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Natalia Janeth Vásquez Garzón

Las pautas del desarrollo económico e industrial en Alemania

Alemania se caracteriza por su política económica intervencionista la cual funciona con un


sistema intermedio de transición, entre el liberalismo y el socialismo, en donde el sector
público y privado funcionan mancomunadamente y depositan en las funciones del estado la
agrupación dirección y abastecimiento de la población por medio de la industria privada.
Esta política se distancia del neoliberalismo norteamericano en el que la propiedad privada
es el eje central de toda la economía y política social.

En esta política económica podemos vislumbrar la importancia de una estricta política


tributaria en donde los alemanes pagan más del 50% de su salario en impuestos como la
renta, el IVA y las cotizaciones sociales alemanas (estas últimas importantísimas para el
desarrollo social desde el estado), este proyecto tributario de establece desde uno de los
salarios más altos de europa, lo que significa que las personas tienen la suficiencia
mensualmente de sus gastos, que a pesar de pagar una alta tasa de impuestos les sobra
para el ahorro e inversión, sin embargo estas inversiones se dan en circulación con la
sociedad y se mantiene un proyecto colectivo.

Una de las pautas del desarrollo económico, político y social alemán se enmarca en la
educación, solamente a principios del siglo XIX el 80% de los jóvenes estudiaban hasta los
14 años, sus tasa de alfabetización son las más altas de Europa superando a las de Reino
Unido. Su eficiente sistema educativo es universal, es decir, no se centra en las clases más
favorecidas, sino que todos en alemania todos sus ciudadanos tienen acceso a la educación
de calidad. Este sistema de educación se enmarca en la capacidad intelectual del
estudiante, en donde se divide quienes tienen mejor análisis siguen en una educación
especializada que profundiza en sus fortalezas y habilidades cognitivas, sin embargo esto
no significa que quienes no cumplen con estos estándares son rechazados, sino que se
emplean en oficios técnicos y auxiliares que les permite igualmente tener una vida digna y
proporcional. Esto es una pauta de desarrollo puesto que permite que la industria se
desarrolle a pasos agigantados gracias a la capacidad de desarrollo ingenieril y tecnológico
de la industria, además de contar con el personal idóneo para manejar las maquinarias de
alta tecnología desarrolladas.
Otra de sus pautas es una tradición industrial histórica, refiriéndose a que su industria se
solidifica a partir de su avanzado desarrollo tecnológico, esto se debe a que además de
contar con la población adecuada para el desarrollo industrial, Alemania cuenta con un
importante sector primario de extracción y transformación de materias primas como el
carbón que les permite competir en un mercado global, al tener un sistema educativo
encaminado a las necesidades productivas del país se combinan dos ingredientes
importantes para el desarrollo.

Dentro de sus pautas se encuentra una política estable (con miras hacia un largo plazo),
que se complementa con una sociedad y cultura de consensos en donde los sindicatos de
las fábricas tienen líderes que ocupan cargos importantes y directivos en la misma
compañía, la problemática bipartidista después de la segunda guerra mundial (Alemania del
este y alemania del oeste) ayudó a hacer más fuerte sus consensos políticos puesto que la
“izquierda” y “derecha alemana trabajan conjuntamente para el desarrollo de la nación, esto
se refleja en el plan de 2010 presentado por un socialdemócrata y apoyado por todos los
partidos, puesto que se comprende que se debía hacer frente a una recesión económica en
el año 2011, otro ejemplo de cómo funcionan los consensos alemanes es que durante dicha
recesión los sindicatos acordaron no aumentar el salario anual mientras que las industrias
se comprometieron a no realizar ningún despido (se busca el bien de todos y todas en la
sociedad).

Finalmente la última pauta del éxito de la economía alemana se debe en gran medida a su
estricto control financiero y sus adecuada política de inversión en desarrollo, lo que significa
que alemania no es una sociedad de consumo en donde solo importa los intereses de las
industrias, sino que se busca por medio de la producción industrial el desarrollo sobretodo
tecnológico de la nación. Esto se enmarca en que el estado al administrar adecuadamente
los grandes recursos obtenidos por la nación por medio de la tributación se dirigen a la
sociedad directamente en función del desarrollo económico, educativo y social.

Para concluir el sistema económico, industrial alemán permite el desarrollo de la nación con
estas cuatro pautas todas relacionadas de manera consecuente para lograr un solo fin que
es la solidificación de la nación gracias a los mismos habitantes del país. Esto los privilegia
a todos puesto que son una de las grandes potencias mundiales, en industrial, tecnología,
política y educación como eje central en la sociedad del conocimiento. Estas pautas se
reflejan en autores como Weber en el desarrollo social, Keynes en la economía e industria y
Nietzsche en lo que respecta al sistema educativo.

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