“Ojo por ojo y diente por… ¿diente?

”
DAÑOS Y PERJUICIOS (Mala Praxis)

El 16/03/2014, el Sr. Osmar Del Plata se encontraba celebrando el

cumpleaños de su hijo de 18, en donde hizo un asado para toda la familia.
Mientras Osmar estaba comiendo el asado, intentó separar la carne del hueso
con la boca y producto de la fuerza que ejerció, se partió el incisivo derecho.
Prácticamente perdió la mitad del diente.

En la semana se contactó mediante la cartilla de su medicina prepaga

UAI SALUD con el Centro Odontológico Paletas Felices SRL, que quedaba
en el barrio de Mataderos, cerca de su domicilio. Sacó turno para el
20/03/2015 a las 18 hs. Cuando llegó le dijeron que el odontólogo estaba
retrasado. Terminó siendo atendido a las 20.30 hs. por el Dr. Carlos Encías
Sangrantes, quien le dijo que había que hacer un implante ya que el diente
estaba completamente perdido. Y que además, iba a tener que pagar la pieza
dental que valía U$S 3000.- porque no lo cubría la Prepaga, aunque Osmar
estaba seguro que si, porque tenía el “Plan Oro”, el mejor de todos.

Luego de desembolsar la cifra y someterse a la intervención, le

realizaron el implante. Estuvo los primeros dos días con dolores continuos,
sufrió una infección y le sangraban continuamente las encías. Terminó en una
sala de urgencias odontológicas 24 hs. y el médico le recetó varios calmantes
y otros medicamentos. Finalmente, cuando pararon los dolores, Osmar se
percibió que cedieron las encías y el diente implantado se impuso por el resto
de la dentadura, quedando con la paleta en cuestión adelante del resto de sus
dientes y además, se dio cuenta que era de mayor al resto.

Volvió al Centro Odontológico donde le pidió al Dr. Carlos Encías

Sangrantes que reponga su error, ya que le puso un diente de un tamaño que
no era el indicado. El odontólogo le dijo que eso es un problema de la
mediación que tomó ya que el diente estaba bien y le notició que si quería que
le cambie el diente, debía volver a abonar los U$S 3000.-

Cansado de los dolores, los gastos que no le cubría la Medicina Prepaga

y que continuamente le dicen “Ratón” en el trabajo (es gerente de publicidad),
el Sr. Osmar Del Plata decide accionar legalmente.