRESIÓN DE FUERZAS

Algunos aparatos actúan fundamentalmente sobre los músculos labiales,


malares y linguales. Pueden controlar la función stomatognatica o actuar
exclusivamente suprimiendo influencias musculares no deseadas para permitir
un desarrollo ordenada de la dentición. Los protectores puros están diseñados
fundamentalmente no tanto para modificar la forma de las arcadas dentales
como para eliminar los efectos funcionales anormales de la musculatura perioral
sobre la zona dentoalveolar en desarrollo.
Se considera que las influencias ambientales desfavorables impiden el
desarrollo normal. A la larga, pueden provocar una adaptación de las estructuras
oro faciales al dar un lugar a verdaderas mal oclusiones del desarrollo, de ahí la
necesidad de atajarlas precozmente.

La aplicación de barreras o pantallas en la trayectoria de las fuerzas musculares


anormales reciben también el nombre de tratamiento inhibitorio, ya que el
objetivo consiste en inhibir la deformación de la dentición mediante la alteración
del equilibrio funcional. Por supuesto, el tratamiento protector no funciona en las
deformidades de tipo patrón morfogenetico. El principio de la interacción entre la
forma y la función se basa en la aceptación de que la función influye
significativamente sobre la estructura y que incluso el proceso de crecimiento
depende hasta cierto punto de la función.

Un dogma básico de este proceso es que la función normal da lugar a una


estructura y unas proporciones normales, mientras que una función anormal da
lugar a malformación y mal oclusión, por consiguiente un cambio en la función
debería provocar un cambio estructural.
Si ya existe una alteración en el momento que el paciente asiste a consulta el
tratamiento protector está enfocado en restablecer la función modeladora normal
de los músculos de los labios, las mejillas y la lengua, con la esperanza de que
el desarrollo posterior corregirá la agresión ambiental sobre la dentición.

Algunos autores justifican el uso de pantallas vestibulares basándose en la


teoría de Moss, la pantalla extiende la matriz capsular hasta un espacio más
normal, permitiendo de este modo que la musculatura funcione sobre un
armazón dentoalveolar normal artificial hasta que pueda hacerlo sin la réplica
protésica. Mientras tantos la pantalla impide que fuerzas deformantes
indeseables actúen sobre a la dentición en desarrollo, permitiendo que los
dientes y alveolos se muevan hacia abajo y hacia fuera par aproximarse a la
matriz formada por la pantalla acrílica. Posteriormente la formación y la función
correctas se combinan para garantizar la estabilidad de la relación conseguida.

Para establecer el crecimiento y desarrollo normales tras la supresión de las


influencias ambientales desfavorables se pueden aprovechar los procesos
metabólicos y las funciones biológicas. Los rasgos hereditarios también actúan
contra las influencias ambientales desfavorables. De este modo solo podrá
existir un sistema estomatognatico normal si las exigencias ambientales no
obstaculizan la expresión normal del patrón hereditario. Sin embargo, para que
un patrón hereditario normal tenga las mayores posibilidades de expresarse o de
corregir los efectos de la agresión ambiental, el tratamiento de intercepción ha
de comenzar lo antes posible para poder aprovechar al máximo la capacidad de
adaptación y el crecimiento.

No es probable que los aparatos para estos tratamientos produzca lesiones


iatrogénicas, ya que la supresión de la disfunción elimina posibles trabas a una
fisiología normal . Las medidas terapéuticas interrumpen el patrón reflejo
anormal y restablecen unos engramas exteroreceptivos y propioceptivos
normales para garantizar la expresión del patrón de desarrollo inherentemente
normal .

Ejemplo: paciente que respiran por la boca quedan sin cerrar los sellos orales
anterior y posterior, la lengua es baja y plana y no se produce el contacto entre
la lengua y los dientes posteriores superiores y el paladar. Si tratamos este
patrón reflejo antifisiológico con una pantalla vestibular proporcionamos un
sustituto para el selle labial anterior y favorecemos la posterior creación del selle
labial anterior con ayuda del tratamiento. 3,5

BIBLIOGRAFIA

1. Simoes W. Ortopedia funcional de los maxilares. Sao Paulo, Brasil: Artes


Médicas/. 2004
2. http://www.barcelona.dental/pdf/Dr.Eduardo_Padros_Serrat/
Clasificacion_de_los_aparatos_funcionales.pdf
3. Uribe G. Ortodoncia teoría y clínica. 2da Edición
4. Graber T., Rakosi T, Pretrovic A. Ortopedia dentofacial con aparatos
funcionales. 2da Edición
5. Chumi Terán R., Campoverde Paute P., Cárdenas Chacha P.
Aparatología Funcional - Revisión de la Literatura Revista
Latinoamericana de Ortodoncia y Odontopediatría Año 2015.
6. Quirós O, Manual de ortopedia funcional de los maxilares y ortodoncia
interceptiva. AMOLCA, edición 1, 2000

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