Con frecuencia los sonidos C y S se confunden al hablar esto se debe a
diversos factores sobre todo relacionados con las variaciones de acentos en
los distintos ámbitos geográficos de España y América. Esto provoca que en
muchos casos las palabras no se escriban correctamente y se utilice la S en
sustitución de la C o viceversa. Para que esto no te suceda vamos a ver las
normas básicas del uso de cada una de ellas.
Estas son las reglas de uso de la letra C:
Se escribe con C la terminación -ces que surge del plural de las
palabras que finalizan en Z. Por ejemplo: maíces, peces, atroces, raíces, rapaces. Se escriben con C las formas de los verbos terminados en -ceder, - cender, -cibir y -citar, siempre que no proceda de raíces que lleven S, por ejemplo: encender, percibir, conceder, recibir, recitar. Se escriben con C las palabras que terminan en –ancia, -ancio, -encía excepto ansia y hortensia. Algunos ejemplos son: extravagancia, cansancio, rancio, excelencia, indulgencia, constancia o fragancia. Se escriben con C las palabras terminadas en -acia, -icia, -icie e -icio. Algunos ejemplos de estas son: bullicio, codicia, falacia, planicie, fenicio, malicia. Se escriben con C los sufijos -cida, -cido y -cidio. Por ejemplo: amanecido, establecido, genocidio. Se escriben con C los verbos que terminan en –cir y –ducir. Un ejemplo podrían ser: conducir, traducir, relucir, decir, esparcir, traducir. Se escriben con C los verbos terminados en –zar en algunas de sus formas verbales. La Z se transforma en una C cuando esta se encuentra ante la vocal E. Veamos algunos ejemplos: avergüence, canalice, analice, utilice. Reglas del uso de la S
Se escribe con S la terminación se de todos los verbos
del pretérito imperfecto, del modo subjuntivo. Por ejemplo: amase, temiese, hubiese, cumpliese, subiese. Se escriben con S las palabras que terminan en -ense y que hacen referencia a gentilicios. Algunos ejemplos son: canadiense, costarricense, onubense, hispalense. Se escriben con S las palabras que terminan en -ersa, -erse y - erso. Algunos ejemplos: adverso, atreverse, inversa, converso, perverso, embellecerse. Se escriben con S las palabras terminadas en –esca y -esco. Como ejemplos nos podemos encontrar con: gigantesca, grotesco, pintoresca. Se escriben con S las palabras terminadas en -ismo. Algunos ejemplos: atletismo, magnetismo, vanguardismo, altruismo. Se escriben con S las palabras terminadas en los superlativos – ísimo e -ísima. Así los siguientes ejemplos son: bellísimo, inteligentísima, feísimo, delicadísimo. Se escriben con S las palabras terminadas en –oso y -osa. Algunos ejemplos: sabroso, asombroso, maravillosa, bondadosa, perezoso, grandiosa. Se escriben con S las palabras terminadas en -sión cuando proceden de palabras terminadas en -so, -sor, -sivo. Así nos podemos encontrar con: persuasión, represión, comprensión, precisión, previsión. Se escriben con S las terminaciones -esta, -esto e -ista. Ejemplos: tiesto, artista, feminista, pianista.